Las puertas del Laberinto se abrieron. Minho nos dirige. Le pregunté qué si íbamos en la dirección correcta y dijo que si.

-___...- dice Thomas.

-callate- digo seria.

-por...

-shhhh- lo interrumpo.

-solo deja...

-¡que cierras la boca!- digo alterada.

-ok- voltea a otro lado.

Aceleró el paso. Me irrita su voz. Si lo vuelvo a escuchar hablar le voy a dar una patada en la entrepierna. Llevamos corriendo algunas horas.

-hay que... comer- ordena Minho.

-¡sí!- me tiro al piso.

Sacó mi sándwich y mi agua. Thomas se sienta a mi lado. Me muevo para no estar tan cerca. Devoró mi sándwich, le doy unos tragos a mi agua, acomodo todo de nuevo en la mochila.

-quiero hablar contigo- dice Thomas.

-por favor. Thomas no quiero. Te juro que si vuelves a hablar te pateare.

-solo quiero expli...

-hazme un favor y no me vuelvas a hablar nunca- tomo mi mochila, comienzo a caminar hacia el pasillo.

Paso al lado de Minho y sigo derecho.

-¿estas bien?- pregunta Minho.

Se me escapa un lágrima. Minho de estar preocupado se entristece. Me limpia la lágrima.

-pequeña no llores- me abraza.

un sollozo se me escapa sin querer. Me separo de él, limpio algunas lágrimas y le ruego que no le diga a Newt y asiente.

Seguimos hacia nuestro destino. Antes de llegar a la Sección 7, encontramos una camiseta ensangrentada.

-es de Ben- dice Minho.

-¿quien?- pregunto.

-larga historia, sigamos.

Unos "bips" se comienzan a escuchar, provienen de Minho. El aparato que le quitamos al Penitente estaba sonando. Eran muy lentos, después mientras mas nos acercábamos a no se donde sonaba más rapido. Pasamos por unas placas enormes. Llegamos a un enorme pasillo, parece como una cueva. Al llegar una luz verde se enciende y nos da paso a otro pasillo que lleva a una puerta en espiral.

-¿esto que es?-pregunta Thomas.

-no lo se, nunca había visto este lugar- contesta Minho.

-parece como si... fuera la guarida de los Penitentes- comento.

-a si parece.

Un rayo verde, nos escanea a los tres, después hace un ruido raro y se comienza a cerrar todo. Salimos lo más rapido. Las placas se comenzaron a cerrar.

Minho fue el único que alcanzó a pasar, Thomas y yo tratamos pero las placas se cierran. Ya no hay tiempo. Thomas toma mi mano y nos hace cruzar. Por poco y caigo, pero Thomas me sujeto de la ciuntura.

El pequeño pasadizo que hay para escapar se comienza a cerrar. Primero pasa Minho, después Thomas y por ultimo yo.

Casi se cierra por completo cuando alcanzo a salir. Me atrapó la punta de la bota y la está presionando. ¡se me va a quebrar el pie!

-¡oigan ayuda!-les grito.

-por dios- dice Thomas asustado.

-Shuck- dice Minho.

Minho me toma de la cintura mientras Thomas me ayuda a quitarme la bota. Genial ya perdí una de mis botas, ¿como se supone que voy a correr?

-casi pierdes el pie- dice Minho.

-en serio. No me di cuenta- digo con sarcasmo.

-bueno hay que volver a el Área. Ya encontramos una posible salida- comenta Minho.

-espera espera. ¿como piensas que voy a volver sin una bota?

-pues corriendo.

-si cómo no, te das cuenta que las piedras me van a estorbar ¿no?

-es cierto- se rasca la frente.

-te puedo llevar en mi espalda... claro ¿si quieres?- ofrece Thomas.

Awwwwww, esto seria una ecena muy hermosa, si es que no estuviera enojada. Como no quiero caminar, Thomas será mi buey.

-si esta bien. Date la vuelta.

Thomas se da la vuelta y yo me subo de caballito. Caminamos... bueno ellos caminando por que yo vengo de pasajera. Un par de horas más entramos al Área.

-gracias, ya puedo caminar- me bajo de su espalda.

-de nada.

Me quito la otra bota y la arrojó al Laberinto. De una vez que se quede con las dos. Todos los habitantes se nos acercan haciendo preguntas: ¿que encontraron? ¿por que estas descalza? ¿te las quito un Penitente?

-explícales tu yo necesito ir al rio- digo cansada.

-ok, al rato te llevo unas botas nuevas.

-gracias.

Llego al rio, lo primero que hago es quitarme la ropa y darme mi chapuson. El agua está fría, justo como la necesito. Duro unos minutos así: flotando de muertito, sumergiendome hasta que se me acaba el aire.

Escucho voces que se acercan. Salgo lo más rápido, tomo mi ropa y trepó a un árbol. Me pongo mi pantalón con cuidado de no caerme.

Thomas se sienta al lado del rio con Chuck.

-¿hablaste con ella?- pregunta Chuck.

-no. No quiere que le vuelva a hablar.

-vamos no puede ser tan malo.

-Chuck me dijo que le hiciera un favor y no le hablará nunca.

-auch, que feo- Chuck mira hacia arriba.

Cuando Chuck me mira arriba del árbol le hago ceñas de que no vaya a decir nada. Este asiente y vuelve a mirar a Thomas.

-entonces Thomas dime, ¿que le dirías a __ si la tuvieras enfrente?

-pues... que me perdone, de todas las idioteces que he cometido está es la peor. Me siento como un completo miertero. Me siento como una enorme montaña de poplus. Quisiera regresar el tiempo y corregir esto, haber acompañado a __ a su cabaña en vez de irme yo solo al bosque.

Voy a llorar voy a llorar.

-no haber aceptado esa cosa rara que me dio Teresa. En vez de aceptarla hubiera tomado la botella y se la quebró en la cabeza. ¿te confieso algo Chuck?- dice triste.

-dime.

-la perdí,

ahora si la perdí para siempre Chuck. No me va a perdonar, la conoce tan bien que se que a la primera que le pida disculpas me arrojará al Laberinto- seca sus lagrimas.

-Thomas no por favor, no llores- lo abraza.

¿por que Thomas tiene que ser tan cursi?, voy a mandar al diablo mi orgullo ¿o no?

Pensando que tengo dónde recargar me, me recuesto. Olvidando que estoy en un árbol. Me doy un santo golpe.

-¿que fue eso?- pregunta Thomas.

-no lo se.

-si me dolio- susurro.

Me pongo de pie y me zobo la espalda. Quien diría que el suelo es tan duro.

-___ te caiste?- pregunta Chuck.

-no Chuck como crees, yo haci me bajo de los árboles.

-menos mal- rie.

Le alboroto sus chinos. Thomas se limpia los ojos y hace como que nunca lloro.

-bueno me tengo que ir, aquí estorbo- dice Chuck- adiós.

-adiós chinitos- le doy un abrazo.

-después agradeces- me susurra.

Chuck se va corriendo, es un chismoso de primera así que antes de que se vaya le grito:

-oye Chuck no te quiero ver cerca de aquí o te juro que lo lamentarás niño.

Este asiente con miedo. Me pongo mi blusa. Por un momento olvido que Thomas está atrás de mi.

-¿escuchaste todo lo que dije?

-si.

-todo eso era cierto

-yo nunca dije que pensara que fuera mentira. Solo un sordo no lo notaria.

-pero ellos no escuchan.

-exacto- digo obvia.

-____, yo... te amo

Dúos mio, mi corazoncito me duele. Esta muy arrepentido, ahora si al diablo el orgullo.

-yo también te amo.

-¿encerio?

-muy encerio.

Thomas lo duda un poco, da un paso al frente con miedo a que lo aleje o lo pate. Me acerco un poco más, él me abraza y le corresponde su abrazo. Duramos unos minutos abrazados. En la primer oportunidad que tenga le voy a partir toda su horrible cara a Teresa, se atrevió a enbrujar a Thomas a MI Thomas.

-en tu cabaña están tus botas nuevas- comenta.

-ok, no es por abusar; pero ¿puedes llevarme?

-con mucho gusto- sonrie.

Me tomo entre sus brazos como recién casados y nos vamos a mi cabaña.

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Hooollaaaaaaa😎🤘. Se que les prometí el capitulo ayer,Nero lo estaba redactando en la madrugada, justo cuando mi mamá entro al cuarto y me regaño por que ya era muy tarde y yo no dormia🙁😝.

Me quito mi celular y hasta hace rato me lo regreso. Encerio que fue el día más largo de mi corra vida.

Gracias por sus votos y comentarios, me alientan a seguir con esta novela📝. Me sacan una sonrisa😃.

Nos leemos pronto.

Besos😘.