CAP 5:La emoción por pelear

Constantino marchaba junto a sus hombres durante el mediodía, estando próximos a la batalla que se llevaría a cabo contra Majencio y sus tropas, pero antes de llegar a la ubicación, Constantino dio un alto a su camino y se dispuso a dar un descanso, sintió algo en su pecho lo cual le hizo detenerse, poniendo de excusa de hacer un descanso, sus hombres hicieron caso y empezaron a organizar un pequeño campamento.

Él sin embargo se dispuso a hacer otra cosa, durante todo el camino, no había dejado de ver el cielo, algo poco raro en él y que sus hombres notaron, pero que no se entro metieron en saber la razón de eso, Constantino había estado viendo nubes en el cielo que tenían formas y letras extrañas que al parecer él solo podía ver y notar, adentrándose un poco al bosque para poder resolver esta cosa que sentía, camino hasta llegar a una zona no tan alejada pero si oculta.

Habiendo un agujero en las ramas de los árboles que dejaba entrar los rayos del sol, Constantino se sentó en el pasto y se tomó un pequeño respiro, sentía como una cosa en su pecho la cual le incómodaba desde que empezó la travesía en matar a Majencio, eso le pareció raro a él pero no se lo comunico a nadie para no mostrar debilidad a sus hombres, procedió entonces a quitarse su armadura hasta quedar completamente descubierto del pecho.

Llevo su mano al pecho y dio leves toques para sentir de que parte venía esa incomodidad que tanto sentía, ningún herida o bulto, eso le pareció extraño a Constantino que ya creía que los dioses le habían enviado alguna maldición por algo malo que había hecho, eso le atemorizo un poco, pero apretó sus manos en señal de no rendirse por esto, sintiendo como los rayos del sol chocaban y quemaban su pecho descubierto, era algo fuerte pero a la vez cálido de sentir.

Había estado con los ojos cerrados durante todo ese rato, sintiendo como la incomodidad aumento a gran medida hasta en un instante desaparecer, eso dejo confundido a Constantino que abrió los ojos y así poder ver cómo es que el árbol mostraba un gran signo reflejado por el sol, su primera reacción fue de sorpresa ante este repentino suceso, pero se calmó para notar como era que de su pecho los rayos chocaban y reflejaban al árbol ese gran signo junto a unas letras.

Constantino:"Con este signo vencerás" -la duda lo invadió, no entiendo el significado del signo junto a su frase.

Alzó la mirada para ver al agujero de las ramas de los árboles de donde entraba el sol, una creencia vino a su mente y de manera inconsciente de levantó del suelo, alzando sus brazos de extremo a extremo para poder ver mejor su signo que se reflejaba en el árbol, creyendo que se trataba de un mensaje de sus dioses que le daban una señal de victoria para su próxima batalla, alzó su vista para ver al cielo, teniendo los rayos del sol a sus ojos y que sintió una fuerza extraña que le hizo sentir perdido.

Parpadeo varias veces ante la intensidad de cómo si se estuviera perdiendo, dejando de ver todo lo del bosque para ahora ver nada, estando en un lugar completamente blanco y que era tan intenso en iluminación que le costaba ver a sus lados, Constantino no podía hacer nada al sentir como si su cuerpo no estuviera con él, pero pudo escuchar una voz que era tan sonante y detonante pero que transmitía unos aires de paz.

"Constantino hijo de Helena y Constancio, te doy esta revelación, una ayuda la cual te doy y que tú después me ayudarás en un futuro próximo, emplea este signo en tus escudos y ponlo contra tus adversarios, aunque tengas dudas de quién soy y cuál es mi intención, no temas, no tengas miedo, que yo solo soy un amigo él cual quiere darte un humanos si tú das tú mano a mi"

Aunque tan poco le dijo esa voz, pudo entender mucho de lo que dijo, volvió a parpadear para recuperar la conciencia y ver cómo sus algunos de sus hombres lo estaban llevando de nuevo con sus tropas, fue llevado de nuevo con sus camaradas de batalla los cuales estuvieron preocupados por el estado en que lo encontraron dejandolo con su caballo para que pudiera descansar un rato, hasta que vinieron unos hombres que quisieron saber qué pasó ahí.

Soldado(1):Mi señor, ¿como se encuentra ahora mi señor?.

- Confundido, pero bien, eso es lo que importa -se soba la cabeza, sintiendo un dolor aunque no siendo tan grande- ¿que paso mientras estuve inconsciente?.

- No mucho mi general, los hombres estuvieron descansando y esperando que volviera para dar la orden de seguir, pero como no volvió, hicimos un grupo de búsqueda para poder encontrarlo, y lo trajimos de vuelta aquí.

- Pero lo que es raro es que tenía su cuerpo descubierto y parpadeando muchas veces, ¿acaso lo emboscaron mi señor?.

Constantino(I):No, nada de eso, solo vi algo en el cielo y después sentí un sueño que fue lo que me agarró desprevenido, vi un signo extraño y tuve un sueño donde alguien me hablaba -estando perdido con su mirada, la alzó para ver a sus hombres que lo veían confusos- saben que, olviden lo que dije.

- ¿Que quiere que hagamos mi señor?.

Constantino(I):-piensa un poco, recordando lo que le dijo la voz- tráeme todos los escudos de las tropas, voy a hacer algo que tal vez nos traiga la victoria, cuando lo hagan, no dejen que nadie entre o vea, eso también va para ustedes.

Sus hombres dieron un asentimiento para salir de aquel mini campamento que hicieron y que habían llevado a Constantino para que se recuperara, no tomo toda la noche para recolectar todos los escudos de las tropas y llevárselos a Constantino que se mantuvo en silencio, viendo cada escudo y pensando en lo que debía de hacer ahora, vio las palmas de sus manos y pensó un poco lo que suponía debía de hacer, agarro su espada y con esta se cortó las palmas para que su sangre saliera.

Utilizándola como pintura para dibujar en todos los escudos el signo el cual vio reflejado en el árbol, estuvo toda la noche haciendo esto, hasta que se hizo de día y mando a devolverle los escudos a sus hombres, diciéndoles que ese signo en sus escudos los llevaría a la victoria contra Majencio y sus tropas, con eso dieron a la carga para ir a la ubicación donde se encontraba al nombrado, siendo en el puente de Milvio.

El ejército de Constantino junto al mismo habían llegado donde se haría la batalla, Constantino pudo notar como Majencio organizó sus fuerzas, dos veces mayores que las de él, en largas filas de cara al campo de batalla, con sus espaldas muy pegadas al río, lo que terminó siendo un obstáculo para la movilidad de las tropas, pero ahora esto sería diferente, llegó al campo de batalla llevando símbolos extraños sobre sus estandartes y escudos.

Se dispuso a lo largo de toda la línea enemiga, después de ver una gran cantidad de lechuzas en vuelo, Constantino ordenó atacar a su caballería, que logró desbaratar a la majenciana y haciéndolo retroceder con el primer golpe de escudos que hicieron contra las tropas de Majencio, el agua del río bajo el puente se sacudió por esto, ocasionando la alteración de los caballos, Constantino ordenó hacer lo mismo, desordenado la formación que Majencio hizo.

Sin importa la gran cantidad de tropas que tuvo Majencio, Constantino pudo hacerlos retroceder y desordenar sus filas lo suficiente como para que sus hombres se encargarán a mano dura de que el número de las tropas de Majencio bajarán a gran medida que pasaba la batalla, fue una feroz y gran batalla donde la cual la humillación se podía sentir, siendo Majencio quien sintió de gran manera esto y que intentó escapar, pero terminó cayendo al río y terminado muriendo ahogado.

Las nubes se despejaron y dejaron ver la luz del sol, haciendo una panorama que a pesar de las muertes, lo hacían ver tan bello y lo cual Constantino pudo notar, alzando su mirada hacia el sol de donde en instantes pudo ver el mismo signo, alzando su escudo en señal de agradecimiento hacia aquella voz que le ayudo aquí, quien diría que se encontraría con el mismo signo y que se trataba del ahora conocido cristianismo, ayudo como aquella voz dijo que lo haría.

(.....)

Demoró unos ratos buscando al Romano ante todo el polvo y los escombros que habían, aunque pudo percatarse de un rastro de sangre que siguió hasta llevarlo al Foro de Julio César, gran parte de las estructuras estaban con grietas o ya hasta quebradas por la técnica que uso hace rato, Helios busco con la mirada un rastro del humano, la sangre ya no estaba o eso pensaba, se acercó hacia la arena y con su garrote la movió para ver algunas gotas de sangre.

Supuso que Constantino las oculto con la arena, gracias a esto, Helios pudo confirmar que él Romano se encontraba rondando por aquí cerca, antes que diera un paso más, una piedra fue tirada desde adentro del templo, Helios la atrapó con su mano y la vio por un par de segundos, pero abrió los ojos en pasmo al notar como la roca le había hecho raspones en su mano, soltó la roca estando confundido con eso, y fue corriendo hacia dentro del templo, preparó su garrote listo para atacar contra su contrincante.

Quien se encontraba ahí parado y moviendo su mano que tenía una piedra agarrada, Constantino subió la mirada Ara ver al dios él cual solo lo veía esperando a que se preparará, él humano se volteó por completo y movió sus espadas en señal de iniciar, Helios podía notar algo diferente en él humano, como un brillo en sus ojos, un brillo de sentimiento, eso le hizo sonreír un poco y fue corriendo contra él humano, alzando su garrote listo para darle, pero Constantino lanzó su piedra hacia la cara del dios.

Su casco lo pudo proteger, pero el impacto destruyó la piedra y eso hizo que los pequeños trozos entraran, provocándole que no pudiera ver bien y que fue aprovechado por Constantino quien fue corriendo contra él, poniéndole si escudo para embestir lo y moverlo para chocar contra la pared, con eso le dio varios rodillazos al torso y trato de poner sus espadas al cuello del dios él cual se movía, pero Helios respondió usando su escudo para alzarlo y darle un golpe en el mentón al humano.

Que se alejó y se tocó la parte dada, Helios se acercó moviendo su garrote en forma de atacar a Constantino él cual se alejó, puso su escudo para cubrirse de la ráfaga de fuego y Helios le siguió con una patada la cual hizo retroceder al humano contra la pared, tuvo que moverse para esquivar el ataque de Helios que golpeó su garrote contra la pared, Constantino se dio la vuelta y se alzó para atacarlo pero un brillo cegador le hizo retroceder para mantener distanció.

El brillo provino del rostro del dios solar que se acercó hacia Constantino dando un salto y propinarle un potente ataque, el cual él Romano pudo esquivar haciéndose aún lado, parte de la pared se desquebrajo y el polvo cayó, Helios volvió a atacar acercándose al su contrincante que solo retrocedía, se un movimiento rápido él dios soltó un ataque giratorio combinado con su ráfaga que Constantino se cubrió con su escudo y retrocedió cayendo al suelo, se tuvo que levantar rápido y así esquivar un golpe del escudo de Helios que le siguió con una patada.

La patada impacto en el escudo y él Romano lo alzó junto a la pierna del dios, pudiendo así hacerle un corte en la tibia, el corte fue tan profundo que le llegó hasta el hueso, Helios por instinto se hizo para atrás y retrocedió sacudiendo su pierna para tranquilizar el dolor, ese fue el momento donde Constantino atacó, yendo contra él dios para propinarle un espadazo que Helios esquivo y dio una patada al brazo del guerrero, Constantino se dejó llevar por el golpe y se hizo para delante el resto de su cuerpo.

Movió su espada de la mano derecha y le dio un corte en el pecho al dios, para atrapar su funda con su otra mano y dándole otro corte, Helios se intentó proteger con su escudo pero el ataque fue más rápido y pudo quebrar parte de su armadura, ambos ataques dieron en el mismo lugar y pequeñas partes de la armadura cayeron, Helios abrió los ojos ante el asombro pero su sonrisa seguía en su rostro, clavó su garrote en el suelo y alzó su mano para apuntar al Romano que se puso frente a una esquina del templo.

Una ráfaga de mini bolas de fuego fue disparada contra Constantino que se hizo aún lado, el ataque explotó aquella esquina e hizo temblar el templo que desde afuera se estaba quebrando, Helios movió su mano para seguirle atacando con su técnica, él Romano se movió en todas las partes del templo y se protegió con su escudo, dando algunos ataques con su espada que cambiaba de dirección las ráfagas de mini bolas de fuego que le disparaba él dios, esto hasta que cambio de estrategia.

Empezando a moverse por alrededor del dios para hacerlo confundir, algo que no funcionaba a Helios seguirlo con la mirada, así que Constantino se acercó más y más a Helios, protegiéndose con su escudo y usando su espada para cambiar la trayectoria de los disparos, empezando a correr directo al dios quien no se detuvo en dispararle, Constantino dio un salto poniendo su escudo para protegerse de los proyectiles de fuego, estando así más cerca de Helios, alzando su espada listo para atacarlo, pero él dios solar se movió para poner su escudo el cual dio pequeños destellos.

El impacto de ambas armas provocó un destello que hizo hacer retroceder al Romano que noto como es que el templo empezaba a temblar ante la onda que hizo ese ataque cegador, Constantino solo retrocedió hasta salir del templo y con su espada golpeo las columnas hasta destruirlos, las estructuras se vinieron a ajo y cayeron sobre el templo el cual ante las quebraduras que tenía, solo cedió ante el peso y todo fue a caer sobre Helios que trato de salir del templo, pero no pudo lograrlo.

Heimdall:¡¡Helios a sido aplastado por el templo de Julio César, al parecer él humano tuvo una estrategia en su corto tiempo que tuvo para prepararse, pudiendo engañar al dios del sol y tenderle una trampa!!.

El polvo se deshizo para así los espectadores ver cómo es que el templo estaba caído y no había rastros de Helios, ya sabiendo lo que le ocurrió, a quien si pudieron ver fue a Constantino que se encontraba parado frente al templo, alzó sus manos para ver cómo estaban por completo manchadas de su propia sangre, la humanidad grito de victoria creyendo que vencieron al dios, todos victoriaban por este hecho ocurrido, mientras que los dioses solo podían mostrar incredulidad y vergüenza por lo ocurrido.

- No puede ser ..... -sorprendido, para cambiarlo por enojo- ¡¿a quien se le ocurrió mandar aún dios desconocido?!.

- ¡Fue él quien recibió la primera herida!.

- ¡Maldito sea quien lo haya elegido como nuestro primer representante!, ¡y más siendo un titán, que horror!.

- ¡Es una completa desgracia, una vergüenza, exijo un cambio de participante!.

- ¡Esto es inaudito, quien lo haya elegido debe ser castigado!.

Las gradas de los dioses estallaron en furia e insultos, mostrando su cólera ante lo ocurrido frente a sus ojos, no podían creer que uno de los suyos había caído tan penosamente, eso igual pasaba en los balcones superiores donde los líderes de los panteones tenían expresiones serias, aunque su enojo se hacía de notar ante el temblor que hicieron por liberar su poder, todos estaban enojados, eso exceptuando a los Griegos que solo se mantenían callados y tranquilos.

Selene:Callense la puta boca, malditos idiotas inaptados, él si tuvo el valor de participar, tan bueno son hablando, pero poco para salir a pelear por su panteón -su enojo al ver como menosprecian a su hermano se hizo notar, aunque su hermana intentará calmarla.

Eos:Tranquilizate hermana, tú sabes que nuestro hermano no caerá con esto, el podrá seguir aunque sea el más grande dolor que tenga -abrazando a la nombrada, evitando que hiciera una locura contra los dioses ajenos.

Debajo de los escombros del templo, se encontraba Helios que ya hacía ahí agachado mientras escuchaba todos aquellos insultos que le decían todos los dioses, otra vez, pensó él, pudiendo sentir el mismo sentimiento que sintió en ese juicio de hace millones de años atrás, era lo mismo, Helios solo se tapaba la cara con sus manos y espero para que esto terminara, desde que volvió a los panteón, así es como fue su bienvenida, todos los dioses lo trataban indiferente y nada de respeto, sin importar la ayuda que brindó en la guerra, de verdad le causaba un gran dolor esto, casi comparado con la pérdida de Faetón y de la isla de Rodas.

Ares:¡Tú puedes, levántate y sigue luchando como él verdadero dios del sol, no te detengas para nada!.

Los insultos cesaron y Helios usando su Visión Solar, vio através de esta al dios de la guerra y líder del panteón Griego, Ares, quien estaba a los extremos del balcón y gritándole palabras de apoyo, otro dios se unió a Ares, se trataba de Apolo, que igual dio gritos de apoyo hacia su mejor amigo, Helios miro a sus hermanas que igual hicieron lo mismo, una pregunta vino a su mente, "¿porqué debe importarme esto? si tengo a personas que me quieren y aprecio apoyándome justo ahora", ese fue el detonante para que saliera otra vez.

Afuera de los escombros, Constantino tomaba aire después de haber luchado sin parar hace unos minutos, pero un sonido le hizo mirar directo a los escombros del templo los cuales empezaron a moverse, las columnas caídas fueron empujadas por otros escombros que igual eran empujados desde abajo de todo eso, poco a poco quien lo hacía empezaba a salir y que la luz del sol le de, así pudiendo dejarse ver de nuevo, la sorpresa para las gradas, ambos compartiendo un sentimiento de asombro por lo imprevisto, esto igual para Heimdall que con los picoteos de los cuervos recobro la conciencia.

Heimdall:¡¡Esto es algo de celebrar para los dioses, su primer representante sigue vivo y sale de los escombros para que la luz del sol le de, él dios del sol Helios a resurgido de las ruinas para seguir luchando por lo que más ama, ¿que será? eso no nos importa, lo que ahora importa es que ha vuelto para más!!.

Tiro los escombros y se sacudió el cuerpo para quitarse la suciedad de encima, dio una rápida mirada al Romano que igual lo estaba viendo fijamente, en el rostro de Constantino una sonrisa se hizo al ver a aquel dios que lo estuvo apoyando durante la pelea, no lo admitiría, pero era un gusto ver cómo iba a seguir luchando, le emocionaba ahora esto.

Antes que fuera contra él humano, Helios se acercó a una columna y la empujó para hacerla rodar, de ahi metió su mano para sacar un pedazo de la columna y así alzarla para que todos vieran aquel escombro que tenía en la mano, era una X que era traspasada por una P, la mayoría de los humanos y dioses estaban confundidos por lo que les mostraba él dios solar, no entendiendo el significado de ese símbolo, pero los historiadores humanos alzaron la voz ante la sorpresa de lo que veían sus ojos, esto igual con los Romanos y el propio panteón.

Ares:¡Forseti!, ¡¿que significa ese símbolo que está mostrando Helios? -señalo lo que decía, él dios de la justicia Nórdica se levantó y se acercó a los extremos del balcón para ver lo mismo.

Forseti:Mhm, es el mismo símbolo que él Romano uso en su batalla en el puente Milvio -se llevo la mano alenton pensando un poco sobre lo que veía- "con este signo vencerás", esa es la descripción que le dieron los humanos a aquel símbolo, además de las primeras colocas de un nombre traducido al griego.

Ares:¿A que crees que se deba eso?.

Forseti:Viendo que Constantino le tendió una trampa a Helios, y que este ahora se encuentra muy herido, aunque pudiendo seguir luchando, puedo suponer que se trata sobre el don que le dieron los dioses de los que su tierra alababan.

Ares:-volteo a ver a la puerta, la cual seguía cerrada y sin que nadie entrara por está- a qué hora vendrá mi hermana, necesitamos de aquel dios Romano para que podamos saber más a profundidad sobre ese símbolo.

Forseti:¿No crees que le pasó algo?.

Ares:No creo, por la guerra, mi madre entreno a todas las mujeres del Olimpo para que así pudieran cuidarse y defenderse por ellas mismas, las volvió guerras aptas para cualquier tipo de situación, quien me preocupa más es él dios que traiga.

Ambos dioses siguieron viendo la arena de combate, mientras en las ventanas superiores, Geir veía con sorpresa lo recién sucedido, por sugerencia de Hermes pudo detenerse antes de celebrar por la victoria, ahora estaba confundida por lo que mostraba Helios hacia las gradas, volteando a ver a Hermes para que le dijera una respuesta.

Hermes:La batalla del puente de Milvio, fue aquel lugar donde Constantino el grande, tuvo un sueño donde se le apareció en los cielos un signo igual que nos muestra Helios, y por lo que noto, Constantino lo uso para algo, tal vez para dañarlo.

Geir:¿Encanto el templo como si fuera un arma contra Helios?.

Hermes:Tal vez así es, los dioses le otorgaron un don a Constantino, no se cuál será ese don pero creo supo es que está relacionado con aquel signo, tal vez sea como un tipo runa que encanta las cosas y las vuelves como armas contra los dioses.

Geir:Le tendió una trampa a Helios, utilizando su propia sangre para hacer aquellos signos -no pudo evitar hacer una mueca de asco ante eso.

Hermes:El mito cuenta que Constantino mando a pintar ese signo a todos sus escudos, como protección en todos los combates contra sus enemigos, así que creo que todo lo que tenga ese signo, se volverá una especie de arma para protegerse y dañar a los dioses.

Él dios solar tiro el trozo de escombro ya sin darle importancia a eso, además de quitarse el casco que estaba destrozado, poniendo su mirada en Constantino que ya estaba listo para volver a luchar, Helios bajo su mirada para ver todo su cuerpo, estaba aún cubierto de polvo y las raspaduras junto a las cortadas estaban por gran parte de su cuerpo, además de heridas internas que no le eran un problema, se mantuvo firme y no mostrando debilidad frente al Romano, dando ambos un paso al frente.

Ese fue el detonante para que ambos fueran corriendo y se hicieran aún lado para con sus armas atacar, Helios fue más rápido y bloqueo el arma del Romano con su garrote, dando un movimiento el cual hizo voltear al humano para así él dios le diera una patada en la rodilla, esto alejó a Constantino que cayó y todo por el suelo para ponerse de pie rápidamente, Helios solito un brillo cegador que fue potenciado con una ráfaga de fuego de parte de su garrote.

Pero esto fue una distracción, Constantino se cubrió con su escudo y Helios fue corriendo para dar un salto para estar en el otro lado, dándole una patada por detrás al Romano que fue mandado contra los escombros del templo, se levantó para protegerse de un golpe del escudo del dios, ambos forcejearon un poco, para Constantino darle un corte en la rodilla al dios que le hizo perder el equilibrio pero que dando una vuelta, con su garrote pudo darle un golpe a la espalda del humano que lo mando hacia unas columnas.

Terminó chocando contra estas y destruyendose, Helios se volvió a poner de pie aunque se tambaleaba un poco por la cortada que le atravesó un lado de la rodilla izquierda, corrió donde él humano para darle un garrotazo del cual Constantino esquivo y atacó con su escudo, dando un golpe al pecho del dios haciéndolo retroceder un poco, lanzó un doble ataque el cual Helios detuvo dándose la vuelta, usando su espalda como escudo, el ataque le ocasionó unos cortes pero que aprovecho para darle una patada al humano que fue mandado contra otras columnas las cuales atravesó.

Se levanto para poner su escudo al frente y cubrirse del garrote del dios, el cual ante la potencia hizo hundir el suelo y hacer que más columnas se quebraban, Constantino vio esto por unos segundos y una idea vino a su mente, Helios le dio una patada la cual le hizo alzar el escudo y enviarlo para atrás, él dios lo siguió para darle algunos ataque con su garrote los cuales él humano se protegía con su escudo, cambio el agarre de su espada y/e movió su escudo para darle una estocada a la barriga de Helios, la armadura al estar muy dañada y quebrada, no resistió lo suficiente como para que le espada la atravesará y apuñalar al dios en el estómago.

No tuvo tiempo de retroceder cuando él dios le dio un golpe con su escudo, siendo mandado a retroceder mientras Helios se agachaba para tocarse la herida, hizo una mueca para de su mano salir una luz solar la cual hizo cicatrizar su herida de la barriga, gracias a eso la sangre dejo de salir, el tiempo que le llevo ha de eso fue suficiente para Constantino que con su sangre hacia los signos con los cuales habían hecho el templo un arma contra él dios, pero esta vez, con las columnas la cual en cualquier momento se caerían.

Otra vez Helios corrió contra él, dando un golpe con su garrote él cual Constantino esquivo y le dio a la columna la cual cayó, Helios puso su escudo para poderse proteger del golpe el cual impacto y tuvo que ponerse casi de rodillas para poderlo soportar, ese mismo aura rojizo pudo notar en la columna y en las demás, Constantino con sus armas empezó a golpear columna tras columna para hacerlas derrumbar contra Helios quien empezó a iluminar sus manos.

~ηλιακή ενέργεια~
{Energía Solar}

El brillo se empezó a esparcir por el escudo el cual se empezó a cargar de energía de parte del dios, quien movió sus piernas para posicionarse correctamente antes de hacer el ataque, puso su vista en Constantino quien seguía ahí parado listo para atacar, el escudo de Helios se llenó de luz para empezar a sacar un brillo él cual salía de las aberturas de las columnas, de la parte de atrás, Helios golpeó sus dedos contra su escudo.

Liberando la técnica, la cual fue un brillo cegador cargado de potencia que pudo destrozar las columnas por completo y mandarlas hacia él Romano que se cubrió con su escudo, los golpes de los escombros fueron constantes pero pudo resistir los, pero con eso le siguió un agarre de Helios quien tomó por el escudo a Constantino para golpearlo con su escudo que seguía cargado con su energía solar, moviendo al humano para someterlo contra el suelo.

Dando una serie de golpes que fue contra Constantino él cual se protegía con su escudo, pero el impacto de cada golpeó le hacía chocar contra el suelo de manera brusca, ocasionando que su herida interna sea más dolora para él, Helios se detuvo y Constantino aprovecho para hacerle un corte con su espada en las piernas del dios, que en respuesta le dio una patada que movió al Romano a varios metros, trato de ponerse de pie pero Helios lo tomo por el cuello para alzarlo y tirarlo hacia los techos de los Foros.

Choco contra el suelo de los techos y con un poco de dificultad se volvió a poner de pie, paso sus manos por sus nudillos para poderse manchar de sangre y así utilizarla para poder hacer un gran sello en el techo del Foro, tuvo que alejarse un poco del lugar para tener una distancia de Helios él cual de un salto subió al techo, a ambos se le notaban ya muy heridos y con aspectos de estar cansados, aunque igual podían seguir atacando, él dios solar se acercó a donde el humano.

Helios:Puedo ver algo diferente en ti humano, algo nuevo y que es un gusto ver, vida -afirmo, deteniéndose y viendo al Romano que se mantenía en su pose defensiva.

Constantino(I):Alguien me enseñó que tengo que pelear contra la culpa y el dolor, no dejarme doblegar por estas, gracias -él dios respondió con una sonrisa- ¿porqué luchas?.

Helios:-baja un poco su sonrisa, desviando su mirada para ver a sus hermanas- es un secreto, pero te puedo decir que es una promesa que le hice a una de mis hermanas.

Constantino(I):¿Tanto las amas como para arriesgar tú vida en este combate? en el cual tienes el riesgo de morir -un poco de duda.

Helios:Si lo vemos así, parece algo que unas hermanas no dejarían que su hermano hiciera, pero yo estoy dispuesto a hacer lo posible por cumplir los deseos de mis hermanas menores, he vuelto para estar con ellas nuevamente -mueve su cabeza aún lado- ¿también harías eso por tus seres queridos?.

Constantino(I):-se queda callado, pensando un poco la pregunta- yo haría todo por mi familia, sin importar de donde o de quiénes sean mis hijos, igual los trataré como lo haría un padre responsable -señala al dios con su espada- yo sé que conoces mi historia, eres un dios, ¿porqué decidiste darme esa ayuda?.

Helios:Porqué amo a la humanidad -sus expresión cambio a una suave y motivadora sonrisa- yo vi las desgracias que hicieron y siguen haciendo, pero se que hay personas que merecen el perdón y una segunda oportunidad, hacer un acto imperdonable no significa que no vayas a perdonar tú mismo, que te perdonen es una cosa, perdonarte a ti mismo es otra.

Constantino(I):¿Un dios amando de verdad a la humanidad? -sonrie un poco- vaya, es algo bueno de que me haya tocado pelear con un dios tan humano como tú, ¿porque al principio actuaste diferente? como ahora.

Helios:Los dioses en su mayoría con arrogantes y con un ego muy alto, así que para famirializarme con ellos, tuve que actuar como un idiota para hacerlo, pero solo es eso, actuar frente a ellos, cuando ya no estoy con ellos o decido ya no hacerlo para hacer un bien, ahí es cuando dejó de actuar, como ahora.

Constantino(I):¿Por qué eres así conmigo? no puedo creer que alguien tan humano pero a la vez tan divino, pueda ser tan amable con un asesino -no estaba convencido, eso lo noto él dios.

Helios:¿Por qué? fácil, es como tú, cualquier humano o dios en tu lugar hubiera dicho que no era su culpa y que solo era culpa de una persona, pero tú te echaste toda la culpa al haberla sido en verdad, no confiar en las palabras de tú hijo y confiar más en un amor ciego -niega con la cabeza, para sonreír mientras sus ojos dieron un brillo- cometer un error es humano, aceptarlo es divino.

Constantino(I):¿Porque eres tan bueno conmigo, Helios?, ¿yo que hice para recibir tal buena actitud de parte tuya, hacia alguien como yo?.

Helios:-suaviza su mirada, sonriendo al mortal que estaba perdido ante lo que le decía- todos merecen una segunda oportunidad, aquellos que no la reciben, terminan acabando con sus propias vidas, tú no recibiste ni sentiste el perdón que quieres recibir, pero seguiste permaneciendo te fuere, aún con ese dolor, seguiste siendo Emperador de Roma, oh Constantino el grande, a pesar del dolor, tú seguiste con tú labor, eso es de respetar -pone su mano en su pecho y de una media reverencia- eso lo respeto.

Aquella reverencia hizo un silencio en las gradas divinas, los dioses se quedaron estupefactos al ver lo que aquel dios hizo, recordándoles como es que Buda los traicionó y le cedió el puesto al humano rubio, ese mal recuerdo hizo que los dioses se alzaron en gritos de furia, era un acto grave para todos ellos ver ese tipo de actos; arrodillarse, reverencias, respeto y etc, siendo dirigido aún humano, todo lo relacionado a ello era un mal recuerdo para los dioses y que ahora odiaban.

- ¡¿Pero que crees que haces basura dorada?!.

- ¡A ese titán le espera un castigo divino, su actuar no será permitido!.

- ¡Vergüenza, maldita vergüenza!.

Horus:¡¿Pero que está haciendo ese maldito desconocido?! -apretó sus dientes y desgarro su trono con sus manos, dando su mirada al palco Griego.

» Cuando acabe esto, haremos una reunión para decidir al próximo representante, no podemos permitir otra vez este tipo de vergüenzas, y más cuando los encargados son unos desinteresados del tema.

Thot:Como usted pida joven Horus -dijo su consejero que se encontraba parado al costado de su trono y de donde él estaba igual sentado.

Mientras que los dioses gritaban, la humanidad no tenía nada que decir, los hijos del Emperador y sus esposas además de sus padres, no tenían respuesta por lo que acaban de ver, un dios haciéndole una reverencia a su padre, no tenían palabras con las cuales expresarse por este momento, Constantino miro a Helios por unos segundos, ambos haciendo oídos sordos hacia las gradas divinas, para él Romano juntar sus dos espadas y llevarlas a su pecho, dando una reverencia igual al dios, ambos quedando en un minuto en esa posición, para alzarse.

Dio un paso para dar un salto y caminar por la estructura que estaba aún lado del camino del techo, Helios movió su garrote dando un golpe que fue directo a la estructura para destruirla, él Romano dio un salto para usar el garrote del dios como segundo salto y así acercarse más a Helios que se agachó hacia un lado, esquivando el corte de la espada que iba directo a su cara, Constantino cayó se pie y se volteó para darle un ataque al dios que se protegió su escudo.

Dando un ataque con su garrote el cual hizo alejar al Romano que mantuvo su distancia de Helios que solo veía los pies del contrario, esperando a que hiciera un movimiento para poder darle de manera certera, Constantino movió su por aún lado y avanzó de ese modo lo cual hizo que él dios lo atacará, pero cambio la dirección de su pie para moverse hacia el otro lado y atacar a Helios quien alzó su escudo para poderse proteger del ataque del humano, quien uso parte de la estructura para poder dar un ataque en el aire y caer hacia el otro lado.

Antes de levantarse, Helios dio un rápido ataque con su escudo él cual Constantino pudo esquivar haciéndose aún lado, estando cerca al brazo del dios y movió sus pies para retroceder, estaba muy cerca como para poder dar un ataque, el escudo de Helios impacto contra el suelo y que el signo pudo proteger como para que se quebrara, él dios dio un movimiento de lado para atacar con su escudo al Romano que ya estaba lejos y volvió a atacar.

Acercándose corriendo para protegerse con su escudo el cual recibió el impacto del garrote, aunque el siguiente ataque vino de por abajo, Constantino hizo aún lado su cuerpo para poder usar la parte trasera de su escudo como para protegerse, pero el impacto igual pudo dar por parte de su antebrazo que pudo hacerle un gran raspón, él Romano movió su escudo para hacer un movimiento giratorio que pudo cambiar la trayectoria de las armas, pudiendo hacer las aún lado.

Dio un impulso con sus pies para poder pasar por debajo del costado de Helios, móvil la funda de su arma y la hizo un corte por la muñeca, para con su espada hacerle otro corte pero en el lado derecho del torso, no fueron tan profundas pero si hacer que él dios salpicara sangre y se agacharse un poco por esto, Constantino aprovecho para volver atacar por atrás, moviendo sus espadas para hacer un corte por la espalda al dios, pero Helios se volteó poniendo su escudo.

Las armas atravesaron las partes quebradas del escudo, traspasando el escudo el cual se quebró más por esto, el filo de las armas pasaron por el antebrazo de Helios que solo estaba sorprendido, ambos, dios y humano tenían los ojos abiertos ante lo recién hecho, la funda de las armas impidieron el avance y Helios tuvo que alejarse un poco para evitar la punta punzo cortante de las armas, Constantino no perdió el tiempo y movió sus armas hacia arriba.

Pudiendo quebrar el escudo que se terminó desprendiendo la parte superior, Constantino fue rápido y dio una patada contra el escudo para hacer retroceder al dios, quien movió su brazo y vio du ahora destruido escudo el cual los trozos solo caían, Helios vio a su contrincante que solo estaba respirando ante la fuerza que había dado para poder quebrar y romper su escudo, la única acción que hizo fue clavar su garrote en el suelo del techo y llevar su otra mano para poderse quitar el cinturón, desplendiendo y dejando caer su escudo.

Heimdall:¡¡Helios acaba de perder su escudo, Constantino pudo destruirlo y ahora él dios solar ya no tiene protección!!, ¡¿acaso este será el fin de Helios?!.

Ares abrió sus ojos a gran medida, Apolo se quedó en silencio y Forseti solo dio un suspiro, viendo al desprotegido Helios quien ya no tenía con que protegerse de los ataques, era una desventaja, las hermanas del dios solar tuvieron expresiones preocupadas ante lo hecho, los dioses sintieron un mal pasar por sus estómagos, como si este reciente hecho significará ya la pérdida de la pelea para los dioses, pero una pequeña risa hizo que ambos dioses volteara a ver a Apolo que se tapó la boca.

Apolo:No está perdido, aún, tiene más cosas que dar para brillar en este combate, no creo que las desperdicie solo para hacérse el humilde con el humano -su sonrisa era lo más notable, aunque lo intentará tapar igual se podía notar.

Los tres dioses volvieron a mirara a la arena, Constantino dio el primer ataque ante esta oportunidad que ahora tenía, no debía de desaprovechar la para nada, se movió a una gran precisión listo para envajerla sus dos armas en los puntos vitales del dios, pero antes de que le dieran, Helios solo puso su brazo como si fuera un escudo y las armas se clavaron en este, Constantino quedó incrédulo por esto, la piel o mejor dicho, todo el cuerpo de Helios fue cubierto por un aura dorada amarillenta.

~προστατευτική αύρα~
{Aura Protectora}

Helios dio un ataque rápido con su pierna la cual hizo caer al Romano y aprovechando, él dios le soltó un fuerte garrotazo del cual Constantino se protegió con su escudo, pero no impidió que fuera mandado a volar contra el techo del Foro de Trajano, él humano impacto contra la estructura y escupió sangre para con dificultad volverse a levantar, dio un quejido de dolor y se agarro el hombro izquierdo.

El impacto le provocó una dislocación, aunque para él no fue problema arreglarlo, poniendo fuerza en su movimiento y pudiendo de nuevo estar bien su hombro, poniendo su mirada a Helios quien se acercaba caminando por los techos de una manera lenta pero calmada, lo más notable eran sus ojos los cuales ahora brillaban al igual que su laurel, además de su aura la cual ahora era una especie de escudo pero por todo su cuerpo.

Movió su garrote y dio un salto para llegar al lado de Constantino él cual tuvo que hacerse aún lado para esquivar el impacto del ataque, Helios alzó su mano y dio una ráfaga de disparos de fuego los cuales él Romano se cubrió pero recibió de seguido una patada, la cual le hizo retroceder más, apoyándose en las estructuras del techo del templo para no caer, Helios di un salto para darle una patada al Romano cerca a la cara.

Quien puso su brazo para poderse proteger del golpe, siendo mandado a unos metros cerca y volviéndose a poner de pie, pero Helios fue más rápido acercándose para dar un fuerte golpe con su garrote en el suelo del techo, pudiéndolo destruir, agarro de la pierna a Constantino y ambos cayeron dentro de la Basílica Ulpia, él dios cayó de pie contra el suelo y jalo de la pierna al Romano para poderlo mover, tirándolo lejos para hacerlo chocar y romper algunas estructuras del lugar.

Helios:Tuve algo bajo la manga por si esto llegará a pasar -lleva sus manos a su colgantes de su armadura- digamos que esto ya no me sirve de mucho, así que bueno, tienes más ventaja ahora que estoy en mi mayoría descubierta -se quita su armadura para tirarla al suelo.

Junto sus manos para tronar sus huesos y estirarse un poco, Constantino se levantó y fue corriendo contra él dios para agacharse, deslizándose por el suelo y juntando sus armas para poderle hacer un corte, pero el aura cubrió la piel del dios que hizo que no tuviera una herida en su torso, o eso parecía, ya que Constantino pudo darse cuenta que el corte del torso junto a las otras heridas, no tenían un aura que las cubriera.

De manera escondida, Helios dio una pequeña sonrisa, haciéndose para atrás y volteando se para hacer un golpe con su garrote del cual Constantino retrocedió para esquivarlo, una serie de ataques le siguió mientras que él humano ponía su escudo para poderse cubrir, pero las ráfagas de fuego ocasionaban quemaduras por sus antebrazos que le ocasionaban un gran ardor, esto le hizo cerrar los ojos, lo cual aprovecho Helios para poderle soltar un golpe con su brazo por el costado del humano.

Pudiéndolo enviar hacia el otro lado del lugar, destruyendo algunas columnas y que hizo temblar la Basílica, él Romano se volvió a levantar y se recompuso para poderse dar la vuelta, Helios dio un salto para poderlo seguir, con eso se acercó a su contrincante y lo ayudo a pararse para empezarlo a limpiar, esto dejo confundido a Constantino que no sabía cuál era la intención de ese acto, pero no se confió y decidió atacar.

Tirando su espada al aire y con su funda atacar al humano, haciéndole un corte en la mano pero que no le hizo nada a Helios al este poner su palma como escudo, no teniendo ningún herida en esa parte de su mano, Constantino tomo en el aire su espada y la clava por el torso izquierdo del dios, pero fue bloqueado por el codo de Helios quien se volteó haciendo un ataque con su garrote, Constantino lo esquivo haciéndose para atrás, pero él dios fue más rápido.

Agarrándolo de las manos y así darle un rodillazo en la barriga que fue cubierta por la armadura, pero que el impacto le provocó una dolencia al humano que hizo que abriera los ojos a gran magnitud, Helios dio un giro para hacerle un ataque con su garrote por las piernas al humano, haciéndolo caer al suelo y Helios poniéndose encima de él para poderlo someter lo, lo agarro por su cabeza y le dio para golpes los cuales hacían quebrar el suelo de donde estaban.

Constantino movió su espada para agarrarlo de diferente lado, haciendo una estocada la cual Helios tuvo que retroceder para esquivar, estando cerca ese ataque de darle a una de sus heridas de su brazo, esto lo aprovechó Constantino para alzarse y darle un cabeza en toda la cara al dios, esto le hizo una herida interna a Helios que fue hecho por los raspones de arriba de su nariz, haciendo que el impacto de la cabeza fuera hacia esta parte la cual el aura protectora no cubría.

Helios se levantó, agarrándose la María al sentir como la sangre bajaba por esta misma, pero Constantino le hizo el mismo ataque que hizo para derribarlo y con el mismo resultado, haciendo caer a Helios que fue tomado por él humano y moviéndolo para hacerlo caer hacia el centro de la Basílica donde era como una mini plaza, él Romano uso al dios como amortiguador y así chocando contra el suelo, siendo él dios que recibió más el impacto, pero eso no lo detuvo.

Puso su pierna contra la barriga de Constantino y le dio una patada con la cual lo saco volando hasta salir de la Basílica Ulpia, chocando y rodando por la plaza del Foro, se llevó la mano a la parte de la barriga y tuvo que agacharse un poco ante el dolor interno que le causaron los ataques del dios a esta zona, pero no hubo tiempo para descansos cuando Helios fue contra él, no dándole tiempo para poderse poner en posición defensiva y acestandole un golpe que lo envío contra la parte izquierda de la plaza.

Siendo esta los mercados, choco contra unas columnas que se destruyeron y sus escombros cayeron, Constantino tomo algunos pequeños de las columnas para poderle dibujar el signo, se puso de pie y retrocedió para poder estar dentro de los mercados, pensando en un plan para poder doblegar a Helios quien caminaba hacia donde estaba, el mercado estaba un tanto oscuro que poca era los rayos del sol que entraban y que hicieron que Helios no pudiera ver bien, él Romano solo alzó sus armas.

Con un movimiento rápido fue a atacar a Helios quien puso su brazo para cubrirse del ataque, él Romano solto su arma para con la piedra clavarsela en la herida del torso a Helios, provocándole que intenso dolor que hizo retroceder un poco al dios, Constantino puso su escudo y embistió al dios para chocar lo contra la pared de los mercados, poniendo su espada cerca del torso del dios él cual se hizo aún lado para esquivar la apuñalada, Helios agarro el escudo y dio un ataque cegador él cual no efecto a Constantino que cerró los ojos.

Soltando le un golpe con una de las piedras al costado de la cara, Helios quedó aturdido ante lo recibido y Constantino le siguió haciéndole otra embestida contra la pared, agarro de la cabeza al dios y lo empezó a chocar una y otra vez contra la pared la cual se quebrara ante los impactos, Helios en un momento tomo el brazo del humano para detenerlo, pero Constantino le dio una patada en el pecho que lo hizo soltar y así darle otra golpe pero esta vez con su escudo, justo en los ojos del dios que fue el decisivo para que atravesará la pared.

Con dificultad Helios se ponía de pie, agarrándose las rodillas para poderse tocar la parte de los ojos los cuales recibieron parte del golpe, además de su herida de arriba de la nariz la cual se había abierto, Constantino se acercó alzando la funda de su espada, listo para soltarle un espadazo al dios, pero que al bajar su arma, pero atrapado por la mano de Helios quien agarro con fuerza el arma, dándole una patada en la barriga al Romano que hizo soltar el arma y hacerlo chocar contra la pared.

Puso más fuerza en el agarre hasta quebrar la funda del arma, ahora se acercó al Romano que se agarraba el estómago ante el golpe recibido, Helios pudo su pie encima de la espalda del humano y empezó a pisotear lo una y otra vez haciendo chocar a Constantino contra el suelo, la herida interna de la espalda se intensificó y el dolor que causó hizo que él humano escupiera sangre, Helios se detuvo en pisotear lo y lo agarro de la armadura para tirarlo en la plaza del Foro.

Llevo su mano a la herida del torso y se sacó la piedra para tirarlo aún lado, acercándose a Constantino quien se levantó, ahora sin parte de la armadura de su espalda y respirando agitadamente, el dolor de su espalda se intensificó más y ahora estaba haciendo todo lo posible para mantenerse de pie ante Helios que se seguía agarrando la herida del torso, otra vez el primero en atacar fue Constantino que se lanzó dando un ataque con su espada el cual él dios se cubrió con su antebrazo.

Dándole una patada en la rodilla al Romano con lo cual hizo perderle el equilibrio, alzó su garrote y lo movió para intensificar la ráfaga de fuego, dando un potente ataque el cual fue bloqueado por el escudo de Constantino que fue más rápido que él dios, movió sus pies en una especie de impulso, moviendo de igual manera su espada para que fuera directo a la barbilla de Helios él cual retrocedió para esquivar el ataque, con su otra mano agarro del brazo a Constantino para empezarlo a quemar.

Pero esto fue doblegado al Constantino con otra piedra, clavarse la en el torso y moverla para hacer más grande la herida, ante el dolor Helios le soltó la mano para le dio un ataque en la barbilla al Romano con lo cual lo mando unos metros atrás, él dios a primeras dio un ataque de disparos de fuego los cuales Constantino resistió con su escudo, pero lo que le siguió fue que Helios se acercó de rápida manera hasta poner sus palmas en el escudo, y hacer la técnica de Pulso Solar.

Pudiendo quebrar y destruir por completo el escudo de Constantino quien no pudo soltarse a tiempo ante el ataque, Helios dio una patada la cual él humano tuvo que poner parte de su brazo para resistir el golpe, siendo una especie de patada giratorio que lo envío contra la esquina de la columna la cual tenía la estatua de Trajano en una carroza con seis caballos, Constantino se sacudió su cabeza ante desorientación que tenía ante ese impacto, pero no tuvo tiempo a Helios agarrarlo de esta y tirarlo lejos.

Rodó por el suelo y trago un poco de polvo por eso, se tocó la espalda y su estómago sintiendo como ya estás no podían dar más, parte de su columna vertebral estaba quebrada, la sangre de sus heridas no dejaba de caer, siendo la más afectada su cabeza, se puso en posición de ataque y llevo su espada para atrás, tal vez siendo este su último ataque contra Helios quien ya hacía ahí parado esperando el ataque, respiro un poco para concentrarse, empezando a correr contra él dios.

Helios movió su garrote dando una ráfaga de fuego la cual Constantino puso su brazo para protegerse aunque esto le afectará a gran gravedad, movió sus pies en una especie de agache y deslizamiento para esquivar los numerosos ataques del garrote del dios que lo siguió con la mirada, Helios volvió a atacar pero Constantino llegó a la columna de la estatua para impulsarse, Helios volteó para atacarlo pero las piedras chocaron contra su cara y eso lo hizo perder.

Constantino lo tomo de la espalda para hacerlo voltear, y así clavarle su espada en la herida que Helios tenía en el hombro derecho, no perdió el tiempo y jalo su espada para abrirle más la herida al dios, pasando su espada por la parte superior del pecho, dejándole ver la clavícula del dios, Constantino bajo su espada hasta llegar al pecho menor, estaba a punto de seguir más, pero sintió algo clavarse en su barriga y bajo la cabeza, viendo el garrote del dios ahí clavado y que su dueño movió, rompiendo su arma y proceso destruyendo la armadura del Romano.

Cayó de rodillas al suelo, tocándose la herida de la barriga para con dificultad sacarse la mitad del garrote, respiro un poco lento al sentir como la sangre salía a chorros y cada vez más se sentía más debilitado, antes que dijera o hiciera algo, Helios solo le dio un pequeño empujón con su arma para hacerlo caer al suelo, él dios cerró los ojos y alzó su garrote, potenciando lo con el poder del sol, dio un fuerte golpe directo al abdomen de Constantino que terminó sacando una explosión de sangre y con su carne volando a todas partes.

El grito del hombre rezono por todos los Foros ante la intensidad del dolor que le causó interna como externamente, la sangre cayó encima de Helios, manchando su rostro y cuerpo, viendo el cielo donde el sol seguía brillando, su mirada no expresaba nada de satisfacción por esto, más bien, parecía odiar lo que hacía aquí, aunque nadie lo pudiera notar más que sus hermanas.

Las gradas estaban en completo silencio, la familia del humana ya hacía expectante ante tal atroz escenario donde veían a su padre/hijo/esposo estar tirado y con una gran abertura en su abdomen, nadie de las gradas humanas sabían cómo reaccionar ante esto, Geir sintió un dolor en su pecho al ver esto, Hermes permaneció callado al igual que el resto de los dioses, en el palco Griego, alguien ya había llegado después de una travesía buscando.

Hebe:Ya llegue hermano -abriendo las puertas para poder entrar junto al dios que la acompañaba- discúlpame por la tardanza, casi la mayoría de los Romanos estaban en las gradas, por suerte lo pude encontrar a él.

Mercurio:Hola hola.... oh vaya, al parecer llegamos tarde -viendo con cierta sorpresa lo que mostraban los paneles, la mujer le dio una mirada de molestia por ese comentario.

Apolo:Que raro viniendo del mensajero de los Romanos -actuando sorprendido ante lo dicho por él contrario que solo todo los ojos por eso.

Mercurio:Tuve que escabullirse de mis demás compañeros de panteón para poder estar aquí, Júpiter y Marte no estuvieron muy de buenas durante la guerra por ciertas cosas personales, así que ya ustedes deben de suponer el peligro que corro por estar aquí.

Forseti:Viniendo de la copia de Hermes, pues es una sorpresa eso, pero no andaremos en temas externos, Ares -llamo a su amigo que seguía viendo la arena, quien se dio la vuelta para ver a los recién llegados.

Ares:Gracias hermana -viendo a su familiar que gustosamente asintió, para ahora poner su vista en él acompañante- ¿que significa esa marca? el crimsón, ese humano al parecer la uso como un encantamiento para que las cosas sean armas.

Mercurio:¿Volver cosas como armas? -se rasca el costado de su cabeza, pensando un poco esto- Júpiter le dio un regalo a Roma, bendiciendo a un bebé humano con un don el cual lo llevaría en su sangre, teniendo una marca la cual solo se vería si los rayos del sol lo iluminaban.

Forseti:¿Te refieres al mito? Constantino mandó pintar de inmediato en los escudos de su ejército el crismón, en la batalla del puente del Milvio.

Se acercó hasta ponerse al borde del palco, viendo detenidamente al tirado humano que seguía en la misma posición, aunque de manera interna daba pequeños pulsos, Mercurio hizo una mueca por esto, pudiéndolo notar al igual que los demás dioses.

Mercurio:Ese bebé fue Constantino, siendo él hijo bastardo de una mujer cualquiera y de un gran guerrero, Júpiter esperaba que ese niño ahora hombre, sea él que pudiera hacer que su panteón se extienda por otras regiones -sonrie dando un chasquido con su lengua- pero fue todo lo contrario.

Todos vieron la arena de combate, Helios agarro la espada del Romano y se la saco del pecho para romperla y tirarla al suelo, con dificultad empezó a caminar para retirarse de la arena, creyendo que esto ya había terminado Heimdall no decía nada al mantenerse expectante sobre si algo pasaría después, algo que en verdad ocurrió.

Heimdall:¡¡Bueno, creo que ya tenemos un ganador para esta primera ronda del Ragnarok, con ustedes humanos y dioses, el ganador es.... -Huginn lo interrumpió, señalándole con su ala para que viera a la arena, algo que hizo él anunciante.

Un quejido de dolor se escuchó detrás de Helios y este volteó para ver de qué se tratara, la sorpresa que se llevó al ver a Constantino poniéndose de pie y agarrándose la cabeza, él dios solar pudo notar que el laurel del humano estaba cubierta por un aura rojiza, ya sabiendo de lo que se trataba esto, Helios sonrió y se volteó por completo para tener frente a Constantino que se ya se había levantado del suelo.

Mientras hacía eso, un pequeño recuerdo vino a su mente, Constantino puso la mirada en sus hijos quienes lo veían en silencio, puso una sonrisa de emoción aunque dolorosa, la sangre bajaba por todas partes de su cuerpo y sintiendo como en cualquier momento se caería.

<.....>

Por mandar a matar a su esposa, él junto a sus hijos de entre los 20, tuvieron que presenciar como es que moría ante el castigo que mandó hacer el propio Constantino, por la atrocidad que su mujer le engaño en hacer contra uno de sus hijos, después de eso, él Emperador junto a sus 5 hijos se fueron al despacho del trono donde a esperas de su mismo padre, tuvieron una discusión intensa.

Constantino(II):¿Porqué lo hiciste? -dio cara contra su padre, que no lo volteó a ver y se quedó viendo su trono- volteame a ver y respóndeme, ¡¿porqué lo hiciste?! -su padre no dijo nada.

Constancio(II):Te están haciendo una pregunta, padre, ¡responde!, ¡¿porqué le diste tal castigo injusto a madre?! -se puso al lado de su hermano, en forma de estar de acuerdo con lo que hacía contra su padre que no respondió de igual forma.

Él hombre solo estaba hundido en sus pensamientos, la muerte de su esposa no le causó ningún alivió o algún tipo de satisfacción, acaba de ver cómo murió a la mujer que le engaño y mintió para hacer un acto atroz, pero las culpas y el dolor seguían ahí, no lo entendía y su atención solo estaba sumergida en la duda del porqué, hasta que alguien lo agarro del hombro y lo volteó.

Constante:Te estamos haciendo una pregunta padre, ¡¿porqué diste la orden de darle tal tipo de castigo a madre?! -noto la mirada erdida de su padre, esto lo hizo molestar- ¡responde maldita sea, da una maldita respuesta!.

Helena:Por favor hermanos, dejemos a padre y no lo hagamos molestar más, la muerte de nuestro hermanastro a engaños de nuestra madre debió afectarlo mucho -trataba de intervenir, pero su hermana Constantina le agarraba la abrazaba para detenerla.

Constantino(II):¡Eso no es pretexto! -voltea a ver a su hermana para voltear a ver de nuevo a su padre que seguía sin restar atención- ¡no es pretexto de que por un hijo bastardo, hayas enviado a matar a madre, a nuestra madre! -lo señalo con el dedo, indignado por lo que su padre hizo.

Ese fue el detonante, él Emperador pudo escuchar ese comentario que dio uno de sus hijos y por instinto ante tal falta de respeto hacia la memoria de su difunto hijo, su reacción fue darle un golpe que fue directo a la cara de su hijo, siendo recibido de relleno ante lo repentino que fue y que lo hizo retroceder, Constante solto a su padre y se puso entre el medio de él y su hermano, su padre había perdido los estribos.

Constantino(I):¡No te atrevas a manchar la memoria de mi hijo, solo porque tú no entiendes el significado y el sentimiento de perder a uno! -lo señalo con el dedo, con intención de acercarse para darle otro golpe- ¡no importa si es un bastardo, sigue siendo mi hijo e hice justicia por su nombre!.

Constantino(II):¡Tú fuiste que lo mando a matar, como a nuestra madre! -enojado, mientras se agarraba la cara por el golpe y trataba de acercarse, pero fue detenido por su hermano que estaba entre medio de ambos- ¡no hay excusa en ese acto, no hay nada de que excusarse!.

Constantino(I):¡Así fueron en verdad las cosas!, ¡¿que no escuchaste?!, ¡tú madre me engañó ya que tenía la intención de que si matando a Crispo, ustedes tendrían pase libre al trono como Emperadores de Roma! -ya enojado, respirando agitadamente.

Constancio(II):¡Culpas a madre de todo lo que pasó!, ¡¿pero tú qué?!, ¡¿acaso no te culpas de lo que hicistes también tú?! -molesto, estando a un costado atrás de su hermano, confrontando de igual modo a su padre que lo vio enojado.

Helena:¡Ya paren con esto, está no es la forma de resolver las cosas solo por un dolor! -fue agarrada por su hermana por los hombros, poniendo más fuerza para que no fuera- ¡madre cometió un acto atroz por nosotros, pero nosotros jamás se lo pedimos y debemos de entender eso!, ¡era una loca!.

Constantino(II):¡Loca, pero era nuestra madre! -molesto, volteando para ir contra su hermana pero su hermano se puso frente a él para detener su avance- ¡apartate hermano, voy a darle una lección a esta engreída de nuestro padre!.

Constante:¡Estoy de tu lado hermano, pero no voy a permitir ningún tipo de agresión más que solo palabras, así que vuelve donde padre! -afirmo, con la intención de proteger a su hermana menor del enojo de su contrario hermano que parecía ya listo para pelear.

Pero un golpe rápido hizo que Constantino(II) fuera empujando contra la pared, esto lo hizo su propio padre quién era agarrado de los hombros por su hijo que tenía el nombre de su padre, le dio un codazo directo a la cara y darle un cabezazo para quitárselo, con eso se acercó a su hijo que se agarraba la cara ante el dolor del golpe, pero Constante se interpuso, su padre cegado por la ira le dio un golpe para quitárlo del medio y se acercó para tomar del cuello a su hijo.

Constantino(I):Ninguno de ustedes merece llevar mi nombre o el de mi padre, ni siquiera el de mi madre o algún otro nombre que yo les puso, son una deshonra para la familia, sus actitudes impuras hacen que vea más a Crispo como mi heredero al trono, que a ustedes -no grito, pero transmitía un veneno en sus palabras que todos sus hijos escucharon- pero él ya no está aquí, ¡YA NO ESTÁ!, ¡así que tengo que conformarme con alguno de ustedes, aunque no quiera!.

No se detuvo en ahorcar a su hijo, quería enseñarle lo que es sentir dolor, la ira de la culpa y el dolor no lo dejaban pensar bien, la realidad se le había vuelto confusa y no entendía lo que hacía, solo lo hacía por nombre de su difunto hijo, habría seguido si no fuera por la intervención de su hija Helena que lo agarro del brazo para tratar de soltar a su padre, pero por reacción en le dio un golpe en la cara que la hizo caer al suelo.

Volteó a ver a quién golpeó, quedando con un zumbido en los oídos ante lo que hizo, solto a su hijo para ver a todo su alrededor, como sus hijos lo veían con miedo y otros estaban adoloridos por los golpes que él, su propio padre les había dado, Constantino(I) trato de levantar a su hija pero ella se alejó, así que él hombre les hizo una seña que fue a la puerta para que salieran, todos sin dar palabra se fueron, dio un vistazo a su hija que había golpeada, quien ahora se tapaba la cara ante el dolor del golpe.

El despacho quedó vacío, sin nadie ahí dentro más que él, Constantino(I) abrió su puño con el golpeó golpeó a sus hijos, viendo la moneda en la cual tenía la imagen de su hijo Crispo, es lo que estuve viendo mientras estaba perdido en su mente, Constantino(I) apretó con fuerza la moneda, apretando su rostro ante el dolor y la culpa que le causaba recordar esos momentos, aguantando el llanto, apretó la moneda, para irse a sentar al trono de su despacho y quedarse ahí solo, solo queriendo estar solo.

(.....)

Constantino(I):De verdad los amo, y perdonen me por no haberlos criado de una buena manera -unas pequeñas lágrimas cayeron de sus ojos, para poner su mirada en él dios que solo lo veía- ¿porqué no estás feliz? esto no es algo emocionante para ti.

Helios:...... -se quita su laurel, para verlo un poco- jamás sentiré satisfacción o emoción al matar a un humano, no es lo correcto para mí, aunque esto sea para un propósito el cual hago por una de mis hermanas.

Constantino(I):¿Un propósito por un ser querido? -sonrie, aunque la sangre saliera de su boca- eso me faltaba a mi, tener un propósito de verdad por el cual pelear, no un deseo egoísta por el cual no merecía hacerse realidad.

Helios:Te duele pero a un sigues sonriendo, antes no pero ahora sí.

Constantino(I):Quiero aprovechar el mayor tiempo posible que me queda, en expresar todos los sentimientos que me negué a sentir o a expresar -lleva sus manos a su cabeza para quitarse el laurel que ya poco a poco se deshacía- de verdad te lo agradezco Helios, me haz abierto los ojos.

Unos minutos de total silencio, donde él Emperador solo se quedaba pensando sobre la vida que tuvo, desde que nació hasta que murió, teniendo su mirada en aquel laurel el cual significaba mucho, pero que para él, era tan poco, solo dio leves toques sintiendo el filo de las hojas de metal, no se dio cuenta que Helios se había acercado a él.

Helios:Yo no gane esta pelea -coloca su laurel dorado encima de la cabeza del contrario, que solo estaba atónito por esto- fuiste tú, tú ganaste de nuevo esa vida que antes tenías pero que desapareció, tú ganaste de nuevo la emoción de sentir tantas cosas, tú ganaste perdón y paz, tú ganaste esta pelea de manera interna, gran Emperador de Roma, Constantino el grande, tú te mereces esto más que yo.

Constantino(I):¿Porqué?.

Helios:¿Que no recuerdas? el laurel desde la antigüedad ha sido la representación simbólica de la victoria y de la gloria -retrocede unos pasos, para alzar su mano, haciendo una especie de saludo que él contrario reconoció.

Un saludo Romano, fue lo que hizo Helios en forma de respeto hacia Constantino que solo se llevó las manos a la cara, aunque las limpiará igual seguían saliendo, así que solo se dejó llevar, sintiendo una gran emoción interna la cual solo expresaba con las lágrimas que caían de sus ojos y de esa gran sonrisa que mostraba, mostrando la al quitarse las manos.

Constantino(I):Gracias Helios, gracias por hacerme volver a sentir todo lo que se fue de mi, ya había olvidado este sentimiento que es raro sentirlo otra vez -casi quebrada su voz, teniendo los rayos del sol que chocaban contra su pecho.

De ahí salió un reflejo, desde el pecho del dios se iluminó para que en el suelo se viera un signo que Helios pudo distinguir, siendo el mismo signo que Constantino hizo para poderlo frenar durante esta pelea y que sus armas tenían, con eso último, Constantino cerró los ojos para solo dejarse caer al suelo, poco a poco se hacía un charco de sangre, pero teniendo aún él humano esa sonrisa que ahora mostraba.

Él dios del sol se dio media vuelta y empezó a caminar para salir de la arena, teniendo la cabeza agachada, puso su mirada en la salida donde sus hermanas ya se encontraban ahí para recibirlo, pero puso su mirada en Ares que lo pudo notar, dando un leve asentimiento.

Helios:(Espero cumplas el trato Ares, lo justo de tú padre debe por lo menos haber caído en ti) -miro de manera seria al dios de la guerra, para agachar la mirada y seguir en la misma posición.

Ares:(Se lo que piensas Helios, cumpliré la promesa por la cual peleaste aquí, no desconfies de la palabra de un líder) -de igual manera serio, se dio la vuelta para irse caminando junto a sus compañeros de balcón, recordando el trato que Helios y él hicieron.

<.....>

Salió del balcón y fue a la parte de abajo, dirigiéndose a la entrada y salida la cual era el ingreso hacia la arena del Valhalla, siendo aquella del lado de los dioses, ahí vio a Helios que se ponía su armadura y se acomodaba sus armas las cuales usaría para este combate, él dios del sol al verlo hizo una pequeña reverencia hacia él líder del panteón Griego.

Ares:¿Para que me llamastes Helios?, ¿cual es el asunto personal que quieres hablar conmigo? -apareciendo imponente ante él dios que volvió a su posición normal.

Helios:Antes, disculpe que lo haya llamado tan repentinamente señor Ares, pero el asunto que quiero tratar el por el cual pedí participar en este Ragnarok -lleva su mano al pecho, justo al lado del corazón- ¿usted conoce la historia de mi hermana y su amor eterno que tuvo con un humano?.

Ares:Eos, la diosa del amanecer, tu hermana del dios solar y de la diosa lunar, reparte la luz del día con su manto radiante, cada mañana, con los primeros rayos, abre las puertas del cielo, anunciando la llegada de su hermano, pero detrás del resplandor, se oculta una tristeza eterna, el amor perdido y la sed de compañía inalcanzable, ella se enamoró de varios mortales, pero entre ellos su más fiel y querido amor fue Titono, un mortal que hizo que Eos le pidiera a mi padre que lo hiciera inmortal, el accedió, pero lo que se olvidó fue pedir que también le diera juventud eterna.

Helios:Titono envejeció y envejeció hasta tener un aspecto completamente diferente al cual mi hermana se enamoró, pero ella lo sigue amando y lo mantiene encerrado dentro de un cuarto en sus aposentos, y es por eso que decidí participar.

Ares:¿Tú hermana te lo pidió?.

Helios:No, yo decidí participar, cuando regrese por la guerra de un milenio, supe sobre los asuntos que me había perdido, entre ellos lo de mi hermana, así que para ya no verla triste y con esa depresión la cual intenta aparentar por su labor como diosa del amanecer, participaré en este Ragnarok, y por eso quiero hacer un trato con usted, nuevo líder del panteón Griego.

Ares:¿Un trato? te escucho.

Helios:Si yo gano mi pelea, usted le considera a Titono juventud eterna, y si pierdo, entonces que su piedad como líder dicte -afirmo, agachando su cabeza.

Ares:¿No quieres recuperar tú título como dios del sol? -un poco confundido, pero sintiendo pena por la hermana de aquel dios que estaba parado frente a él.

Helios:Eso ya no me importa, señor de la guerra, solo lo utilice como pretexto para poder participar en este Ragnarok -alza la cabeza, para poner una sonrisa suave y gentil- lo que más me importa y lo que en verdad quiero, es ayudar a mis hermanas.

Por instantes, Ares pudo ver la imagen de Hades personificada en Helios, aunque sacudió la cabeza un poco para quitar esas alucinaciones que tenía por lo del antiguo Ragnarok.

Ares:-dio un suspiro, agachando la cabeza para pensar un poco, él no era como su padre, en cambio él era alguien más justo y amable- está bien -alza su cabeza para ver al dios solar- su ganas esta pelea, te concederé lo que me pides.

Helios:Muchas gracias señor de la guerra -da una reverencia- no le puedo jurar que ganare pero por mis hermanas lo haré.

Ares:-lo detenidamente- ¿porqué amas tanto a los humanos? -eso tomo por sorpresa al contrario pero mantuvo la calma.

Helios:Vaya pregunta, pero es fácil, a pesar de los tantos errores cometan u ocasionen, yo los seguiré amando, les daré una oportunidad como Hades y Zeus me la dieron a mi, es un ejemplo a seguir, si yo como titán que es la raza más despreciable y cruel de toda Grecia, recibió una oportunidad -sonrie calmadamente, teniendo una emoción que brillo en sus ojos- ¿por qué no ellos?.

Se escuchó el sonido del cuerno de Heimdall, significando la señal de presentación del dios, Helios se dio la vuelta para ir a subirse a su carruaje y Ares solo se alejó del lugar, un sentimiento de tristeza era lo que sentía, aquella relación de Helios con sus hermanas, le hicieron recordar a como él y su hermana Atenea eran, ambos hermanos de la guerra que se ayudaban y protegían el uno al otro, se sobo una mano a la cara, recordando como ella terminó muriendo, debía de superarlo, es lo que ella hubiera querido.

(.....)

No pasó un rato para que los dioses dieran gritos de celebración ante su primera victoria después de muchos milenios, por fin su primera victoria en el Ragnarok, la humanidad quedó en silencio y la familia del Emperador cayó en lágrimas ante su supuesta muerte, siendo la única excepción los balcones de los líderes que permanecían en total silencio y con una seriedad abundante.

La joven Valkyria se cubría los ojos para poder aguantar el llanto, no se acostumbro para nada en ver las heridas y muertes brutales que podían llegar a tener alguien, siendo dios y humano, aunque una risa hizo que se sacará las manos y volteara a ver a su acompañante, confundida, algo que captó él mensajero.

Hermes:Perdona por eso, no pude aguantar la risa al darme cuenta de este detalle que al parecer nadie noto, eso incluyéndome a mi -sonrie.

Geir:¿De cual detalle hablas?.

Hermes:Verás, Helios tiene muchas heridas causadas por las armas del humano, es obvio saber eso, pero no pude ignorar como es que él nunca cicatrizo sus heridas con su poder solar, siendo una habilidad la cual siempre utiliza en esos ámbitos.

Geir:¿Me estás diciendo que Helios le estaba dando una ventaja a Constantino para poder herirlo? -abre los ojos ante la repentina revelación, eso hizo que volviera a ver de nuevo a la arena.

Hermes:Correcto señorita Geir, Helios ama tanto a los humanos que de manera oculta les dejaría una ventaja para que lo pudieran herir fatalmente, esto sin que ningun dios lo tomara como traición o algo parecido.

Geir:Pero ¿porqué Constantino no las aprovecho? ya las había notado, pero no vi que las aprovechará hasta el final de la pelea.

Hermes:La emoción de pelear es algo que Constantino tal vez no pudo haber sentido, está oportunidad de volver a sentir la adrenalina en una pelea, fue algo que no quiso desperdiciar y que para él, creo, le parecería una muy mala jugada terminarla muy rápido.

Geir:Ya entiendo -viendo el cuerpo del Emperador que seguía ahí tirado, sonriendo un poco al pensar la gran emoción que debió pasar gracias a este momento.

Las paramédicas entraron a la arena para poner a Constantino encima de una camilla y sacarlo de ahí, aún tenía pulso, Helios volteó su cabeza para dar un pequeño vistazo de cómo se llevaban al que podía considerar un amigo, solo siguió su camino para poder llegar hasta la entrada ahora salida de la arena, había perdido mucha sangre y solo se dejó caer para que sus hermanas lo atraparan, podía sentir sus sollozos y lágrimas.

Helios:Lo logré hermanas, lo logré gracias a ustedes, por apoyarme cuando las necesitaba -sonriendo, hundiéndose en un abrazo junto a las féminas, para escuchar el resultado del ganador.

Heimdall:¡¡Con una larga pelea donde hubo sangre y huesos rotos, un perdón y una emoción que surgió, ya ha llegado el fin de esta primera ronda!!, ¡¡siendo esta la primera victoria para los dioses en un Ragnarok, después de muchos milenios que transcurrió del primero!!, ¡¡así que con todos ustedes, él verdadero dios del sol, se proclama como el vencedor!!.

.....

[Primera ronda del Ragnarok]
Constantino I vs Helios

Duración del Combate: 17 minutos
Técnica Decisiva: Golpe del garrote
Ganador: Helios
0 - 1

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TR
1

4/03/2024

(Vaya, llevo mucho sin hacer esto, pero por aclaraciones y para conectar con los lectores, creo que es necesario, así que bueno, muy buenos días o en la hora que estén leyendo esto)

La verdad, debo aclarar que a principios de esta pelea, iba a hacer 4 capítulos, pero pensé que era largo y pues lo reduje a solo 3 capítulos (es mi punto máximo a donde llegó de peleas), aunque debo de revelar que la primera idea era hacer un capítulo entero donde se llevaría únicamente la pelea, pero gracias a consejos de mi amigo y mentor Dnielmon pues pude solucionar eso y extenderlo más tiempo.

Aunque obvio, sin ser tan largo ni tan corto, se qué tal vez ustedes puedan notar algún tipo de error o sin sentido en la pelea (eso siento yo), pero es que esta pelea es una forma base, osea que es como un experimento que será de ayuda para mejorar en las otras rondas que seguirán de está, como más reacciones, sentimientos y demás cosas que den peleas de este tipo.

De hecho, para el final tenía otra idea en mente, si la llegue a escribir, pero por un inconveniente no se pudo, así que cambie el final y escribí lo que tienen ahora, en una futura Guía Oficial que are, les explicaré más detalladamente sobre el tema junto a información de los peleadores que tal vez les interese saber, pero por mientras se quedarán con la duda.

Debo agradecer a mis dos amigos y personas que me inspiré en hacer esta historia, Dnielmon y Dharma1421 fueron los que me dieron la inspiración para poder lograr esto, siendo el primero que me dio consejos de cómo hacer la historia y su estructura de cómo será, un verdadero gracias y les recomiendo ir a leer sus historias de SNV, ya que sin ellos, esto no hubiera podido nacer.

Un total gracias por haber leído está historia a pesar de sus errores, les aviso que la lista de peleadores llegará pronto pero muy pronto en ser revelada, así que paciencia ya que esto será emocionante, yo me despido de ustedes, cuídense y buenas noches.

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