29•
Jungkook no le creyó esta vez, no le creyó cuando él estaba siendo completamente sincero con lo que sentía. Fue un estúpido, tendría que haber seguido los consejos de Namjoon y alejarse de él antes de que esto sucediera y evitar que le rompieran el corazón, porque eso es lo que Jungkook hizo.
Ahora Jimin está llorando en el suelo, en un rincón de su cuarto, y completamente roto.
Ellos nunca fueron una pareja, no estaban juntos, así que esto no es específicamente una 'ruptura', y eso lo hace sentirse aún más patético, porque siente que eso acaba de suceder. Rompió con Jungkook.
Cuando Namjoon lo encontró, Jimin estaba sentado en la cama de su habitación perdido en sus pensamientos. El mayor frunció el ceño, moviéndose hacia él, sentándose en el borde de la cama. Sonrió de lado por un momento. Jimin le escribió un mensaje, resumiéndole lo que había sucedido y él ahora necesitaba su compañía. Namjoon quería regañarlo, pero sabía que no era el momento indicado para eso, además, no lo culpa; él también hubiera caído por Seokjin en su situación, así que no va a juzgarlo por eso.
— Entonces... ¿ambos estamos más jodidos que nunca, amigo?—
Jimin soltó una risa, y asintió. Sí, lo necesitaba en este momento para que lo hiciera reír un poco — Así parece, Nam—
— Somos igual de estúpidos, pero... al menos nos tenemos entre nosotros. Vístete, saldremos—
— Es domingo por la tarde, ¿a dónde iremos?—
— No lo sé, por ahí. No quiero que estés encerrado aquí. Vamos—
Estaban en el colegio ahora, Jimin se saltó aquellas clases que compartía con Jungkook porque simplemente no quería verlo. Namjoon hizo lo mismo con la clase de deportes para no ver a Seokjin, así que se quedó vagando por el establecimiento hasta que fuera la hora de coincidir la clase con Jimin.
Jimin salió de una de sus aulas y se dirigió al baño. Al salir, pudo visualizar a Daewoo hablando con Nayeon, aparentemente, con demasiada confianza. Frunció el ceño ante aquella situación que veía porque le resultó bastante extraño que Nayeon esté hablando justamente con el novio de Seokjin. Ella está obsesionada con él... no lo entiende.
Se acercó a ellos escondiéndose en una columna para tratar de escuchar qué mierda hablaban.
<¿Aún no tuvieron sexo?>
<No, lo intenté el otro día. Lo toqué sin su consentimiento y se enojó. Es un histérico >
El padre de Nayeon es director de una de las universidades de Leyes más prestigiosas del país. Es por eso que tienen mucho dinero. Daewoo es el mejor en su clase, es sumamente inteligente, pero en dicha universidad no aceptan simplemente a excelentes alumnos. Para ingresar allí deben tener contactos o ser gente influyente, y la familia de Daewoo no es tan adinerada.
Nayeon supo que Daewoo quería ingresar allí, y a ella se le ocurrió la grandiosa idea de sobornarlo con eso. Ella odia a Namjoon y quería verlo sufriendo, la única manera era metiéndose con Seokjin. Convenció a Daewoo de llevar adelante este plan porque ambos saldrían ganando algo. Daewoo era gay y no iba a ser difícil fingir ser el novio perfecto... ¿A quién no le gusta el sexo? Seokjin le gustaba, por supuesto que iba a aceptar el trato.
Daewoo ingresaría a la mejor universidad, y Nayeon vería a Namjoon sufriendo.
En cuanto vio que Daewoo y Nayeon se alejaron, fue corriendo en busca de Namjoon a decirle todo. Jimin no hablaría con Seokjin porque sabe que el pelirosa no tiene el mejor concepto sobre él, y no se equivoca. Jimin fue un imbécil con él en todo momento, y todo por estar celoso de Namjoon . Así que simplemente no podía ser el que le cuente todas esas cosas porque posiblemente no vaya a creerle.
Namjoon esperó que Seokjin saliera del colegio para poder hablar con él. Creyó que lo vería salir solo, pero al contrario de eso, Seokjin salió del colegio de la mano de Daewoo.
Jimin pudo ver como el pecho de Namjoon se inflaba al ver esa imagen. Intentó detenerlo, pero sabía perfectamente que Namjoon iba a golpear a Daewoo tarde o temprano.
Sin pensarlo dos veces; Namjoon caminó hacia ellos. Se acercó lentamente por detrás y, repentinamente, le dio un fuerte empujón. En cuanto Daewoo se dio vuelta, recibió un doloroso golpe en su rostro, haciéndole sangrar su nariz al instante.
Daewoo frunció el ceño porque definitivamente no se lo esperaba. — ¿Qué mierda te pasa, imbécil?—
Seokjin empujó a Namjoon , pero él lo miró con rabia también. — No te metas, Jin. Esto es con él—
El rubio quiso devolverle el golpe, pero Nam estaba sumamente furioso y comenzó a golpearlo fuertemente, hasta que Daewoo cayó al suelo y recibió patadas en el estómago. Seokjin estaba inmóvil, porque nunca vio a Namjoon de esa manera, era otra persona. Entonces, nuevamente recordó las palabras que una vez Nayeon le dijo sobre Namjoon .
«Namjoon es demasiado agresivo, golpea a todos, no debes confiar en él. Se acuesta con todas y después las deja llorando. Te promete amor para llevarte a la cama. Es violento, mala persona, ten cuidado»
Aquellas palabras se hicieron eco otra vez en su mente y estaba descolocado. Se había armado un revuelo, y todos los estudiantes formaban una ronda alrededor de ellos tres. Jimin intervino antes de que Namjoon matara al estúpido de Daewoo. No quería tener que visitarlo tras las rejas si lo asesinaba de verdad.
En cuanto Jimin los separó, Namjoon escupió a Daewoo, escupió la sangre de la comisura de su labio (porque recibió dos o tres golpes) y se alejó de él.
Namjoon caminó lentamente hacia donde estaba Seokjin, y él dio pasos hacia atrás, luciendo asustado de verdad. Namjoon frunció el ceño ¿A caso Seokjin le teníamos miedo? ¡Él es incapaz de hacerle daño!
— Jin—
— Aléjate, Namjoon —
— Bebé, tuve que hacerlo. Ese idiota quiso propasarse contigo, yo no puedo perm-—
Otro golpe. Otro golpe de Seokjin y este dolió mucho más que el anterior. Tambaleó apunto de caer al suelo. Seokjin lloraba.
— Deja de meterte en mi vida, Namjoon . Tú causaste todo esto, y ahora es tarde—
— Jin, él está usándote, está usándote, bebé.—
— No, lo que sucede es que no puedes aceptar que seguí adelante. ¡Supéralo, Namjoon , supéralo! A ti no te incumbe si yo tengo sexo o no con él o con quien se me antoje. ¡Déjame en paz!—
— Bebé—
— Tocaron tu ego, Nam, ¿no es así? ¿No puedes aceptar que me guste otro que no seas tú? ¿No quieres que me toque otro que no seas tú?— Seokjin se acercó a su oído y le susurró sólo para que él escuchara — ¿no quieres que me la chupe otro? ¿Qué me la meta otro que no seas tú?—
Namjoon negaba frenéticamente porque el menor estaba provocándolo y las imágenes que Seokjin acaba de mencionar se le aparecían en su mente, y ¡No! No quiere que a Seokjin le guste otro, ni que lo toque otro, ni mucho menos que tenga sexo con otro. Seokjin es suyo, y se lo prometió, le prometió que él iba a ser el único en su vida.
— No lo hagas, Jin— Namjoon se quebró, se escuchó a si mismo sonar roto, y sus lágrimas comenzaron a caer por su rostro — Por favor, bebé, no lo hagas. Me lo prometiste, me prometiste que yo sería el único—
Seokjin sonrió negando — Así como tú prometiste que jamás me harías daño, Namjoon .— Se dio media vuelta y caminó hacia Daewoo. El rubio lo estaba esperando para subir al auto, Seokjin se fue a su casa con él.
Al instante que ingresó a la casa de Daewoo se procuró de curar aquellas heridas que el rubio tenía a causa de su ex.
— Perdón... no sé qué decirte—
— No pidas perdón. Tú no tienes la culpa de que Namjoon sea un imbécil. No entiendo ¿Qué le viste? Es un drogó-—
— Hey, no le digas eso. Él cambio, ya no lo hace—
Daewoo rió y negó — Es tan obvio que aún lo amas Seokjin. ¿Que haces conmigo, entonces?
Seokjin no puede mentir, sólo bajó su mirada, mordiéndose el labio. Daewoo levantó su rostro con una mano en su barbilla. — ¿Aún quieres...?—
«Está usándote, bebé»
«No lo hagas, Jin»
«Por favor, bebé. Me lo prometiste»
Seokjin asintió débilmente y eso era todo lo que Daewoo necesitaba para avanzar. Se inclinó y besó a Seokjin con fervor... el menor no correspondía al mismo ritmo, pero lo hacía, correspondió al beso poco a poco y luego... sucedió.
Tuvo sexo con Daewoo.
El rubio lo llevó a casa luego de eso, se despidieron con un beso, y Seokjin se adentró en su casa. Al instante en que lo hizo corrió por las escaleras, subiendo a su habitación de prisa.
Se quitó su ropa de inmediato y cuando estuvo completamente desnudo ingresó a la ducha. El agua estaba helada, pero Seokjin se sentía sucio y necesitaba arrancar de su piel todo aquel rastro de Daewoo.
Se arrepentía, se arrepentía tanto y sus lágrimas no dejaban de caer. A pesar de que Namjoon no se merecía que él cumpliera aquella promesa, sintió que lo engañó. Engañó a Namjoon , rompió su promesa.
[...]
Acaban de cumplir 6 meses, y Namjoon quiso sorprender a Seokjin con un lindo fin de semana. Lo llevó al cine por la tarde, luego a cenar y después... lo llevó a un hermoso lugar. Seokjin creyó que lo llevaría a su casa, como siempre; pero al contrario de eso, estando en el auto, Namjoon frenó en una esquina y sacó un pañuelo que tenía escondido en el auto para cubrir sus ojos.
— ¿Qué haces,Nam?—
— Te tapo los ojos para que no veas la sorpresa que te tengo, bebé—
— ¿Más sorpresas aún?—
Namjoon bajó del auto y se registró en aquel hotel lujoso donde pidió la mejor suite (gastando todos sus ahorros en eso) Luego se bajó del auto y ayudó a Seokjin a ingresar en aquella habitación que les otorgaron. La 276.
Una vez que estuvieron en la puerta, Namjoon le quitó el pañuelo que cubría los ojos de su novio.
— ¿Nam? ¿Dónde estam-—
— Abre los ojos, bebé—
No iban a esperar demasiado, pronto los labios de Namjoon se posaron sobre los de Seokjin y la pasión hizo el resto. Ya se habían visto desnudos varias veces, pero este momento era especial, era distinto ésta vez... harían el amor.
Los besos pasaron de tiernos y dulces, a ser fogosos y sin coordinación. Se recostaron en la cama, sin decir ni una sola palabra, y con ambos cuerpos desnudos. Namjoon se posó delicadamente sobre él, comenzando a dejar huellas de besos en cada parte del cuerpo de Seokjin. Esos besos eran tiernos, llenos de amor, no eran desubicados. Seokjin comenzó a jadear por el roce de entrepiernas y sus ojos pedían a gritos que Namjoon comenzara de una vez, entonces se posó sobre el mayor y sin permiso, besó su cuello, descendiendo lentamente hasta su pecho, estómago y terminando en la entrepierna.
Ya lo había hecho mil veces, porque con eso es con lo que se satisfacían el uno al otro, y Namjoon amaba que Seokjin lo hiciera, porque sólo él lo hacía de la manera en que más lo calentaba. Seokjin metía y sacaba repetidamente de su boca el miembro de su novio, chupándolo casi con desesperación.
Cuando sintió que estaba a punto de terminar, Namjoon se sentó en el borde de la cama, y puso de pie a Seokjin frente a él para hacerle lo mismo, pero con un extra; acercó una de sus manos y metió tres de sus dedos en la boca de Seokjin para que los mojara con su saliva. Una vez que lo hizo, Namjoon metió con delicadeza uno de sus dedos en su interior haciéndolo jadear. Estaba sumamente estrecho, lógicamente, pero Namjoon se encargó de seguir chupando su miembro para distraerlo y que el dolor se convierta en placer.
Cuando el interior de Seokjin se sintió bien lubricado, el menor se acercó a la boca de su novio con desesperación. — Hazlo mi amor, hazlo Nam, por favor—
Namjoon se acercó y lo besó con delicadeza. Comenzó a moverse despacio pero con constancia... el miembro de Seokjin latía fuerte, entonces el menor comenzó a masturbarse, coordinando con las suaves embestidas de Namjoon . El mayor empujó unas veces más con fuerza llegando al punto en que Seokjin llegó al climax, corriéndose en su propio estomago; Namjoon en ese mismo instante sintió un cosquilleo en su vientre, sus músculos se contrajeron y terminó dentro de Seokjin.
— ¿Eres mío, bebé?—
— Tuyo,Nam—
— ¿Lo serás siempre?—
— ...sí, por supuesto, siempre—
— ¿Me lo prometes?—
— Te lo prometo—
[...]
Antes todo era fácil. Ellos sólo pasaban el rato, iban a los clubes o fiestas, consumían y se relajaban porque no tenían preocupaciones, simplemente para ellos estaba todo bien, no tenían el corazón roto. Pero ahora, de repente Jimin y Namjoon tienen una angustia enorme y es por culpa del amor.
Puto amor.
— ¿Qué haremos cuando terminemos las clases? No falta mucho y no me he anotado en ninguna universidad... no sé qué mierda hacer— Jimin susurra.
— Ni yo, es decir, me había anotado en una pero debo rendir un examen y... ugh, no tengo ganas de estudiar.—
— Yo opino que nos vayamos a la mierda, Nam—
Namjoon le dio una pitada a su cigarrillo, riendo y asintiendo. — No estaría nada mal—
Jimin despegó su espalda del paredón de la biblioteca donde estaban apoyados. Estaban salteándose una nueva clase, como en los viejos tiempos. — No, pero hablo en serio... ¡Podríamos viajar!—
— ¿A dónde quieres ir?—
— No lo sé, ningún lugar específico. Iremos sin rumbo, donde nos lleve el viento—
— No tengo tanto dinero—
— Pero tienes auto... yo tengo ahorros.—
Namjoon también tenía ahorros y era porque se suponía que iría a la universidad. Ese dinero era para poder alquilar un departamento con Seokjin. Habían planeado vivir juntos en cuando Namjoon se graduara. Nadie lo sabía, sólo ellos dos.
Namjoon frunce el ceño, y mira pensativo hacia un árbol — yo... tengo ahorros...—
Jimin saltó del lugar para abrazarlo y besar su mejilla muchas veces — Yo sabía que podía contar contigo, Nam. ¡Por eso te amo!—
Namjoon rió y palmeó el rostro contento de su amigo — ¿Olvidas algo? Como que ¿Soy el mejor y que no puedes vivir sin mi?—
— Acabas de decirlo tú, Nam—
— Hola, ojos bonitos—
Jimin mira hacia un costado, porque un extraño acaba de susurrarle al oído.
— Hola— contesta. Jimin bebió demasiado, pero no está ebrio.
— ¿Quieres venir a mi casa?— Es el mismo chico que se encontró aquella ves. ¿Dongjae? ¿Dowoon? — Soy Dongwoon, ¿te acuerdas de mi?—
A Jimin siempre le gustó eso de ir directo al grano. Odia el juego previo cuando la cosa es así de simple, sin vueltas. ¿Quieren tener sexo? Listo, se van juntos. ¡No hay que pensar demasiado! Lo único que quería en este momento, era borrar la imagen que tenía de Jungkook besando a Yuju minutos atrás.
Jungkook luce feliz, y él no tiene porqué estar triste ¿Verdad? Él también puede ser feliz, él sólo quiere sentirse bien. Esperó a que Namjoon llegara del baño para avisarle que se iría con aquel chico. Namjoon se mostró algo sorprendido, pero no lo iba a detener si lo que quería Jimin era tener sexo con algún tipo.
Tomó la mano de aquel chico y salió de ese bar con él hacia su departamento para borrar a Jungkook de su mente. Olvidar su piel, sus besos, sus caricias y todos los recuerdos.
Jimin inclina la cabeza hacia atrás, dejando escapar un gemido de placer porque aquel castaño ahora se la estaba chupando. Es la segunda vez que lo ve, no sabe quién es, y realmente no le importa; todo lo que sabe, es que lo que él está haciendo, se siente bien.
— Justo ahí.— Alienta al desconocido con voz ronca, cuando siente que su miembro se endurece, y cierra los ojos fuertemente.
Si, él puede hacer eso, es más fácil para él pensar en otra cosa, por ejemplo, creer que el placer que está sintiendo se lo está dando Jungkook. Si cierra los ojos puede imaginar que el cabello que está agarrando con su mano es el corto cabello de Jungkook. Él puede, incluso, imaginar la mirada penetrante de Jungkook frente a él, mirándolo fijamente mientras lo come entero.
Su miembro estaba sumamente duro, y ansioso deseaba que él empujara fuertemente dentro suyo, y cada vez más profundo. Pero entonces abre los ojos y no es él, no es Jungkook. El castaño quiso darlo vuelta para comenzar, pero nuh-ah... Jimin se negó a ser el que esté debajo.
Él, únicamente, se convierte en la Princesa sumisa con su Daddy. Sólo con él.
....
Con movimientos lentos, él le quita aquel vestido negro que lleva, dejándolo caer al suelo. Él deja que sus ojos recorran su cuerpo, y realmente desearía poder sentir algo; porque ella, definitivamente, es hermosa, pero no puede. Jungkook sólo desea que su novia fuera ella... (bueno, él) porque no puede tener una erección. Yuju no parece preocuparse, sin embargo; besa sus labios, hasta que desciende suavemente, y luego está de rodillas delante de él, trabajando con su mano y su boca. Eso, al menos, parece estar funcionando, porque si inclina la cabeza hacia atrás para el ángulo recto, apenas puede ver su cara y así es más fácil de imaginar que se trata de Jimin.
Todos estos pensamientos están fluyendo a través de su cabeza y él se siente un poco culpable, porque está con Yuju, es su novia, y por lo tanto, no debe estar fantaseando con que es otra persona. No puede evitarlo, de todos modos. Cuando él está lo suficientemente duro, la recuesta en la cama. Se posiciona en su entrada entre sus piernas, y cuando empieza a empujar dentro, se aferra a las sábanas de la cama, mientras Yuju apoya sus tobillos sobre sus hombros.
Cierra sus ojos y ahora está empujando dentro de ella, fuerte y profundo, como sabe que le gusta. Eso da resultado, porque ahora está escuchándola gemir. La extrañaba tanto...
— Te amo, Princesa—
Yuju no dice nada, porque ¡Dios! ¿Jungkook la ama?
— Hermosa... te amo, Jimin—
Yuju empujó a Jungkook de encima, sumamente histérica (no es para menos) — ¡¿Qué?! ¿Cóm-Qué? ¿Acabas de llamarme Jimin?—
Jungkook abrió y cerró su boca varias veces, sin saber qué mierda decir, porque, ¿qué decir? Está teniendo sexo con su novia y acaba de gemir el nombre de otra persona.
— Jungkook, ¿qué mierda significa esto?— Yuju lo empujó fuera de ella, cubriéndose con la sábana, tirando de su cabello.
— Nada. Sólo, uh- ¡Me confundí! ¿De acuerdo?—
— En caso de que no lo sepas, Jungkook, yo soy tu novia, y acabas de decir el maldito nombre de otra persona mientras gemías. ¡Necesito una puta explicación!— Yuju elevó su voz, cruzando los brazos sobre su pecho. Jungkook la acalló porque el cuarto de sus padres está al lado, pero ella se negó a bajar el tono de su voz.
— ¡No lo sé! ¿Okay? Simplemente...— Jungkook se rascaba la nuca, estaba realmente nervioso.
— ¿Jimin? ¿Le dijiste hermosa a Jimin? ¿Qué caraj-— Yuju frunció el ceño, tratando de asimilar ciertos acontecimientos del pasado, atando cabos.
Recordó cuando lo vio por primera vez, que fue en aquel cumpleaños de Sehun donde Namjoon besó a Seokjin. Jimin y Jungkook no se despegaron en toda la noche, no hicieron nada que llamara la atención, sólo estaban juntos. Luego la noche que Jungkook y ella se besaron por primera vez, en la fiesta de Nayeon; Jungkook se había puesto loco buscando a Jimin por todos lados y la dejó plantada para ir a buscarlo, y por último, una tarde que estaban juntos, Jungkook contó una anécdota graciosa: — Y luego, y luego ella se levantó del suelo porque...—
— Espera, ¿ella? ¿No me hablabas de Jimin?—
— ¿Qué piensas?— Preguntó Jungkook al ver el rostro confundido de su novia.
— ¿Tú... y Jimin? ¡Dime que no es lo que pienso, Jungkook!— En verdad, era la única explicación lógica que a su cerebro se le ocurrió para explicar su comportamiento. Pero... no podía ser eso... ¿verdad?
Jungkook se muerde la lengua y frunció los labios.
— ¿Hay algo entre tú y Jimin?— Le preguntó de nuevo, más audaz en esta ocasión. Se quedó mirándolo, casi en estado de shock.
— ¿Por qué me preguntas eso?—
— Responde a la pregunta, Jungkook. ¿Estás engañándome con él?— Se nota que ahora está enojada, estaba segura de que era eso al ver el rostro de Jungkook. Antes de que siquiera pudiera decir algo en su defensa, su palma chocó con una de las mejillas de Jungkook. — ¿Estás engañándome con él? ¡No puedo creerlo!— Gritó.
Jungkook se frotó su mejilla al instante — Nunca dije eso, ¡no pongas palabras en mi boca que no dije!—
— ¡No, tienes razón! No has dicho nada en absoluto, lo que es peor!— Le gritó a él a medida que se levantaba de la cama y recogía su ropa del suelo para comenzar a vestirse.
Jungkook se puso de pie, tratando de frenarla. — ¿A dónde vas? No te vayas así, hablemos—
Con una mano en su brazo, la dio vuelta y ella lo miró casi con rabia, pero a la vez era como si estuviera en el borde de las lágrimas. — ¡¿Qué quieres?!—
Jungkook tragó saliva con dificultad. Lo mejor sería negarlo a muerte y no dejar que ella se vaya de esta manera. Ese es el camino fácil, ¿verdad? Sin embargo, Jungkook no va a tomar el camino fácil esta vez. Soltó su brazo lentamente y miró al suelo, avergonzado. Yuju esperaba que le negara todo, pero al contrario de eso, Jungkook alzó su vista casi con vergüenza. — Perdón—
Yuju rió sarcásticamente, negando. — Creo que no hace falta que te diga que terminamos ¿verdad?—
Jungkook asintió, mirando nuevamente al suelo. Se sentía terrible de verdad, pero no podía fingir más. Yuju es una buena chica y se merece alguien que la quiera de verdad. Él intentó, de verdad que intentó, pero sus sentimientos por Jimin son más fuertes, y le jugaron una mala pasada estando en la cama con otra persona.
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