Estoy encerrado en una oficina con un hombre lobo que vino expresamente a verme desde Bergen. O eso creo.

Estoy seguro de que algo anda mal.

-Entonces... ¿Qué necesita un hombre lobo de mí?

El sujeto me mira de pies a cabeza un par de veces antes de abrir la boca.

-Ahora entiendo algunas cosas -Me dice con una extraña sonrisa.

-¿Disculpa?

¿Quién es este sujeto con aspecto de pervertido?

-¿Podría decirme a que ha venido? Si no es mucha molestia.

-Claro. -Voltea para quedar de frente conmigo -Mi nombre es Claus. No es necesaria tanta formalidad. Soy la mano derecha del alfa y quien le comunica ciertas cosas a los grandes cuando es necesario. Iki debió haberte comentado que nos vimos anoche.

-¿Anoche?

¿Así que era por eso que estaba tan raro?

-N-No lo sabía...

-Me imagino, porqué involucrar a un vampiro en asuntos de lobos ¿no?

-¿Por qué está aquí?

-Ya que Iki no te dijo nada, tendré que ser yo quien te ponga al día. Toma asiento.

-Estoy bien así.

-Como quieras -Su tranquilidad me pone algo nervioso -Iki rompió varias reglas que se le habían impuesto antes de salir de Bergen.

-¿Lo estuvieron vigilando?

-No exactamente. Lo conozco desde que era un niño, ya que su padre es mi mejor amigo. Sabía que no era necesario vigilarlo. Con un par de preguntas puedo saber si me miente o no.

Sigo sin entender por qué está aquí.

Mi teléfono suena ante la llamada de alguien. Iki.

-¿Es él? -Parece muy interesado.

-Sí -Corto la llamada. -¿Por qué está aquí?

-Un lobo que rompe las reglas es castigado. Iki será obligado a regresar a Bergen junto con sus hermanos. Le dije que mañana me encontraría con él para que viera el reporte que le entregaré al concejo. -Lo veo sacar una carpeta de su bolso -Quiero que lo leas.

-Creí que no debía involucrarme en cosa de lobos.

-No, pero por lo que huelo, te introdujiste mucho más que en asuntos solamente -Que sujeto más desagradable -Pensé en que lo leyeras, debido a que es posible que también te traiga problemas con el tiempo.

Tomo la carpeta y la reviso de inmediato. Sí que se esmeró en escribir este informe.

Día en el que salió, cumplimientos de palabra, firma de su padre... Todo parece estar en orden.

Los lobos son demasiado protocolares.

-"...Iki Beck ha declarado tener un "amigo humano de confianza" que sabe su identidad y el tener una relación sentimental con un vampiro de nombre James Moore. No solo rompe la regla de no formar lazos fuera del territorio, si no que también viola las antiguas reglas sobre las antiguas guerras..."

-¿Desmientes lo que dice?

Todo lo que dice es verdad. Sigo sin entender porqué me lo muestra.

-No desmiento nada. Todo lo que dice es verdad -El sujeto parece sorprenderce un poco -¿Qué pasa?

-Creí que harías lo contrario. Creí que dirías que todo es mentira.

-¿Por qué habría de hacer eso? Esta situación no es de esas en las que puedes jugar con la realidad y creer que puedes olvidarlo. Mentir sobre esto es solo una bomba de tiempo que estallará apenas exista una inconsistencia. Es cierto que Iki tiene un mejor amigo que sabe su secreto. Es cierto que él y yo tenemos una relación sentimental. Y estoy al tanto de que está rompiendo reglas por lo que hacemos. -Me mira en silencio -Yo también estoy rompiendo reglas que podrían traerme problemas; pero no me importa en lo absoluto.

-¿Ambos están dispuestos a mandar a la mierda su estilo de vida para poder coger?

-No -Río por lo bajo ante la última palabra. Mi teléfono vuelve a sonar -Estamos dispuestos a mandar a la mierda todo por querer caminar junto al otro. Quizás para ustedes son importantes las reglas, incluso si son del año de la pera; pero al menos para mi, nada de eso sirve en tiempos tan modernos. Deberían sacudirse el polvo de la cabeza.

-Bastante grosero para alguien como tú. Se nota no has vivido poco. -Mira el teléfono que no ha dejado de sonar -Será mejor que contestes, no querrás asustarlo más de lo que está. -Recoge la carpeta para volver a guardarla -No creo que sea la última vez que nos veamos. Así que, hasta entonces, procuren bañarse después de coger. Me retiro.

En cuanto el hombre sale, me dejo caer sobre la silla mientras escucho mi corazón latir frenéticamente.

-Concéntrate, James -Me digo -Piensa bien en lo que harás ahora.

Contesta por favor.

Contesta, contesta, contesta.

-¿Hola?

-¡James! -Me detengo justo en la entrada de la Universidad en donde trabaja. -Necesito decirte algo importante.

-No hace falta -Suena algo decaído -Ya me lo dijeron aquí.

-¿De verdad?

-¿Cuando planeabas decírmelo?

-Yo...

-Estoy ocupado por ahora. Hablamos en casa. Adiós.

-¡James espe...! -Colgó.

Quizás deba darle su espacio e irme al departamento.

A lo lejos, veo que Claus se marcha tranquilamente del lugar.

Así que se lo contó a papá y a James.

-A la mierda...

Decido entrar en la Universidad para buscar a James. Este lugar es realmente grande y no tengo idea de por dónde empezar.

Personalmente, la universidad no fue uno de mis mejores años. Bueno, dos años, ya que no terminé la carrera...no importa. Los estudiantes de medicina no son realmente una buena compañía. Todos compiten por todo.

Y peor aun siendo lobos.

Los chicos son más territoriales, las chicas buscan a los chicos más apuestos, y el ambiente es realmente tenso la mayor parte del tiempo. Teniendo en cuenta el que debíamos controlarnos por los humanos.

Este lugar nunca cambia, todos los chicos que me ven pasar, no apartan la mirada hasta que ya estoy lejos.

Puedo sentir sus miradas sobre mí. Los chicos me miran de pies a cabeza; y es muy incómodo que las chicas me miren de un poco más arriba.

Me siento violado con la mirada.

Espero encontrar a James cuanto antes o... Mierda.

Este lugar es muy grande. Supongo que tendre que pedir indicaciones.

-Disculpen... -Estos chicos son casi de mi edad o un poco menores -¿Saben en donde puedo encontrar al maestro James?

El chico me mira de pies a cabeza como todos y las chicas me miran de forma extraña.

Preguntaré en otra parte.

-Disculpa... -Mala idea preguntar a un grupo de chicas obviamente mucho más jóvenes. -¿Sabes en dónde puedo encontrar al Maestro James de literatura? -Termino preguntando a un chico que lee un libro.

-En el edificio de allá -Apunta el lugar.

-Gracias.

Hacía tiempo que no me sentía tan incómodo.

Al fin llego a una sala ¿de clases?

¡Mierda! Esta dando clases y yo aquí molestando.

Debe de estar molesto conmigo. Debí irme a casa.

Termino quedándome sentado junto a la puerta a la espera de que acabe la clase.

Es tan raro saber que quienes me ven, deben creer que llegué tarde o que el maestro me sacó del salón.

Esto es algo vergonzoso, tomando en cuenta que hay estudiantes de mi edad o cercanos.

-Bueno, ya pueden irse -De pronto las puertas se abren y varios estudiantes comienzan a salir. -Les tendré las calificaciones listas mañana por la mañana. Recuerden prepararse para el examen. Nos vemos -Se preocupa mucho por hacer bien su trabajo.

-¿Te diste cuenta que el maestro estaba algo menos motivado? -Comenta uno de los estudiantes.

-Es raro verlo así de "decaído". Siempre es tan animado en sus clases. Nunca lo había visto tan desmotivado. ¿Estará enfermo?

En cuanto salen todos los estudiantes, veo que James se queda sentado revisando su libro y escribiendo algo. Entonces decido entrar en silencio.

-Si tienes duda con el examen pasado, mañana estaré disponible toda la tarde para resolver preguntas.

-Yo... no estoy aquí por eso... -Se apresura en alzar la mirada. -La última vez que vi uno de tus exámenes ni siquiera estaba seguro de mi nombre -Río nervioso.

-¿Qué haces aquí? -Pregunta con seriedad -Te creí trabajando. Ya sabes, para enviarle dinero a tu familia. Es por eso que estás aquí ¿no?

-Eso ya lo sabías...

-¿Cuándo pensabas decirme que ese sujeto estaba aquí? ¿Cuándo ibas a decirme que te ibas a ir? ¿Era por eso que anoche...?

-No me voy a ir -Me mira confundido -Perdón por mentirte y guardarte un secreto tan importante.

Camino hasta llegar a la ventana.

-Creí que podría manejarlo; pero... La verdad no sé qué hacer. Claus no es alguien fácil de convencer, y mi padre ya lo sabe todo...

-Entonces regresa a Bergen. -Volteo a verlo -Si regresas no tendrás más problemas. Después de todo, yo no debería interferir en tus planes. -Comienza a recoger sus cosas para irse, pero lo detengo colocando mi mano sobre ellas.

-Tú no interferiste en mis planes, James. -Me arden los ojos -De no ser porque te conocí, seguiría durmiendo en la calle como lo hacía; seguiría teniendo ataques de pánico por lo que sea que me pase; me seguiría sintiendo solo a pesar de que tengo a Joe... -Sujeto su mano con delicadeza -El que nos conociéramos fue una simple casualidad. Una que me hace muy feliz de que pasara.

-Iki... -Lentamente separa su mano de las mías -¿Crees que vale la pena arriesgar nuestros respectivos estilos de vida por estar juntos?

-¿Qué?

-¿Crees que de verdad un vampiro y un hombre lobo pueden hacer esto?

-¿A que te refieres?

Creo entenderlo, pero quiero que él lo diga másclaro.

-Quizás sea lo mejor.

-¿Qué? -James toma sus cosas y sale. -James... ¡Espera!

Decide ignorarme y solo se va, dejándome completamente solo en el salón.

-James...