KAO

Llevo diez minutos esperando a Earth para llevarlo a la entrega de premios, quiero llegar temprano para disfrutar de la noche con él. Sé que ha estado nervioso estos días y no nos hemos visto lo suficiente, quiero compensarle esta noche.

Cuando lo veo salir del portal de su apartamento mi boca se abre sin remedio y mis ojos son como platos. Ese ser extraordinario que veo dentro de un traje negro de firma no puede ser mío. El traje se adapta a su cuerpo como un guante, su pelo peinado hacia arriba brilla con un poco de gel y para rematar me regala la sonrisa más bella de este planeta.

Es mucho para asimilar ahora mismo, no sé qué decirle cuando me ve y camina hacia mí.

-¿Estás bien?, tienes una cara muy rara- me dice dándome un beso suave en los labios.

-Creo que he visto un ángel- le digo en todavía pasmado con su magnífico aspecto.

-¿Te gusta?- me dice dando una vuelta para que lo vea en todo su esplendor-¿no te avergonzaré esta noche?- me pregunta con inquietud.

-Aunque te hubieses presentado en pijama me avergonzaría de ti- le digo para que sepa lo orgulloso que estoy de que estemos juntos.

-Sí, seguro- me dice riéndose complacido con mis palabras.

-Eres el ser más bello de este mundo y eres todo mío, no puedo esperar a que todo el mundo lo sepa- le explico mientras le abro la puerta del coche.

Esta noche será maravillosa estoy seguro de ello.

EARTH

Llegamos al evento un poco antes de lo esperado, Zee y Saint ya están aquí, los dos guapísimos con esos trajes. Kao ha ido a saludar a nuestra anfitriona y yo me quedo un rato admirando todo el lugar con Saint.

-¿Has pensado en lo que hablamos esta tarde?- me pregunta mi amigo.

-Lo he pensado, pero todavía no sé qué voy a hacer, Saint tú mejor que nadie sabe perfectamente cómo ha sido mi vida, ahora mismo soy quien quiero ser- le digo.

-Earth sé muy bien que eso no es verdad. Tú eres bailarín, te levantas con ese deseo y te acuestas pensando en subir a un escenario. También sé que da un miedo atroz pensar en dejar tu cómoda vida para arriesgarte y confiar en alguien. Pero créeme cuando te digo que el que no arriesga no gana y creo firmemente que Kao quiero hacerte feliz- me responde.

-Lo amo de verdad Saint, confío en él y creo que es el hombre de mi vida, pero tengo tanto miedo que estoy paralizado- le confieso.

-No puedes dejar que tus miedos dominen tu vida, te mereces que te paso algo bueno y Kao, déjame decirte, está muy bueno- me dice el muy descarado.

-Pero es sólo mío, así que deja de fantasear con él- le espeto un poco celoso.

-Si te pone celoso que alguien más piense en él más vale que lo amarres de una vez, porque si no puede volar en cualquier momento- me advierte seriamente.

-Hablaré con él esta noche, ¿estás contento?, pero no olvides tu promesa de contarme tu idea para mantener mi independencia económica- le recuerdo.

-Por supuesto no lo olvido- me dice mientras me guiña un ojo.

Parece que la entrega de premios va a empezar y nos guían hasta nuestros sitios, Saint, Zee, algunos de los empleados de Kan Security y yo nos sentamos juntos.

Con toda la gente ya en sus sitios correspondientes, de apagan las luces y se enciende el escenario. Es todo espectacular, empiezan a entregar los distintos premios por categorías, hasta que llega la mejor empresa por desarrollo del año.

Cruzo los dedos para que Kao reciba el premio que merece, es un hombre extraordinario y ahora me doy cuenta de que es mío, que sabe lo que ha sido mi vida y sigue queriendo un futuro conmigo. Y yo lo único que he hecho ha sido apartarlo de mí. Pero esta noche eso cambiará, aceptaré su proposición, intentaré hacerlo feliz.

-El premio a la mejor empresa por su desarrollo a lo largo del año es para Kan Security- dice el presentador del evento.

Zee y los chicos se levantan y empiezan a silbar y a aplaudir como locos. Saint se quiere morir de la vergüenza enterrado en su asiento y yo me he quedado sin palabras.

Veo que Kao sube a recibir su premio y el presentador le pide que diga algunas palabras.

-Quiero dar las gracias a todos los que han hecho posible que nuestra empresa haya optado a este premio con su esfuerzo y dedicación. Para poder ganar hay que saber jugar en equipo y yo tengo el mejor del mundo. Zee, gracias por confiar en mí y entrar en este equipo sin dudarlo desde el principio. A todos mis empleados gracias por todo sois los mejores. Por último quiero agradecer a Earth, el dueño de mi corazón, por hacer que cada día me esfuerce en ser mejor jefe y mejor persona, te quiero- suelta todo eso sin inmutarse y la gente se levanta para aplaudirle, pero él solo me mira a mí y yo a él. Voy a llorar y no quiero avergonzarlo así que me levanto y salgo de la platea hacia la casa principal.

Mi corazón está a punto de estallar, le ha dicho al mundo entero que me ama sin ningún pudor, no sé cómo voy a merecerme ese amor tan grande, estoy entrando en pánico.

De repente siento una mano que me agarra por la cintura y me abraza con fuerza, su olor me atrapa y me siento como en casa. No quiero moverme de sus brazos nunca.

-Earth amor, ¿estás bien?¿te ha molestado lo que he dicho?- me pregunta con una nota de ansiedad en su voz.

Lo miro directamente a los ojos, me pongo de puntillas y lo beso con devoción.

-Es lo más bonito que me han dicho nunca, te quiero Kao, quiero todo lo que me quieras dar e intentaré estar a la altura, lo prometo- le suelto todo de golpe.

-¿Dejarás tu trabajo y te mudarás conmigo? – me pregunta para estar seguro de lo que le digo.

-Lo haré, estaremos juntos como tú quieres – le respondo con una sonrisa.

-Pero tú también lo quieres así ¿verdad?- me interroga.

-No he querido nada tanto en mi vida –le respondo besándolo de nuevo.

Él me coge en brazos y me da una vuelta completa sin dejar nuestro beso, es feliz y yo también lo soy.

Cuando me deja en el suelo todavía riéndonos como dos colegiales, oigo a alguien llamarme por mi nombre. Me giro y no puedo creer lo que veo, mi felicidad se hace añicos y el terror se apodera de mí. No es posible que la vida me haga esto, es mi tío vestido con un elegante traje que se atreve a hablar conmigo, no lo he vuelto a ver desde que tenía 17 años pero ha vivido en mis pesadillas desde entonces. Se me nubla la mente y mi corazón late a mil por hora, me parece que Kao me está hablando pero solo oigo un pitido muy fuerte en mis oídos. Todo se pone negro y mi mente desconecta de la realidad, ya no sé dónde estoy.

KAO

Earth se ha desmayado e inmediatamente lo cojo en mis brazos. No sé qué ha le ha dicho este hombre pero mi duende no lo ha soportado. Voy a encarar a ese tipo cuando en ese momento llega Saint y le dice a Zee que se lo lleve a la casa principal.

-¿Qué está pasando Saint?- le pregunta Zee asustado.

-Por favor amor haz lo que te digo, después te lo contaré todo, lo prometo- le ruega Saint.

Zee obedece, carga a Earth y lo mete en la casa.

-Saint- lo llamo, quiero saber que está pasando.

-Kao este es el tío de Earth, creo que ya conoces su historia- me informa.

Ese malnacido se ha atrevido a intentar hablar con él. La ira se apodera de mí cojo al tío de Earth por el cuello y lo estampo contra la pared de la mansión.

-Kao, por favor tranquilízate, esto está lleno de gente y este bastardo es una persona muy influyente. Así solo vamos a empeorar las cosas, por favor Earth te necesita, no lo abandones como ha hecho todo el mundo, y mucho menos por este cerdo- me dice mirándo directamente la cara al asqueroso del tío de Earth.

-Álejate de Earth, jamás vuelvas a intentar verlo o hablar con él, como se te ocurra incluso pensar en él te arrancaré las entrañas bastardo de mierda- le escupo mi odio a la cara y suelto el agarre de su cuello.

Corro escaleras arriba tengo que pensar en mi duende porque si no bajaré a rematar a esa rata que tiene por tío. Tengo que agradecer que Saint estaba ahí porque podría haber cometido una locura.

Al llegar a la habitación veo que Zee ha metido a Earth en la cama, entro y le pido a mi amigo que nos deje a solas.

-Earth, mi amor despierta cariño- le pido cogiendo su mano.

Está muy pálido pero respira con normalidad, así que espero paciente a que abra los ojos.

Pasados unos minutos le oigo gemir y lo abrazo con fuerza para que sepa que estoy con él.

-Kao por favor llévame a casa, no quiero estar cerca de ese hombre- me pide cuando deja de llorar.

-Claro cariño ahora mismo nos vamos a casa- le digo sin dudarlo.

-Siento haber estropeado tu gran día, ya puedes empezar a arrepentirte de tenerme en tu vida- me dice muy apenado.

-Jamás me arrepentiré de que estés en mi vida, hoy es el día más feliz de mi existencia, porque has aceptado ser parte de ella. Por favor no permitamos que lo que te hizo ese malnacido condicione el resto de nuestra vida- le pido.

Salimos de la habitación y nos despedimos de Saint y Zee. Ellos se disculparan por nosotros en la recepción del evento, así cogidos de la mano nos dirigimos a casa. Por fin la palabra hogar tiene un significado completo, Earth ha decidido que seamos una familia y yo no puedo ser más feliz.