Era una de esas tantas noches en las que JungKook y Seok Jin no podían dormir, por algún motivo no tenían sueño y se sentían en paz en los brazos del otro, en medio de la penumbra del cuarto y cubiertos hasta la cadera por la sábana delgada y suave.

El omega acariciaba los brazos desnudos de su alfa, sintiendo sus piernas enredadas. Hubiera deseado que el mayor no tuviera el pantalón de su pijama, le gustaba más el contacto que tenían piel con piel, por eso siempre usaba un pantalón corto y amplio para dormir, además de una camisa grande de su esposo. Amaba usar cosas de él para dormir. Aspiró su aroma, sintiéndose en paz al poder tenerlo con él, sintiendo sus manos sobre su cintura, debajo de su ropa, acariciando con dulzura. Amaba esos momentos que podía pasar con él.

-Hoy llamó TaeHyung, nos invita a su casa este fin de semana.-comunicó con voz suave, no había necesidad de hablar tan alto ante la tranquilidad de la habitación.

-Me parece un buen plan, Tae me dijo que JiWoo está ansiosa por invitarme a una fiesta de té con el nuevo juego de porcelana que le compró HoSeok.

-Me dijo también sobre eso, le gusta jugar contigo-se acurrucó más en el pecho del mayor-serías un buen padre, hyung.

-Tú también lo serías, amor. La mejor madre del mundo.-sonrió al sentir que el menor gruñía-¿acaso no te gustaría que te dijera mamá?

-Mmm...eso ya lo veremos después...dime hyung ¿cómo te gustaría que se llame nuestro bebé?

-Mmm...siempre pensé en que si tenemos un niño, se llamaría JiSung.

-¿Y si fuera niña?-preguntó acariciando la espalda del mayor.

-Mmm...no lo sé, nunca pensé en un nombre para niña, la verdad creo que hay muchos nombres lindos y no me puedo decidir. ¿A ti cuál te gusta?-JungKook levantó la mirada, su mano viajando hasta la mejilla de Jin.

-NaYeon, siempre...he pensado que si tenemos una niña sonaría muy bonito llamarla Kim NaYeon ¿tú qué crees, hyung?

-Que me encanta-tomó su mano, entrelazando sus dedos-estaba pensando que podríamos, no sé...hacer a nuestro pequeño en el viaje que hagamos a Europa y América ¿Qué dices?

-Me parece una buena idea-sonrió enternecido, levantándose un poco para besarlo en los labios-y ¿Qué te parece si...compramos una casa más grande? Me gustaría...que tengamos muchos bebés y para eso necesitamos una casa más grande.

-Mi mamá me habló sobre una hace unos días...podríamos averiguar si quieres, conejito. Así habría lugar para que Kim JiSung y Kim NaYeon puedan jugar, correr en el jardín y tú tendrías más espacio para tus obras.-Bien, JungKook tenía que reconocer que la imagen de su esposo en el jardín jugando con los niños había sido encantadoramente hermosa, quería ya poder hacer realidad eso.

-Me gusta eso...sería tan perfecto todo. Tú, yo, nuestros hijos, nuestras mascotas...la familia Kim será muy numerosa ¿verdad?-ambos rieron mientras seguían perdidos en sus caricias y mimos.

-Por supuesto, conejito.-tras un beso en la frente, agregó-Kookie... ¿puedo confesarte algo? Pero que sea un secreto entre nosotros ¿sí?-JungKook sonrió, por el tono de voz sabía que no sería nada extremadamente serio.

-Claro, hyung, dime.-sintió que lo estrechaba más contra él.

-Te amo, conejito, y no importa lo que nos depare el destino, siempre te voy a amar. Sin importar las vidas que pasen o la distancia...yo siempre te voy a amar.

-Hyung...yo también te amo, más de lo que alguna vez imaginé que amaría a un alfa. Mi amor por ti no tiene límites...haría lo que sea con tal de siempre estar a tu lado.

Ambos sonrieron y, en medio de la oscuridad y el silencio, se besaron con todo el amor que sus corazones sentían.

Y aqui el final de este especial hecho pura y exclusivamente para condimentar con sal y limón la herida n.n

Espero que les haya gustado n.n muchas gracias por leer, votar y comentar ❤︎

Nos vemos en mis otras historias! Besos💋💋💋