00 | Piloto
• No existen mentiras en la vida. Solo verdades escondidas que viven debajo de la superficie y como bien se sabe, dos pueden guardar un secreto si uno está muerto •
🎲🎲🎲
Londres, Inglaterra
1:56 am | Ramiro's POV
—¡Maldición! ¡Maldición! ¡Maldición!
El pánico se apodera de mi sistema haciéndome flaquear y cuando menos me doy cuenta impacto contra el suelo dejando caer el arma que mis temblorosas y heladas manos sostenían, me reprimo cualquier sentimiento que mi corazón pueda crear. Aún que...no estoy seguro que las sensaciones sean dolor más bien temor a ser descubierto; sin embargo trago saliva con pesadez envolviéndolo con las mantas blancas de algodón y atando un nudo que es protegido con la cuerda que sujetan las cortinas haciendo un elegante moño.
Es media noche y yo continúo dejando cada objeto en su lugar simulando que nada extraño ha ocurrido en las últimas horas pues me percato de que la policía no rescate pistas cuando llegue su momento de investigar y mientras lo hago el nudo en mi garganta me impide tragar aire haciendo un recuerdo de la situación que llevo a esta, tengo la vista clavada en el cadaver y una bola de nerviosismo que nada dentro de mi estómago la cual se intensifica cuando lo cargo sobre mis brazos metiéndolo en el maletero de su propio auto y acelerando a una velocidad que me permita no crear sospechas. Sin dudas estoy sobrio y lo compruebo pues no he bebido ni una gota de alcohol desde la mañana y sé que ahora tengo motivos para hacerlo pero me inmuto.
—Puedes hacerlo Ramiro es sencillo solo lánzalo del puente regresa a casa y actúa normal
Me aliento como si todo fuera tan sencillo pero no lo es no es suficiente para que deje de atormentarme; mientras tanto presiono una palma sobre mi nuca limpiando el incesable sudor que corre hasta mi columna vertebral y en un débil intento por disminuir la velocidad fallo pues se escuchan sirenas de policías a pocas cuadras de aquí. Respiro profundo pero no funciona
Un incendio en el centro de Inglaterra calma mi exasperación y el temblor de mi mandíbula disminuye pues ahora toda la atención está en aquel desconocido edificio. No sé qué demonios estoy haciendo ¿En que me he convertido? Esto no se puede justificar pero no tenia otra opción era el o yo, fue en defensa propia supongo, o simplemente tenía ganas de hacerlo...no no no no, nadie creerá esta patética historia.
El camino se ha vuelto terroso sin pavimento alguno y estoy lo bastante lejos para hacerlo es ahora o nunca. La opresión de mi pecho crece pues utilizo todas mis fuerzas para sujetarlo, se ha vuelto más pesado o puede ser impresión mía, sin embargo suspiro sintiendo alivio en mis pulmones. Esta es la parte en donde me deshago de toda responsabilidad; con fuerza lanzó el cadaver por el puente dando una fuerte bocanada de aire puro, los rulos de mi cabeza sobresalen por el gorro de algodón negro hasta cubrirme las cejas me miro las manos y tiemblo por décima vez, hasta los guantes de piel han sido ensuciados por su sangre. No soy consciente del tiempo en que me quedo mirando aquel río en donde segundos antes el estaba flotando ahora entiendo lo que el dolor y la traición son capaces de hacer
—¡Eres un idiota!—me reprimo con la voz alta—no debiste hacerlo—sollozo pero debo parar, ahora mismo
Mi aspecto es deprimente he caminado desde la estación abandonada del tren hasta la residencia de los Balsano Devine estoy cansado y lo único que necesito es hablar con alguien..no, con alguien no con ella. Su rostro palidece al verme en la puerta siento que va a darme una fuerte cachetada en la cara, al contrario, sujeta mi mano llevándome a su habitación sigilosamente. Entramos y cierra con llave trato de respirar adecuadamente pero no lo logro
—Ra-ramiro...¿que es esto?—su blanca palma esta manchada de sangre miro reiteradas veces mi guante, efectivamente soy el culpable
La imagen de Yamila sobre el espejo me tranquiliza de una manera extraña aunque luce asustada trata de disimularlo rascándose su desnudo hombro bajo esa corta pijama de seda roja. Nuestras voces se apagan mientras con fuerza utilizo la esponja de baño para retirar la sangre de mi camisa, pero se niega a borrarse. Maldigo en voz alta dejando todo en el baño estoy cubierto solamente por mis jeans y estallo en sus brazos, las lágrimas humedecen mis mejillas en cuestión de segundos creyendo ahogar los sollozos
—Mírame a los ojos—sorbo de mi nariz encontrándome con un brillo preocupante de tono avellana—te traeré un té y vas a descansar ¿me escuchas Ramiro? no hablaremos de esto hasta mañana
No soy capaz de responder pero me arrojo a sus labios como si la vida se me fuera en ello, entonces siento su pecho contra el mío y mi agarre es fuerte haciéndole entender que no puedo dejarla ir. Me siento terriblemente adolorido cuando me aleja de ella lo suficiente para descansar su frente sobre la mía
—Discúlpame—mi voz ronca arrastra mis palabras y en ese instante su mirada se clava sobre mi, me rindo ante ella sin evitarlo—sé que sigues molesta pero no me abandones Yam, por favor no me dejes
Niega con la cabeza besando mi mejilla con ternura y suspiro aliviado al sentir su cálido aliento en mis labios es como si la seguridad tomara posesión de mi sistema
—podemos tener sexo si quieres—cuando creí que esta noche sería devastante una risa sale de lo más profundo de mi garganta—¿mal momento para pedírtelo?
—para nada—sonrió y ella se aleja unos pasos haciendo una mueca de silencio al salir de su habitación
5:35 am
No ha dejado de dar vueltas en la última hora con los pies descalzos sobre la alfombra su rostro parece pensar en una forma de salir sin ser juzgados, pero solo pierde el tiempo. Miro al costado de vez en cuando solo por costumbre a observar sus finos rasgos mientras me sostiene la mano pero esta vez no lo hace, ni siquiera me mira. Esta noche en especial es más fría que las anteriores y lo sé por el ventanal abierto que deja pasar ráfagas de húmedo viento a través de las cortinas y cuando consigo calmarme el camina en dirección mía observándome con miedo
—Vas a ir a la carcel, todos vamos a ir a la carcel y nos pudriremos en ese lugar si es que no tenemos pena de muerte
—Nadie irá a la carcel Matteo—una pelinegra habla entre dientes de forma molesta—¿Sabes porque? Porque no hablaremos de esto seguiremos con nuestras vidas como hemos hecho hasta ahora
—Eres estupida o estupida—confirma otra rubia temblorosa puedo notarlo por sus ojos azulados como canicas abrillantadas, apunto de llorar—somos culpables por más de 3 asesinatos ¡Y yo fui parte de uno!
—Ambar baja la voz, mis padres llegarán en cualquier momento y ahí si nos van a joder a todos—de manera serena Yamila se envuelve con una manta y yo trato de sujetar sus hombros sin incomodarla
—¿Y que pretendes que haga? Yo no puedo actuar como si nada de esto hubiese pasado, aún puedo recordar los ojos marrones de Simón mirándome fijo después de haberlo matado. Nunca sentí tanto asco por mi como esa noche y traté de convencerme día por día que lo que había hecho estaba bien y que nadie me descubriría pero--
—¿Pero que?—mi entrecejo se frunce en una expresión seria y Ambar simplemente deja salir unas cuantas lagrimas
—siento que me estoy volviendo loca..lo veo en el espejo y encuentro cosas suyas por todas partes como si todavía estuviera aquí, como si su alma me succionara cada vez que pienso en su nombre—su voz se quiebra en cuestión de segundos derribándola por completo—no puedo más
—Cierra la boca no eres la única que sufre con todo esto—una chica habla desde el fondo de la habitación acariciando el dije sobre su pecho de manera culpable—así como no eres la única culpable de lo que hemos hecho, necesitamos ayuda
—Emilia está conversación ya no tiene sentido—un castaño se levanta con brusquedad revolviéndose el cabello—teníamos un trato, juramos cumplirlo y hablar sobre esto es lo contrario a guardar silencio. No podemos involucrar a más personas si lo hacen yo mismo tomaré medidas
—¿De que carajos estás hablando Gastón?—ante su mención Delfina lo mira con preocupación negando una y otra vez—¿Que tipo de medidas?—acelero mi voz con intriga
—Nos vas a abandonar ¡Lo harán ambos!—su hermana grita con desesperación dirigiendo la mirada hacia la chica que creía su amiga—Nunca fuiste confiable, desde que llegaste te has empeñado en mentirnos a la cara para tu propio beneficio y le abriste las piernas a mi hermano más de una vez con tal de tenerlo a tu lado. Eres una perra
—¡Ambar!
—¡Ambar nada! Estas cometiendo un grave error con ella gaston—da un paso atrás como si no lo reconociera—estamos jodidos y todo por culpa tuya
Nunca he estado tan de acuerdo con algo que esta chica ha dicho pero hoy simplemente parece que se iluminó, sin dudas Ambar es la más inestable de todos nosotros desde que la conocí supe que sería un problema lidiar con ella pues una persona que está acostumbrada a que le resuelvan la vida con solo chasquear los dedos no sabe como manejarse ante situaciones de peligro y puedo decir con certeza que si ella no se hubiera involucrado en todo esto las cosas serían más sencillas.
—¿Mi culpa?—reprocho levantándome para combatirla sin embargo ella se adelanta empujándome por el pecho
—Si, tu culpa. Sabes bien que si no lo hubieses matado todo seguiría como antes pero preferiste jugar al asesino para sentirte bien contigo mismo...eres un monstruo, no mereces a mi prima
—no confundas las cosas—respondo con rabia—tu no sabes todo lo que he sacrificado por ella cometí muchos errores en mi vida pero amarla, jamás será uno
—Eres un mentiroso. Te juro que te voy a joder la vida Ramiro
—Ambar—mi chica susurra mirándola con decepción en una actitud de miedo que simplemente me aterra rotundamente
—Recuerda las reglas y cúmplelas porque sino volveré tú vida un infierno o mejor, voy a matarte si llegas a romperlas
—Tienes suficientes balas para hacerlo
—¡Ya basta!—el puño de Matteo impacta contra la pared, no una ni dos sino 3 veces seguidas hasta mancharse de sangre, nadie se acerca a excepción de Emilia
—debemos irnos, esta amaneciendo. Hablaremos sobre esto más tarde pero no aquí. Nos vemos en la sala de ajedrez
Concentrada en limpiar las heridas de su novio salen ambos de la habitación con prisa a lo que Ambar y su hermano no se detienen en seguirlos, lo que provoca a la pelinegra hacer lo mismo pero puedo jurar escuchar su corazón latir con fuerza a la espera de que solo quedemos nosotros tres. Está asustada pero se niega a mostrar debilidad y estoy cien por ciento seguro que tiene una idea en mente desde hace tiempo que no ha dejado de golpearla, lo sé por experiencia y debe hablar ahora si queremos tener esperanzas de seguir viviendo.
—Debemos llamar a Emma—nos observa con miedo—es la única opción que tenemos, es ella o la policia
—¿crees que es confiable? Vamos que Emma tiene una versión pero no se sabe la historia original—Yamila vacila por un momento abrazando la almohada de su cama
—una persona que arriesga todo por proteger a los que ama es confiable—confirmo después de un suspiro pues ella tiene razón solo hay dos opciones y la segunda es un completo suicidio—llámala y que venga a la sala de ajedrez a las 9:00 pm
6:29 am
—¿Crees que podemos ser felices?
Tengo un nudo en mi garganta mirando sus ojos que retienen un mar de lagrimas dándome una sensación de querer dispararme a mi mismo por todo lo que he provocado, tuve opciones y elegí el camino más difícil. Se deshace de la almohada bruscamente dejando caer la sabana que cubría sus hombros hace un segundo, acercándose a mi cuerpo hunde la cabeza en mi hombro esperando por la respuesta y es que no tengo nada mas que pensar.
—por supuesto que si—sonrio débilmente mientras ella abre la boca dejando salir el pánico que la lleva a cuestionarse sobre su vida
—¿Como? ¿Cuando?...no puedo más con todo esto. Quiero olvidarlo, todo lo que hice
No dudo un segundo en tomar su cintura con fuerza para sentarla sobre mis piernas es un movimiento tan ágil que la hago jadear al rozar nuestros labios; ninguno de los dos hablamos por un largo momento yo solo me dedico a disfrutar las caricias que deja por mi rostro utilizando sus suaves manos de forma lenta y cansada.
—No te alejes—murmuro antes de tomar una bocana de aire que me permita aguantar saborearla el mayor tiempo posible—no te alejes nunca Yam
Estoy súper contenta e inspirada con esta nueva novela, es una trama completamente diferente a lo que he hecho últimamente con muchos secretos, traiciones y muertes como ya leyeron, sin dudas van a sufrir pero créanme que la van a amar tanto como yo.
¿Ansiosos por seguir leyendo? Comenten cómo creen que comenzará la historia ya que este es el capítulo 00
Portada magnífica por mi amiga de toda la vida CrxstinePhotosxp
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top