El tren no podía ir más lento, o eso pensaba Hall.

-Estoy aburrido- se quejó Hell-

-Concuerdo con mi hermano- Hall se sumó-

-Cállense estoy leyendo- Haruna tenía la vista fija en su libro-

-¿Qué estás leyendo Haru-chan?- Hall tenía curiosidad-

-Es un libro para aprender a quitar maldiciones-

-Suena interesante, préstamelo- se abalanzó sobre la chica-

Una patada en la cara hizo que Hall se volviera a sentar en su lugar.

-No molestes a Haruna-san- lo regaño Hell-

El resto del viaje fue, bueno para resumirlo un desastre, Haruna incluso se cambió de vagón para poder leer en paz.

Hall no dejó de quejarse y querer molestar a las personas del tren y Hell, Bueno el trataba de que su hermano dejará la peluca blanca del señor de enfrente.

-Basta Hall, te meterás en problemas- se cruzó de brazos-

-Claro que no, este tipo está dormido- dijo poniéndose la peluca sobre el cabello-

Hell se dió por vencido y caminó fuera del vagón, entro en el mismo vagón que Haruna.

-¿Te has rendido?-

-Tengo un tonto por hermano- se dejó caer al lado de la chica-

Al poco rato un Hall con una mejilla hinchada entro en el vagón.

-¿Qué hiciste?- Haruna lo vió de reojo-

-Levante por error la falda de una señora- tocó con cuidado su mejilla-

Hell y Haruna comenzaron a reírse.

-No es gracioso- musitó molesto-

Ambos chicos no dejaron de reírse de Hall en todo lo que restaba del viaje.

Al fin llegaron a su destino, después de más o menos dos días de viaje. Los tres bajaron del tren y tomaron sus maletas.

-¡Hey ustedes tres, por aquí!- se escuchó una voz a lo lejos-

Haruna pudo ver un auto negro y un tipo de cabello rojo que balanceaba su mano para llamar su atención.

-Chicos, por aquí- sugirió la pelinegra-

Ambos chicos asintieron y cargaron sus maletas hasta quedar frente al tipo pelirrojo.

-Al fin llegan- les sonrió- Mi nombre es Spirit y soy una death scythe de Shinigami-sama-

Hall y Hell estrecharon su mano, pero Haruna no lo hizo, prefería no tocar a las personas.

-A ella no le gusta el contacto físico- explicó Hall-

-Si, ella es más de palabras- Apoyó Hell-

Ambos chicos sonrieron nerviosamente mientras trataban de medir sus palabras, no podían revelar nada acerca de su técnica.

-Esta bien, comprendo- Spirit les sonrió de nuevo-

Ambos chicos suspiraron aliviados.

Los tres chicos subieron al auto rumbo al Shibusen, su nuevo hogar. Hall y Hell miraban por la ventanilla del auto, Haruna se limitó a seguir su lectura dónde se había quedado, su libro era más interesante que ese lugar al cual ella no quería ir.

-¡Mira Hell ya llegamos!- Hall estaba emocionado-

-Haruna-san llegamos- Hell controló su emoción-

Haruna asintió y siguió concentrada en su libro.

Al llegar spirit les indicó una pequeña casa donde los tres podrían quedarse sin costo, luego les entregó sus horarios y les indicó el camino para llegar a varios lugares en la ciudad, después se despidió y les indicó que mañana comenzaban sus clases.

Hall y Hell fueron directo a dormir, estaban muy emocionados por recorrer la ciudad, pero su cansancio era mayor. Haruna se sentó en el sofá y siguió su lectura, odiaba ese lugar.