Capítulo 9
Los otros me miran y luego al niño rápidamente, pero al darnos cuenta un tiburón ya estaba por allí. Apreté el barandal con fuerza y antes de saber siquiera que estaba haciendo... salté al agua...
Sí, así como lo leyeron... la estúpida saltó del barco, pero ni modo...
-¡_____!
-¡Mademoiselle!
El niño grita cuando un tiburón nada directamente hasta él con la boca abierta, listo para devorarlo. Cerré mi mano en un puño y el anillo que traía dejó salir aquella punta afilada.
-¡Agh!
Golpeé en el ojo al tiburón con fuerza haciendo que este nadara lejos, agarré al niño y nadé hacia el barco otra vez.
-¡Sí, eso es! - Polnareff sonríe y me vítorea pero entonces mira atrás de mi -¡Oh no, mademoiselle atrás!
Miré justo cuando el tiburón regresaba, se veía más molesto que antes... Me coloqué frente a la niña cerrando de nuevo el puño pero antes de que el tiburón llegase, Star Platinum sale de debajo del agua golpeándolo.
-¡Ora!
Le da repetidos golpes en el aire y lo deja flotando muerto en el agua. Yo lo miré pero pasé mi vista hasta tras del niño, para ver a Jotaro. Él nos mira a ambos pero cierra los ojos y agarra al niño.
-Yare yare daze, vamos mocoso. ¿Eh?
Él se detiene y vuelve a mirarlo, pero entonces aplasta su mano contra el pecho del niño... que yo ya sabía que era una niña.
-¡Oye, Jotaro! - agarré a la niña y la jalé pero su gorra cae y muestra su cabello largo -¿Qué crees que haces?
-¿Eres una chica? Pero eres pequeña.
-¿Cómo te atreves a tocarme así? - ella se esconde tras de mi sujetándose por mis hombros, se veía sonrojada -¡Pervertido!
-Yare yare da...
Suspiré bajando la mirada por el cansancio de esto, pero entonces me sobresalté cuando Jotaro me jala por la mano.
-¡He..Hey!
-Vamos.
Miré a la chica y le di la mano para atraerla igual y los tres volvimos al barco, pero entonces vi que algo ocurría con el cuerpo del tiburón.
-¡J..Jotaro! ¡_____! ¡Algo los persigue bajo del agua! ¡No es un tiburón. Y va hacia ustedes!
-¡Hm!
Me sobresalté cuando Jotaro me sujeta por la cintura para nadar más rápido... aunque yo pudiera sola pero bueno, no me suelto porque perderíamos tiempo... solo por eso...
-¡Está demasiado lejos!
-Yo puedo alcanzarlos ¡Hierophant Green!
Este nos agarra y nos estira justo a tiempo cuando aquella cosa desgarra el salvavidas junto a nosotros.
-¡Desapareció! Es un Stand. ¡Esa cosa es un Stand! - dice Polnareff.
-Un Stand acuático. Nunca había visto eso en mis experiencias místicas - menciona Avdol.
Todos miran hacia la chica con duda, sabía que estaban dudando de ella y pensaban que era la usuaria del Stand acuático. Suspiré y me acerqué a ella agachándome hasta su altura y apoyando mi mano en su hombro.
-¿Estás bien?
Ella levanta la mirada y me mira mientras seguía jadeando por la sorpresa y la falta de aire. Ella voltea a ver a los demás y se aleja de un salto.
-¿Qué les pasa, idiotas? Dejen de verme así. No sé qué está pasando, pero pelearé. No me subestimen, ¡Se arrepentirán! ¡Vengan de a uno!
Todos la miran como si quisieran regresarla al agua, cosa que me hizo reír aún así en un momento como este. Me enderecé apoyando mi mano en mi cintura y mirando a la chica con la navaja.
-Oye, dime ¿Cómo está DIO?
-¿DIO? ¿Qué diablos es eso?
-No te hagas la que no sabe, mocosa.
-Se los advertí, imbéciles. ¿Quieren hablar o que les dé una paliza? ¿Qué eligen? Mi cuchillo quiere beber la sangre de su víctima número trescientos cuarenta.
-Okey, ya mucho teatro.
-¡¿Ah?!
En un rápido movimiento ya tenía la navaja de la chica y la guardé antes de cruzarme de brazos.
-¿Nunca te dijeron que no juegues con cuchillos?
-¡Oye, devuélveme eso!
-Hm... yo creo que no. Pero tranquila, no haré nada con esto, ninguno de nosotros te hará algo.
Ella se queda en silencio, ya no dice ni hace nada y eso me hizo pensar de que había conseguido calmarla. Sonreí pero miré hacia los otros un poco más seria y haciéndome la misma pregunta que ellos: ¿quién era el usuario de aquel Stand?
-¿Esta chica es la polizona?
El capitán del barco aparece, yo lo miré... entrecerré los ojos pero no hice nada, él agarró a la chica.
-Soy estricto con los polizones. Eres una niña pero si soy compasivo contigo, cada vez tendremos más polizones. Te encerraré en el calabozo hasta que lleguemos al puerto.
-Capitán, quisiera preguntarle algo. ¿Verificaron la identidad de los diez hombres a bordo?
-Por supuesto. Todos trabajan conmigo hace más de diez años. No entiendo por qué es tan importante. Por cierto...
Abrí los ojos de par en par cuando vi que el capitán le arrebató el cigarro a Jotaro, me sorprendió que lo hiciera así.
-No fumes en cubierta, por favor. ¿Qué planeabas hacer con las cenizas y la colilla? ¿Tirarlos por la borda a estas aguas impolutas? Podrás ser un invitado en este barco, pero cumplirás mis reglas, chico rudo.
El capitán aplasta el cigarrillo en el sombrero de Jotaro quien no hace nada, solo se quedó sorprendido igual que el resto de nosotros.
Pero justo cuando el capitán se estaba yendo, Jotaro lo acusó de no ser el capitán y de ser el usuario del Stand. Al menos no era la única que lo pensaba... Jotaro pone a prueba a todos con una mentira de que a los usuarios de un Stand se les marca una vena en la nariz cuando huelen el humo de un cigarro y el capitán había caído...
-Tienes razón. El verdadero capitán está durmiendo en el fondo del mar.
-Entonces pronto tú estarás durmiendo en el infierno.
El capitán se ríe y yo abrí los ojos de par en par, agarré a la niña y la lancé al frente, la mano del Stand sujeta mi pierna y me estira haciendo que caiga al suelo y luego pasara por el barandal, pero lo agarré para no soltarme.
-¡_____!
-¡Tsk!
Agarré la navaja y apuñalé su brazo, la del capitán igual comienza a soltar sangre. Regresé al barco de un salto y miré al capitán con la navaja en mano, pero este había agarrado a la niña.
-¡Maldición!
-Seis contra uno es mucho, incluso para mi. Por eso mantuve mi identidad en secreto, para eliminarlos uno a uno. Pero me descubrieron, no tengo alternativa ¡Los enfrentar a todos! Pero atrapé a la chica así que la suerte está de mi lado. Creo que me sumergirá con ella en el agua con tiburones. Si quieren salvarlas tendrán que seguirme. En el océano tengo ventaja y puedo destrozarlos a los seis.
La niña forcejea y luego me mira como pidiéndome ayuda, yo apreté el agarre en la navaja y luego presione más fuerte mis dientes antes de mirar al capitán de nuevo.
-Te haces el recio amenazándonos con una rehén. Necesitarás más que eso para intimidarme.
-No es una amenaza. Es una predicción. Tu Stand, Star Platinum, es muy rápido, no quiero alardear pero mi Dark Blue Moon es rapidísimo bajo el agua. Es mucho más rapido que cualquier pez del mar.
El hombre salta junto a su Stand hacia el agua pero Jotaro fue más rapido en mandar a Star Platinum y este consigue darle una serie de golpes al Stand del capitán.
-Bueno, eso fue fácil.
Vimos como el hombre se alejaba flotando en el mar pero yo me concentré más en Jotaro que se había pegado al barandal y no subía a la chica.
-¿Jotaro? - me acerqué.
-¿Qué pasa, Jotaro? Levanta a la chica, vamos. - no lo hace - ¿Qué pasa, Jotaro?
-¡Maldición! Algo me tira hacia abajo.
Vi en ese momento como algo crecía sobre el brazo de Star Platinum y me di cuenta de que se trataban de percebes. Estos comenzaron a hacer sangrar a Jotaro.
Todos sujetamos a Jotaro y tratamos de subirlo pero ni siquiera podía retirar a Star Platinum y entonces no pudimos sostenerlo ni él por lo que terminó cayendo.
-¡Jotaro!
Kakyoin lanza su Stand pero él hace que atrape a la chica mientras que él cayó al agua y el capitán llegó junto a él con su Stand.
-¡Diablos!
-¡Esto es malo!
-No, Jotaro no se dejará ganar... - me acerqué más al borde -¡Vamos, Jotaro. Acaba con él rápido o voy a golpearte, idiota!
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