Prólogo.
"Y es que el amor no necesita ser entendido, simplemente necesita ser demostrado"
—Paulo Coelho.
¿Has sentido las famosas "mariposas en el estómago"? Esas que supuestamente se sienten cuando estas enamorado, las mismas que terminan con un dolor sofocante.
A como era de costumbre había estado despierto hasta tarde, no era para más, me la había pasado mirando una y otra vez el vídeo de All Might, él era genial, era sin duda el mejor héroe que existía.
Cuando decidí dormir, tras haber llorado unas cuántas veces, el reloj marcaba las 3:42 am, estaba seguro de que mañana tendría unas ojeras enormes, era posible que pareciera Mapache. Me acosté en mi cama y miré por la ventana, de pronto comenzaron a invadir mi mente un millos de ideas y preguntas, el ser humano no había sido creado con igualdad, desde todos los ángulos, la vida solía ser injusta, los ricos tiran comida sin razón, los pobres la comen y en situaciones los golpean para que no urgen en su basura, aquel que se enamora no es correspondido.
Así pasaron los minutos y sin darme cuenta ya me había quedado dormido, dentro de mis sueños comencé a pensar en muchas cosas, yo jamás había besado a una chica, jamás había tenido amigos que no me dieran de golpes, mi existencia era complicada.
—Izuku, izuku— la voz de mi madre logró despertarme, era un día lunes si mi memoria no falla, abrí mis ojos de manera lenta, sentía como estaban hinchados, sentía la garganta seca y tenía un sueño de muerte.
Miré a mi izquierda y pude ver como mi madre me miraba desde la puerta de mi habitación, ella es una mujer muy bella, entregó sus mejores años a cuidarme, le sonreí de manera amplia, supe de inmediato que se me había hecho tarde para ir a la secundaria. Me levanté de la cama y me vestí, de algún modo, ver a mi madre parada ahí me había puesto de buen humor, supongo que eso es lo que hacen las mamás.
Ese día llegué tarde al colegio, pero no tuve sanción alguna, el profesor aún no estaba en el aula, tomé asiento y me limité a mirarlo, era él, Kacchan, antes solíamos ser amigos aunque, por algún motivo él había comenzado a negarme.
Era correcto si alguien decía que yo me esforzaba mucho por complacerte, quería recuperarlo, sabía que en algún sitio de ese chico rudo estaba mi amigo, sólo debía buscarlo con desesperación. Eran finales de año, debíamos hacer trámites para las preparatorias y claro que yo quería ir a la UA, pero no tenía ningún poder, era sólo un cero a la izquierda, eso me causaba dolor en el alma, sin embargo jamás dejé de intentarlo.
Una vez, sin esperarlo, sin pensarlo, me encontré en un momento sofocante, mi primer encuentro con un villano, jamás pensé que ese encuentro marcaría mi inicio como héroe. A como ya han de saber, All Might me heredó su singularidad, fue entonces que entre a la UA, para mi buena y mala suerte, en mi misma clase estaba Kacchan, Dios, se veía tan bien ese día, desde ese día nada volvió a ser como era antes.
Sentimientos incontrolables rondaban por mi mente, se hicieron presentes esas mariposas tan horribles y hermosas a la vez.
Olvidé mencionar, esta es una historia de amor, mí historia de amor, aquella que no se debería contar, esa que no debe ser pensada con detenimiento.
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