25•

Jungkook se fue dejando a Jimin confundido, y herido también. ¿Jungkook acaba de rechazarlo? Jungkook no lo rechazó nunca.

Namjoon se acercó a él cuando logró visualizarlo. - Bro...-

- No estoy bien.- Jimin afirma - Jungkook, Jungkook no--

- ¿Qué sucedió?-

Jimin negó, e hizo un gesto con la mano. No importa.

Realmente deseaba que Jungkook quisiera quedarse con él, que todo se solucione y vuelvan a ser lo que eran. Eso no ocurre, sin embargo, Jungkook simplemente se aleja hacia la salida, llevándose de la mano a Yuju.

La noche fue un fiasco para ambos, y decidieron darla por terminada en aquel momento. Caminan hacia la salida, pero antes, Namjoon pudo ver a Seokjin con Daewoo sobre una columna. No se estaban besando, pero el mayor tenía una de sus manos apoyadas en la pared y con la otra tocaba su rostro o sus mechones rosados.

Namjoon quiso vomitar al instante en que sus ojos vieron como el señor perfectito tocaba la cintura de su bebé, casi acercándose para besarlo... sólo él podía tocarlo de esa manera, sólo sus labios podían besarlo.

Jimin quiso frenarlo cuando vio que Nam hizo un ademán por ir hacia ellos, pero no hubo caso, porque Namjoon hizo lo que quiso.

Se abrió paso, caminando a una velocidad muy rápida por lo que parece que está tratando de marcar territorio con lo suyo, porque Seokjin es de él.

Antes de que se dé cuenta de ello, su cuerpo se balancea hacia adelante y golpea al chico en la cara con tal fuerza impactante, que ni siquiera siente algún dolor en sus nudillos, aunque está seguro de que lo sentirá luego.

- ¡Namjoon ! ¿Qué haces? ¡¿Estás loco?!- Grita Seokjin mientras se agacha a levantar a Daewoo del suelo.

- ¡Te estaba tocando! ¡No voy a dejar que te toque, ni que te bese, bebé! ¡Tú eres mío!- Dice Namjoon mientras se acerca al rostro de Seokjin.

Por un instante su vista se nubló. El rostro de su bebé no era el de siempre, sus ojos transmitían rabia, y no fue hasta que la sangre caliente empieza a correr por su nariz que se da cuenta de que Seokjin lo golpeó.

- ¡No te acerques, Namjoon ! ¡Yo no soy de tu propiedad! ¡Déjame en paz!-

El señor perfectito de repente se pone de pie, con una mano en su boca, limpiándose la sangre de su comisura. No dice nada, simplemente toma del brazo a Seokjin y caminan hacia otro lado.

Namjoon quedó de pie en silencio, y tildado, hasta que Jimin se acercó, y lo llevó del brazo fuera del lugar. El pelinegro manejó el auto de Namjoon , porque el mayor no se encontraba en condiciones de conducir. A pesar de que ambos habían bebido demasiado, el mal rato que pasaron allí dentro hizo que la lucidez se hiciera presente.

- Seokjin me golpeó- dijo, una vez que estuvieron en la puerta de su casa.

- Lo sé, Nam. Vi todo-

- No puedo creerlo... él... él no es violento. Él-él me golpeó y todo por defender a ese-

- Yo creo que más que por defenderlo a él, lo hizo por la rabia propia que siente por todo. Está dolido, resentido, no sé-

- Yo sól-yo sólo quise... Seokjin es mío, es mi bebé- dijo, comenzando a sollozar. - Seokjin no me- no me habría golpeado nunca. Yo no... no entiendo-

Jimin se acercó a abrazarlo por un momento cuando Namjoon comenzó a llorar. - Ve, Nam, ve a dormir. Mañana te traeré el auto, descansa- palmeó su espalda y rompió el abrazo.

Namjoon asintió mientras se limpiaba las lágrimas. Se bajó del auto y caminó a casa. Jimin esperó a que entrara y luego condujo hasta la suya.

....

El viaje a casa es bastante corto. Entró a su cuarto en silencio, desvistiéndose mientras su vista no se desvía de la ventana, donde puede ver perfectamente el cuarto de Jungkook. Siente un terrible dolor de cabeza en ese instante, y cree que sería bueno tomar una ducha caliente antes de dormir. Salió del baño con una toalla envuelta en su cintura, y observó por última vez la ventana de su vecino. No quería espiar, pero no lo pudo evitar, necesitaba saber si Jungkook estaba o no con Yuju en su habitación... en su cama.

No podía ver nada porque las cortinas eran oscuras. Por supuesto que no se iba a quedar con la duda, y es por eso que se vistió lo más rápido que pudo y salió de su casa con urgencia, pronto estaba por amanecer y no quería ser descubierto. Nuevamente usó aquella llave que Jungkook escondió en una maceta y entró por la puerta del jardín. Subió las escaleras lo más silencioso posible.

Ahora estaba parado frente a la puerta de la habitación de Jungkook. Tragó saliva en seco y se asomó a mirar por la cerradura. No hizo falta escuchar los gemidos, pero vio la silueta de Jungkook, empujando fuertemente dentro de Yuju, casi tan fuerte como empujaba dentro de él.

Resopló mientras se irguió de pie. Se dio media vuelta para bajar por las escaleras, pero vio a la madre de Jungkook salir de su habitación.

- Jimin, amor, no sabía que te quedaste aquí-

- Señora-yo... no-

Jungkook dejó de embestir a Yuju cuando escuchó los murmullos en el pasillo.

- ¿Qué sucede? ¿Por qué paraste?- Preguntó Yuju susurrando. Estaban llevando bastante bien el tema de no ser ruidosos.

- Shh... mi madre está hablando. No sé con quién, espera-

Jungkook se puso de pie, y Yuju se cubrió entera con el edredón. Se acercó a la puerta y no oyó más que silencio, entonces la abrió lentamente y pudo ver a Jimin bajar por las escaleras. Por instinto, el pelinegro se dio vuelta y conectaron miradas sólo por un segundo. Jungkook rompió el contacto cerrando la puerta.

....

Tal vez él no tiene derecho a estar enojado, porque lo que tenían se terminó, y ellos nunca estuvieron en una relación ni nada, pero aún así se sentía engañado.

Ahora en lo único que piensa es en que fue un estúpido error haberse acostado con él desde un primer lugar. Fue una estupidez, y recién cae en cuenta de eso... ahora, ahora que Jungkook por fin puede seguir adelante con alguien más.

Sentía vergüenza de él mismo en este momento, de haberse mostrado como una puta fácil cada vez que quiso tener sexo. Vergüenza de dejarse llamar Princesa, de humillarse, quizás, de haber sido un maldito débil.

Se arrepentía de haberse enamorado de Jungkook. O de haberse dado cuenta tarde de que lo estaba, a este punto da igual.

Al día siguiente, Jimin llega a casa de Namjoon con su auto, como habían acordado. Se la pasaron todo el día hablando, confesándose miles de cosas, y estuvieron de acuerdo en algo.

- Necesito que me ayudes a olvidar a Seokjin. Si ves que intento hablarle o acercarme a él, golpéame, no sé, pero impídelo-

- Okay, tú igual, necesito dejar de pensar en Jungkook. Necesito sacarlo de mi mente, no dejes que haga alguna estupidez-

Pasaron varias semanas después de eso. Namjoon ignoró el hecho de ver a Seokjin de la mano de Daewoo en la escuela, y de las constantes burlas de Nayeon sobre eso.

- Idiota-

- No sé qué festejas, porque Seokjin tampoco está contigo-

- No importa, siempre quise separarlo de ti, porque te detesto-

- A mi no me engañas, linda. Me odias porque yo rechacé tu culo chato.-

- Ya quisieras...-

- No olvido que te me lanzaste como zorra apenas llegué aquí. Debo ser el único que te rechazó y además porque me quedé con Seokjin después. Deja de estar obsesionada conmigo, piérdete, estúpida-

Sábado por la noche. Jungkook estaba caminando hacia la barra para comprar unos tragos, y en el camino, vio a Do soyheterosexual Jimin sentarse a horcadas sobre un chico cualquiera que, de seguro, acaba de conocer.

Jimin está haciendo esto en una jodida disco, a la vista de cualquiera y automáticamente siente rabia. ¿Cómo es posible que sus ojos estén viendo esto? ¿Jimin... con otro hombre?

Las manos de este extraño están vagando sobre el cuerpo de Jimin, y él parece estar disfrutándolo, está sonriendo y oh... se están besando.

Jungkook se encuentra congelado, tensando los músculos con sorprendente rabia, y eso es raro en él, porque no suele enojarse por muchas cosas, es más bien, tranquilo.

Luego sus miradas se conectan, Jungkook cree que Jimin va a empujar al chico, levantarse y correr hacia él para consolarlo y decir que lo siente, sin embargo, Jimin no lo hace. Sus ojos se posan nuevamente en el chico al que está besando y sonríe al despegarse por un momento.

Sabe que Jungkook está mirándolo, pero a él parece no importarle. Tal vez a Jimin realmente no le importa, pero Jungkook duda por si acaso, y va en busca de ella... su Princesa.

Se acerca a ellos y empuja al chico lejos de Jimin. El extraño no entiende quién es ese tipo y por qué lo está golpeando y es por eso que mira a Jimin, intentando atar cabos al respecto. Jimin está un poco contento por esto, pero él se estremece cuando es consciente de que Jungkook está en el suelo, recibiendo patadas en las costillas.

- ¿Qué demonios está pasando?-

Es Namjoon el que aparece en escena, cual héroe. Su puño se empuja sobre el rostro de aquel extraño que golpea a Jungkook, tumbándolo al suelo. Jimin ayuda a su ex amigo a ponerse de pie.

- ¡Él comenzó!- El extraño grita, mirando a Namjoon , y señalando a Jungkook. Luego observa a Jimin con clara confusión en su rostro. No hacen falta las palabras, porque entiende perfectamente que no van a continuar lo que hacían, entonces se pierde entre la multitud luego de murmurarle un - Llámame- a Jimin.

Jungkook está respirando fuertemente. Sus ojos están bien abiertos, está sorprendido, ni siquiera puede asimilar lo que acaba de hacer. Jimin puede notar fácilmente que Jungkook está enojado con él, pero no puede entender por qué, cuando Jungkook no tiene ningún derecho a estar celoso. Él tiene novia.

En ese momento, Jungkook mira sus propios puños que están cerrados fuertemente, y sus nudillos tornándose blancos. Observa a Jimin y vergonzosamente mira hacia el suelo.

Está realmente preocupado de que Jimin llame al chico, no quiere que lo haga. Pero luego ve la mirada de furia absoluta del pelinegro mirando al chico que se va, y comprende que acaba de hacer algo que no debía.

Namjoon parece que está a punto de gritarles a ellos como un padre, regañando, pero las ondas de mano que Jungkook hace, lo frena.

- No necesitamos un regaño, Namjoon .- Dice entre dientes. - Jimin... ¿podem--

- Vete, Jungkook.- Namjoon insiste en su tono demandante de siempre.

Jungkook vacila por un momento, debatiendo consigo mismo si debía irse o no, así que sólo se limpia la sangre de su nariz y camina hacia Jimin.

- ¿Podemos hablar? ¿A fuera, a solas?-

Namjoon le dispara una mirada a Jimin, como diciendo: - pensé que hablamos sobre esto- . No es difícil de adivinar por qué Jungkook simplemente atacó al chico que Jimin besaba. Jungkook nunca se mete en peleas, odia la violencia, y sólo practicó boxeo durante un tiempo por hobbie, por hacer algún deporte.

- Vamos, Jimin- ordena Namjoon .

- No- Jungkook murmura. - Necesito que hablemos, Jimin-

- Bro- demanda Namjoon , nuevamente.

Jungkook lo mira con enojo esta vez. - ¿Acaso eres su madre?-

Namjoon se acerca a Jungkook al instante, también con furia y le habla casi rozando sus rostros. - No, soy su amigo, el único que tiene y nos vamos, ahora-

Namjoon choca a Jungkook con los hombros, saliendo de la disco y Jimin lo sigue, como siempre, confianza ciega.

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