Está bien, estoy casi seguro de que este lobo averiguó algo en su ruta hacia el baño.

—¿Qué sabes de esa mesa? —Me atrevo a preguntar —Te ví poner un poco de atención en la mesa de Rita.

—Averigüé un par de cosas en ese pequeño momento.

—Igual que un sabueso ¿no?

—No me llames Sabueso.

—Vamos Beck, con tu olfato...

—No soy un perro, James.

—Está bien, solo di qué averiguaste.

—¿Qué crees que pasa en esa mesa?

—¿Por qué el interés?

—Ninguno en realidad.

—Ya deja de jugar conmigo Beck —Este sujeto comienza a irritarme —Ustedes los lobos siempre son tan arrogantes. —Aquello parece molestarle.

—Y tú...

—¿James? —La voz de Rita Interrumpe la discusión.

—¡Rita! —Intento fingir que nada ocurre y volteo a mirarla, ignorando al lobo que permanece molesto frente a mi. 

—Que sorpresa encontrarte aquí. Te creí en casa.

—Sí, bueno... Mi amigo Beck... Iki, me habló a última hora para que viniéramos a este lugar. —Siento que estoy sonriendo como un idiota y que beck no me quita los ojos de encima —Supongo que es casualidad encontrarnos en este lugar ¿no?

—Sí... Casualidad —Dice Beck en tono serio —¿Me disculpan un momento? Iré a ver si mi mejor amigo terminó de destapar el excusado. Un gusto conocerte, Rita.

—Lo mismo digo, Iki.

Iki se levanta de su asiento y se va en dirección al baño, no sin antes toparse con el sujeto que acompaña a Rita y tener un extraño intercambio de miradas.

—James, él es Raymond —Dice mientras se abraza a su brazo —Llegó esta tarde a Londres.

—¿Él es...?

—Ray es mi hermano mayor.

—Hermano, ya veo. No sabía que tenías un hermano mayor.

—Bueno, no suelo hablar mucho sobre mi familia.

—Eso es cierto. —Ambos reímos unos segundos.

—Bueno, ya nos vamos. Nos vemos mañana. Me avisas hora y lugar ¿eh?

—Nos vemos —Los veo a ambos salir del lugar. —Así que hermano mayor, supongo que estoy tranquilo con eso.

Espero que no tarden tanto, realmente quisiera estar en casa ahora mismo. ¿Les molestará si solo me voy sin avisar?

—Iki —Escucho decir al amigo de Beck —Iki ¿A dónde vas?

¿Qué le pasa?

¡¿Cómo se atreve a llamarme sabueso y arrogante?! Realmente ese sujeto no tiene filtro a la hora de abrir la boca.

Fue una suerte el que esa tal Rita y su hermano Interrumpieran la discusión antes de que sacáramos los colmillos en público.

Más le vale a Joe haber tenido un percance como para tardar tanto en el baño.

En cuanto entro al baño, mis vista se fija en el idiota que mira su teléfono mientras permanece apoyado en el lavamanos.

—¿Se puede saber que carajo haces aquí? —Desvía la mirada de la pantalla y me mira algo sorprendido. Más bien es una expresión de "me atrapaste".

—Solo quería que pasaras tiempo a solas con tu "amigo" —Dice sonriendo inocentemente.

—Ese sujeto no es mi amigo. Solo es un idiota excéntrico que no le importa decir lo que sea —Joe se aguanta una risa.

—Te quejas de él como si fueras un niño, Iki. ¿A caso dijo algo feo sobre tu personaje favorito?

—No jodas, Joe.

—El sujeto es relativame agradable, amigo. Solo...

—No quiero tener esta clase de charla en el baño de una cafetería. Además, llevamos poco más de media hora y no hemos ordenado nada.

—Está bien vamos a...

El sonido de mi teléfono interrumpe a Joe. Un mensaje de Finn.

Finn: Pappa fikk et tilbakefall.

Siento que mi corazón se detiene por un segundo.

—¿Que te pasa?

—Es Finn, dice que papá tuvo una recaída. —Casi ni puedo controlar mi respiración —Yo... Lo siento.

—Descuida, solo ve a casa y descansa. Le avisaré a James para que te...

No es primera vez que esto pasa; pero siempre me afecta de la misma forma.

No sé en qué momento salí del Hard Rock café; pero en este momento estoy caminando por la calle, este no es el camino hacia el departamento.

Espera, ¿dónde está Joe?

—¿Joe?

—Le dije que se fuera a casa y que yo te vigilaría hasta llegar al departamento. Pero te desviaste un poco del camino hace una media hora.

—¿Cuánto llevo caminando?

—Como unas dos horas —Dice de forma desinteresada. No parece estar fastidiado por eso —Dime una cosa Beck. ¿Hace cuánto que eso te pasa?

—¿Por qué tan seguro de que me ha pasado antes?

—Porque actúas de lo más normal luego de darte cuenta de tu trance ¿Hace cuánto? —Dejo salir una suave risa y me detengo para apoyarme en la barra del puente que está en el James park.

—No lo sé. Siempre me pasa cuando recibo una mala noticia.

—¿Es sobre tu padre?

—Tuvo una recaída. Finn siempre me avisa todo lo que pasa, porque sé que ni mamá ni papá no me dirán nada. Las primeras veces solo entraba en pánico y no sabía qué hacer. Luego solo...

—Te desconectabas del mundo de forma temporal. A eso se le llama disociación. Si no tienes ayuda, podría empeorar.

—Terminaré por volverme loco en este lugar —Restriego una mano por mi rostro. —¿Tienes idea de lo difícil que es sacrificarte por toda tu familia?

—Supongo que no del mismo modo que tú. Tengo un hermano menor que no hace nada mejor que meterse en problema. —Lo escucho reír suavemente —Estudié leyes por él, para sacarlo de los problemas en los que se metía. De hecho ayer tuve que reportarme enfermo en mi trabajo en la universidad para dármelas de abogado y negociar con un juez para que al muy condenado no lo encerraran por tanto tiempo.

—Ya veo... —Siento un nudo en mi garganta con el cual lucho por no dejarlo salir.

—Oye Beck —Lo miro por el rabillo del ojo. No sé si se habrá dado cuenta de que los tengo húmedos. —Ya es tarde, ¿volvemos a casa?

Por alguna razón, oírlo decir eso me hizo sentir un poco mejor. Hasta podría decir que me hizo sentir un poco feliz.

—Claro...

Durante varios minutos, solo me limito a caminar mientras siento que James camina junto a mí. Supongo que debería decir algo; pero no sé qué decir.

—Oye...

—¿Alguna vez te preguntaste el porqué de la enemistad de vampiros y lobos? —Pregunta James de repente. ¿Por qué pregunta eso?

—No, realmente nunca me lo he preguntado. Supongo que... —No se me ocurre nada.

—Exacto. Supongo que es algo así como un secreto que solo los grandes saben ¿no?

—Supongo. Mi padre solía decirme que lo hecho en el pasado no debería repetirse en el futuro. a menos que fuera algo positivo.

—El mío también lo decía. "No cometas los mismos errores que nuestros antepasados. No porque sea diferente..."

—"... Significa que intentará matarte o que debas matarlo". —Ambos nos miramos sorprendidos.

—¿Quién lo diría? —Dice James con una sonrisa —Nuestros padres compartían la misma ideología.

—Ante los ojos humanos somos igual que ellos —Digo de la nada —Podríamos intentar llevarnos mejor y discutir menos.

—Lamento llamarte arrogante, en realidad no lo eres. Digo, he conocido lobos que si lo son; pero eres diferente a ellos. Eres todo un caso, Beck.

—Gracias.

Al llegar al edificio, subimos las escaleras despacio para no hacer tanto ruido. Luego veo a James meter la llave en el cerrojo de la puerta del departamento para entrar.

—Oye James —Digo luego de entrar. Él me mira desde la puerta —¿Aun puedo aceptar tu ayuda por eso del título de psicología? ¿O solo era por tiempo limitado? —El sujeto vuelve a sonreír y deja salir una carcajada sutil.

—Claro que sí. Tú solo di que quieres hacerlo y fijamos algún horario. Tengo más tiempo de noche, ya sabes, como no necesito dormir... En fin, lo mejor será que descanses y que hablemos de eso mañana. Que tengas buena noche, Iki.

—Igualmente.

Observo a James caminar hasta perderlo de vista cuando entra en su habitación. Después de lo ocurrido, sé que puedo confiar en él. Pero, ¿qué tanto debería confiar?

Apenas entro a mi habitación, me transformo en lobo y mi meto bajo la cama. Sé que suena muy infantil; pero supongo que es algo que hago cada vez que algo así me pasa. 

Espero que ese vampiro pueda ayudarme antes de que me vuelva tan loco como él.

—James también es todo un caso... —Murmuro mientras lentamente voy cayendo en el sueño.