Han pasado ya unas horas desde la desaparición de Naruto, no hay ninguna pista de lo que pudo haber pasado o eso creía.

- Que bueno que viniste.

- Pues cálmate, ya estoy aquí.

- Como quieres que me calme, prometí que siempre lo protegería y ahora lo perdí.

- Que fastidio, Naruto no es un niño, el se puede defender solo, aunque dónde está va a ser difícil, volverlo a ver si es que sigue con vida.

- ¿Qué?, Cómo que si es que sigue vivo, tú sabes dónde está, ¿Qué le hiciste?, devuélvemelo.

- Tranquilo, tranquilo, no se donde esta, pero si se con quien esta.

- ¿Con quién?, ¿Por qué que se lo llevaron?- decía el azabache entrando en pánico.

- Pues la verdad, fue su culpa, le dije que meterse con esos tipos era peligroso, pero no me hizo caso y ahí las consecuencias.

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En otro lugar, un lugar abandonado y como una mansión olvidada, se encontraba un rubio, tratando de liberarse.

- ¿Qué quieren de mi?.- decía gritando.

- Cállate, cállate, o te va a ir peor- dijo una voz amenazante.

- Tú.

- Hola, me recuerdas, te dije que te daría una lección.

- Te recuerdo bien Pain, o más bien Nagato.

- Cuida tu lenguaje muchachito, para ti soy Pain.

- ¿Qué quieres de mi?, Ya tienes la empresa.

- Si, pero escuche por ahí, que quieres recuperarla, ¿Es eso cierto?.

- No, por supuesto que no.

- Pues no te creo- dijo acercando un cuchillo al cuello del rubio.- No saldrás de aquí con vida, oíste.

Naruto solo podía asentir con miedo, no quería morir, no quería dejar a su azabache, no quería perder la empresa, pero no sabía que hacer.
Se había metido en un gran problema, Nagato o más conocido como Pain es el líder de un grupo de mercenarios llamado Akatsuki, Naruto los conoce, porque un día le hicieron una visita.

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- Hola, Namikaze.

- ¿Quién yo?- decía fingiendo confusión.

- No te hagas, vine a buscarte.

- ¿Qué quieres?.

- Mira, mi nombre es Nagato, soy buena persona, y...

- No me hagas reír- interrumpió- Cuál buena persona, dime qué quieres.

- No te creas, niño, quiero que sepas que yo fui quien mato a tus padres.

-No, no es cierto.

- Ten cuidado, dónde me enteré que vas a hacer algo en contra de nosotros, ten por seguro que no vas a volver a ver la luz, nunca más- dijo antes de dar la vuelta e irse en una camioneta negra.

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- Todo está listo- dijo una persona que llegaba desde, las sombras.

- Muy bien, llevenselo, te lo encargo, cuídalo bien, no se te vaya escapar, Itachi.
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Sasuke estaba entrando en pánico, siempre ha tenido su semblante serio, pero ahora era lo que menos le importaba, solo necesitaba proteger al rubio, lo necesitaba de vuelta.

- Entonces, se lo llevaron.

- Así es oficial.

-¿Quiénes?

- Parece ser que un grupo llamado Akatsuki.

-¿Qué?- decía alarmado.- Lo siento pero puedes dar a tu amigo por muerto.

- ¿Por qué?- decía más alarmado.

- Ellos son peligrosos, no hay nada que hacer, así que será mejor que me retire- decía mientras les daba una señal a todos sus compañeros.

- No pueden hacer eso, ustedes, regresen, necesito que me ayuden...- decía con lágrimas.

- Bueno, me voy a arrepentir por esto, pero ten- Shikamaru, le dio una nota.- Por favor, ten cuidado, regresa con vida, seria un fastidio tener mas trabajo- mientras se iba.

Sasuke leyo la nota, en ella venía una dirección, supuso que era la dirección, en la que se encontraba su amado novio, por lo que rápidamente se subió a su carro para ir por el.
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- ¿Qué quieres de mi?- decía un rubio mientras se revolcaba para librarse de sus ataduras.

- Shhhh, cállate.

- No me digas que me calle, maldito.

- Tranquilo, tranquilo, estoy para ayudarte.

- ¿Ayudarme?, Si claro, no soy un estúpido, ttebayo.

- A no, entonces porque te metiste con Akatsuki.

- Cállate, que te importa.

- Ay, no, lo bueno es que esto ayudara a la empresa Uchiha, también- dijo muy bajo, aunque el ojiazul escucho perfectamente.

- ¿Uchiha?- el rubio palideció- tu problema es conmigo no con él.

- ¿De qué hablas?- miraba confundido.

- Por favor, no te metas con Sasuke- el rubio le suplicaba.

- Tu, conoces a Sasuke.

- ¿Qué?, Pues si, pero no le hagas nada.

- ¿Cómo lo conocés?.

- Eso no te importa, más bien ¿porque tú lo conocés?.

- El, el, es... Mi hermano- dijo entre cortado.

- ¿Qué?, Itachi, ¿En serio?.

- Ahora tú ¿Cómo?.

- Pues... El es mi novio- dijo con una sonrisa.

- ¿En serio?, Y ¿Cómo está?, ¿el está bien?.

- Si, pero creo que le debes una explicación, porque según nosotros estabas muerto.

- A, si, es una explicación muy larga...

- Está bien, no me la debes a mi, pero ¿Cómo me encontraron?, trate de ser lo mas sigiloso posible.

- En realidad no lo se, el jefe tiene a sus espías, probablemente algún amigo o familiar tuyo, que este engañándote.

- La verdad no creo, todos son de mi confianza, a excepción del primo de Sasuke- decía pensativo.

- A bueno, entonces.. Espera ¿Qué?- dijo alarmado.

- ¿Qué cosa?

- ¿Cómo que primo?, aparte de mi, el único Uchiha existente es Sasuke.

- No, solo hay dos, Sasuke y Sai.

- ¿Quién es el?.

- Tu primo.

- No, Naruto, no, el no es un Uchiha, es el espía de Akatsuki.

- ¿Que?, pero Sasuke vive con el desde siempre y casi siempre esta con nosotros.

- Eso significa que mi hermanito ha estado en peligro desde siempre.

- Y ahora que hacemos, deben de estar tramando algo con el, hace poco desapareció, será que le hará algo a Sasuke.

- No lo se, pero tengo que sacarte de aquí.

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Sasuke estaba del otro lado de allí, iba en camino cuando algo lo detuvo, se bajo para poder hablar con esa persona.

- ¿Qué haces aquí?- dijo algo apurado.

- Voy a acompañarte, si sigues así vas a chocar, yo conduzco.

- De acuerdo, pero rápido ... S....