Canción: Birds/Imagine Dragons.

"Todo es temporal. Todo se deslizará. El amor nunca morirá" Birds/Imagine Dragons.

Daniel, 2 de septiembre de 2023.

—¿Se puede saber por qué has salido corriendo? ¿Acaso no íbamos a recogerla y traerla aquí? —baja Louis enfurruñado de mi coche.

—¿No has visto que la iba a llevar su padre a clase? —intento escurrir el bulto, pero lo único que consigo es que me fulmine con la mirada.

—Ya, y no podías haberte ofrecido. Además, has quedado fatal con el acelerón que has dado justo cuando la estaba saludando...

—¡Pues no haberlo hecho, ¿vale?! ¡Ni siquiera íbamos a ir, tú me empezaste a taladrar la cabeza con que fuéramos a por ella cuando ya casi estábamos en los aparcamientos! ¡¿Y de que nos ha servido, eh?! —pierdo los papeles, sin saber muy bien porqué.

—Podrías haber rechazado mi proposición, sin embargo no hizo falta rogarte mucho por que cambiaras la dirección y retrocedieras en su busca —sonríe abiertamente —. Por cierto, no grites tanto que vas a formar un espectáculo ya, a las nueve de la mañana...

—¿Por qué narices tienes tanto interés en April, así de repente? —respiro hondo, intentando calmarme.

—Eso ya lo sabes querido amigo... —se encoge de hombros.

—No. Ese es el problema. Que no sé que te está ocurriendo últimamente... —avanzamos por los pasillos del instituto.

—Puedes tratar de mentirte a ti mismo, pero no mientes a los que te rodean; y mucho menos vas a empezarlo a hacer conmigo. Llevas años apestando... —mira al frente de repente, y veo como la arruguita esa que se forma sobre sus cejas cuando se concentra o se enfada gravemente, se va insinuando sobre su piel.

»Hola Kate, ¿qué tal estás? —habla Louis de pronto, al toparnos con Kate, incomodando a alguien.

Katherine se tensa rápidamente al escuchar la voz de Louis y puedo ver por encima de su hombro a quien está molestando.

April... Mi April... ¿por qué te hacen esto? ¿Por qué la toman siempre contigo si tú no haces mal alguno a nadie?

Quiero matar a todo aquel que le saque una lágrima o un solo suspiro... quiero que todo su dolor desaparezca de su interior y que pueda y la dejen vivir su vida en paz.

—Ayleen, ¡cómo puedes ser tan torpe! —dice de repente y saca un pañuelo de su bolsillo y se lo da.

»Lo siento mucho April, le tengo dicho que mire por donde va... —habla con voz dulce y melosa y acaricia tímidamente el brazo de April.

¿De verdad solo ha sido un malentendido? ¿No quería hacerle daño alguno?

»¡Hola chicos! ¿Qué tal? —se vuelve para mirarnos y la observo con desinterés.

—Bien... ¿aún no comienza la clase? —la mira fijamente Louis.

—Sí, pero Ayleen se ha tropezado con April y le estaba dando un pañuelo para que se secara la cara... —sonríe abiertamente, mostrando una sonrisa blanca e impecable.

Parece que sí... Solo se trata de una confusión. ¿Quién iba a querer hacerle daño a un ser tan dulce como April? Nadie en su sano juicio y con un mínimo desarrollo de sus sentimientos, podría hacerle algún daño a mi Pril...

—Que atenta por tu parte... —responde Louis con falsedad y sonrío levemente tratando de mantener la mirada en Kate y no incompodar a April.

Intento contener la risa en esta situación. No importa lo que haya pasado, si ha sido adrede o solo un pequeño accidente a Louis jamás le caerá bien este tipo de gente... aunque tampoco puedo culparlo, a mi tampoco me hacen especialmente gracia... Solo es que Katherine parece estar demostrando no ser como yo me pensaba...

Sonrío levemente al ver que todo este barullo se está aclarando.

—No es para tanto... —sonríe jugando coquetamente con su pelo y mirándome, aleteando sus pestañas inocente y coquetamente.

No puedo decir que su reacción ante mi interés no me divierta, pero no pienso reírme y confundir más, probablemente, a April.

Así que sin ánimos de aturdirla más de lo que ya lo está les paso por un lado, saludando y entrando en clase, dejándolos ahí parados y probablemente confundiendo a April más de lo que estaba ya.

Alguien tira de mi manga justo cuando estoy por sentarme en mi sitio y me giro para observar unos grandes ojos verdes a través de una espesa y negra capa de pestañas, postizas.

—Hola de nuevo... —sonríe avergonzada Kate.

—¿Qué quieres Katherine? —voy al grano, sin dejar los formalismos, cosa que parece incomodarla.

—Bueno... ya sabes que siempre he estado un poco colada por ti... —se sincera de golpe y tengo que reprimir el impulso de no abrir los ojos como si me hubiera dado algo y disimular. ¿Colada por mi o por mi uniforme? —El caso es... que, me gustaría pedirte una cita, si no es mucho pedir... —da una risilla nerviosa mientras mira a su pie, jugando con este en el suelo.

—Eh... pues... —¿y ahora qué le respondo? No voy a negar que es muy guapa y demás, pero ahí se queda todo... no creo que ni siquiera compartamos un solo pensamiento o ideal o lo que cuernos tenga que compartir una pareja; ni siquiera creo que compartamos unas míseras patatas fritas, no con la sílfide que está. Sacudo la cabeza intentando concentrarme.

—¿Eso es un no? —pucherea levemente y abro los ojos como platos.

—No... no es eso es que... —su sonrisa comienza a ensancharse, entendiendo lo otro. En qué lío te has metido Daniel... estás superando los marujeos de tu padre, pero ya sabes lo que se dice en estos casos, de tal palo tal astilla.

—Entonces es un sí... —sus pequeños ojos castaños brillan con emoción.

—Un tal vez... me lo pensaré Kate, me lo pensaré... —digo sin ánimos al ver cómo April pasa por nuestro lado para sentarse en su sitio. Estoy cien por cien seguro que ha escuchado la conversación, o al menos una gran parte de ella.

—Estaré esperando tu respuesta —se menea coqueta en el sitio y se lanza a besarme la mejilla, dejándome totalmente confundido y a media clase vitoreando.

—Sigo pensando que debes de dejar para los demás. Debes de compartir más y no ser tan avaricioso... —dice Louis llegando a mi algo serio. —¿Nueva novia? —pregunta con desinterés.

—No es momento de hablar de eso... —señalo con la mirada a April, la cual garabatea en su cuaderno y aprovecho mis palabras cuando la profesora entra en clase.

Louis y yo nos sentamos en nuestros respectivos sitios a la espera de que empiece la clase. Y como era de esperar el gorila que tengo en el equipo de fútbol aparece cinco minutos después, ganándose la mirada fulminante de la profesora, la que intuyo que no había empezado la clase dándole un margen para venir.

—Señor Edwards, no se lo volveré a decir... si le hacen falta diez minutos para recorrer los pasillos pisando huevos para venir hasta clase por su adormilamiento, salga diez minutos antes de casa. Es su último año aquí antes de ir a la universidad, más le vale aplicarse si no quiere verme el septiembre que viene, repitiendo curso —zanja la profesora y este agacha la cabeza aturdido mientras se sienta.

»Muy bien clase. Abramos el libro por la página 12, hoy comenzamos el primer tema —y todo lo que se escucha a partir de eso son páginas pasando y quejas adormiladas de los estudiantes.

—Mantente alejada de mí experimento... —Connor se hace al lado opuesto del pupitre alejándose de April y mirándola con asco, mientras esta se limita a asentir avergonzada ¿y ahora a este que le pica?

Louis me mira seriamente, expectante a que le diga yo algo o lo hará él. Las tinieblas que atraviesan sus ojos con la furia que le ha provocado ese comentario, se podría partir firmemente con una espada con su densidad o perfectamente nos ahogaría a toda la clase; pero no hace falta que me diga mucho más, ni que él salte, ya de por sí, por el puñetero comentario me hierve la sangre.

Miro hacia todos lados, buscando que no me vea nadie, mucho menos la profesora y agarro a Connor por la capucha haciéndolo hacia atrás. Este traga saliva y pega un brinco en el asiento por la sorpresa, conteniendo el aire en cuanto nota mi presencia.

—Más te vale alejarte de ella si no quieres que te rompa el maldito cráneo en la pista de fútbol esta tarde. No quiero que vuelvas a hacer un puto comentario despectivo sobre ella, ni quiero un insulto, ni una mala cara, ni siquiera un soplido, ¿te queda claro Edwards? —este asiente con pesadez, esperando a que lo suelte —. Más te vale que así sea, porque te juro que desencajaré la rótula de tu pierna en medio de un entrenamiento, para que no puedas jugar más en el asqueroso año y haré que parezca un accidente.

—Sí, de acuerdo mi capitán... —vuelve a asentir temeroso de mi autoridad.

—Pues ahora pega tu puto culo al asiento como si en este hubiera superglue, cierra la boca y limítate a escuchar las explicaciones de la profesora. A ver si pillas algo. —lo suelto de golpe golpeándolo en la nuca y se sienta sin rechistar, colocándose el cuello de la sudadera correctamente, para mirar al frente.

April mira de reojo hacia atrás con cara de póker, no sé si le ha gustado que la defendiera, no sé si le ha molestado mi empleo de la violencia, o si sigue cabreada conmigo por lo que hice hace unos años, lo único que sé es que su expresión es indescifrable.

—Bien, como en la mayoría de los años, comenzaremos por las células.Y daremos los distintos niveles de organización. Pero antes de ello, pongámonos a prueba y veamos los estragos que ha hecho el verano en nosotros. ¿Alguno sabría decirme lo que era una célula? —espera la respuesta de alguien, enseguida Katherine levanta la mano para responder, y parece que no soy el único sorprendido porque los ojos de la señorita Smith parece que saldrán disparados en cualquier momento de sus cuencas.

¿Qué intenta demostrar? ¿Qué no se ponía atrás para limarse y pintarse las uñas y pasar rotundamente de la clase?

»¿Sí, señorita Kavanagh? —Sophia se sienta sobre la mesa esperando su respuesta.

—Aquello que compone al ser humano... —dice tan pancha y me tengo que morder los labios para no soltar una enorme carcajada, Louis está igual, lo sé por lo rojo que se ha puesto y por las lagrimillas que descienden por sus mejillas.

—Me temo que es una verdad a medias señorita Kavanagh. El ser humano es más que células, y creo que no es el único ser vivo compuesto por ellas, ¿alguien más? —mira hacia todos lados buscando a alguien que le sepa explicar con más detenimiento lo que acaba de preguntar, sin recibir respuesta alguna, no sé si por pereza de estos a las nueve de la mañana o directamente, porque no se acuerdan de algo tan sumamente sencillo.

De repente se escucha un murmullo, en clase, todos excepto yo buscan a quien ha empezado a hablar, a mi no me hace falta, reconocería su voz en su versión más insonora y apagada, April...

—¿Sí, April? ¿Podrías repetir lo que acabas de decir? —habla Sophia sonriendo, reconociendo su voz también.

—Yo, yo, eh...

—Tranquila April, estoy segura de que responderás a la perfección, confía más en ti misma —sonríe de oreja a oreja mirándola.

—Yo... eh..., Una célula es una unidad anatómica fundamental de todos los organismos vivos, generalmente microscópica, formada por citoplasma, uno o más núcleos y una membrana que la rodea —la profesora asiente con aprobación sonriendo.

—Eso es lo que es exactamente, una unidad anatómica fundamental de todos los organismos vivos ¿notas la diferencia Kate? Los seres humanos no son los únicos organismos vivos de la tierra —explica sonriente, mirando hacia Katherine, la cual se sonroja con la corrección que le han dado Pril y la profesora y los demás ríen levemente.

—No sé cómo podéis reíros de algo que no habéis tenido narices a responder vosotros —reprende seriamente y las risas se cortan al momento. —Cuando queráis hacer una chanza, al menos que sea con fundamento...

»Muy bien señorita Kavanagh, para la próxima lo hará mucho mejor. No ha estado usted muy desencaminada, siga así —Kate asiente con cierto rubor subiendo por sus mejillas—. ¿Y bien, señorita Stone, podría decirnos cómo se clasifican?

—Según su complejidad, se clasifican en Eucariotas, que contienen un núcleo organizado, y el ADN, el cual se encuentra en el interior del núcleo y Procariotas, las cuales tienen el material genético o ADN, dispersos en el citoplasma, como en el caso de las algas y algunas bacterias.

—¡Venga ya! ¡Tiene que tener escondido el móvil! ¡Seguro que lo está buscando en la wikipedia! —empiezan a decir por detrás.

—¡Callaros ya! Si os preocuparais en estudiar, no pensaríais tanto en la picaresca y creeríais que todos son iguales a vosotros. —regaña la señorita Smith haciéndoles callar.

—¡Pero es que eso no puede ser posible! —grita una chica de atrás.

—TODO es posible hincando los codos, Monique. —espeta con seriedad.

—En serio April, me tienes que dar una clase de biología por lo menos... —bromea Louis por lo bajo a Pril, tras ver como se le va desfigurando la cara con los comentarios de esta panda de imbéciles.

Esta sonríe en su respuesta y vuelve a agachar la cabeza.

—Bien, sigamos con la clase, visto que aquí, no se puede ni dialogar como personas maduras y adultas... —la profesora se gira hacía la pizarra y comienza rápidamente a escribir un esquema, con el cual amenaza con borrar y nos pone a escribir a toda prisa, como máquinas de escribir.

April, 2 de septiembre de 2023.

—Maldita zorra, ven aquí ahora mismo —Katherine me agarra del pelo y me empuja, golpeándome contra las baldosas en el baño.

»¿Cómo mierda te has atrevido a dejarme en ridículo delante de toda la clase?, ¿eh? ¡Respondeme, maldito saco de basura! —grita golpeando mi cabeza contra las baldosas y tirándome del pelo sin piedad.

—¡Yo, yo no he hecho nada! —intento defenderme pero cada vez atrapa más pelo en su puño cerrado, haciéndome gemir de dolor.

—No seas mosquita muerta. Siempre te haces la tonta. Pero solo quieres lo que es mío. Solo quieres la atención de Daniel y aun no te has dado cuenta que él no te quiere ni ver en pintura.

—Daniel no es tuyo. Nadie es propiedad de nadie...

—¿Por eso está deseosa de deshacerle las sábanas, no? ¿Qué acaso piensas que no sé cómo le miras depravada? ¿Qué no sé como te derrites cada vez que por casualidad cruzáis una mirada? Eres una mierda de persona April, y aun no te has dado cuenta... No te has dado cuenta de que él no te quiere ni siquiera para desquitarse, porque das demasiado asco, le das asco... y no eres capaz de verlo, no te has dado cuenta de que para él solo eres un experimento sin gracia de algún loco que experimentaba con la ciencia. Para él no significas nada... —ríe golpeando la cabeza fuertemente contra la pared, casi asegurándome una brecha.

—Eres tú la que está obsesionada y teme que se lo quiten. Si no fuera así, no estarías conmigo ahora y mucho menos me habría llevado ayer a casa y me habría venido a recoger hoy —la encaro como puedo y me suelta sorprendida, quedandose igual de boquiabierta que sus aliadas.

Aprovecho que está en shock para salir por patas del baño, sin que se me caiga nada de la mochila y corriendo como una loca hacia la puerta principal del instituto.

De repente alguien me golpea y tengo que hacer malabares para no acabar de bruces en el suelo.

—¿April? —miro hacia arriba y me encuentro la mirada seria de Louis. —¿Por qué vas corriendo de esa forma por los pasillos? ¿Pasa algo? —indaga y trago saliva mirando hacia atrás para ver si Kate o alguna de sus secuaces ha decidido seguirme.

»Aip... ¿me escuchas? —mira hacia todos lados buscando lo que yo —¿Ha pasado algo? ¿Alguien se ha metido contigo? ¿Qué es lo que tienes en el cuello? —pasa los dedos por este haciéndome cosquillas —. ¿Esto es sangre April?

—¿Qué? —me enseña los dedos, con mi sangre goteando por ellos.

—¿Qué ha pasado April? ¿Quien te ha hecho esto? —dice ladeando el pelo de mi cara, el cual ya se había comenzado a pegar en mi rostro, empapado de mi propia sangre.

—Eh...

—April... Dime quien narices te ha hecho la maldita brecha en la cabeza y porqué... —sus ojos se vuelven furiosos y su respiración comienza a agitarse.

—Yo... yo...

—Vamos a la enfermería... Ya me lo contarás luego —me agarra de la mano dándose por vencido.

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—Solo serán tres puntos de nada cielo. No te asustes, terminaremos enseguida... —si supiera tan solo lo que han llegado a hacerme en los hospitales, no estaríamos teniendo esta conversación ahora mismo.

—De acuerdo...

—Muy bien cariño, échate hacia atrás y túmbate en la camilla, no voy a tardar ni un segundo en hacerte la cura... —me sonríe y cierro los ojos asintiendo y tumbándome lentamente.

»¿Dices, que no ha dicho nada sobre como ha pasado esto? —pregunta murmurando la enfermera.

—No sé absolutamente nada, no ha querido hablar conmigo... —como si yo no estuviera aquí —. He avisado un amigo, que la aprecia y que la entiende... tal vez él pueda sacarle algo de información... —Daniel, mierda.

—Muy bien... —dice, no sé si para él o para mí, ya que noto como ha dado el último punto.

»April, no te incorpores todavía. Quédate un rato recostada, traeré unos analgésicos... Tú solo relájate —asiento sin abrir los ojos, no me apetece ver el brillo de confusión de Louis de nuevo.

No pasan ni cinco segundos cuando llaman a la puerta.

—¿Puedo pasar? —es la voz de Daniel y solo con oirle, automáticamente mi cuerpo empieza a temblar y mi corazón se dispara en mi pecho.

—Sí, pase... —escucho decir a la enfermera, de manera risueña.

—¿Cómo está? —cuestiona, probablemente al verme con los ojos cerrados, él nunca ha dado rodeos conmigo para preguntarme nada.

—Solo ha sido un pequeño golpe, estará bien en unas horas... Solo le he dado tres puntos y lo único que hay que vigilarle es cualquier dolor anormal que se le produzca o el tamaño de sus pupilas —le informa la enfermera.

—No quiere decir como se ha hecho eso, ni quien se lo ha hecho... Porque ya sabemos que ha tenido que ser alguien... Por eso te he llamado, tal vez puedas sacarle un poco de información... —murmura Louis, interviniendo en la conversación.

—Intentaré hablar con ella... ¿Está despierta? —pregunta esto último ya, más alto.

—Sí. Solo le he dicho que intentará relajarse... Toma, dale tu las pastillas, si no se ha dormido y preguntale como va, saldré fuera a hablar unos asuntos con el Jefe de Estudios... —comenta la enfermera y oigo cómo se marcha de la habitación.

—Esperaré fuera... —puedo escuchar como si le diera unas palmaditas y más tarde el sonido de la puerta al abrirse y cerrarse respectivamente.

Daniel camina hacia a mí, puedo sentirlo. Se sienta en la silla que hay al lado de mi camilla suspirando y me coge de la mano, trazando siluetas con el pulgar sobre ellas, haciendo que trague saliva en un intento de que no se me note cuán nerviosa estoy.

—Pril... ¿estás despierta? —solo bastan esas tres palabras para que mi corazón se salte un latido y de repente, se desboque completamente.

No pasan ni dos segundos, cuando abro los ojos y puedo ver cómo entrelaza nuestras manos como cuando éramos pequeños, contenta por este gesto asciendo mi mirada a sus ojos, pudiendo ver lo preocupados que están.

»¿Te encuentras bien? —pregunta dando un suave apretón a mi mano y asiento, sin decir una sola palabra.

»Tómate esto, me lo ha dado la enfermera para ti. Es para que no te duela la cabeza y te recuperes más rápido... —me muestra las pastillas y acerca una a mi boca, poniendo posteriormente el filo del vaso de agua en mis labios, para que me la tome mejor. Una vez me he tomado una, hace lo mismo con la segunda.

—Gracias... —logro articular, casi sin aliento.

—No hay de que Pril... ¿Estás bien? —vuelve a inquirir preocupado y yo, vuelvo a asentir, aunque crea que la cabeza tiene su propio corazón y bombee ella misma su propia sangre.

—Sí...

—April... ¿cómo te has hecho eso..? —ahí va.

—Me he resbalado en el cuarto de baño, los suelos estaban mojados...

—April, no me mientas. Sé cuando me mientes. Olvidas que he crecido contigo... Dime qué ha pasado por favor, dime quién te ha hecho esto —aprieta mi mano acercándose a mi rostro contraído por la aprehensión.

—Me caí, Daniel...

—¡No me mientas! ¡April te conozco desde que teníamos dos años! Ya de por sí es fácil ver cuando estás mintiendo, para que ahora quieras colármela a mí, después de todos estos años... Dime quien te ha hecho esto —exige cabreado.

—¿Después de todos estos años? Pues dime en cuales, porque ya hace algunos que no se te ve el plumero... —me atrevo a decir, sin saber de donde he sacado las fuerzas para decir tanta palabra seguida sin equivocarme.

Daniel parece aturdido durante unos segundos, hasta recomponerse y volver a mirarme.

—April... Pril... por favor, dime quién te ha hecho eso... por favor.... —implora.

—¡Nadie! ¡Nadie! ¡Nadie! —grito comenzando a llorar.

—April... —me agarra de las muñecas con tristeza.

—¡Me abandonastes Daniel! ¡Cuándo más te necesitaba, me abandonaste! ¡Sólo porque sabías mi secreto! ¡¿No es cierto?! ¡Me abandonaste! —le cremino y enseguida sus ojos se muestran heridos, con sombras del pasado.

—Lo siento mucho April... de verdad que no quería hacerlo... no quería hacerte eso...

—¡Pero lo hiciste! ¡Como si fuera un pe-pe-rro! —grito y comienzo a golpearme con la mano en la frente.

—Pril, basta, no te hagas daño... para —intenta sujetarme pero yo soy más fuerte ahora.

—¡Me abandonaste! ¡Me abandonaste! ¡Piensas que no recuerdo, pero me abandonaste! ¡Y vuelves ahora, queriendo que confie en ti! ¡Pero me abandonaste! ¡Daniel, me abandonaste! —me golpeo con más fuerza en la frente, mientras chillo.

—Lo sé Pril, lo siento... Lo siento mucho, no sabes cuanto, lo siento... —llora subiéndose en la camilla rodeando con sus rodillas mi cuerpo para detenerme.

—¡Me abandonaste! —grito con fuerza y suelto la mano que tenía agarrada Daniel, para esta vez, golpearme con las dos.

—Pril, cariño no te pegues... lo siento mucho... te prometo que no lo volveré a hacer... Pril cielo... —intenta agarrar mis muñecas de nuevo, pero le es inútil, sigo pegandome.

—¡Ah! —me golpeo con fuerza en la cabeza, llorando.

—Pril mi amor... cariño, no te pegues, basta mi vida, no lo hagas... —le oigo sollozar y enseguida voy remitiendo, aunque sea lentamente.

»No sigas con esto por favor... cariño, no sigas —se le escapa un gran sollozo y cierra los ojos para llorar con fuerza mientras consigue agarrar nuevamente mis manos.

Lo que me dice después, ya no soy capaz de escucharlo.

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Para el que siga esta historia, siento mucho la espera. Como ya sabeis esta novela forma parte del concurso "Primer amor" organizado por Litnet y la editorial Group Edition World, (con lo cual solo podré subirla en otras aplicaciones ajenas a Litnet hasta las 22 mil palabras)  asi que si mas adelante quieres seguir leyendo, te dejo el link: https://litnet.com/es/book/simplemente-b115514

Os quiero! Nhoa ♥