Capitulo 26
-Princesa, princesa,por favor espere.-escuche a Hagrid llamarme. Me pare de caminar y di media vuelta para mirarlo.
-Si?, pero por favor usted puede llamarme _____.
-Esta bien ____.Necesito su ayuda.-dijo hablando agitadamente, al parecer corrió para alcanzarme.
-Claro que si, encantada, en que puedo ayudarte.-dije dándole una sonrisa.
-Pues oí que usted tiene una Quimera y me preguntaba si podría ayudarme mostrando a su amigo en mi clase. Hasta podríamos juntar su clase con la mía y la daríamos juntos que dice?.-dijo emocionado. No era mala idea, mire a Caelum y este asintió.
-Esta bien, lo aremos. Peor puede ser en las clases después del almuerzo?.
-Claro como desee, eso mismo le iba a decir, ya que son a los alumnos de 4 año de Gryffindor y Slytherin les quería mostrar.-dijo feliz.
-Eso es perfecto, y yo también tengo con 4 año de las otras casa, así que no sera problema.
-Una pregunta.-dijo llamando mi atención.
-Claro, pregunte lo que quiera.
-En donde la tiene, no la vi y se que las Quimeras son grandes criaturas que necesitan espacio.
-Pues aquí esta.-dije mostrandole a Caelum que seguía en mi cuello.-Su nombre es Caelum, se que las Quimeras son animales de la dinastías Imperial de la antiguas magias y son los primero Animagos Metamorfmagos.
-Es impresionante.-dijo mirando a la serpiente en mi cuello anonadado.
-Lo se, soy algo único.-dijo Cael.
- Lo que tu digas, Cael.-dije canturreando y el me miro ofendido.-no vemos mañana Hagrid tengo algo que hacer.-comencé a caminar hacia las mazmorras, donde ya seguramente se encontrarían los niños de mi casa con el profesor Snape.
-Adiós _____.-escuche a Hagrid a lo lejos.
Llegue al salón de pociones y entre como si nada. Cuando estuve ya adentro vi a los niños, que al mirarme me rogaron con la mirada que los ayudase a salir de aquí.
-Quien se cree usted para entrar así sin más?.-dijo molesto Snape yo sonreí, iba a divertirme mucho este año con Severus, molestandolo obvio.
-Mm no lo se..-me hice de pensar.-La hija del director de Hogwarts quizá?.-dije para molestarlo.
-Este es mi salón, por lo tanto no puede entrar cuando le plaza.-dijo tratando de intimidarme, le sonreí lo que pareció molestarle e hizo que ensanchará mas mi sonrisrá
-Esta bien Sev, no se amargue más de lo que es o le puede salir una verruga.-dije con una sonrisa, era divertido molestarlo y verlo como casi hecha humo.
-No, Tiene derecho a llamarme así Dumbledore y si estoy amargado o si me amargo es mi problema, no se entrometa en donde no la llaman.-dijo lentamente y mirándose molesto.
-Esta bien, esta bien, lo que usted diga.-dije paseando por la sala.- niños ya es tarde sera mejor que se vallan a sus dormitorios.-dije e inmediatamente salieron como si hubiesen visto un dementor. Estaba caminando hacia la puerta y dirigirme a mi dormitorio, cuando sentí que me pegaban bruscamente a la pared, cerré los ojos al sentir un poco dolor al chocar con el duro muro.
-Usted no es nadie para darle ordenes a mis castigados.-sentí su cálido aliento en mi rostro, abrí lentamente mis ojos y lo vi tan cerca de mi, unos centímetros de más y podríamos besarnos.
-Se equivoca, soy su jefa de casa, por lo tanto tengo el mismo o más derecho que usted a mandarlos.-dije mirando sus hermosas gemas Ónix. Al parecer eso le molesto más, ya que rápidamente me agarro del cuello apretandolo brevemente.
-Es una insolente mocosa que juega a ser princesa y saber todo.-dijo cada vez más cerca. Yo mire sus labios, como los deseaba. Basta no!! Tengo novio.
*No pensabas en el cuando dijiste que deseabas sus labios, o si?.*
Oh genial, cuando apareces es para confundirme más de lo que estoy.
*No es cierto. Solo trato de darte una opción*
Que me confunde más
*Ese ya es tu problema no el mio. Yo solo me encargo de darte concejos por algo soy tu conciencia*
.....
Estaba por contestarle cuando sentí unos labios sobre los míos. Era un beso lento y delicioso. Severus adentro su lengua a mi cavidad bucal, haciendo el beso más apasionado. Sentí sus manos en mi cintura, atrayendome más cerca suyo y yo lo agarre de sus cabeluyo desesperada. Por la maldita falta de oxigeno tuvimos que romper el magnifico beso. Nos mirábamos fijamente, no se que pensamientos tendría, tal vez se esta arrepintiendo o piensa que es un error, creo que sera mejor decir algo.
-Tal vez no se todo, como usted dice, pero se lo suficiente para no andar jugando con las personas, porque yo se que usted jamás podrá y no querrá olvidar a Lily Potter. -dije soltandome de su agarre y saliendo a toda prisa de las mazmorras.
Llegue lo más rápido que pude a mi habitación, con el corazón latiendome fuertemente por casi haber corrido. Cerré la puerta y me apoye en esta asimilando lo ocurrido hace solo un momento.
-Que fue todo eso.-dijo Cael después de unos segundos.
-No lo se.-dije todavía ida en mis pensamientos.
-Como que no lo sabes?.-pregunto atónito.-acabas de besarte con el amargado profesor de pociones.-yo lo mire confundida desde arriba, ya que se había bajado de mi cuello y estaba en el suelo.-Escuche a algunos de tus alumnos hablar de el, de lo malo y amargado que es.-al parecer entendió mi mirada.
-No es la primera vez.-dije en un susurro.
-Ya te habías besado al Murcielago.-dijo gritando y yo reí al escuchar como lo llamo, así lo llaman los alumnos.-Ahora tu que?.
-Es que como lo llamaste, así lo llaman los alumnos todo el tiempo.
-Lo se yo también lo escuche y déjame decirte que tienen razón.-dijo sentado en el sofá de la sala ya transformado en humano.
-Si tienes, razón. Mejor olvidemos lo sucedido si?.-dije sentándome a su lado.-No dirás a nadie de esto, esta claro?.-lo mire sería.
-Esta bien, esta bien leona.-dijo poniendo las manos en forma de rendición.
-Esta bien es hora de dormir y mañana tendré que volver a levantarme temprano. Ahg, suerte que quedan solo 2 días de clases contando mañana y luego tendré que ir a Hogsmeade. No tengo mas camas, así que tu decides si en convertirte en león o serpiente.-dije caminando a mi habitación. Escuché pasos, mire y se había convertido en un pequeño león. Me puse el pijama y me acosté al lado de Caelum, que ya estaba dormido en mi cama. Estaba mirando al techo pensando en todo lo que paso hoy, hasta que caí en brazos de morfeo.
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Narra Severus
Esa niña insolente como se atreve a dejarme con la palabra en la boca luego de haberme besado, pero eso no se quedara así. La pregunta aquí es ¿Porque la bese?¿Sera que me gusta esa niña malcriada? ¡¡No!! Es imposible yo amo a mi Lily a nadie más, ella es la mujer más bella y buena de todas, con una lindura natural que nadie la compara su voz..
*Estas hablando de Lily o de La princesa?*
De mi Lily, porsupuesto
*Seguro?, sabes que a mi no me puedes engañar, soy tu conciencia*
Ya se que eres mi conciencia,y no tendría porque mentirte.
*Sabes que puedes mentirte a ti mismo pero no a tu corazón verdad?*
Si lo se, pero no estoy mintiendo, ademas no tengo corazón.
*Si tienes, todos tienen uno.*
Yo no.
*Porque tu no?*
Porque mi corazón murió con ella..... con mi hermosa Lily.
*Hay Severus... Severus.. no puedes seguir así, debes seguir adelante luchar por tu vida*
No tengo porque vivir...
Deje de hablar con mi conciencia y me senté a en mi escritorio. Saque la foto de Lily que tenia y la admire.
-Jamás dejare de amarte mi hermosa Lily, ni siquiera por una estúpida princesa caprichosa.-dije con decisión.
-No deberías hablar mal de las personas a su espaldas Severus, es de mala educación sabes?.-Reconocería esa molesta voz en donde fuera.
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♥♥♥♥BESOS♥♥♥♥
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