Muertos en vida


A la mañana siguiente, Shinji se fue junto con Asuka a la escuela, al llegar suspiro aliviado, pues Kaworu todavía no llegaba, suponía que tenía que volver a sentarse a su lado. Asuka se dio cuenta de la reacción de su amigo y le preguntó que le pasaba. En ese momento Shinji se acordó del lápiz enterrado en su pierna, y pensó "si él puede amenazarme, qué no haría con Asuka" Lo mejor era callar por la seguridad de su amiga y dijo que nada. Poco después llegaron Touji, Kensuke y Hikari, saludaron a Asuka y a Shinji, para después sentarse en sus respectivos lugares.

- Shinji, dijo. Touji ¿pudiste hablar con Flow?

- No, dijo Shinji. Desanimado.

- Pero si ayer ella estaba muy interesada en ti... háblale, mira. Shinji volteo a ver como Flow estaba en uno de los asientos sacando su cuaderno, era la primera vez que no la veía con su grupito de amigas. No tenía ganas de hablarle y la verdad no quería, ya que por hablarle a una chica ella podría sufrir al igual que él.  Temía que Kaworu le hiciera algo malo a algunos de sus compañeros, aunque qué va. Shinji no tenía por qué temerle a Kaworu, ningún estudiante por más loco que estuviera podría tener más poder que los maestros, a lo mejor si conquistaba a Flow, Kaworu a lo mejor se alejaba. Además Shinji siempre había querido salir con la hermosa prima de Asuka, su ex amigo, no le iba a robar una oportunidad como esa. Sin más Shinji se le acercó con paso decidido.

- Hola, Flow.

- Ikagi, dijo la chica rubia sonriendo. Ayeg me dejaste muy concerné ¿ya estas megog?

- Si, tuve una recaída pero ya todo está en orden. Oye yo quería preguntarte si nuestra cita..sigue.

- Shinji-kun. Dijo una voz terriblemente familiar. Kaworu Nagisa se acercaba a Shinji con una sonrisa y colocó su brazo en el hombro de Shinji, ante la mirada atónita de Flow. Shinji consideraba esta posición muy incómoda. Flow por otra parte miraba desconcertada a Shinji, y cómo no si ayer le había dicho que Kaworu no tenía nada de especial.

- No sabía que ustedes deux fuegan tan amigos.. vaya sogpesa. Kaworu volteo a ver a la chica rubia y con una sonrisa sarcástica comenzó a hablarle en francés en un tono dulce y gentil. Shinji no entendía nada de lo que Kaworu le estaba diciendo a Flow pero por las reacciones de la muchacha rubia, no debía de ser nada bueno, Kaworu mencionaba el nombre de "Asuka". Además de que Flow ponía una cara asustada y miraba de reojo a Shinji totalmente atemorizada.

- comprendre qu'il est à moi. Dijo Kaworu finalmente, a lo que Flow solamente asintió, pues Kaworu le dirigió una mirada amenazadora. –ven, vamos, Shinji Kun. Dijo sosteniendo a Shinji de la mano. Cuando llegaron a su asiento, Shinji se soltó de Kaworu y le dijo.

- ¿Qué le dijiste a Flow ?

- Nada, querido, solamente que se aleje de ti. O se las verá conmigo.

- Pues has fallado, Flow no te tiene miedo, y ella si le dirá al director.

- Ja, ja. Dijo Kaworu riéndose. Si crees que una pobre rubia francesita, puede conmigo estás equivocado, además yo ya arregle todo con el director. Cualquiera que se me oponga, será expulsado. Shinji estaba asustado, realmente Kaworu había manipulado a toda la escuela para que hicieran su voluntad, ya nadie estaba a salvo. ¿cómo lo había logrado? Quién sabe.

Todo fue de mal en peor, Shinji fue toqueteado todas las clases por Kaworu quien se dedicaba a manosearlo y meter su mano dentro de sus boxers, luego obligaba a Shinji a hacerle lo mismo. Shinji a través de amenazas tuvo que hacerlo. Lo cual lo asqueaba en sobre manera, poco después en la clase de literatura, Shinji trataba de pensar en otra cosa tratando de ignorar los toqueteos de Kaworu, haciendo un esfuerzo enorme para ignorarlo aunque no pudo. El que el profesor le hubiera llamado, representó un alivio. El profesor le pidió a Shinji que leyera la historia de Jeida no Monogatari la historia de un joven estudiante japonés que se había enamorado locamente de una bella muchacha árabe, el capítulo que le había tocado era el de la confesión. Shinji se paró de su asiento, y en un momento fugaz, Kaworu le dio una nalgada y le dirigió una mirada coquetea que hicieron que Shinji se pusiera más nervioso que nunca y tropezara ante la mirada de burla de todos a excepción de Asuka, Rei y Flow, Asuka miraba a todos con el ceño fruncido para que lo dejaran en paz, Rei no se reía y lo miraba con su habitual frialdad y Flow le dirigió una mirada asustada. Shinji se paró delante de todo el público y el profesor le pidió que dijera el nombre de la novela que le había tocado.

- Jeida no Monogatari, penúltimo capítulo 27: No puedo amarte

- Bien comienza.

Era tarde, me dirigía a la casa de Jada, cuando la vi bailar una extraña danza en la que movía las caderas, vestida con un top con lentejuelas y una falda larga morada hecha de una tela brillante. Me le quede observando, era la mujer más hermosa que había visto, las mujeres en Japón no eran nada en comparación con ella. Bella glacial, amable y gentil, todo en ella era perfecto era la misma Amaterasu. Me le quede observando embobado por su belleza, y la vi desvistiéndose, poniéndose su habitual túnica larga negra y su hiyab. Cuando finalmente terminó de vestirse, toque a la puerta de su casa y ella me recibió amablemente como siempre lo hacía. Le había sorprendido mi vista pues no esperaba encontrarme tan tarde.

- Nagano, '¿hay algo que te preocupa?

Estaba decidido a decirle lo que sentía, ya no lo podía soportar más, la amaba más que a mi propia vida. Quería que ella supiera de mí, que supiera cuanto me importaba, que daría mi vida por ella. Mi mundo solamente era ella, ella. Sin más tomando aire, la tomé de las manos, ella volteo a mirarme sorprendida y preguntó que me pasaba, ignorando aquel comentario le dije.

- Jada, estoy enamorado de ti. Aquello pareció no sorprenderle, y me miró con suma ternura, tanta que empezó a llora, alejo sus manos y comenzó a dar vueltas, tomando su mano en su mentón. No sabía qué le preocupaba, ¿acaso me estaba rechazando? ¿acaso...? Mis preguntas fueron interrumpidas con un.

- Yo también estoy enamorada de ti. Pero no puedo corresponderte. Esas palabras fueron una estocada en mi corazón, no podíamos estar juntos.

- Soy una mujer apunto de casarme. Dijo rompiendo a llorar. Además tu familia nunca me va aceptar, los árabes no somos bien vistos por los japoneses nos creen terroristas.

- Jada, créeme cuando te digo de que escuches los deseos de tu corazón, ya no hagas caso a la cultura.

- No puedo.. Me han enseñado a suprimir el corazón. Debo obedecer a mis padres, estoy cerca de los 20, si no me casó seré una carga para mis padres. Y si me fugó contigo seré una deshonra para ellos. Qué más quisiera yo el abrazarte, tocarte y amarte. Pero no puedo, nacimos en un tiempo equivocado.

Sin más la abrace y lloramos por nuestra pena. Sentí sus lágrimas, su perfume tocándome la nariz, la abrase, pero tenía razón no podíamos estar juntos. Es cierto somos de mundos diferentes, ella aquí en medio oriente y yo haya en oriente. Pero ¿y si no era cierto? ¿qué tal si se podía estar con ella? No lo sé, solo sabía una cosa, quería pasar la noche con ella aunque solo fuera por un poco tiempo. Sin más me separé de ella y le dije.

- ¿me enseñarías aquella danza, antes de que mañana nos separemos para siempre? Jada se me quedo mirando un momento y me pidió que me sentará, al poco rato regresó, vestida como la había visto, puso la radio y comenzó a danzar. El verla me daba un cierto éxtasis, me estaba dedicando un último momento íntimo antes de perderla para siempre. Lo iba disfrutar, cada uno de los movimientos que ella hacía, disfrutarlo, como si mañana mismo me dijeran que debía ir a la horca.

Shinji termino de leer el párrafo, tan consternado estaba por la violación de Kaworu que no se había percato de lo hermoso que era el capítulo, y no fue el único media clase suspiro, incluso a Rei le pareció un capítulo hermoso, pues dio un suspiro. Demasiado triste, cuando terminó el maestro le pregunto a Shinji su opinión.

- Un bello capítulo. Aunque.. si en verdad se aman, deberían hacer todo lo que esté a su alcance para terminar juntos. Dijo Shinji. No debería importarles la opinión de los demás.

- A veces las culturas pueden separar a las personas, Shinji. Dijo el profesor muy serio.

- ¿y cómo termina, profesor? Pregunto Hikari.. Todos hicieron la misma expresión. La clase estaba con las pupilas dilatadas, incluso los hombres estaban atentos.

- ¿quieren que les arruine el final? Bueno, Jada se termina casando y él se termina casando con una japonesa. Pero ambos son infelices, pues aunque estén con las personas que su tierra les exige que estén, su corazón les recrimina.

- ¿mueren al final? Pregunto Kensuke

- No. Mueren en vida.

- ¿muertos en vida? Pregunto Asuka.

- Aquellas personas que son solamente muñecos de trapo que ya no sienten emociones, que se vuelven egoístas e ignoran a su corazón y el de los demás. La muerte en vida es el peor castigo para una pareja de enamorados, es allí donde las personas al ser muertos en vida, recorren a las cosas más bajas como el sadismo, la humillación y la satisfacción lujuriosa. Shinji ante aquellas palabras, vio a Kaworu que se encontraba viendo la ventana, ignorando toda la historia trágica de Jada y Nagano. No sabía por qué pero en ese momento, Shinji sintió una especie de lástima hacia Kaworu, si había alguien que era un muerto en vida era él. Shinji comenzó a preguntarse qué le ocurrió, qué lo llevo a ser una persona muerta en vida.

No sabía, cuando termino la clase, Shinji tuvo que salir con un grupito de amigos para despistar a Kaworu, tenía que hablar con el director esto no podía seguir así, Kaworu necesitaba un psicólogo, él no podía ayudarlo. Era de idiotas el tener que soportar todas las bajezas de Kaworu para eso estaba los psicólogos para manejar los problemas mentales, además Shinji estaba seguro de una cosa. "Jamás se enamoraría de alguien que tuviera que recurrir a la manipulación y al miedo para someter a las personas". No importaba lo que Kaworu le hiciera a él o a sus amigos, él nunca podría sentir nada por él, quizás un poco de lástima pero de allí en fuera nada. Sin más Shinji fue a la oficina del director, entró con mucho pesar pues sabía que lo que dijera ahora, nada cambiaría, y que era un buen motivo para preocupar a su hermana. Shinji tocó la puerta del director para sorpresa del muchacho esta estaba abierta. Shinji entró, y llamó varias veces pero no encontró respuesta alguna, en ese momento Shinji oyó unos gemidos que provenían de uno de los cuartos pequeños. Shinji curioso, tocó la puerta, pero nadie respondió, sin más acercó su ojo a la puerta y encontró una escena que le provocó ganas de vomitar. Se trataba de su padre manteniendo relaciones sexuales con un personaje de cabello gris brillante, cuando su padre termino de sodomizar al personaje de cabellos grises, se levantó de la cama agarró su camisa y sus pantalones, Shinji como pudo se escondió debajo del escritorio. Vio a su padre salir del cuarto, seguido por un Kaworu Nagisa que se encontraba semi desnudo y agitado.

- Bien, Nagisa-Kun. Con esto hemos arreglado todo. Tendrás a mi hijo a cambio de más noches como está. Y no te preocupes nadie se enterará.

- Si estoy de acuerdo, pero acuérdese de lo que me ha prometido. Si no yo me encargaré de que estas noches especiales salgan a la luz del sol.

- No, no pasará tendrás a mi hijo. Mañana mismo lo llamaré, podrán ocupar el salón de música.

Dicho esto el joven y su padre salieron de la habitación, Shinji no podía creerlo, Kaworu estaba manipulando a todos a través del sexo. Shinji pensó en ese momento en Flow qué es lo que le habrá prometido qué le dijo. Shinji no lo sabía pero tenía que hablar con ella, tenía que averiguar qué le había dicho y más aún tenía que hablar con la melliza de Kaworu, Rei Nagisa para detener esta locura. Shinji recordó en ese momento como había sido violado por Kaworu y sintió pánico, pero ahora que Kaworu estaba manipulando a quien quisiera, toda la escuela corría peligro. Con mucho cuidado, Shinji salió de la habitación y fue a la habitación de Flow, Shinji tocó la puerta y vio salir a la joven francesa que se encontraba en un camisón de color rosado y el pelo largo recogido en una trenza larga. Flow miró a Shinji un poco preocupada y comenzó a mirar por todas partes si había alguien con Shinji.

- ¿Estas, sogo? Pregunto la chica.

- Sí, Flow, necesito que me digas qué fue lo que te dijo Kaworu Nagisa. Flow inmediatamente lo invitó a pasar y lo sentó en una pequeña mesita.

- ¿él? Ese garçon malin. Flow se estremeció al recordarlo.

- Si ¿acaso te ofreció sexo o algo así?

- No... pego me digo que si me volvia acecagme a ti, Je voudrais aller très mal et je crois juntog con mi prime Asuga, ese garçon, tiene una migada muy mala. Me refiego a que esa migada ese del diable. Lo mejog es no l'interroger rien

- ¿amenazó también a Asuka ?

- Wi

Shinji se sentía cada vez más asustado. Eso significaba que todo estaba perdido, que tenía que ceder ante los deseos sexuales de Kaworu sobre él, Shinji comenzó a deprimirse todos estaban siendo amenazados por su culpa. No había otra opción, Shinji tendría que acceder a los deseos de Kaworu pues era cuestión de tiempo para que Kaworu sometiera a toda la escuela a su voluntad. Sin más Shinji se despidió de Flow ya se iba a dirigir a su cuarto, pues ya era tarde y Misato debía estar preocupada. Pero en ese momento Shinji sintió como una mano nívea lo jalaba de nuevo a uno de los cuartos de limpieza. Shinji ya no se asustó, Kaworu Nagisa quien se encontraba en ese momento todavía semi desnudo, miró a Shinji con lujuria y le subió la camisa hasta la barbilla.

- Te extrañe mucho, mi vida. Dijo, besándole el vientre. Shinji no dijo nada, en ese momento Kaworu se detuvo.

- ¿Qué, por qué no te quejas? Di algo. Dijo dirigiéndole una mirada suplicante con una sonrisa más ancha. El cual Shinji sospechaba de que Kaworu estaba realmente furioso de que no se quejara ni comenzará a llorar.

- Ya sé lo que estás haciendo. Te estás acostando con mi padre para llegar mí. Kaworu pareció inquietarse y lo miró confundido. Aunque después de un rato, soltó una tremenda carcajada que hizo que a Shinji se le erizara la piel.

- Si lo he hecho. En el convento siempre fui el favorito de mis profesores por lo mismo, me acostaba con ellos para conseguir a los alumnos. Así es como fui escalando, muchos se quejaron de mí, pero yo tenía las de ganar y a los alumnos simplemente los ignoraron y ellos siguieron complaciéndome. Y los profesores que no se rendían a mí yo...

- ¿los mataste? Inquirió Shinji asustado.

- Qué va. Claro que no, eso habría sido una solución muy fácil pero muy arriesgada. Simplemente los echaban, al ser el hijo del director tuve también mis privilegios. Pero ya basta de charla, vamos grita, gime para mí.

- Lo haré. Dijo Shinji sin oponer resistencia. Kaworu se le quedo mirando con un poco más de asombro por lo que acababa de escuchar

- ¿Qué?

- Si lo haré. Pero a cambio de que dejes a mis amigos en paz. Me entregaré a ti, seré tuyo, gimiere para ti y llorare para ti pero a cambio de que los dejes en paz.

- Ja, ¿y si no?

- Le diré a tu madre lo que has venido haciendo, a ver si ella está de acuerdo con tu actitud. A diferencia de Rei yo no te tengo miedo, y si vas a matarme o encerrarme por decirlo, adelante, pero yo juro que escaparé y se lo diré, o dejaré una carta en dónde explique toda la verdad la cual ocultare muy bien. Te juro por mi madre de que lo haré. Kaworu por primera vez parecía nervioso, Shinji no se sometería a su voluntad y aquella mirada que le había dirigido era totalmente seria y decidida. Sin más Kaworu aceptó el trato de Shinji.

- Está bien, dejaré a tus amiguitos en paz. Te doy mi palabra.

- jurarlo por lo más sagrado que tengas. Si es que tienes algo.

- Por mi madre. Dijo en un susurro.

Dicho esto, Kaworu comenzó a lamerle los pezones a Shinji, Shinji daba uno que otro suspiro agitado, volteando hacia otro lado. Tuvo que contener las ganas de vomitar y tratar de no llorar pues Shinji se negaba a darle el gusto de llorar y quería hacerse el valiente pero todo fue en vano ya que Shinji dejaba caer una que otra lágrima, Kaworu por otra parte dejó de lamerle los pezones y comenzó a deslizarse hacia su torax y comenzó a masajearle el pene. Cuando el pene de Shinji estuvo erecto, Kaworu aprovechó para darle pequeños besos y mordidas al poco rato se lo metió todo en la boca, chupándolo y succionándolo lo que provocó que Shinji tuviera un orgasmo, el cual Kaworu aprovecho para lamerle todo el semen derramado. De nuevo las horas a Shinji le parecían eternas, "solo tengo que acostumbrarme" decía, "solo debo acostumbrarme" "si no cuestiono nada, mis amigos estarán a salvo"Pero por más que se lo repetía no terminaba de acostumbrarse. Kaworu quitándose el cinturón ató las manos de Shinji y lo obligó a adoptar una posición nada cómoda en donde tenía la cara metida entre las rodillas y enseñaba el trasero. Kaworu sonrió al verle el trasero a su víctima le dio pequeños besos, quitándose el pantalón el joven Nagisa se introdujó adentro del chico Ikari embistiéndolo con fuerza a lo que Shinji respondía con lágrimas y súplicos, rogándole al joven peli gris que se detuviera. Kaworu por otra parte, reía y sonreía al ver como Shinji sufría.

- Me gusta cuando las cosas salen como yo quiero.

)O


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