Mortales: 2

Dioses: 2

Tarzán otorgó el empate a los Mortales de parte de los Humanos, acabando con la vida de Shiva, el Dios Hindú de la Destrucción, ahora, debían dar inicio a la Quinta ronda, aquí se decide el desempate. Brunhilde y Geir fueron a una habitación la cual tenía de puerta unas rejas con cadenas y antorchas a la izquierda y derecha de esta misma, al entrar, pudieron ver un páramo seco y quemado, al ir avanzando, las hermanas pudieron ver varios huesos de diversos animales fuertes, desde rinocerontes y osos, hasta incluso de elefantes, y en medio de ellos...estaba el responsable de tamaño cementerio.

???: Vaya, ya era hora de que tuviera nuevas visitas.

Geir: *se sorprende* *pensando* Para ser un Tigre de Bengala es muy grande, incluso para su especie.

Shere Khan: ¿Y bien? *se limpia los dientes con su garra* ¿Qué será mi presa ahora?

Brunhilde: No es otro animal por lo que he venido, ya es tu turno de pelear.

Shere Khan: Ah claro, tenía que ser *se levanta* ¿Y quien será mi compañera?

El tigre era de Bengala, pero su tamaño era incluso igual al de un tigre siberiano, la especie de tigre más grande de la actualidad, siendo incluso más grande que cualquier león jamás visto en la Tierra, en eso, una luz esmeralda aparece en la habitación, siendo la valquiria que iba a acompañar a Shere Khan en esta ronda.

Reginleif, Séptima hermana de las Valquirias

Reginleif: Ya llegué, hermana Brunilda.

Brunhilde: *a Shere Khan* Ella es tu compañera, Reginleif, "Hija de los Dioses"

Shere Khan entonces tomó la cabeza de Reginleif de la nuca mirándola con unos ojos maliciosos.

Shere Khan: *maliciosamente* Hmmmm tu cráneo cabe perfectamente en mi mano, me hace pensar en el cachorro que causó mi muerte.

Geir: *temerosa* P-Por favor, no le hagas nada a mi hermana.

Shere Khan: *la mira* Jejeje, muy bien, por suerte ya estoy lleno.

Entonces Reginleif toma la pata de Shere Khan para luego decir ambos al unisono:

VOLUND

Y junto con un gran brillo, la valquiria se adentra en el cuerpo del tigre mientras este comenzaba a reír lleno de orgullo y malicia en su voz. La Quinta Ronda estaba apunto de empezar, Heimdall se puso en medio mientras rocas y algunos árboles volvían a aparecer en la arena del Valhalla, si bien eso era darle ventaja al participante de los Mortales, los dioses entendieron que Tarzán terminó acabando con Shiva sin usar el medio ambiente a su al rededor, por tanto, podían permitir que ellos hagan uso de un terreno en específico nuevamente, siendo este, la selva de la India.

Heimdall: ¡¡Finalmente, en este combate se decidirá si los Dioses o los mortales serán los que terminen tomando la delantera en la Quinta Ronda!!

En eso, de la entrada de los dioses comienza a aproximarse un carruaje tirado por dos caballos junto a un gran hombre sosteniendo sus riendas.

Heimdall: ¡¡De parte de los Dioses, se encuentra este guerrero que venció tanto al León de Nemea, como a Cerbero, el Guardián del Inframundo, a mano limpia!!

¡¡El que sepultó a la Hidra de Lerna bajo una avalancha de rocas!!

¡¡El Terror de los Titanes!!

¡¡El Dios que se enfrentó al Mismísimo Hades, el Rey del Inframundo, saliendo victorioso!!

¡¡Su Padre Zeus lo bendijo con la divinidad, él es el Héroe Griego más fuerte de todos!!

¡¡Nacido en el Cielo y la Tierra, es el Mensajero de la Justicia!!

¡¡El Mortal que ascendió a Dios tras completar sus 12 trabajos!!

Finalmente, el hombre se bajó de su carruaje y puso su garrote a manera de bastón contra el suelo.

¡¡HÉRCULES!!

Todos los dioses, en especial los más jóvenes, gritaron su nombre con orgullo, respeto y admiración, ya que si de nobleza se trata, no hay nadie más digno de esa palabra que este héroe. En las gradas más altas del coliseo, donde no había división de bandos, una mujer estaba viendo la aparición del héroe con una mirada de preocupación y duda.

Megara, Esposa de Hércules

Megara: *angustiada* Ten cuidado mi amor, Terímaco, Creontíades y Deicoonte​ confían en ti.​

Heimdall: ¡¡Y del lado de los Mortales se encuentra esta bestia!!

En eso, de la puerta contraria se muestra una reja de hierro que se abre jalando cuatro cadenas desde arriba mientras se mostraba una silueta oscura con dos ojos amarillos con gesto de maldad en ellos.

Heimdall: ¡¡Si el León es el Rey de la Sabana Africana, él debe ser el Rey de la Selva Asiática!!

¡¡Su fuerza y poder ha inspirado a los Humanos para crear estilos de combate!!

¡¡Y cómo no, si este ser es capaz de incluso acabar con osos sin dificultad!!

En eso, el tigre comienza a caminar por el pasillo dejando ver su gran tamaño impresionando tanto a los espectadores generales cómo a los expertos en zoología y biología.

¡¡Tres metros de largo, 380 Kilogramos de peso, un carnívoro hecho para matar!!

¡¡Si la Naturaleza debe sentirse orgullosa de un animal, debe ser de este!!

¡¡Siempre dispuesto a cazar lo que sea, incluso a los humanos!!

El tigre esbozó una breve sonrisa al escuchar eso último.

¡¡Pero ahora, querrá cazar a un Dios, quiere probar su carne y su sangre!!

¡¡Ante ustedes, el Carnívoro más Fuerte de la Tierra!!

¡¡Y sin duda, la representación de la Crueldad de la Naturaleza!!

¡¡SHERE KHAN!!

Mowgli: ¡¿Shere Khan?! ¡¿Porqué eligieron a Shere Khan?!

Bagheera: *suspira* Por mucho que lo niegue, el tigre sin duda es el que más terror ha causado en la Selva, solo estando detrás del hombre, por lo que enviarlo a él a pelear es una decisión bien tomada en combate y estrategia.

Los animales que estaban presentes en las gradas no pudieron evitar ponerse nerviosos al tener de frente a semejante depredador, mientras que los dioses se mantenían escépticos ante esto, no les parecía justo que animales luchen junto a los humanos, a fin de cuentas, la mayoría de los panteones prefieren a los animales que a los propios humanos, pero a pesar de eso, deciden aceptar esto ya que la regla del Ragnarok dicta que es una lucha de Mortales vs Dioses, no sólo refiriéndose a los humanos, por lo tanto, deben simplemente ver la pelea y esperar el resultado.

Heimdall: ¡¡Nuevamente los Cielos se enfrentarán a la Fuerza de la Naturaleza!! ¡¡La Quinta Ronda del Ragnarok ha iniciado!!

La Justicia Divina

VS

La Maldad Animal

Shere Khan y Hércules se acercaron al mismo tiempo al centro de la arena, donde había un pequeño estanque de agua de dónde el tigre comenzó a beber mientras el héroe se cuestionaba varias cosas en su cabeza.

Hércules: *pensando* Carajo, no me esperaba tener que acabar con un animal, ¿Tan cruel eres Brunhilde de mandar a pelear a un ser sin malicia y sólo instinto? He matado a muchos monstruos, pero este solo es un Tigre de Bengala muy bien alimentado, más allá de su Volund, no tiene alguna posibilidad de poder ganarme, sólo lo enviaron a morir en batalla, que lamentable.

Mientras el tigre seguía bebiendo del estanque, los dioses Griegos estaban hablando de dicho combate.

Ares: ¿Habrán sabido que el que vendría a pelear de parte de los Dioses era Hércules?

Hermes: A juzgar por la mirada de Brunhilde, lo dudo mucho.

Brunhilde: *frustrada* ¡¡Mierda, enviaron a Hércules a sabiendas de nuestro participante!! ¡¡De haber sabido hubiera enviado a Scar o a Frollo!! Solo espero que el intelecto de Shere Khan sea equiparable a su fuerza.

Hércules salió de sus pensamientos mirando a su contrincante diciendo lo siguiente:

Hércules: Te sugiero que te rindas y aceptes la derrota, no quiero tener que matar a una criatura que solo mata para sobrevivir, así que por favor, evita que tu sangre termine manchando mis manos.

Pero el tigre simplemente alza su mirada con una mueca de molestia.

Shere Khan: Sin duda eres cómo los humanos, haciéndote el sabio y noble sólo por mostrar misericordia, pues déjame decirte ¡Qué no necesito tu lastima!

Acto seguido, el tigre golpeo una parte del estanque lanzando lodo a la cara del héroe quien hace una mueca de disgusto mientras los dioses mostraban su enojo por tal insolencia de parte del animal.

Shere Khan: *desafiante* No necesitamos que nos tengas piedad, cuando los tuyos no la mostraron en todos sus años de existencia, por lo cuál, si decidieron actuar por las malas, entonces nosotros también actuaremos por las malas.

Hércules: *se limpia el lodo de la cara* Muy bien, tú lo pediste, te has condenado a morir.

Shere Khan: Ja, ya deja tu teatro de compasión, me está empezando a molestar.

Hércules: Pues dime ¿Tú tesoro divino son tus garras?

Shere Khan: *confiado* Precisamente...

Shere Khan: Por lo que debes cuidarte la espalda si quieres salir ileso *esboza una sonrisa maliciosa*

Hércules: *serio* Lo mismo digo.

El Héroe se puso en posición para lanzarse a toda velocidad contra el felino alzando su garrote, pero el tigre esquivo el ataque con solo dar un salto a un lado mientras el semidios intentaba golpearlo con su arma siendo esquivado por el animal mientras mostraba una sonrisa burlona en su rostro, para comenzar a huir de los ataques del dios a través de la jungla a su al rededor mientras Hércules se comenzaba a frustrar por no conseguir golpear a su enemigo, ambos contrincantes siguieron corriendo por toda la arena.

En eso, Hércules toma una tajo y logra atrapar la cola del tigre impactando su garrote contra el piso haciendo que Shere Khan diera un rugido del dolor que acababa de sentir.

Hércules: *harto* ¡Ya deja de huir, cobarde!

Shere Khan: *molesto* ¡Suéltame grandísimo idiota!

El tigre le atinó un zarpazo en toda la cara al héroe, haciendo que este diera un quejido del dolor cubriéndose la cara retrocediendo unos pasos, al limpiar su vista se dio cuenta que tenía 4 cortes en su rostro ocasionando que sangre comenzara a derramarse de su cara dejando asustados a los fans más jóvenes de Hércules, siendo niños que tenían incluso juguetes del héroe estando con miedo de que su ídolo pueda resultar con más heridas en el futuro. Shere Khan corre hacia el semidios y lo embiste ocasionando que caiga de espaldas por el impacto.

Hércules reacciona y con su garrote se lo quita de encima estrellando al tigre contra un árbol cercano, ambos logran reincorporarse, la sangre del semidios se derramaba por la orilla de sus ojos, ocasionando que con el más mínimo movimiento le cegaran por unos momentos por tener que cerrar los ojos por reflejo, por lo que Hércules intenta limpiarse con su brazo izquierdo pero rápidamente Shere Khan se lanza contra él mordiendo su brazo atravesándolo con sus colmillos, acto seguido, el tigre usa toda su fuerza para alzar al dios y estrellarlo contra el suelo.

Heimdall: ¡¡Hércules inició el duelo, pero fue el único que recibió daño por tal acción!! 

El tigre se acercó a su rival e iba a atacar pero el dios dio un giro por el suelo esquivando el ataque, dando un giro hacia la derecha golpeando la cara del felino que lo deja tambaleando por el impacto dejando a Hércules ponerse de pie para luego sostener su garrote con sus dos manos.

Hércules: ¡¡Poderoso león de Nemea, TOMA MI CARNE!!

En eso, su garrote que tenía la cara de un león comenzó a moverse como si tuviera vida propia.

Al instante, una onda de choque en forma de la cabeza de un león salió disparada hacia el tigre, quien se quedó sorprendido por dicho ataque, por lo que dio un salto a la gran roca que tenía detrás dejando que la onda de choque golpeara la roca ocasionando que esta se derrumbe haciendo caer a Shere Khan nuevamente contra el suelo siendo golpeado por los trozos de roca que le cayeron encima. Hércules se le acerca mientras su tatuaje rojo parecía crecer y soltar humo de su piel, alza su garrote y golpea la pata izquierda del tigre haciéndolo rugir del dolor.

Por lo que se levanta rápidamente sacando su pata para volver a atacar a su rival, pero este sostiene su arma para golpear a Shere Khan, sólo que no contaba que eso era lo que planeaba el tigre, ya que logró sostener el arma con sus patas delanteras clavando sus garras en el garrote, para luego dar un giro impactando a Hércules contra unos árboles alzándolo por el aire y estrellarlo contra una piedra quedando tirado en el suelo.

Shere Khan: *molesto* ¡Eso te costará la vida!

Acto seguido, el tigre comenzó a atacar con sus garras el cuerpo expuesto de su rival ante la mirada aterrada de todos los dioses presente, especialmente en los más jóvenes.

Las garras de Shere Khan entraban en la piel de Hércules cómo si fuera mantequilla, este se giró dejando a plena vista su espalda mientras se ponía de pie sin dejar de recibir ataques rápidos y letales, en eso, el tigre se lanza a morder al hombro izquierdo del héroe haciendo que este grite del dolor, y al quitárselo de encima solo hizo que el animal lograra arrancar un gran trozo de carne de él asustando aún más a los dioses. Shere Khan retrocedió unos 10 metros para poder comer su platillo en paz mientras su oponente intentaba recuperarse de eso, pero la sangre que se estaba derramando era muy grande.

Geir estaba lamentándose de esto, consideraba a Hércules como un hermano no solo porque ambos son semidioses, sino que él siempre fue amable y noble con todas las valquirias, era un ejemplo a seguir para ella, por lo que verlo en esa situación era muy difícil de ver para ella. Hércules se intentó reincorporar y tomar su garrote, pero al intentar levantarlo con su brazo izquierdo, pero rápidamente lo soltó haciendo un quejido de dolor.

Heimdall: ¡¡Vaya, el hombro de Hércules fue arrancado, el músculo de su trapecio está siendo comido por Shere Khan!!

Los expertos en anatomía y biología saben que el músculo del trapecio que es parte crucial del hombro, es lo que permite a los seres humanoides poder levantar objetos, incluso golpear, pero sin ese músculo, su brazo cuelga cómo si fuera un trapo viejo, por lo cual, Hércules tiene un brazo inutilizado, siendo incapaz de sujetar su garrote con las dos manos.

Dioses: ¡¡Hércules, no!!

Dioses menores: *con lágrimas* ¡¡No, hermano Hércules!!

Geir: *se cubre los ojos* ¡¡No puedo ver esto más!!

Hércules vio las gradas notando a todos los dioses que lo veían con una mirada de angustia y temor, esto lo hizo pensar en sus hijos y su esposa, recordando toda su historia.

Tebas, Grecia - 1,269 A.C.

Antes de convertirse en héroe, Hércules...

Pero aun así, siempre velaba por la justicia y defendía a quienes no podían cuidarse a sí mismos, ejercitándose duramente o eligiendo siempre el camino más difícil, obteniendo un mejor cuerpo y fuerza, ganándose el respeto de todos. Lo que él no sabía es que él nació en el Olimpo cómo un bebé divino cómo cualquier otro, pero su tío Hades, el Rey del Inframundo, envió a dos de sus demonios para robarlo de la vista de Zeus y convertirlo en un humano gracias a una poción de sus dominios, al ser un bebé humano, fue dejado en el pueblo de Tebas para que creciera cómo un humano.

Al regresar a su reino, los dos demonios, Pena y Pánico, le avisaron a su rey que el trabajo estaba hecho.

Hades: Excelente, mi hermano Zeus estará agradecido después de esto.

Pena: ¿Y si se entera de lo que hizo con su hijo?

Hades: No hay problema, él sabe que de los cuatro Dioses mayores del Olimpo, soy el que tiene más dominio sobre la vida y la muerte tanto de Dioses cómo de humanos, y nada me va a impedir que la profecía se cumpla.

Pánico: Siempre tan sabio, majestad.

La profecía que vio el Dios del Inframundo, se trataba de la liberación de los Titanes a manos de su hermano menor, Adamas, para quitarle a Zeus el trono, a sabiendas de que las profecías Griegas no suelen poderse evitar de ninguna manera, lo único que podría hacer es asegurar la victoria del Olimpo ante esa rebelión, cuyo combate se debe dar entre el Dios de la Conquista y el Dios de la Fortaleza, por lo cuál, debe hacer que ese campeón sirva a los Dioses fervientemente sin objeción, por lo cuál, convirtió a su sobrino en mortal para poder brindarle un poder a futuro.

Lo que sucedió fue que cuando Alceo, el nombre mortal de Hércules, logró obtener un cuerpo de humano muy fuerte, Hades le dijo a su hermano Zeus que su hijo estaba vivo y que lo estaba buscando en su templo por respuestas a sus preguntas, el Rey del Olimpo estaba aliviado de esa noticia y al ver a su hijo este no lo reconoció, dándose cuenta de que él ya no era un Dios, sino un humano mortal, por lo cuál, si quería que su Hércules volviera a ser un dios, debía darle su sangre en la Ambrosía, pero el Valhalla no lo aceptaría, convertir a un humano en mortal por un capricho, lo pondría en mala imagen ante todos los dioses.

Así que decidió pedirle ayuda a Filoctetes, un Sátiro entrenador de héroes para entrenarlo para ser capaz de enfrentar a múltiples monstruos para ganarse su ascensión a los cielos, su primera misión fue salvar a una damisela de un centauro, Alceo usó su garrote para enfrentarlo, tras dos horas de intensa lucha, el mortal pudo derrotar a su oponente con sus propias manos sorprendiendo a la damisela, que se hacía llamar Megara, ambos durante el resto de Trabajos de Hércules comenzaron a sentir algo por el otro, que terminó en noviazgo.

Finalmente, tras terminar los 12 trabajos, Hércules fue reconocido cómo un humano digno de grandeza, por lo que fue invitado al Olimpo mismo para convertirse en un Dios en toda regla, sólo que justo en su ceremonia de iniciación, los Titanes fueron soltados dejando ver cómo un trono aparecía en escena en medio de la sala.

Adamas, Dios de la Conquista

Adamas: Ya fue suficiente Zeus ¡Te volviste Rey por demasiado tiempo!

Zeus: Oh jo jo, me estás retando ¿verdad?

Adamas: ¡Por supuesto, idiota!

Alceo: *se pone en medio de ambos* Yo seré tu oponente.

El Dios se la conquista se rió por la acción del humano, por lo que sacó su guadaña y le hizo varios cortes en el cuerpo tumbándolo al suelo, pero justo cuando iba a darle el golpe final, el chico bebió la ambrosía de su padre, y justo cuando la guadaña tocó su pecho, esta se rompió al instante, el cuerpo del joven se volvió más grande tornando su cabello de color rojizo, convirtiéndose en Hércules/Heracles, en honor a su madre verdadera, la Diosa Hera. La Batalla del Dios de la Conquista y el ahora Dios de la Fortaleza se prolongó durante una hora y media.

En la cual, Adamas terminó perdiendo la pelea tras ser golpeado en la pared, solo para ser rematado por su hermano mayor Poseidón, quien simplemente dijo que siempre han existido 11 Dioses del Olimpo, y ahora, Hércules se convirtió en el Duodécimo Dios del Olimpo, quedándose a vivir en los cielos por el resto de su vida, con la condición de que su mujer, Megara, se quedara con él en el cielo también, a lo que los dioses aceptaron sin dudarlo, después de todo, es el Campeón favorito de todo el Valhalla.

Sobre todo porque él sólo se encargó de luchar contra todos los Titanes que se habían unido a la rebelión, siendo recordado cómo su mayor hazaña tras ascender cómo un dios al Olimpo.

El Presente...

Hércules tomó su garrote con su mano derecha, usándolo cómo un bastón para poder levantarse y seguir con la pelea, por siempre ha luchado hasta el final, sin importar las heridas que posea, y esta pelea no iba a ser la excepción, pues su fuerza y poder no viene de sus músculos, sino de su corazón, ese noble corazón que nunca se rindió hasta alcanzar los cielos y volverse el Héroe más poderoso de todos los tiempos.

Hércules: ¡¡No teman hermanos dioses, jamás dejaré que la maldad me doblegue!! ¡¡Aunque pierda mi sangre y esté en mal estado!! ¡¡TAN SÓLO NECESITO EL PODER DE LA JUSTICIA!!

Los Dioses gritaron animados por las palabras de su campeón, mientras que los mortales, si bien sabían que ese dios estaba luchando por su destrucción, sus palabras mostraban sinceridad en sus acciones, tanto que ni siquiera lo pueden odiar por luchar del lado de los dioses, después de todo ¿Cómo podrías morder la mano que te dio de comer durante toda tu vida? Ningún dios se atrevería a desertar a los suyos, ninguno lo haría, jamás, mucho menos alguien cómo Hércules, el dios más noble de todos ellos.

Shere Khan: *aplaudiendo* Bravo, bravo.

Shere Khan: Extraordinario regreso, y gracias por hacer que vaya a disfrutar más de tu muerte *sonríe de manera maliciosa*

Hércules: *se pone de pie* Tendrás que derribarme primero.

Shere Khan: Por supuesto, he derribado criaturas más grandes que tú *se pone en posición de ataque*

Hércules: *se pone en posición* ¡Pues ven ahora!

El tigre dio un salto hacia su oponente recibiendo un golpe del garrote del héroe, quien consigue tomar la cola del tigre a duras penas con su mano izquierda haciendo un esfuerzo para levantarlo a falta de su hombro izquierdo, mandándolo contra la pared de las gradas, en eso, Hércules lanza su garrote al cielo generando una oscuridad tapando el sol dejando a oscuras a toda la arena del Valhalla, mientras que el héroe estaba pronunciando unas palabras.

Hércules: ¡¡Cerbero, cumple mi deseo, te ofrezco a este oponente cómo tributo para alimentarte de su alma, a cambio, concédeme la victoria!!

De repente, el garrote genera un tornado que impacta contra el suelo de la arena agrietándolo dejando ver lava y fuego debajo asustando al tigre, recordando que murió tras caer en un foso de lava siendo atrapado por una escultura de una ruina impidiendo que pudiera salir mientras la lava subía con cada día que pasaba, muriendo siendo derretido y consumido por las llamas que estaba viendo frente a sus ojos, la grieta había acorralado la zona donde estaba Shere Khan obligándolo a tener que saltar para llegar del otro lado, donde casi se cae pero logra agarrarse con sus garras y subir.

Shere Khan: *maliciosamente* Oh jo jo jo, cómo disfrutaré comiendo cada extremo de tu cuerpo.

Hércules: Los humanos te hicieron daño, ¿No es verdad?

Shere Khan: ¿Y porqué te importa eso?

Hércules: A mí, también fui tratado mal en mi niñez, antes de convertirme en un dios.

Shere Khan: Y ahí vamos con el sentimentalismo, los humanos creen que la tienen difícil con sus emociones, trabajos y dinero cuando no se dan cuenta de la cosa más importante.

Hércules: ¿Qué?

Shere Khan: Su corazón, su corazón es lo que los conecta con su mundo, pero solo nosotros somos capaces de apreciarlo ¿O porqué crees que estamos luchando junto a ellos en esto? No nos importa su bienestar ¡Sólo queremos salvar nuestro territorio! *semblante molesto* ¡Es la ley de la selva, cómo cielo tan antiguo y natural! El que la respete prosperará, pero el que la rompa morirá, y ustedes los humanos ya la han roto por mucho...mucho tiempo, deberás pagar por tu gente.

Hércules: .....Muy bien, hagamos esto, ahora mismo vamos a luchar cómo se debe, mano a mano, nada de armas, aquí se decide quien gana y quien va a perder.

Shere Khan: *risa villanesca* Jejeje, eso me fascina.

Finalmente llegó el último asalto, sin armas, solo sus propios cuerpos para combatir, Hércules se lanzó al ataque, él empezó la pelea y él la iba a terminar dando un golpe derecho que es esquivado por el tigre, quien le lanza un zarpazo en el brazo y otro en su cara para después lanzarse a morder su cuello, pero el héroe se cubre con su brazo izquierdo perdiendo una parte de su antebrazo, pero Shere Khan no se detendría ahí, seguiría lanzando zarpazos a diestra y siniestra sin detenerse, mientras que Hércules respondió dando potentes golpes que conseguían hacer retroceder al carnívoro, pero este siempre da un giro para alejarse de la grieta.

Ambos comenzaron un intercambio de golpes brutal, la fuerza de ambos al parecer estaba igualada, la sangre de ambos se derramaba sobre el piso tanto de la boca del tigre cómo del cuerpo del Dios, los gritos de las gradas no se hicieron esperar, tanto los mortales cómo los dioses estaban dando su apoyo a sus representantes para que ganaran la pelea, la cuál parecía extenderse mucho hasta que el héroe logra atrapar las dos patas delanteras del tigre, alzarlo por el aire y estrellarlo contra el suelo para después aplicarle una llave al cuello. El felino intenta zafarse pero parece imposible, esa era la misma técnica que usó Hércules para matar al León de Nemea, la estrangulación que duró días.

Sólo que el tigre no tenía una piel irrompible. La fuerza del héroe era mayor que en aquella ocasión, pero todavía seguía débil por su brazo izquierdo, por lo que usó todo su poder para ahorcar al tigre, sin querer, ambos comenzaron a retroceder, sin darse cuenta que la grieta se había hecho más grande, tropezando ambos comenzando a caer hacia la lava asustando a los espectadores quienes solo pudieron ver cómo ambos cuerpos caían al lago de lava salpicando tanta que llegó hasta la superficie, dejando ver las tres cabezas de cerbero saliendo a manera de llamas ardientes riéndose de haber devorado lo que sea que cayó en la fosa.

Todos pudieron escuchar dos gritos de dolor y sufrimiento viniendo del fondo, ambos cuerpos habían sido tragados por las fauces del mismísimo inframundo, en eso, los gritos cesaron, la calma había vuelto. La tensión y el suspenso era muy grande, de repente, todos notaron en el fondo cómo...una mano salía de la lava, siendo Hércules, que logro salir a la orilla del abismo mientras dejaba ver cómo su brazo izquierdo estaba completamente derretido por la lava mientras que del fondo del lago de lava, un brillo esmeralda con la forma de Reginleif se elevaba a los cielos desapareciendo de la escena hecha polvo cósmico.

Hércules: Lo siento hermana Reginleif, no tuve opción.

Heimdall: ¡¡El Ganador de la Quinta Ronda del Ragnarok es HÉRCULES!! ¡¡El Campeón del Olimpo!!

Los dioses dieron gritos de victoria y orgullo ante la victoria que acababan de obtener mientras que los mortales se habían quedado en shock tras ver la forma en la que murió el tigre, pudieron escuchar sus gritos de agonía mientras estaba aún en la lava, Geir comenzó a llorar por su hermana, ni siquiera podía alegrarse por su hermano Hércules, después de todo, no había garantía alguna que ambos hubieran podido sobrevivir a tal batalla, después de todo, Hércules ha derrotado a muchos monstruos con sólo sus manos, por lo cuál, la batalla al parecer estaba destinada a una victoria de los dioses desde el principio.

Siendo notado en la cara de frustración de Brunhilde, quien simplemente se retiró de la arena mientras hacía chillar sus dientes del enojo, los dioses lograron ganar ya que tenían anticipado quien sería el luchador por parte de los mortales, pero en la siguiente, debían ser los mortales quienes iban a tomar la ventaja, sea cómo sea, finalmente, Hércules es sacado de la fosa gracias a unos guardias alados reuniéndose con su esposa y sus hijos. En una habitación apartada de la arena, unas siluetas estaban hablando de algo importante.

???1: Ese es el plan entonces.

???2: Esplendido, será un placer encargarme de él en la Sexta Ronda.

???3: Gracias, es bueno saber que sabes lo que es conveniente para los tuyos.

???2: Por supuesto, sólo son una banda de sucios pecadores, no merecen el perdón de los dioses.

???1: Créeme, los dioses sabrán recompensarte por esto, después de todo, no nos burlamos de nuestros seguidores más fieles.

???2: Me honra su confianza en mí, su simple ciervo, prometo que si fallo, mi alma será castigada cómo se debe.

???3: Cómo dicen los tuyos: Amén, así sea.

Continuará...