Lincoln si pudiese describir como se sentía con respecto a la situación en la que ahora se encontraba, solo podía encontrar una palabra para hacerlo... perdido.

Realmente no entendía como es que siquiera era posible que hubiese acabado en el infierno, y que además de que tampoco podía recordar que es lo que le había pasado, de hecho ni siquiera podía recordar su vida en general, era como si todo eso se hubiese bloqueado.

Ahora que estaba despierto, veía que no había ni un solo ser humano a su alrededor, hasta ahora lo que ha visto han sido ha diablillos que literalmente provienen del infierno, por lo que aun seguía con la sudadera y el bozal de cuero que, eran capaces de cubrir su rostro casi por completo, al meno lo suficiente para que no se percataran de su apariencia.

-Ah, es mejor así... aquí no estoy seguro... no puedo estarlo. -pensó Lincoln al mismo tiempo en que volteaba a ver hacia un lado.

Ahí veía a un demonio con apariencia de un lobo humanoide con pelaje oscuro, tenia agarrado a un ser de estatura mucho más pequeña que el, lo tomo por la cabeza de manera que lo levanto del suelo y...

Lo siguiente que el chico vio fue como el lobo giro la cabeza del otro demonio de manera que le termina por quebrar el cuello, para luego dejar caer el cuerpo inerte en el suelo e irse de aquí.

Lincoln a estas alturas, no tardo en volver a dirigir la mirada hacia el frente del camino por el que ahora estaba yendo, sin duda esto era más de lo que hubiese querido o esperado.

-Es difícil creer que esto se pueda parecerse a cualquier otra ciudad. -dijo Lincoln en susurro para si mismo mientras seguía caminando.

Mientras seguía con su caminata, sin saber por cual rumbo iba a terminar, no tardo en escuchar como una especie de ruido se iba escuchando con más fuerza conforme el seguía caminando hacia adelante.

Es cuando alza la mirada y ve un establecimiento del cual, era de donde provenían aquellos ruidos, al alzar un poco más la mirada es, cuando ve que arriba de aquel lugar se hallaba un letrero, uno en el que se veía claramente la palabra "Taberna Pentagrama".

A simple vista, el lugar se veía ya algo viejo pero, claramente aun funcionaba a pesar de que se le notaba el pasar de los años, el albino al ver el lugar detenidamente, siente una punzada en su cabeza y, viene un pequeño recuerdo de un lugar que era similar, pero afuera de dicho lugar se3 veían acomodadas unas cuantas motocicletas, y unos hombres salían del lugar persiguiendo  a un pequeño grupo de tres.

Pero, de repente el recuerdo se disipa de su cabeza y reacciona, eso se estaba convirtiendo volviendo un verdadero fastidio, realmente no entendía que le pesaba en ese aspecto.

Sin embargo, esos pensamientos no tardan mucho en disiparse cuando ve que estaba justo en donde hace un momento, pero no pasa mucho tiempo hasta que ve como alguien es lanzada literalmente a patadas hacia afuera.

-Agh, esta gente del infierno no sabe lo que es tener un sentido del humor tan refinado como el mio, supongo que no soy para todos. -dijo el tipo al mismo tiempo en que se incorporaba para levantarse.

En ese momento, Lincoln llega a ver que, aquel sujeto tenia la piel pálida, cabello rubio algo descuidado y venia vestido con un traje de rayas blancas y negras, con una camisa morada y corbata negra.

El sujeto no tarda en voltear la mirada hacia donde el se encontraba, mostrando una sonrisa abierta que dejaba ver sus dientes claramente podridos, y sus ojos amarillos.

Al notar que miraba hacia la dirección por la que el iba, Lincoln opta por hacerse el desentendido y voltea a ver hacia otra parte con tal de evitarse algún posible problema, por lo que esperando que el hombre no se fijara realmente en su presencia.

No estaba escuchando que el sujeto se estuviera acercando hacia su persona, lo cual significaba que al parecer se acababa de ir por otra parte, por lo que voltea a ver de nuevo hacia el frente del camino y...

-¿Que ocurre enano? -pregunto el sujeto al estar enfrente de su rostro.

Ante la repentina aparición del hombre, el joven albino no pudo evitar el tropezar al ir hacia atrás, por lo que cae sentado al piso, y sin darse cuenta eso hace que gorro de la capucha se le caiga de su cabeza, por lo que su cabello y la parte superior de su rostro quedan al descubierto.

Eso hace que el extraño tipo abra los ojos con una expresión de asombro en su rostro, al mismo tiempo que se le notaba algo confundido.

Sin embargo, lo que más lo dejo sorprendido, fue el hecho de ver que, en el cuello del peliblanco estaba el símbolo de un pentagrama.

Con solo ver eso último, hacia que el ser demoniaco sintiera muchas preguntas formándose dentro de su cabeza pero, al final sintió que a su cabeza llego la imagen de una joven que era más o menos de la misma edad de Lincoln.

La chica en cuestión, tenia el cabello negro atado en una coleta, su pie estaba pálida con ojeras moradas, vistiendo un poncho color rojo con patrones de telarañas encima de una blusa manga larga color negra, junto con pantalones y zapatos de ese mismo color.

Al terminar la imagen de aquella chica dentro de su mente, hizo que la mirada en el rostro del sujeto cambiara ligeramente, se veía un tanto más suavizada.

-¿Le habrá lo mismo que a mi... lo mismo que a ella? -se pregunto el tipo dentro de su mente con pesar.

Por su parte, Lincoln se estaba reincorporando tras el susto que acababa de tener, al mismo tiempo se comenzó a quitar de encima cualquier posible rastro de polvo que le hubiese caído encima de su persona, una que termina con eso su mirada se centra directamente en la del extraño tipo.

-Disculpe jovencito pero, ¿que es lo que esta haciendo aquí? -pregunto el tipo al mismo tiempo en que se cruzaba de brazos.

Lincoln por su parte, al escuchar al sujeto que ahora mismo le estaba hablando, hizo que no tardara mucho en reaccionar por lo que se reincorpora de una vez.

-Oh eh, disculpe señor pero, es que no estoy seguro de que es lo que esta pasando, ni siquiera se bien donde estoy. -dijo Lincoln con lo ultimo mientras volteaba a ver de un lado al otro.

No parecía muy convencido por lo que el menor le acababa de contestar, así que en un raído movimiento, inmovilizo a Lincoln al tomarlo con fuerza de la muñeca para posar su otra mano en su frente.

-¿Pero que... -preguntaba Lincoln hasta que se detiene.

Sus ojos se tornaron totalmente blancos, ya parecía que se encontraba dentro de un tipo de trance, y el hombre estaba con una expresión de que estaba meditando pero, después de no más de un minuto los dos vuelven a la normalidad.

Lincoln estaba respirando de manera un poco agitada, sentía que su mente y alma se habían perdido durante un momento, y habían regresado a su cuerpo de golpe.

-¿Que... acaba... de pasar? -pregunto Lincoln quien se terminaba de recuperar de esta extraña experiencia.

El sujeto por su parte, estaba en mejores condiciones pero, su expresión facial era totalmente seria, al ver al chico tuvo una extraña sensación dentro de su pecho, como una sensación familiar que, la verdad no se sentía con gracia de percibirla en este momento.

-No cabe duda... fuese como fuese lo que le hicieron... es claro que lo afecto más de lo esperado... y pensar que esta no seria la primera vez. -pensó el tipo de manera sombría mientras se pasaba una mano por el rostro. 

-Señor, ¿q-que es lo que quiere de mi? -pregunto Lincoln con algo de temor al no saber lo que iba a pasar ahora.

Al escuchar la voz del joven peliblanco, el tipo no tardo mucho en reaccionar y, al final tampoco paso mucho tiempo para dejar, que de su boca saliera un suspiro no muy ligero.

-De ti nada niño, pero creo que debes de acompañarme. -dijo el sujeto mientras se pasaba una mano ahora por el cabello.

-Perdón pero, ¿porque lo haría así como si nada? -pregunto Lincoln con clara desconfianza en sus palabras.

-No es como que te pida que confíes en mi enano, pero temo que no tienes demasiadas opciones si estas aquí, al menos a donde estoy yo hay protección, aunque no es como que sea algo a lo que le tome importancia con frecuencia, pero tu si lo necesitaras. -dijo el hombre al mismo tiempo en que se cruzaba de brazos.

-Disculpe pero, ¿quien es usted? -pregunto Lincoln confundido mientras arqueaba una ceja.

-Mi nombre, no se lo llego a dar a cualquiera, la gente puede darle sin querer un propósito indebido pero solo para que sepas que el fantasma loco soy... me llamo Beetlejuice. -dijo el ahora conocido como Beetlejuice presentándose mientras su ropa cambiaba a la de un maestro de ceremonias de un circo.

Lincoln estaba sencillamente confundido por la presentación de aquel sujeto, peor no tuvo tiempo de decir aunque fuera una silaba cuando sintió que Beetlejuice lo tomo de la muñeca para llevarlo con el.

-Oye, ¿que te pasa? -pregunto Lincoln mientras era arrastrado.

-No hay tiempo, alguien como tu ocupa un refugio aquí, y curiosamente yo vivo en uno que es muy lujoso, te tendrán que recibir. -dijo Beetlejuice mientras seguía con su camino.

-Y, ¿donde es eso? -pregunto Lincoln mientras se subía de nuevo la capucha de la sudadera.

-Como dije, es un lugar seguro, es básicamente... un hotel bastante intrigante. -dijo Beetlejuice para luego soltar una carcajada mientras ambos iban directo a su destino.

...

Y Fin.

Bueno, hasta aquí llega el capitulo, espero que les guste.

La verdad, es que la idea de meter a la versión animada de Beetlejuice fue algo que surgió tras leer una historia por ahí que mezclaban The Loud House con Beetlejuice, y así que los personajes son propiedad de sus propietarios.

Los invito a que dejen sus votos si les gusta el capitulo, además de que también los invito a que escriban sus opiniones sobre el capitulo en los comentarios, comenzó el maratón, nos vemos.

Que lo disfruten.