7.

Tiempo atrás.

Estaba cansada de oír siempre las burlas, las personas cuchicheaban a mi espalda y las que una vez consideró sus amigas fueron las que comenzaron todo eso.

Nunca debió ir a esa fiesta y nunca debió dejar sola a Paula en su habitación y es que nunca lo pensó, nunca se imaginó que seria ella quien la traicionara asi, por eso nunca les comentó sobre sus sentimientos y por alguna razón jamás confió en ellas a pesar de estar juntas desde primero de primaria.

Se prometio que los dos periodos que le quedaban trataria de parecer invicible para todos y más para Even que a pesar de lo bien que se sintió aquella vez que la besó, sabia que él no sentia lo mismo y él que hayan decidido por ella el exteriorizar sus sentimientos la dejaba en desventaja.

Asi que si, decidió alejarse de todos ellos.

Cruzó por un pasillo para llegar al salón y al entrar vio al que fue su grupo de amigos pero que al parecer nunca parecio ser realmente parte de él porque fueron los que más la humillaron solo por sentir algo por un chico y claro siendo Romina la que habia dicho todo, era peor.

—Llegó la enamorada—dijo Romina haciendo que todos se fijaran en mi.

—Siempre he estado enamorada de ti—citó Axel una parte de la carta que escrbí.

—¿Como es que se llama el blog?—preguntó Max—¿Amor entre lineas?.

—¿Como saben de mi blog?—pregunte en un hilo de voz.

—Todo el mundo sabe de ese blog tuyo—habló Angelica— ''¿Como confesarte que te amo? ¿como dejar latir mi corazon con libertad?''— dijo haciendo una mueca de asco—das pena Camelia—todos se rieron y mi corazón se estrujo.

—Dejenla en paz ¿acaso ustedes nunca se han enamorado de alguien?—exclamo Marcus acercandose a mi—según parecia ustedes eran sus amigos pero veo que no y tu Even, ten los pantalones para defenderla, aqui todos sabemos que te encanta andar ilusionando a las chicas.—Even lo miró serio y se levantó.

—Yo nunca les doy alas—dijo mirandome—no me hago responsable de nada—yo bajé la mirada aguantando las lagrimas, eso fue un puñal al corazon.

Me di la vuelta y me senté junto a Luna que no dijo nada mientras ellos me atacaban.

—Te dije que esas arpias nunca fueron tus amigas y esos idiotas menos, bueno exceptuando a Marc pero del resto pura basura.—la miré y asenti, tenia tanta razón

Habian pasado dos semanas y juro que trate de ser invisible pero no me lo dejaban facil, cada vez que pasaba por algún pasillo todos murmuraban o leian en voz alta todos los poemas que tenia en ese blog para Even.

Él no se acercó despues de aquel dia y yo lloraba todas las noches porque me había acostumbrado a él.

Romina de alguna manera me habia declarado la guerra y no dejaba de insultarme y burlarse cada que me veia, sabia que era ella la responsable de que las paredes esten empapeladas con mis poemas y con la copia de mi carta, de esa carta que debia ser privada.

—Miren a quien tenemos aqui, a la idiota enamorada que se queria meter con quien no debia—habló Romina exagerando su tono de voz para que todos los que estaban en el pasillo escucharan—¿como te va sin amigos? ¿como es tu vida despues de darte cuenta que no vales nada para él?—todas se rieron y yo me di la vuelta cambiando de dirección.

—No te olvides que jamás estaras con él—gritó de pronto Romina.

Segui caminando rapido, queria alejarme de ellas, de sus burlas, de sus humillaciones. Su traicion abrio una pequeña herida en mi pero ya luego todas sus acciones y sus palabras comenzaron a hacer heridas profundas que dolian cada vez más.

Luna y Marcus me han ayudado, han estado junto a mi pero igual duele.

Choque con lo que parecia una pared pero es el pecho de un chico, le vante la mirada y vi que es Even, di un paso hacia atras dispuesta a correr pero me detuvo.

—Espera...

—¿Que? ¿que quieres?—pregunte sintiendome fuerte de repente—¿hacerme más daño? ¿burlarte?—me solté bruscamente de él.

—Yo...Cam, perdoname ¿si? se que fui un idiota, merezco tu odio pero el enterarme de tus sentimientos así me descolocó, me sustó porque... yo siento lo mismo—lo miré incredula.

—Eso es mentira, solo lo haces para tenerme ahí, como te gusta pero no—se acercó a mi y con su mano acaricio mi mejilla.

—Yo te quiero y quiero estar contigo—suspiré—¿aceptas estar conmigo?—que podia decir o hacer, era el chico que me gustaba.

—Si, acepto—el me beso y me sentí en las nubes, sus labios eran como un sueño

—Hay que mantenerlo en secreto—me alejé de él—es solo mientras se calma todo el revuelo que esta haciendo Romina, por favor.

—Esta bien—acepte y me abrazó.

Yo solo queria ser feliz, aunque fuera engañada.

Ya habiamos terminado el segundo periodo y solo esperaba terminar el ultimo y salir de esa pesadilla.

Todo entre ella y Even iba genial aunque aun era un secreto pero era feliz, le repetia tantas veces que la queria que la hacia olvidarse de que por alguna razón la ocultaba.

Iba caminando tranquila  a su casa, eran las tres de la tarde solo queria llegar  y descansar, escucho pasos detrás de ella y acelero su caminar pero de frente se topo con Romina y se detuvo.

—¿Ahora que quieren?—pregunté irritada.

Romina hizo una señal con su cabeza y Paula y Angelica me agarraron los brazos y me llevaron a un callejon que estaba cruzando la calle, esta calle siempre estaba desierta y por eso me voy por aqui para poder pensar tranquilamente.

—Vamos a llamar a Even—dijo Romina mientras las otras cubrian mi boca—te dejé tranquila mucho tiempo, disfrutaste de algo que es mio—la miré extrañada.

—¿Romina? ¿que pasa?—ella sonrio viendome.

—Amor, queria saber si ¿salimos hoy?—¿amor?.

—Claro cariño—¿Cariño?

—Una cosa más—me puso el telefono cerca—¿como va todo con tu enamorada?—dijo haciendo una mueca de asco.

—Ni la menciones, sabes que solo lo hago para que puedas burlarte de ella—una herida que intentaba cerrar se abrió con más fuerza.

—Lo sé, nos vemos a las ocho, te quiero.

—Te quiero más—y corto soltándose a reír frente a mi.

—¿Ves? no te quiere, solo eres un juego que le permito pero a ti no te lo permiti y espero esto te sirva de leccion para que no te metas con lo que no es tuyo—senti su puño conectar en mi mejilla.

Todas se rieron y de ese otros golpes le siguieron, en mi estomago, cara, costillas y piernas. Me tiraron al piso cuando ya no pudieron con mi peso y Romina comenzó a darme  patadas sin pensar en donde las daba, no le importaba el daño que estaba ocasionando.

Grite con cada golpe pero ya no sentia nada, no tenia fuerzas ni voz, solo era un cuerpo inerte que era golpeado sin piedad.

—Romi ya, dejala—dijo Paula  tratando de alejar a Romina—para ya, por favor.

—¿Ahora la defenderas? de igual forma ya terminé, no puedo creer que pude ser amiga de esta basura alguna vez—sonrio y me miró con desagrado—vamonos.

Escucho como se alejaron y yo no podia ni moverme, solo podia respirar y con dificultad.

Queria moverme para sacar mi telefono y llamar a Marc pero todo dolia, hasta respirar.

Pasaron como veinticinco minutos y escuche unos pasos acercandose y me asusté.

—Tranquila, soy Paula—mis nervios no menguaron—solo quiero ayudarte, esto es mucho, lo siento Cam—suspiró y sentí como saco mi telefono—¿Marcus?—asentí y cerré los ojos queriendo dejarme llevar por la inconsciencia.

Escucho como me llaman pero ya no podía abrir los ojos, no tenia fuerzas, estaba acabada.

***

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