Atsushi leía en la sala, realmente pasaba hoja tras hoja porque no le prestaba la debida atención, estaba concentrado observando al pelinegro a la distancia, era "ese" fin de semana

Era sábado, era de noche, y las miradas que se habían enviado el uno al otro eran obvias, lo tenían claro, esa noche era la noche

—Aku...— susurró, Akutagawa no podía hablar, pero tenía un oído agudisímo, que reaccionó ante el corto sobrenombre. —Ah...verás...son las...es un cuarto para las nueve, ¿no tienes algo qué decirme?- esperaba paciente por una respuesta

"Si" el pelinegro dejó las manos en el aire un segundo, acercándose al sofá en el que estaba el tigre, "¿estás excitado?"

—No...era lo que esperaba...—el pelinegro negó con la cabeza mientras sacudía las manos, quería olvidar haber dicho eso, no era una buena manera de entrar en ambiente

"Dame otra oportunidad"

—Claro- se sentó en el sofá, esperando a las señas, pero en vez de eso, fue atacado por un beso de su novio, quien le arrebató el libro para terminar acostándole sobre el sofá

Estaba inmóvil, pero puso sus manos torpes sobre la espalda ajena, mientras comenzaban a besarle el cuello, era extrañamente sensible, y su piel era pálida como para que el rubor fuese evidente

—M...mh~- se exaltó un poco ante aquel sonido, ¿era enserio un sonido proveniente de su garganta? Nunca había imaginado que podría llegar a escucharse así, pero la lengua de Akutagawa pasando por su cuello le hacía temblar

Atsushi estaba agitado, su respiración parecía incontrolable, moviendo su cuerpo porque le gustaba la sensación del frote, nunca había probado esa sensación, en la cual quería pedir a gritos que le tocaran

-Ah~- sus gemidos comenzaban a ser bastante honestos, realmente se sentía como estar hirviendo, entre excitación y vergüenza

Sabía que Akutagawa no podría decirle nada en ese momento, solo verificaba la comodidad ajena al mirarle a los ojos, asegurándose que los movimientos fuesen correspondidos

-A...ah~- el cuerpo del tigre tembló, basta de frotes, sin ropa de por medio, Akutagawa se decidió a tocar otras zonas de forma más directa, una parte de él quería bajar y hacer un trabajo oral decente, pero debido a su vergüenza, terminó solo por humedecer sus dedos con saliva suficiente para que lograran resbalar y entrar, primero uno, y después de que Atsushi estuviese acostumbrado, siguió con el segundo

—Ah-agh— Akutagawa reaccionó al sonido, mirándole fijamente

—ah- no, está bien, solo no me lo veía venir, es una sensación extraña— Akutagawa asintió, comenzando a mover sus dedos, frotandolos contra puntos específicos mientras los metia y sacaba, Atsushi era sorprendente sensible, correspondiendo inconscientemente a cada tacto

—mgh~— sentía como los dedos le expandian, era una sensación nueva, pero terriblemente satisfactoria, y ciertos puntos que el pelinegro tocaba le hacían estremecerse, moviéndose de forma sexy y honesta apesar de su vergüenza —Agh~ vas...muy rápido— empujó sus caderas hacia arriba, eran algunos espasmos seguidos, le cosquilleaba todo el cuerpo  —mgh~—

Akutagawa era expresivo con su mirada, y como si su erección no dijese suficiente, estaba excitado

—Así- a-así está bien— no estaba seguro de eso, pero quería satisfacer también a su pareja —puedes hacerlo—

Akutagawa sacó sus dedos, el cuerpo de Atsushi tembló ante esa acción

"¿Seguro?" Hizo la seña lenta y fácil de comprender, y Atsushi asintió

—Seguro— Akutagawa se colocó el condón ante la aclaración, para seguido las caderas del peliblanco ser tomadas, el pelinegro se empujó lento en un inicio para luego embestirle con un poco de fuerza, terminando por entrar en él

Atsushi tembló, era una línea de electricidad en toda su espalda, no se sentía tan bien como lo de antes, pero no detestaba la sensación

—Ah~— entrecerró sus ojos, drogado en placer.

Akutagawa le besó y le lamió los labios para luego verle a los ojos, —puedes moverte— dijo Atsushi para que el contrario procediese a hacerlo

Akutagawa le embistió, era como ya lo había imagino, o incluso mejor, Atsushi se aferraba a él, y comenzaban a coordinar los movimientos

—Ah~ mgh~ se siente bien, ah~ Akutagawa— en medio de sus gemidos se miraron a los ojos, fue algo vergonzoso, pero así continuaron, al pelinegro le encantó ese contacto, era como mil palabras con solo la mirada, notaba cuando hacía un movimiento muy brusco o cuando el pasivo en realidad estaba pidiendo por más

—¡AH!~— se echó ligeramente hacia atrás, temblando bastante más que antes

Atsushi se estaba empujando más, sus caderas hacia arriba con el deseo de recibir más, no habían palabras que lo indicaran, era comunicación por medio del físico, no tenía el valor para decirlo y demostrarlo se le hizo extrañamente menos penoso

—R-Ryonosuke- — al decir aquel nombre, las embestidas eran más fuertes y más profundas, logrando justo lo que quería —ah~ se siente bien mgh~ Ryonosuke~ ah~— tembló mientras las embestidas se hacían más rápidas, pero también sentía su líquido pre-seminal caer sobre su abdomen, estaba cerca, y a juzgar por la mirada contraria, Akutagawa también lo estaba

Atsushi se aferró a la espalda desnuda del pelinegro, rasguñando por más de haber querido evitarlo, y su respiración agitada sobre el oído ajeno era estimulante

Estaban abrazados, sacudiendose ambos con fuerza, —UGH~ AH~— la garganta del pasivo dejaba salir gemidos agradables y audibles por todo el hogar, —estoy cer- ah...ah~— llegó al orgasmo antes de poder decir cualquier cosa, su interior presionó un poco más al miembro de Akutagawa, quien se vino por consecuencia

Akutagawa salió de Atsushi, removiendo el condón para hacerle un nudo, dejándolo por ahí para desecharlo luego, primero quería comprobar cómo estaba su pareja, abrazándolo con cariño para darle un beso en la frente

—estoy bien— rio Atsushi —se...sintió bien— abrazó a su novio de regreso, dándole un espacio después para que pudiese decir algo

"¿Si estás bien?", Atsushi asintió, "también se sintió bien para mí...podremos durar más la próxima vez"

—Ah- sí, la próxima vez— era cierto que habían durado relativamente poco debido a que era la primera vez de ambos, dejándolos un poco avergonzados

"¿Te duele algo?" El pelinegro cambió el tema

—No, no me duele nada, estoy bien, ¿tu estás bien?— Akutagawa asintió, para luego tomarle el rostro y darle un beso corto en los labios. El beso corto había sido suave, y tan satisfactorio que volvió a hacerlo, para seguir llevando los besos por todo el rostro de Atsushi, haciendo reír a este, estaba feliz de la cercanía que sentía en ese momento

—Aku...Ryonosuke— captó la atención de este —yo...— dio una sonrisa con emoción —te- a-mo— hizo las señas marcadas mientras las acompañaba con su voz

Akutagawa sonrió de regreso, con su rostro ruborizado, y con un pequeño esfuerzo, trato de aclararse la garganta

—A...mo— la voz había sido ronca, sonaba afónico, pero ese pequeño esfuerzo en realidad se entendía como algo grande, haciendo sonreír a Atsushi, quien se lanzó a abrazarlo con fuerza

—Es adorable pero por favor no lo hagas si duele— le dijo al oído —pero te entiendo...yo también haría ese esfuerzo con tal de decirte que te amo—

Tendrían que seguirlo demostrando, con señas, a veces con palabras, pero también con muchísimas acciones, lo bueno es que ambos habían entendido las múltiples formas de comunicación que tenían para usar e intentar.

Quizás Dazai sabía todo desde un inicio, quizás pudieron hacerse pareja desde un inicio, pero primero necesitaban comprender su forma de comunicación, necesitaban entenderse, y así poder amarse a como lo hacían ahora.

~Fin~