Los meses pasaron y las cosas parecían ir por buen camino. Ya no se burlaban de mí en la escuela, y mi amistad con Jimin parecía volverse algo más fuerte que una amistad.

El beso que me dio aquella desastrosa tarde fue el primero de muchos. Pequeños besos fugaces que me hacían reír o besos largos y profundos que me arrancaban suspiros, pero a pesar de eso jamás formalizamos nada.

Admito que se sentía bien esa extraña relación. Jimin me hacía sentir especial y me trataba con todo ese amor y cariño que Taehyung jamás me daría. Luche con todas mis fuerzas por poder sentir de la misma forma en que él lo hacía, luche demasiado por tratar de corresponder ese lindo y romántico amor que él me ofrecía. Pero solo lo correspondía a medias.

Porque aunque todo era muy lindo, sus besos no eran los que yo quería probar, sus caricias no eran las que yo quería recibir y sus abrazos no eran los que quería sentir. Trate de mil maneras callar esa estúpida voz que lo comparaba con Taehyung, pero me era imposible, pues aún no lo superaba. Ni siquiera creo haberlo dejado de querer en algún momento.

° ° °

Hola a todos, ¿cómo han estado? Hace mucho tiempo que esta historia terminó, pero he regresado porque decidí editar esta parte de la historia.

Hace semanas me dio por leer SIN GRACIA y al llegar a esta parte no me convenció. Sentía que le faltaba algo, así que decidí reescribirlo.

Algunos capítulos cambiaron y otras simplemente los edité un poquito, pero siguen siendo iguales.

Espero que les gusten los cambios que hice.