Pase el resto del día con Minho me mostró su oficina y el museo detalladamente. Fue como un tour privado. Los empleados al escuchar mi nombre sonreían y se acercaban a saludar.

-Esto es algo raro -dije sonriendo nervioso.

-No, no lo es -sonrío- ellos te conocen tanto como yo.

Sonreí nervioso al saber que todas estas personas conocen parte de mi vida privada. Tendré que pensar mejor que es lo que escribo de ahora en adelante...

Llegamos junto a una pintura enmarcada enorme pero hermosa. En ella se encontraba a una pareja tomada de las manos caminando hacia un lago. Minho se detuvo en esta imagen y guardó silencio... incómodo, muy incómodo.

-Kibum... -dijo sin dejar de ver la pintura.

-¿Si? -pregunté viéndolo.

-¿Tu crees que yo estoy jugando?

-Min... yo... -dije pero me interrumpió.

-¿Que tipo de juego crees que es? -dijo aún sin verme.

-De... ¿Roles?

-¿Roles? -dijo y volteándome a ver de inmediato.

-Ya sabes... finges ser mi novio y finges quererme. Yo finjo que me gusta y así funciona...

Me vio unos minutos serio, sonrío y desvío su mirada hacia el suelo.

-Que bueno que lo tengas presente -dijo- Esto no es nada más que un juego. -empezó a caminar hacia las siguientes esculturas.

Por alguna razón escucharlo decir esto en voz alta me hizo sentir mal, algo se removió en mi... pero esta bien que él sepa mi punto de vista.

Lo seguí y nos detuvimos en una escultura donde Onew se encontraba​ pasándole un trapo húmedo encima.

-Bum, el es mi hermanastro Onew -dijo presentándome. Onew dirigió su mirada hacia mi y sonrío.

-Si, nos conocimos esta mañana. -sonrío.- ¿Él es tu novio, no hermano? -preguntó en voz alta... muy fuerte para mi gusto.

Me quede en shock ante la pregunta. Todos los empleados voltearon a vernos y por un momento fuimos El Centro de atención.

-Si -dijo Minho sonriendo poniendo su brazo sobre mis hombros- él es de quien tanto te he hablado.

¿Hablado? ¿Él habla de mi con su hermano? No, espera... ¿Hermanastro? ¿Minho no tiene mamá o papá biológico? ¿Es él adoptado? ¿Nima conoce a Onew también?

Muchas preguntas invadieron mi mente en ese momento y me di cuenta que definitivamente yo no sé absolutamente nada de él... Soy el peor novio del mundo.

-Mucho gusto... -dije tímido hacia Onew.

Este me vio de pies a cabeza y se tiro a abrazarme. Ahora comprendo el parentesco entre estos dos.

-Bienvenido a la familia -dijo y Minho se acercó rápido a separarnos.

-No es manera de saludar al novio de tu hermano -dijo molesto.

Yo lo tomé de la mano para que se calmara, no tiene por qué fingir frente a su hermano. Él apretó mi mano y ya no me soltó.

-Lo lamento -dijo Onew rascando su cuello.

-Bummie... -dijo Minho hacia mi- debo terminar un papeleo de las esculturas que van a entrar...-se giró hacia Onew- podrías acompañarlo a la puerta -dijo con una enorme sonrisa y el aludido asintió y en ese instante Min me beso frente a los empleados. -Tengo que marcar territorio -dijo susurrando luego de besarme. Se despidió y se perdió en su oficina. Es un intenso.

-Jamás había visto a mi hermano así -dijo Onew acercándose a mi dejando la estatua a un lado.

-¿Como? -pregunté atento.

-Olvídalo -dijo sonriendo- te acompañaré -avanzamos hasta la entrada.- Apuesto a que no has almorzado -dijo.

-La verdad no -conteste apenado.- Pero voy directo a casa puedo cocinar algo ahí -sonreí.

-Nada de eso... no dejaré que mi cuñado pase hambre frente a mi -dijo en la puerta de la entrada.

Nos despedimos del guardia de seguridad, luego de que me pidiera una foto. No me acostumbraré a esto.

Onew me llevó a un restaurante sencillo que estaba a unas calles del museo. Pasó saludando casi a cada persona que nos encontrábamos. Entramos y ordenó por los dos.

-Vaya... -dijo viéndome detenidamente.

-¿Sucede... algo? -pregunté nervioso. Su mirada era intimidante.

-Mi hermano tiene buenos gustos -sonrío.

-Tu... ¿no me odias? -volví a preguntar.

-rió-¿Por que lo haría? -dijo confundido.

-Por mi culpa... tu hermano está saliendo con otro hombre -rasque mi cuello nervioso.

-No es que yo sea homofóbico -dijo riendo.

-No es eso...

-De hecho me alegra más que este contigo... la verdad, desde que te empezó a leer sus días son más alegres. No te imaginas ahora que viven juntos.

-¿Más alegres? -pregunté curioso.

-Ya sabes por lo de sus padres biológicos y eso... -dijo restándole importancia. ¡Entonces si es adoptado!

-Disculpa si me meto... pero él ¿Es adoptado? -dije directo.

Este se quedo quieto y sorprendido- ¿Él aún no te cuenta?-dijo.

-Al parecer aún no... -dije agachando mi cabeza. Creo que después de todo no fue tan sincero conmigo.

-Bueno, algún día lo hará, así que te puedo adelantar la historia -dijo sonriendo.

En ese momento la camarera llego con dos platos de spaghetti y se despidió de Onew. Al parecer conocía a todo el mundo.

-¿Por donde empezar? -dijo después de probar su comida.- Está bien... Minho y yo somos hermanos desde que él tenía 10 años...

-¿10 años? -pregunté curioso- Estaba muy grande para ser adoptado.

-Es verdad -sonrío- la verdad... somos primos... sus padres lo dejaron con nosotros un día que dijeron que saldrían por un viaje... quién diría que jamás volverían por él.

-¿A que te refieres? -dije preocupado.

-Sus padres desaparecieron de la faz de la tierra, jamás regresaron. Lo único que supimos de ellos fue una nota que la madre de Min dejo en su habitación... se podía leer un "lo siento" y nada más. -Vio su plato por unos momentos.

-¿Lo... lo siento? -pregunté.

-suspiró- ya estaba en sus planes abandonarlo -dijo sin dejar de ver el plato.- Hace unos cuantos meses la policia llego a casa de mi mamá y nos dijeron que los habían encontrado. Al parecer ambos se suicidaron en una cabaña de un pueblo muy lejano, así que de inmediato todas las deudas de sus padres cayeron en él.

-Yo... -susurre viendo mi plato casi vacío. No lo podía creer, la vida de Min no es tan fácil después de todo... y yo quejándome por no tener novio. -estúpido- pensé para mi.- Onew... creo que debo irme... -dije tomando mi chaqueta.

-Kibum...-dijo tomando mi mano- gracias por hacer feliz a mi hermano -sonrío y me dejo ir.

Esto no está bien. Su hermano de verdad cree que somos pareja, esto no es solo un juego entre Minho y yo... su hermano, su familia está involucrada.
En ese momento mi celular vibro mientras yo caminaba por las calles. Era de Jonghyun. Me apresuré a leerlo.

-"Lamento lo que sucedió... tenemos que hablar. Pasaré por ti al trabajo mañana."

Suspiré y apague mi celular. En este momento lo único que quería era hablar y ver a Minho. No podía dejar de pensar en lo que Onew me había contado. En comparación con Min... mi vida estuvo en bandeja de plata. Tenía tantas dudas en mi cabeza, un nudo se formó en mi garganta. Creí que esto de un novio temporal sería fácil... pero no lo es. Camine a casa en vez de tomar el autobús y empezó a oscurecer demasiado rápido.

Oí música desde fuera de casa, al parecer Min ya estaba ahí. Le gustaba poner música con volumen alto después de trabajar. Abrí la puerta de casa y ahí estaba él con preocupación en sus ojos, sentado en el sofá.

-¡Bummie! -gritó al verme y se tiro a abrazarme.- ¿Por que no contestabas el celular? -preguntó.

Al verlo empecé a llorar. Por él.

Y no quería que fuera así, no quiero tener lastima por él... quiero cuidarlo, quiero hacerlo feliz de alguna manera. Pero yo no soy el indicado. No puedo ser yo.

-detuvo su angustia al verme llorar.-¿Pasó algo? -dijo tomando mi cara entre sus manos.

-Yo... lo siento tanto -dije poniendo mis manos sobre las suyas sin dejar de llorar.

-¿Que Sucede? -preguntó asustado.
En ese momento lo abrace tan fuerte como pude.

-Tu vida... es tan difícil, y tú me ves aquí llorando por hombres... no es justo... -dije apretándolo- Soy la persona más egoísta... yo no debí... Minho, lamento lo de tus padres -dije al fin.

Al decir esto su agarre se tensó un poco, pero luego me envolvió en sus brazos.- Eres rápido -susurró.

-¿Q... que? -dije entre sollozos.

-Acabas de completar el mes dos sin que yo interviniera... -dijo.

-Me separe de él- Pero... justo ayer termine el mes uno -dije limpiando mis ojos.

-El mes dos sería sensibilidad... tenía planeado contarte lo de mis padres justo hoy... Onew se adelantó... ¿no es así? -dijo sonriendo amablemente.

-¿A que te refieres? -pregunté confundido-¿Onew sabe de esto? -pregunté.

-negó con su cabeza- él de verdad cree que estamos saliendo...

-Esto no está bien Min... -dije alejándome de él.

-Shhh -dijo tomando mis manos, provocando que me acercara a él- Si esto está mal... ¿Por que se siente tan bien? -agregó y me besó.

Justo en ese momento en el reproductor se comenzó a escuchar "Baby, Baby" del grupo Winner.

Minho me soltó y me tomo de la cintura.

-¿Me concedes esta pieza? -preguntó. Yo solo asentí sin dejar de ver sus ojos. Sus pasos eran lentos pero seguros. Y aún cuando no sé si esta canción era balada... Era una balada perfecta en este momento.

-Min... tus padres... -dije siguiendo sus pasos de una manera torpe.

-No hablemos de eso -me dio una vuelta estratégicamente y volvió a tomar mi cintura- solo disfruta este momento. -sonrío.

Mi corazón empezó a latir de una manera alocada. Sentía que todo mi cuerpo reaccionaba a favor de los pasos de Minho. Su mano se sentía tan cómoda en mi cintura que olvide que la tenía ahí, sus ojos estaban cerrados mientras la canción sonaba y él la tarareaba. Me fijé en sus labios y esta vez fui yo quien lo beso...

"Baby, baby... No me gusta esta noche. Baby, baby... No me gusta estar solo."