@MoonLight se ha conectado.

MoonLight: Solecito, ¿estás contento?

MoonLight: Mira lo que has hecho.

@SunShine se ha conectado.

SunShine: ¿Qué?

SunShine: ¿De qué hablas? 

MoonLight: De lo enamorado que estoy de ti.

@SunShine se ha desconectado.

Veo a Dión sonrojarse y murmurar algo para sí mismo desde su sitio antes de volver a su teléfono.

SunShine: Pensaba que solo te gustaba.

SunShine: Un poquito.

MoonLight: Ojalá fuera ese poquito.

MoonLight: Me tienes fatal, Solecito.

SunShine: ¿Y por qué tanta sinceridad de repente?

Dión se apoya en la ventana mientras observa desinteresadamente la pantalla. Se da cuenta de mi mirada, porque me la devuelve y me guiña un ojo.

—Eres un hijo de puta —bufo, haciéndolo reír.

—¿Y por qué esta vez? —sonríe.

—Por ser tú. —Le saco la lengua.

MoonLight: Porque vida solo hay una.

SunShine: Ni que te fueras a morir pronto.

SunShine: ...

SunShine: Porque no te vas a morir pronto, ¿no?

MoonLight: ¿Por qué lo haría?

SunShine: ._.

SunShine: Viendo cómo un día de la nada me mandas un mensaje diciendo que estás en el hospital porque te has caído por las escaleras y otro día de repente estás tan amoroso, no sé, dime tú.

MoonLight: AKUDYASJKHGDJAHG.

MoonLight: Tqm.

SunShine: Yo también, pero tómatelo con calma, Moon.

SunShine: No tenemos por qué ir tan rápido.

MoonLight: Solecito :c.

SunShine: Tú también me gustas mucho, pero ni siquiera nos conocemos en la vida real aún.

Eso piensas tú.

MoonLight: En mi defensa, es la primera vez que me gusta alguien, pero vale :D

SunShine: Eres lindo, Moon.

SunShine: Pero el amor no tiene por qué ir rápido.

SunShine: Y no te lo tomes como rechazo, porque no es rechazo.

SunShine: Porque nos conocemos y tú solo te estresas por tonterías.

MoonLight: Ey, quién fue a hablar...

MoonLight: Pero gracias por especificar KJHSDJAKSGDA.

MoonLight: Entonces, como te iba diciendo, te quiero mucho.

SunShine: Yo también te quiero mucho.

SunShine: Ahora presta atención a clase.

MoonLight: ¿????????????????????

MoonLight: ¿Cómo sabes que estoy en clase?

SunShine: Tenemos la misma edad, son las nueve de la mañana de un día lectivo y vivimos en el mismo país. Así que, a menos que te hayan vuelto a hospitalizar o que te estés saltando clases, deberías estar en el aula ahora mismo.

MoonLight: ._.

SunShine: Y porque me dijiste hace tiempo que tenemos horarios parecidos.

MoonLight: Pero, ¿qué? ¿Cómo te vas a acordar de eso?

SunShine: Tengo buena memoria.

MoonLight: Psicópata.

SunShine: Ay, me has descubierto. Ahora tendré que secuestrarte y asesinarte para que no reveles mi identidad.

MoonLight: ¿Solecito haciendo una broma????

MoonLight: No serás tú el drogado, ¿no????

SunShine: Tengo buen humor, que lo sepas.

MoonLight: Una pena que aún no haya tenido la oportunidad de descubrirlo kashdakshd.

SunShine: Ahora en serio, presta atención a clase.

MoonLight: Bueno, pero me debes una conversación de una hora.

SunShine: Sí, sí.

MoonLight: Y que sepas, que no te has dado cuenta de que no he saludado :p

MoonLight: ¡He vencido al sistema >:D!

SunShine: ...

Escucho la suave carcajada del pelinegro.

SunShine: Niñato.

MoonLight: Te enamoro.

SunShine: Lamentablemente.

MoonLight: AHORA SÍ.

MoonLight: NOS VEMOS, CARIÑO.

SunShine: Adiós, Moon.

MoonLight: Estudia duro para mantenerme en el futuro, ¿vale?

SunShine: ¿Cómo?

MoonLight: Come.

SunShine: Moon...

MoonLight: Sigues cayendo, Solecito, sigues cayendo.

SunShine: Que te den.

MoonLight: Si eres tú...

Dión rueda los ojos.

SunShine: Hasta luego.

MoonLight: Adiós, mi amor.

@SunShine se ha desconectado.

@MoonLight se ha desconectado.

El timbre suena, por lo que apago mi teléfono y me tumbo sobre mi pupitre, en espera del profesor. El asiento de mi lado deja de estar vacío cuando Dión lo ocupa. Antes de que le pregunte, señala su sitio anterior, ahora ocupado por Hywel.

—Ugh, traidores —resoplo.

—Están enamorados. —Dión se encoge de hombros con una sonrisa tonta en su cara.

—Parece que tú también —comento.

—Un poco.

—Uy, ¿de mí?

—Ni en tus mejores sueños, Sinclair —ríe.

—Auch. —Sorbo mi nariz fingidamente—. Pero el mini Dión de siete años no decía lo mismo.

—Que te calles. —Se sonroja—. Te odio.

—Te encanto —Esbozo una sonrisita.

En ese momento, un profesor que no es el nuestro irrumpe en la clase para avisarnos de que el profesor habitual ha faltado. La noticia provoca un murmullo de entusiasmo, hasta que nos informa que debemos permanecer en el aula hasta nuevo aviso, ya que necesitan averiguar si pueden conseguir un suplente o si nos darán la hora libre.

Dejo de prestar atención a las explicaciones del profesor, aprovechando que Dión está concentrado para tomar su brazo y empezar a dibujar tonterías con un bolígrafo. Primero hago una rosa deforme, luego un corazón y una luna.

Vale, no estaba siendo nada discreto. Me sorprendía que Dión aún no supiera que era yo. Aunque no tenía la intención activa de revelar mi identidad, tampoco es que no lo intentara.

—Espero que se pueda lavar, Sinclair —bufa, dejando que siga.

Le saco la lengua.

—No sé, nunca me he pintado con este boli.

Él alza una ceja antes de arrebatármelo y agarrarme del rostro.

—Pues podemos probar. —Se encoge de hombros antes de pintarrajear mi cara.

—¡Dión! —chillo, horrorizado—. Como sea un pene, te voy a lanzar por la ventana.

La mitad de la clase nos mira, interesados por el chisme, pero los ignoramos.

—Yo no dibujo esas vulgaridades.

Trato de deshacerme de su agarre, pero el muy cabrón tiene mucha fuerza en los brazos. Se notaba que era nadador.

Acabo aceptando mi destino.

—Eso espero, porque si no, te dibujaré un pene en la frente como venganza.

Él carcajea y por fin me suelta, entregándome su móvil con la cámara frontal activada para que me vea.

Es un corazón y un solecito sonriente en mi mejilla.

Ayuda.

—Te queda bien.

—Ti quidi biin —repito con burla—. Ahora tengo que lavarme.

—Ya me informarás de si funciona o no —se mofa.

Le saco el dedo del medio en respuesta y me dirijo al baño. Me miro en el espejo y noto que estoy sonrojado. Agito la cabeza para despejar esos pensamientos y empiezo a frotar mi mejilla con jabón y agua. Afortunadamente, la mancha se quita con facilidad. Vuelvo a la clase con una sonrisa, pensando en cómo contestar a Dión.

Abro la puerta y encuentro a todos inmersos en sus grupos, mientras Hywel y Dess están muy acaramelados en su esquina. Dión frunce el ceño mientras observa su teléfono. Me acerco a él sin que se dé cuenta y me siento a su lado.

—Buh.

Él gira su rostro, nada sorprendido, y tiene una expresión de confusión y es mi móvil el que está en su mano.

—¿MoonLight?