Mi chico era un gran actor.

En cuando Kim salió del auto y llegó al porche, Baekhyun salió corriendo, refunfuñando cosas en mi contra mientras se abrazaba al bastardo. Ninguno estaba contento conmigo y en mi contra tenía levantadas cinco armas, pero a mi no podía importarme mucho cuando hace poco había estado dichosamente metido entre los muslos de mi chico.

Tenía mi ropa bien puesta, aunque me hubiese gustado recibirlo con Baekhyun desnudo y ver cuan roja podía ponerse su cara. Rojo de furia y envidia.

—¡Te has vuelto loco! ¿Cómo te atreviste a secuestrar a mi prometido?

—Cuida tu tono conmigo, chico —mascullé, apoyándome en la puerta con aire ligero—. Para gritarme te hacen falta muchas cosas.

—¡Te robaste a mi prometido! —volvió a quejarse, quizás envalentonado en lo mucho que Baekhyun se aferraba a las solapas de su traje.

—Como tú me has estado robando. No me creas tan idiota como para no darme cuenta de que estabas metiendo tus manos en mis negocios.

Él frunció el entrecejo, brillantemente viéndose sorprendido por mi acusación.

Eso, finge bastardo.

—No me cambies el tema —rugió y yo no aguanté las carcajadas y, por la cara de Baekhyun, él hizo un gran esfuerzo, mucho mayor que el mío.

—Llévate a tu pobre prometido —ladré—. La próxima vez que nos veamos, no seré muy gentil.

—Tú-

—Ni siquiera intentes algo estúpido, loco bastardo. Puede que tus hombres estén aquí, pero no supongo que no pondrías a tu prometido en riesgo solo por tu orgullo.

Apretó los dientes. Ese idiota realmente estaba sopesando sus opciones. Lamentablemente a mí se me estaba acabando la paciencia.

—Hoy te dejo vivir como un regalo de bodas, pero mañana puede que Baekhyun se convierta en viudo antes de incluso casarse contigo.

***

Encontré a Kyungsoo en el balcón esa tarde, tenía los ojos brillantes y una poco disimulada sonrisa en el rostro mientras bebía su humeante té de flores rojas —cosa que yo odiaba y prefería cambiar por una taza de café con un poco de licor, un gusto adquirido con los turcos.

Él casi no se dio cuenta cuando yo me senté al frente. Había bocadillos de manzana, muffins de arándanos y mucha fruta picada, y era el tipo de desayuno que él no consumía, yo sí, pero por un gusto ruso.

Jum.

Y enfocando mis ojos sobre mi radiante amigo, hallé la respuesta.

—Te jodieron —solté sin tapujos—, en todos los sentidos.

Él me miró con el ceño fruncido, pero sus mejillas pronto se colorearon.

—Así que no fui el único que se divirtió anoche.

—Cállate.

—No actúes como si no te hubiese visto desnudo.

—Tenía doce años en ese entonces, y mi pierna estaba enyesada, que fue la única razón por la que te permití ayudarme a bañar.

Yo me encogí de hombros. Kyungsoo era como mi hermano menor y al pasar más tiempo en casa de mi abuelo que de mis padres, nos hicimos muy unidos. De hecho yo fui su primer beso —algo sobre querer practicar antes del baile de graduación—, pero ambos sentimos nauseas.

—¿Y dónde está Lev?

—No tengo porqué saberlo.

—Si duermes con él, esperaría que al menos supieras dónde está a la mañana siguiente.

Kyungsoo refunfuñó, pero finalmente me contestó:

—Fue al centro a reunirse con su hermano.

—Debió llevarte para que conozcas a tu cuñado.

El me miró todavía más feo que antes.

—No digas estupideces, Chanyeol. Solo fue una jodida.

—Te subestimas. Lev no está interesado en joderte una sola vez.

—Resulta que estoy algo cansado de los hombres que quieres joderme más de una sola vez; son el tipo de hombres que no involucran el corazón en nada —masculló herido dejando su taza a un lado—. Ya estoy enredado con uno... y no quiero cambiar un mal por otro.

—Lamento lo que voy a decir, Kyung, pero necesitas que te duela un poco para aprender.

—¿Qué?

—Desde que eres joven has estado enamorado de Kai, y has dejado a un lado tu propia felicidad porque piensas que estar al lado de él es ser feliz. Y te he dicho muchas veces que no le ofrezcas a nadie todo lo que eres porque no te quedará nada a lo que aferrarte cuando te lastimen. —Él agachó la cabeza y frunció los labios. Yo sabía que odiaba que yo le diera esas charlas, pero era mi trabajo, el que me encomendó mi abuelo—. Lamentablemente no has sido capaz de soltarlo...

—... Quería que alguien me quisiera —murmuró—, y confundí muchas cosas. Claro que sé que Kai no me quiere, y la verdad es que yo tampoco creo quererlo a él. Solo estoy tan acostumbrado a esto que me cuesta... Y lo odio.

"Pero tampoco creo que quiero reemplazarlo por algo con Lev. Si consigo soltar a Kai, quiero tener un tiempo para mí, porque necesito sanar. Además, Lev se irá dentro de un mes. ¿En verdad crees que algo bueno pueda salir de eso?

Suspiré.

—No, con honestidad no. Bueno, solo quería que probaras salir con otras personas.

—Sí probé mucho de Lev —contestó con malicia, viéndome casi con demasiado descaro.

—Ugh, no quiero esos detalles.

—Interesante, yo sí quiero oír los detalles.

Joder. Ninguno de los dos contó con la llegada de Kai ese día, y ahí estaba, parado en la entrada del amplio balcón, con su acechante mirada oscura y los labios fruncidos.

—Así que en mi ausencia encontraste entretenimiento.

—¿No lo hiciste tú también mientras estuviste en Busan?

Kai solo sonrió de medio lado, casi burlándose de Kyungsoo, y no le dio ninguna respuesta lo que bien podría subir la escala de su discusión y conmigo en medio, no iba a tolerarlo.

—Pero no veo aquí al ruso, ¿te dejó luego de follarte?

—Basta, Kai. Vas a cruzar un límite que te costará.

—Solo quiero saber —suspiró, encogiéndose de hombros, porque si te abandonó luego de joderte, es que tu agujero no le gustó tanto.

Golpe la mesa con mi puño, poniéndome de pie. De reojo vi el enojo de Kyungsoo subir como la espuma.

—Cierra la boca. Ahora. Kyungsoo es parte de mi familia, la familia a la que le sirves —escupí—. Le debes respeto. Y si no puedes ofrecérselo, te pido que te marches.

—¿Así pagas la lealtad, Chanyeol?

—La he pagado soportándote a ti lastimando a Kyungsoo por años. Mi abuelo te hubiese disparado a la cabeza luego de la primera vez que él regresó llorando a casa. Así que no creas que toleraré más este puto juego.

—Me niego a dejar mi puesto en la mafia.

—Bien, entonces hazte un favor tu mismo y mantente alejado de Kyungsoo. Y tú —le hablé a Kyung—, si te vuelvo a ver rogándole a Kai, juro que te mandaré de regreso a Londres.

—You better send him to Russia. I have a very nice suite where he can stay. Mine.

(Mejor mándalo a Rusia. Tengo una muy linda suite donde se puede quedar. La mía)

Resoplé fuertemente.

¡Genial!

Lev y Kai juntos en una misma habitación eran la receta para el desastre. Kai era muy orgulloso como para soltar a Kyungsoo incluso si no lo amaba. Y los rusos son tan tercos y duros de roer como el hielo.

Por otro lado, siguiente la lógica de mi abuelo, quizás Kyungsoo encontrara esta pelea divertida siendo que peleaban por él.

Lev pasó de Kai, casi chocando sus hombros, lo que hubiese provocado una gran pelea ahí mismo. Tenía un sobre negro en sus manos que dejó en mi lugar en la mesa, un encargo que le había pedido yo.

—Oh, I almost forget it —se apresuró diciendo. Lev metió su mano en su saco de donde sacó una tira de... condones, el muy hijo de puta—. For tonight.

Kyungsoo iba a matarlo, si Jongin no lo hacía primero, y nada me daría más gusto que bailar sobre su cuerpo por ser tan cabrón.

—Tu príncipe encantador solo piensa con la polla, Kyungsoo —se mofó Jongin, lo que era el equivalente de una declaración de guerra en los tiempos actuales. Yo sería *Prusia, metido en un lío que no era mío y del cual saldría perdiendo todo. Por idiota.

De todas formas, no estaba seguro de si Lev había entendido a Kai o no, con lo poco que sabía de coreano.

—My cock is better than yours for sure —alegó Lev con una sonrisa—. Kyungsoo thinks so.

(Mi polla es major que la tuya con seguridad. Kyungsoo lo cree)

—Only sluts would say such a shit like that.

(Solo las putas dirían una mierda como esa)

Paz interior. ¡Diablos que Jongin se estaba buscando unos buenos golpes! Y si Lev no se los daba, yo bien podría gastarme los nudillos enseñándole algo de respeto.

Pero no fue necesario.

Lev sonrió de forma perversa, el mismo tipo de sonrisa que usaba cuando mataba a sus enemigos.

—You can say so because sluts are the only ones you can fuck —escupió—. And if you call him slut again, I will cut your tongue and feed it to my dogs, get it?

(Dices eso porque putas es lo único que puedes follar. Y si vuelves a llamarlo puta, te cortaré la lengua y se la daré a mis perros, entendido?)

—I'm not afraid of you.

(No tengo miedo de ti)

—Oh, but you should cause I'm Russian and we don't forgive a bastard.

(Oh, pero deberías porque soy ruso y nosotros no perdonamos a los bastardos)

Lev era más alto que Jongin apenas, pero lo suficientemente ancho y alto como para ser intimidante, lo que me causó cierto placer. Veía a Kai algo nervioso, quizás por contener su rabia. Y hasta cierto punto quise que se pelearan, ambos necesitaban sangrar un poco por una persona.

—Don't get me wrong —continuó Lev—. Maybe in a future I'll leave to Russia without Kyungsoo, but definitely I'm not going to do the same you do to him.

(No me malentiendas. Tal vez en un futuro me vaya a Rusia sin Kyungsoo, pero definitivamente no voy a hacer lo mismo que tú le haces)

—That is what? —vociferó con dureza.

—Use him, play with him, and hurt him. Cause I care about Kyungsoo.

(Usarlo, jugar con él y herirlo. Porque me importa Kyungsoo)

Jongin estaba cabreado, se le notaba por la forma en la que apretaba las manos, como si imaginara estrellar sus nudillos contra la mejilla pálida de Lev. Sus ojos oscuros estaban a dos segundos de incendiarse tanto como su boca.

—Only remind you, Kyungsoo, that when he leaves you, I won't accept you back. I don't like used things.

(Solo te recuerdo, Kyungsoo, que cuando él te deje, no te aceptaré de regreso. No me gustan las cosas usadas)

—And you just remember that I warned you —arremetió Lev con dureza.

(Y no olvides que yo te lo advertí)

De pronto todo fue un caos.

El puño cerrado de Lev golpeó sonoramente la mandíbula de Kai, tirándolo al piso. El golpe seco del cuerpo de mi amigo cayendo al piso fue como el estallido de una burbuja en la que no sabía que estábamos. Kyungsoo jadeó, casi gritó. Vi sangre en la boca de Kai, pero también una cortada en su mejilla. Luego vi a Lev, su puño estaba intacto, pero le había golpeado con el anillo de su familia.

—If you don't respect him, I'll teach you to, ublyudok.

(Si no lo respetas, te enseñaré a hacerlo, hijo de puta -en ruso)

***

Cuando logré que Kai se marchara a su departamento, previniendo un mayor enfrentamiento entre él y Lev, me moví rápidamente hacia mi estudio con el sobre negro en la mano. Cerré la puerta y me dejé caer en el sofá más cercano. Abrí el sobre y saqué un papel doblado y cuya letra garabateada me sacó una carcajada.

<<Interceptó mi teléfono, así que no te atrevas a llamarme o si quiera a mandarme un mensaje>>.

Ese no era el saludo que me hubiera gustado, pero no podía quejarme mucho.

<<Te extraño>>.

Eso estaba mejor.

—También te extraño, Baekhyun.

<<He estado ocupado. Taewoo no se va a detener. Hoy llamó a los filipinos y está preparando un nuevo ataque, esta vez a la central de los alemanes en Busan. No solo los matará a ellos, sino a la prometida de Andrek>>.

—Mierda.

Y la prometida de Andrek era la hermana de Lev. Nada bueno saldría de eso. Aunque firmaran con mi nombre, la muerte de los alemanes no provocaría a la Bratva, pero sí lo haría por la muerte de Anastasia.

Estaban tomándose muchas molestias por esto.

—Bueno, Kim, si quieres jugar...

<<Te mandaré otra nota cuando sepa los detalles. Pero deberías armar un plan para evitarlo.

Y... hoy compré mis cosas para la luna de miel>>.

—¡Já! Al menos debiste invitarme. Pude haberte entretenido en los vestidores.

<<Todavía me voy a casar con él si no llegamos a solucionarlo. No me malentiendas, no lo amo, pero es mejor cazar un animal estando en su propia casa. Aunque realmente preferiría ser románticamente secuestrado el día de la boda. Siempre puedes interrumpir al sacerdote cuando diga la frase: ¿Alguien se opone a este matrimonio? Serías un lindo Shrek>>.

Esta vez no pude evitar reírme, por mucho que me estuviera comparando con un ogro verde. Mi chico estaba loco, pero si quería un secuestro, bien podía complacerlo un poco. O tal vez solo lo haría cambiar de una iglesia a otra.

<<Nos veremos pronto,

B>>.

Tomé un pedazo de papel y un esfero negro para escribirle mi respuesta.

Lamentablemente para Lev, se volvería nuestro buzón de correspondencia personal.

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*Prusia estaba conformada por lo que hoy es Alemania, un parte de Rusia y Polonia, durante la Primera Guerra Mundial.

Como contexto del chiste, la Primera Guerra Mundial se da por el asesinato del Archiduque Francisco Fernando de Austria, por lo que Prusia se involucra en la guerra contra la triple entente -por metiche, porque no era su guerra- y al final pagó todos los platos rotos porque una vez firmada la paz, tuvo que pagar para la reconstrucción de los países vencedores.