Todo se quedó en silencio por mucho tiempo.

-Creí que su obsesión habría terminado... - Murmuré escondiendo mi rostro contra el panda.

Yenia me abraza más fuerte y suspira.

-¿Obsesión?- Pregunta Shawn.

Me levanté y los hice seguirme hasta más lejos al momento de ver a algunos volver a los dormitorios.

Nos sentamos bajo un árbol apartado.

-Se llama Adam. Desde que me conoció tuvo una obsesión por mi, al principio no lo veía y acepté intentar salir con él... pero era muy tóxico y controlador. Yo no lo soporté y terminé con él. Mi madre, obviamente se molestó... Él fue quien le dijo a sus padres para casarse conmigo por "conveniencia" para ambas familias-

Los chicos fruncieron el seño claramente disgustados.

-Les metió tantas cosas en la cabeza a sus padres y luego a mi madre que en un día para el otro pasó de ser mi ex a ser mi prometido. Cuando me escapé creí que así también terminaría con su obsesión pero... ahora está aquí... -

Sentí una mano en mi hombro y cuando miré vi a Daemon sonriendome de manera cálida y demostrandome su apoyo.

Yenia hace lo mismo y Noah pone su mano en mi cabeza.

-No dejaremos que se acerque a ti, tenlo por seguro- Dice este último.

-No quiero involucrarlos... su familia es de personas importantes... -

-Y nosotros somos una banda que es conocida por casi todo el mundo- Dice Noah.

-Y sin exagerar- Le sigue Yenia estando de acuerdo.

-Creeme que podemos y somos capaces de ayudarte- Dice Daemon.

-No nos importa involucrarnos, preferimos que estés feliz- Dice Shawn.

Les sonreí apenas pero luego los abracé soltando una que otra lágrima que no conseguía retener.

-Yo solo quería ser una chica normal... - Murmuré.

-Si eras una chica normal como todas... no nos hubiéramos conocido y no nos hubieras agradado- Dice Shawn.

Yo me reí un poco.

Los demás asintieron a su favor.

-Gracias chicos... de verdad... -

-Para eso estamos-

Nos quedamos un momento más hasta que la mayoría bostezo y decidimos irnos cada quien a dormir.

Yenia me acompañó y los chicos igual solo que se quedaron en la entrada de los dormitorios y se despidieron para luego irse al suyo.

Nosotras entramos y fuimos cada quien a su cama.

***

***

Las siguientes semanas fueron normales, por suerte no vi que Adam intentara entrar o que ya estuviera por aquí.

Estaba muy asustada y en alerta constante.

Me asustaba con cada persona que se me acercara a hablar.

Los chicos también estaban atentos a cualquier cosa.

En los únicos momentos que me calmaba era cuando jugaba al básquet, dibujaba o me metía en la charla con los chicos.

Como justamente ahora estábamos jugando al básquet un sábado por la tarde en una plaza.

Yo sonreía y no me sentía preocupada por nada.

Formaba equipo con Shawn y Yenia que por fin se ánimo a jugar, no lo hace mal.

-Aquí- Dije hacia Yenia quien me lanzó la pelota y yo amagué a Noah y pasé por su lado para luego encestar una canasta.

Él bufa y yo sonrío con triunfo.

-Mejor suerte para la proxima- Dije sonriendo y parándome de puntillas para luego golpear levemente la punta de su nariz.

Él rueda los ojos.

Me comencé a reír junto a los demás menos Noah.

-¿Con que para esto te fuiste... ?- Me quedé helada y con ganas de huir nuevamente.

Todos los chicos se detienen y se juntan a mi alrededor.

-¿Para jugar como si fueras un hombre o para estar de zorra?-

Apreté los puños.

Noah frunce el seño y todos los chicos estaban dispuestos a defenderme pero yo me di la vuelta caminando rápidamente hasta estar frente a frente con ella y con el niño chismoso de Adam atrás de ella.

Me crucé de brazos.

-Qué alegría verte mami- Dije sonriendo con total cinismo.

-Niña mal agradecida... nos vamos ahora mismo a casa, te enseñaré modales- Dice y trata de agarrarme del brazo pero yo la esquivó tomando una pose pensativa y caminé.

-¿Modales? ¿Enserio me enseñarás algo que a ti justamente te falta? No pienso volver a ese lugar solo para que me tengas de marioneta. No me quedaré sentada, callada y asintiendo a todo lo que me digas. No soy así y no lo seré. Seguiré aquí, seguiré jugando y seguiré con mi vida como se me venga en gana-

-Esto es un juego absurdo. Eres una señorita, no deberías... -

-¿Otra vez con eso? Que juegue al básquet no me hace menos "señorita"- Dije molestándome -Pero... ¿Sabes una cosa? Tú y tus estúpidos ideales se pueden ir a la jodida mier... -

El sonido de la cachetada que me dio retumbó por todo el lugar.

Mi cabeza quedó de lado. Juro que estaba por doblarme el cuello como para matarme.

Escuché que los chicos trataron de acercarse a ayudarme pero yo me reí.

-Ay... madre... - La miré sonriendo y me toqué la mejilla -Tus golpes dejaron de ser fuertes... ¿Tuviste piedad?-

Ella aprieta los labios.

-Te diré algo- Dije volviendo a cruzarme de brazos -Aunque me insultes, me golpees, me humilles o trates de obligarme... jamás... y repito jamás volveré contigo ni volveré a verte como mi madre. Puedes estar segura de eso-

-Eres una vergüenza... Debiste de haber muerto junto a tu padre... -

-¿Terminaste?- Dije bostezando falsamente.

Ella levanta nuevamente su mano pero y agarré su muñeca y luego me acerqué a sujetarla por el cuello.

-Será mejor... que me dejes en paz si no quieres terminar en la cárcel... - Dije en su oído.

-¿De qué mierda estás... ?-

-¿No lo sabes?- Murmuré -Te estamos grabando, tenemos las pruebas suficientes para culparte. Me has golpeado... eso ya significa mucho para la ley- Dije y la solté.

Ella mira a todos lados buscando las cámaras y las encuentra, las que son del parque y a Shawn y Yenia con sus celulares en mano.

-Mira... hagamos esto... - Dije -Tú... me dejas vivir en paz, Adam no se volverá a acercar a mi y... haces hasta lo imposible por encontrar a Sarah... y el video no saldrá a la luz-

-Eres una... -

-Pero si no lo haces... créeme que no me importará que tu seas la que me dio la vida... -

Ella hace chillidos completamente frustrada y arrinconada.

Se da la vuelta resignada y hace que Adam camine junto a ella.

-¡Oh! ¡Y quiero que me envíes dinero mensualmente!- Dije aprovechando la situación.

Ella me lanza una mirada fugaz y luego se va.

Cuando la perdí de vista los chicos se me acercan y me rodean pero yo me quejo del dolor y me sobo la mejilla.

-Golpea duro la muy zo... -

-¿Estás bien... ?- Pregunta Noah mirando el golpe preocupado.

-Si, ya pueden calmarse-

-Eres una extorsionistas- Dice Shawn riendo orgulloso.

Yo sonreí.

-¿Qué fue? ¿Seguimos?- Pregunté agarrando la pelota de las manos de Daemon.

-¡Quiero revancha!-

-¡Pues ven y quitenme la pelota si puden!-