U N I C O
11 de Septiembre de 1973, donde un día común se convirtió en una página más para la historia de chile, un día tatuado en la memoria de los chilenos que lograron sobrevivir este periodo, donde se dio inicio a una de sus peores pesadillas, la dictadura militar.
8:40 am, Carabineros da el llamado al pueblo chileno de no salir de sus casas ante un eventual peligro, la madre de los Byun desesperada mese a su pequeño hijo mientras escucha la radio, el mayor, su primogénito ya había salido rumbo a su trabajo en el lugar del ocaso, la moneda. Los nervios la carcomían mientras que las palabras de su presidente no lograban calmarla, todos sabían lo que se aproximaba y el llamado a la tranquilidad no le era suficiente.
Se confirma el cercano golpe de Estado, ante la inminente negación de renuncia al poder como presidente de la republica de parte de Salvador Allende, las fuerzas golpistas denunciaban la incapacidad del actual gobierno que causó una grave crisis económica, social y moral.
Poco después de las nueve de la mañana se escuchaba por la radio un discurso, o más bien un testamento político, que no se pensaba serían las últimas palabras dirigidas hacia el pueblo chileno de su parte. "Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre para construir una sociedad mejor".
Una llamada, la madre corrió al teléfono sorprendida y aliviada de escuchar a su hijo, pero no con las buenas noticias que esperaba ansiosa.
-Es mi deber quedarme aquí, no podría soportar el no hacer nada para salvar la democracia de este país, tengo un compromiso con el presidente y no le abandonare.
— ¿¡Estás loco?! No puedes hacer eso, hijo mío regresa a casa...te esperaremos con los brazos abiertos y con lo poco que tenemos una deliciosa comida. — La mujer lloraba abrazando a su hijo menor quien no tenía conocimiento de lo que sucedía y el porqué de la gran pena que tenía su madre en esos minutos. — Vuelve, tienes que ver crecer a tu hermano, el espera que tú seas su ejemplo.
-¡¿No entiendes lo complicado del problema mama?! Si yo viviera y los militares quedan al mando los pondría en peligro...estarías en peligro tú y Baekhyun, es algo que no me puedo permitir. – Se escuchó un suspiro tras la línea. — Baekhyun. — El pequeño amplio sus ojos sabía que hablaba su hermano del teléfono, ya sospechaba algo extraño en su forma de expresarse. — Quiero que cuando crezcas tú entiendas el sacrificio que estoy haciendo, protege la libertad de todos con lo poco que tengas en tus manos, puedes surgir y ser alguien mejor, estoy seguro que serás todo eso que te propongas, pero jamás olvides que habrá alguien tras de ti, esa persona que tiene menos recursos que tú y que necesita ayuda, dale ese empujón, no pienses solo en ti. – Extrañado seguía mirando por donde salía la voz de su hermano. – Se feliz, entrégate a amar y cuida mucho a mamá...los amo.
Teléfono colgado, llanto desconsolado, era un hecho, no volverían a ver al chico y lo aseguraron cuando cerca de las 13:00 se informa la rendición del presidente ya luego de ser bombardeada la moneda por dos horas, las figuras sobrevivientes salen del recinto en pedazos, no se encuentra Byun ahí. Habían perdido la figura paternal, y también a su presidente.
SALVADOR ALLENDE SE SUICIDA EN LA MONEDA, según la información el mandatario utilizo su fusil como forma de acabar con su vida de forma instantánea.
Ese fue el inicio de una época del terror para chile, el principio de la dictadura militar. Las personas empezarían a desaparecer, aquellas que simpatizaran con el partido político del presidente derrocado no tendrían que esperar mucho para tener una muerte inmediata o ser mandado a un centro de detención política de forma que al ser torturado contaras algún secreto que pudiera ser útil para atrapar a mas comunistas, ese era su fin, terminar con el comunismo de raíz.
Baekhyun tenía tan solo tres años cuando fue el golpe de Estado, pero eso no le permitió sufrir menos ante todas las muertes que pasaban a sus oídos cuando iba a la escuela o caminaba por las calles, se sabía de cuantos vecinos habían sido tomados prisioneros por los militares y no habían vuelto a pisar sus hogares, no se tenía ningún tipo de información sobre ellos. Ya con dieciocho años le era difícil el no querer enfrentarse a los causantes de todo el dolor que tenían sus compatriotas, quienes vivían con miedo de que alguien les delatara por pensar diferente al actual gobierno que tenía envuelto en una crisis económica y social a todo Chile.
Se detuvo en uno de los restaurantes de Santiago centro para probar un bocado en su horario de descanso, tenía un par de billetes que su madre le había regalado para su cumpleaños y que aun ahorraba para momentos donde el hambre atragantaba su garganta. Trabajaba en una pequeña cordonería y se ganaba la vida con eso, aunque su sueño creciente siempre fue el ingresar a la universidad pero con la mala economía que tenía y con lo exigentes que eran para seleccionar personas en los recintos, le sería imposible, debería seguir soñando con defender a su pueblo, tampoco es como si le gustara estudiar un libro de leyes totalmente contrarios a sus pensamientos, seria descubierto y atrapado por alguno de los agentes del actual presidente del país, Augusto Pinochet.
-Solo quiero algo del menú del día. – Sonriente pidió a la camarera quien sonrojada se fue de inmediato, solía causar ese efecto en las personas, su rostro angelical le permitía enamorar a cualquiera con solo una mirada.
-Veo que logras atrapar a cualquiera con esa mirada.
Sorprendido por la voz dirigida hacia él se giró para descubrir a un chico alto hablándole, no creía que fuera mucho mayor que él, pero seguía intentando descubrir el porqué de esa cercanía repentina al ser un extraño.
-¿Me hablas a mí?
-No veo a nadie más con un rostro angelical como ese.
-Disculpa, pero no tengo los mismos gustos que tú, no me atraen los hombres. – Incomodo se giró tapando su rostro con la carta del local, no podía creer que esas cosas le pasaran a él. – Si me permitieras almorzar tranquilo...
-No te estoy alagando por un gusto romántico. – Levanto su mano a la camarera y en una sonrisa le hablo. – Tráeme lo de siempre, me sentare con este joven hoy.
-¿Disculpa?
-Byun Baekhyun, hermano de Byun Baekbeom...tus padres no fueron originales cuando eligieron sus nombres al nacer. – Nervioso estaba dispuesto a escapar, pero sería evidente si lo hacía.
Tenía conocimiento sobre un organismo secreto que trabajaba para el gobierno, CNI, esas eran sus siglas, no se tenía mayor conocimiento sobre este más que cualquiera de las personas que te rodean pueden ser parte de ella, eso causo la desunión de chile, que las personas vivieran con miedo de confiar sus problemas e inquietudes, debían de cuidarse hasta de sus propios hermanos.
-Soy su hermano menor, pero no soy partidario de nada de lo que hizo, solo tenía tres años al momento de su muerte.
-No soy un agente de la CNI.
-¿Y que con eso?
-Si te estoy hablando es porque necesito tu ayuda...estamos planeando una red de apoyo para que las personas se animen a votar por el NO, en este plebiscito, no podemos seguir con este señor al mando del país.
-¿Cómo se yo que lo que dices es cierto?
-Sé que es difícil lo que voy a pedirte, pero es algo que se ha perdido en todos estos años de dictadura, confía, confía en mi palabra y veras la veracidad de estas.
Inseguro le dedico una mirada, y a los pocos minutos de comer ya se encontraba en un departamento bastante lujoso a su parecer, cargaba con cosas que ni en años de trabajo podría conseguir, al solo pagar las deudas de su madre ya se le iba todo el sueldo de la cordonería. Observo con detalle cada imagen y desorden que existía en ese lugar, no parecía estar mintiendo, él estaba en contra de todo el gobierno presente.
-No veo que seas de escasos recursos... ¿Qué te hace estar en contra de todo esto?
-El tener dinero no me hace ciego Baekhyun, gracias al cielo pude vivir entre lujos y comodidades toda mi vida pero también vi como algunos carecían hasta de un pan para comer de desayuno por las mañanas, como madres o familias enteras desean sepultar a sus hijos y tener un sitio donde llorarles, porque son detenidos que nunca sus cuerpos fueron encontrados. – Seguía mirándolo, su discurso era sincero. – No soy como los de más de mi clase social, yo si pienso en el resto...no puedo comer tranquilo mientras que muere gente día tras día por toda esta dictadura de mierda.
-Bien principito, así que eres un rebelde que va en contra de todo el sistema, pero ¿te das cuenta que con todo esto pones tu propia vida en peligro?
-Lo sé, pero vale la pena el sacrificio cuando es mi gente la que seguirá sufriendo día tras día. – Mirarle. – Así fue Allende, consentidor del pueblo a pesar de ser un médico cirujano con varios billetes en su bolsillo, es una...es una gran pena que muriera de esa forma, y es nuestro deber como jóvenes mantener su legado.
-Me alegra que haya gente como tú en el mundo...pero no sé de qué podría serte útil, mi madre me tiene prohibido todo tipo de contacto con manifestaciones o protestas.
-Tu hermano trabajo con el presidente antes de todo el caos, él debe tener información necesaria en algún sitio de su habitación, por eso te busque. – Realmente ese alto joven había investigado toda su vida. – Tuve que investigarte si queríamos tener el sueño ganar estas elecciones, y porque necesito un rostro confiable y bonito como el tuyo para toda esta campaña.
-¿Estudiaste algo?
-Periodismo, o en eso estoy aun, publicaremos un periódico que ayude a las personas a simpatizar entre ellas, que les demuestre que una raya en un papel será el cambio que todos y todas necesitamos.
-Me gusta tu entusiasmo, si me dices tu nombre podría considerar tu propuesta.
-Park Chanyeol.
Su apellido quedo rondando en su cabeza, parecía haberlo visto u oído en algún sitio, pero no le tomo importancia mientras le enseñaba todas las ideas que tenía, parecía estar trabajando con tres chicos más, dos hombres y una chica, todo con extrema confidencialidad, un paso en falso y todo el trabajo que hicieron se iría a pique, después de todo lo que hacían seguía siendo ilegal según la constitución.
Tomo asiento en un sofá mientras ojeaba un par de documentos que estaban en la mesa, pudo escuchar un sonido de una lata por lo que se giró observando al otro pintando un lienzo, le sorprendía el tiempo de ocio que tenían los ricos como para estar confabulando contra el gobierno y a la ves aprendiendo a pintar algo tan hermoso.
-Veo que tienes más talentos, digo...además de pensar en planes suicidas.
-Soy una caja de sorpresas señorito Byun, nunca me conocerás por completo.
Una mirada, un latido extraño, el inicio de algo más que una rebelión, sería una revolución para su corazón.
...
-No debiste venir aquí...te dije que llevaría todo a tu departamento el lunes, siquiera debes agradecer que acepte estar dentro de la tumba que me dejara ese proyecto.
-Tu madre me vio afuera, dice que me sirvas una taza de café como bienvenida, le comente que me quedaría a dormir ya que te enseñaría algunas cosas sobre las leyes.
-¿Le mentiste de tu profesión?
-No me pregunto.
-Si sabe que deje ingresar a un chiquillo millonario y socialista a la casa, oh no...- se corrigió. – con solo saber de qué te lleve a la habitación de mi hermano, te echara de patadas y me llevare una buena bofetada, todo tenía que ser con sutileza. – Le empujo dentro de su propia habitación con un suspiro. – Te conozco hace una semana y ya complicas toda mi existencia, tengo solo dieciocho años y un anciano como tú me mal influencia.
-Tengo el talento de causar ese tipo de sensaciones en la gente, y solo tengo veintiuno.
Se miraron unos segundos a los ojos, era un sentimiento extraño que se instalaba en su estómago, aquel chico le causaba miedo de lo malo que podría atraer al estar a su lado, pero a su ves el deseo inquebrantable de lo prohibido le causaba atracción, como no querer separarse de su lado, había aceptado como si nada a una propuesta así de peligrosa.
La habitación de su hermano era un sitio preciado en la casa, desde que tiene uso de memoria su madre le tiene prohibido el solo ingresar a mirar por la ventana, por lo que al abrir la puerta sintió una ola de recuerdos pasar a su mente, su hermano, aquel sonriente chico que les había dejado hace tantos años, ahora no en vida esperaba que les hubiera dejado algo para enfrentarse a eso que tanto le pidió al morir, ayudar. Se aferró al brazo de Chanyeol, un miedo enorme le hizo retroceder pero este no dudo en empujarlo dentro, debían conseguir la información antes de que no hubiera momento de entrar.
-Chanyeol, no quiero entrar siento...es como traicionar su legado.
-Un joven que no es revolucionario es absurdo. – Abrió sus ojos ante su respuesta e ingreso rápido a registrar los papeles que podía encontrar alrededor, no tardo en tomar todo para poder llevarlo, había recordado algo pequeño, dudaba que las palabras que le dijo fueran exactas pero si sabe que le pidió luchar por la libertad de los demás, algo que en Chile se estaba perdiendo por completo y él debía defender.
Dejaron todo donde estaba y pronto tomaron asiento en la habitación de Baekhyun, quien se mordía las uñas mientras observaba al otro leer cada papel que encontraba cerca, al parecer ninguno parecía útil por su rostro de molestia, suponía que deberían buscar en otro sitio.
-Nada...
-¿Qué es lo que quieres encontrar?
-Necesito tener la información sobre un proyecto que revolucionaria la tecnología aquí en Chile, por mi padre pude escuchar de su existencia, pero es información confidencial. – No pudo comprender en su totalidad lo expresado por el otro así que solo ladeo su cabeza cuando de pronto sintió la mano del otro en su mejilla mirándole de la misma manera. – Con información sobre eso podemos hacer que las personas se motiven a votar por el NO, para que noten como el romper el mandato del presidente fue un error.
Le dedico una boba sonrisa, le explico con tanta emoción que las ansias de abrazarlo sobrepasaban el nivel de mantener su compostura, pero no pudo retenerse cuando ya se vio aferrado a los brazos contrarios. Ese chico tenía algo que le hacía especial, porque cuando correspondió a ese abrazo nublo su mundo y le hizo sonrojar.
-Encontraremos algo, no descansare hasta recuperar la democracia de este país, tal como tu lo quieres Chanyeol.
Fue así que con unas leves palabras se motivó a participar en ese proyecto, deseaba que el miedo se fuera de la población, que en sus corazones volviera a crecer la esperanza de un Chile mejor.
-¿Me harás cucharita? – Recostados en la misma cama miraban el techo, no tenían otro colchón así que ante la negación de Park para que Baekhyun durmiera en el sofá terminaron así. – No me incomodaría en absoluto.
-Me sorprende lo abierto de mente que son los cuicos como tú. – "Cuicos" modismo para referirse a personas adineradas de la clase alta. – Es como si estuvieras dispuesto a besarme todo el tiempo Chanyeol.
-¿Tendría que fingir? De alguna forma siempre tuve todo desde pequeño, y también quiero tener al chico que encuentro guapo.
Se encontraba ya adormilado por lo que se hizo creer así mismo que solo eran alucinaciones del sueño, si...solo era eso.
...
-Encontré los papeles. – Eran las 22:00 cuando llego al departamento del mayor tocando la puerta con rapidez, sabia la emoción que causaría en este y deseaba en su corazón ver esa emoción en el otro, solo que al verlo en la puerta descifro su rostro de pánico que le ordeno guardar los papeles bajo el tapete de la entrada. - ¿Chanyeol?
-¡Bae..lun! pensé que no vendrías, debiste avisarme antes pero espero no te moleste cenar con mis padres antes de estudiar para la prueba de economía. – Extrañado solo se limitó a sonreír y pasar a la mesa, ¿Qué tan peligroso eran sus padres que hasta su nombre debió cambiar?
Fue la cena más incómoda que haya podido presenciar en su vida, y es que aquellos seres parecían robots controlados por el gobierno para repetir una tras otra sus leyes dictadoras. Seguía preguntándose por qué el chico había sido tan diferente a sus padres, cuando creció con un pensamiento totalmente distinto por lo que podía observar.
-¿Vas en la facultad con Chanyeol joven?
-Sí, no tuve tiempo de responder a su invitación por trabajo, así que siento interrumpirles es la primera vez que vengo al departamento y creí seria de mala educación no asistir. – Una mirada fulminante recibió del dueño de casa.
-¿Puedes traer el té Baelun?, por favor. – Nervioso se levantó ante lo pedido por el dueño de casa y se dirigió a la cocina para traer el té con rapidez, agradecía saber dónde estaba, cajón derecho.
-¿Trabajo?
-Baelun trabaja por disgusto propio, está castigado por chocar el yate de su padre contra una roca.
-Fue un momento emocionante que me llevo a esta crisis económica propia.
Una ligera risa se le escapó de los labios al padre, agradecía que no hiciera más preguntas debido a que aquellos fósiles responsables no volvían a casa más allá de las doce de la madrugada.
Les dejaron solos, Baekhyun agotado recostado en el sofá miro a Chanyeol.
-¿Por qué eres tan diferente a ellos?
-Porque me informe y tuve un gran amigo que murió en manos de estos tiranos. – Le entrego un cuadro donde se podía ver un chico sonriente junto a Chanyeol más pequeños, se podía vislumbrar en sus rostros.- Lo asesinaron un siete de septiembre...participo en el atentado contra Pinochet en el 86, claramente al ser fallido los buscaron hasta matarlo, tenía una familia, acababa de ser padre de su primer hijo...Jongdae merecía ser feliz, solo era parte de esas personas que así como nos arrebataron con sangre nuestra libertad deseaban devolverla igual.
-Chanyeol... -Una tristeza enorme le llego al corazón, no tenía palabras, era pequeño cuando murió su hermano no tuvo momentos donde llorar o sentir realmente su ausencia, había crecido sin él, no tenía un consejo para darle. – Él debe estar orgulloso de lo que planeas.
- Lo tienes, ¿verdad? – Evadió el tema, no tenía tiempo para seguir llorándole.
-Lo tengo.
Chanyeol tenía una sonrisa de oreja a oreja sacando lo más pronto posible los documentos ocultos, les leyó con rapidez antes de abrazar al chico con fuerza haciéndole girar por los aires entre risas y lágrimas de felicidad, lo habían encontrado. Bajó al chico avergonzado por tal acto motivado por la emoción, pero sus corazones latieron en la misma sintonía y como si fueran comandados por el mismo cerebro se acercaron para besarse. No saben cómo paso, tal vez fue la adrenalina del momento, o quizás era algo que llevaban bastante tiempo buscando, desde la primera vez que compartieron un almuerzo en el centro de Santiago, tampoco entienden en que minuto todo se volvió oscuro y la sensación de que solo eran ellos en el mundo se hizo presente, ¿Estaba bien? Digamos que les inculcaron tener una esposa toda la vida, ¿les importaba? Solo les puedo contar que como testimonio de la luna y las cuatro paredes de esa casa, pueden afirmar que no, no les importaba.
...
4 de octubre de 1988, estaban junto a un quiosco de Santiago comprando el periódico, debían hacerlos llegar a la mayor cantidad de gente posible, contenía la premisa "SILENCIARON CHILE Y LOS MEJORES PROYECTOS PARA SU FUTURO", escrita por Chanyeol y su pequeño ayudante Byun.
Un cierto porcentaje de personas no creía en aquella campaña política del NO, algunos tenían aquel lema en mente que les causaba miedo salir de la dictadura, "Mejor malo conocido que bueno por conocer." Razón suficiente para que llevaran cinco horas animando a personas desconocidas por la calle.
-Chanyeol, estoy agotado...déjame descansar cinco minutos.
-Si no entregamos todo a tiempo puede resultar devastador en las votaciones de mañana. – Ambos yacían sentados en el césped de un parque mientras repasaban el camino en un mapa, aún les quedaba por recorrer. – Te prometo que luego de esto te comprare algo delicioso.
-Me chantajeas emocionalmente. – Susurro acercándose a este cuando no había nadie cerca, un ligero beso fue el que le dejo en los labios. – Si me acostumbras a estos dulces regalos no tendré ganas ni de buscar trabajo. – Si, le habían despedido de la cordonería, esto por llegar tarde todos los días, en los cuales se quedaba abrazado a Chanyeol todo el desayuno.
-Mejor para mí, te tendría en casa todo el día. – Luego de aquella noche adrenalinita habían iniciado un tipo de relación secreta, no se les tenía permitido por la sociedad mostrar lo que sentían, se amaban pero sabían que no sería aceptado el sentir de sus corazones. Lamentablemente en esos años no solo era penado por el gobierno el ser diferente, si no que la misma sociedad te hundía hasta que tomabas la decisión de matarte, sabían de muchos jóvenes que habían llegado a tales extremos.
Emprendieron camino nuevamente, tanta gente paseando por el centro de Santiago les permitió tomarse de las manos, para darse la fuerza que les faltaba en su último esfuerzo, aquel que podría ser peligroso si no huían a tiempo.
Constaba de colgar un lienzo hecho por Chanyeol que llamara la atención de todos los que transcurrieran por ahí e hiciera conciencia de los hechos, aquel que decía "Allende nos traía el futuro, ellos lo arrebataron. Vota NO este 05 de octubre y reclama las tecnologías del futuro."
-Chanyeol...se ve hermoso, espero que esto funcione.
-Vete ahora.
-¿Qué?
-¡MI PRESIDENTE ALLENDE ENVIARA AL INFIERNO A TODO AQUEL QUE CREA EN ESTE ESTUPIDO GOBIERNO MILITAR! – Le entrego un empujón a Baekhyun, quien paralizado y sin el conocimiento del porqué de aquel actuar seguía mirándole incrédulo, solo esperaba que no fuera lo que su mente le indicaba.
-¡Levanta las manos weon!
Sintió su mundo derrumbarse, Chanyeol se había entregado para salvar su vida, sabía desde un comienzo que a este no le interesaba morir, pero no podía dejar que lo hiciera cuando ahora tenía a alguien que le acompañara en todas las locuras que se le ocurrieran por delante, no se podía permitir aceptar que seguramente jamás volvería a ver al hombre que amaba. Necesitaba ayuda, de alguna forma tenía que rescatarlo pero no supo más de sus pensamientos cuando sintió sus ojos pesados y como caía desvanecido.
...
-¿Qué pensabas? Porque mañana son las votaciones no significa que no pagarías por tus fechorías comunistas.
-¡Suéltenme! Saben que ganara el pueblo, mañana chile estará libre otra vez y no tendrá quienes le retengan ¡Ninguna mierda más como ustedes hará callar a la gente! No más.
Estaba atado a una cama de fierro, sus manos dolían de tanto intentar liberarse al igual que sus tobillos, ya le habían dado diferentes tipos de golpes, puñetazos, latigazos y quemado cigarrillos en su torso descubierto, no habían tardado en desnudarlo apenas fue amarrado ahí.
-Sea como sea el sueño de tu nuevo Chile, no podrás verlo, estarás muerto antes de descubrir que pasara con tu amada patria.
Tenía miedo, siempre tuvo en mente mientras planeaba el plan que podrían encontrarlo y asesinarlo en cualquier minuto, y no tenía miedo de morir cuando ya habría aportado su grano de arena para hacer conciencia entre los ciudadanos, pero ahora las cosas eran diferentes, se sentía culpable por haber expuesto a Baekhyun a esa locura suya, y lo que más le dolería de morir seria el no poder cumplir todos esos sueños que su corazón había inventado junto a él, junto al chico del cual se había enamorado, y por el cual suplicaría a ese dios que le sacara de ahí.
-No me maten, se los pido por favor.
-Debiste pensarlo antes de estar en contra de nuestro presidente.
Comenzó a gritar desesperado mientras a quien parecía un doctor acercarse con una especie de aparato que daba corriente eléctrica, no quería morir, no podía hacerlo.
...
-¡Chanyeol! – Baekhyun despertó desesperado queriendo correr a buscarlo, pero no sabía dónde, no tenía ni la más mínima idea de donde podrían tener al chico encerrado.
-Baek. – Asustado miro la voz que le hablaba, era Sehun olvidaba por completo que él les había ayudado en todo, era parte del plan desde un inicio de este. – Estas a salvo en tu hogar, solo podemos rezar esperando que Chanyeol regrese.
-¿Rezar? ¿¡Me estas pidiendo que rece para que la persona que amo regrese con vida?!
-Esa persona me pidió que si todo se salía de control te durmiera y pusiera a salvo, solo puedes hacer lo último que pidió, cuidarte.
-No dejare que más personas se sacrifiquen por mí y por mi futuro.
Molesto por la poca sensibilidad del chico le empujo, y corrió sin rumbo por las calles, le estaba buscando pero a la vez intentaba idear un plan para poder encontrar la forma de rescatarlo, sabía que el llegar solo sería el peor plan. Observo una familia que le miraba extraño por correr por el mismo sitio ya tres veces seguidas, y con aquello algo vino a su mente, la familia de Chanyeol.
No creía en la magia, ni mucho menos era fiel creyente de la palabra de dios, pero alguno de ellos le ayudo para dar con el hogar de los Park, suponía que algo harían por su hijo.
-¿Quién es...?
-Señora por favor, necesito hablar con el señor Park de inmediato, es algo urgente.
-E-espéreme un segundo. – Cinco minutos ya demoraba por lo que angustiado entro a la casa sin permiso gritando en busca del hombre.- ¡oiga!
-¡Señor park!
-¿Qué es ese escándalo? ¿Baekh...? ¿Baelun?
-Señor ha pasado algo malo...Chanyeol está detenido, no sé dónde está pero pueden estar torturándolo si es que ya no está muerto señor. – Intento mantenerse fuerte pero no pudo hacer más que largarse a llorar al final de sus palabras, se sentía un idiota por dejar que se sacrificara por solo salvarlo a él.
-Mierda.
El señor Park corrió hacia el teléfono, encontraría la forma de rescatar a su hijo, suponía en que estaba metido, había muchas cosas que sabía de su hijo que solo había callado. Si, el origen y la relación de aquel joven con su primogénito también.
...
-Dime escoria ¿había alguien más metido en tu estúpido proyecto?
-Solo yo.
-¿estás hablando en serio? Un lienzo de esa magnitud no se cuelga solo. –Se acercaba la corriente eléctrica y el sudor recorría su cuerpo con miedo.
-Deje eso donde estaba y suelte a este joven. –Ordeno una voz masculina que conocía muy bien. – Hubo un malentendido, él no tiene que estar aquí.
-Señor estaba a favor de...
-¿Y? es parte de la campaña del bando contrario, no puede tomarlo prisionero con lo que dicta la ley ahora.
Temblando sintió como le libraban de los agarres, encontraba por fin el descanso en sus muñecas por las que escurría sangre gracias a las heridas. No sabía que hacia su padre ahí, ni como se había enterado pero agradecía su aparición.
-papá...
-Vístete, hablaremos en casa.
Recibió un gran regaño cuando entro en su departamento, pero no fue la magnitud que esperaba ya que no tardo en sentir unos brazos rodeando su cuerpo, su padre le estaba abrazando.
-Eres experto desde pequeño en llevarme la contra, partido político y ahora que te gusten los hombres. – Estático en su sitio se separó mirando petrificado a su padre. – Se tu plan contra el gobierno hace mucho tiempo, ¿Cómo esperabas que no me enterara también de tu amorío secreto? Ah, con el hermano de un trabajador de Allende, que no se llama Baelun si no que Baekhyun.
-Papá yo...
-Tu madre se moriría de dolor si te pierde, no te metas en más peligros, yo guardare tus secretos.
-¿Por qué tenías acceso al sitio donde me torturaron?
-Aprenderás en un futuro que para mantener a una familia y un buen status, otros deben sufrir las consecuencias.
-Yo jamás sería capaz de torturar a personas por pensar diferente, podría haber muerto ahí, así como la mayoría de personas que pasaron amarradas en esa cama de fierro.
-Agradece que estas con vida, y dale las gracias a ese chiquillo de tu amigo que fue a avisarme, creíste que él también era algo que ocultabas de mi vida.
-Todos tenemos nuestros secretos.
...
05 DE OCTUBRE
Las mesas ya estaban siendo escrutadas y el silencio se sentía por todos los rincones del país, no se sabían aun los resultados más que según radio Cooperativa, un medio de comunicación de oposición al gobierno militar, estaba ganando el NO. Junto a tres explosiones seguidas a las 20:45pm un apagón arremetió las calles de Santiago, el segundo apagón en el día, sumiéndola en miedo, se tenía el temor y en parte la sospecha de los ciudadanos, que si estaban haciendo aquello, ¿estaba ganando el NO?
Baekhyun temblaba en su sofá mientras escuchaba la radio, no había tenido ninguna llamada de Chanyeol, por lo que se encontraba deshidratado de tanto llorar desde el día anterior, solo esperaba que si se obtenía la victoria el sacrificio del chico hubiera valido la pena. Aunque aquello no le daría un consuelo a su desamparado corazón que había perdido a quien se convirtió en la luz de su vida.
Sus ojos ya se cerraban de lo agotado que estaba, no tenía idea de la hora que marcaba el reloj, pero sintió gritos y unos golpes en su puerta que le hicieron levantarse a abrirla, su madre ya estaba durmiendo así que nadie más lo haría, pero a penas giro la manilla quedo helado con la presencia junto al portal.
-Gano el NO.
Tapo su boca ante la sorpresa, era la mejor noticia escuchada gracias a los labios más hermosos que se presentaban ante él, y que aun, seguían vivos para besarlos. Como si fuera una película salto a los brazos de Chanyeol aferrándose a estos mientras lloraban por el resultado que se había entregado, valió la pena cada sacrificio que hicieron, tantas noches en vela pintando y ordenando papeleos, la sociedad había comprendido y dejo atrás el miedo que les atemorizaba para enfrentarlo. Después de todo agradecían el proceso, el que los llevo a amarse, y donde podrían, a pesar de que fuera secreto, amarse sin temor de que alguno de los dos muriera antes de la media noche.
-¿Nos podremos casar ahora?
-Deberemos esperar que la democracia nos traiga la oportunidad de unirnos legalmente.
Y la trajo, pero no fue hasta 2022 cuando el matrimonio igualitario fue legal en el Chile. Con cuarenta y dos de Baekhyun y --- de Chanyeol.
La dictadura militar es una mancha en la historia de Chile, aquella donde fueron asesinados y torturados una cantidad terrible de personas por el simple hecho de no pensar igual a lo que se les implantaba. Seguramente esta no será la última desgracia que ocurrirá, y espero estar equivocada, por que jugar con la vida y la tranquilad de las personas no es un juego. No importa si no eres chileno, sé que te causa miedo que eso ocurra en tu país, o tal vez el tuyo también fue parte de la cadena de dictaduras implantadas en américa del sur en ese mismo periodo, es minuto de hacer conciencia y de pensar realmente quien tiene el verdadero poder en el mundo, sencillamente quien es el causante de tanto dolor dentro de una terrible e angustiante guerra fría.
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