Era la mañana. Tras ese abrupto sueño, Bolo se levantaría para arrepentirse de haber acosado a varias chicas durante el tiempo que vivió. Luego de ese tiempo de reflección, Bolo vería a Rottytops para ver cómo estaba. Al escucharse los pasos, Rotty despertaría con algo de cansancio. Pero apenas cargando unas energías.

—¿Cómo está la muertita viviente?— el chico peliazúl dijo con buena gana. —¿Lista para un emparedado de cerebro?

—¿Por qué dormiste afuera esta noche? Con razón sentía que no había nada.

—... Uh... No quería hacerte sentir como si estuvieras con un acosador. Recuerda que he estado en rehabilitación estos meses.

—Esta vez podías dormir conmigo sin problemas. Yo sé que no somos novios pero podías haberme cuidado por lo menos. Claro. Obviamente no me tendrías que quitar la ropa para cometer cochinadas.

—Por eso último fue que me dormí en la cubierta. No sabría decir cómo se llama esa acción pero no sería capaz. A menos que fuera con consentimiento.

—No te preocupes.— la chica zombi dijo con una sonrisa apenas. —Ahora solo veamos por algo de desayuno. Muero de ganas por un buen cerebro asado.

Tras haber desayunado, Rotty iría a la cubierta solo para darse cuenta de que Bolo cambió el lugar del barco.

—¿¡Por qué demonios cambiaste el barco del lugar!?— la chica zombi respondía enojada.

—¿No recuerdas lo del alcalde? Ese mariconazo se ponía a chillar cada vez que veía este barcazo en el muelle. Solo por que era de Risky hasta que apagamos los explosivos.

—Uh, claro...— la chica zombi suspiró. —¿Quieres que paseemos en esta parte de la orilla de la playa?

—Solo deja que saque unos barriles, tablas de madera, soga y algunas herramientas que no sé para qué tenían estos Tinkerbats. Seguro por mantenimiento.

—¿Y para qué? ¿O qué?

Luego de aquella pregunta que la chica zombi hizo, el chico peliazúl haría dos cosas. Un muelle flotante y una caña de pescar. ¿Pero cómo pescaría? Pues para eso están algunas almejas. La receta perfecta para una carnada. ¿Pero qué hará Rottytops?

—¿Cómo me veo con este traje, Bolo?

—¡Te ves guapí...! Quise decir... bellí... ¡Perdón! Se te ve bien, supongo.— Bolo dijo sonrojado. —¿Qué tanto estarás haciendo?

—Solo jugaré en la playa un momentito.— contestó emocionada. —¿Vienes o te rajas?

—Por el momento preferiré pescar. De hecho pienso vender pescado con el fin de ganar gemas. Así tendremos tanto para comida como para otros recursos.

—¿Estás seguro? Y yo que pensaba que haríamos algo juntos ahora que nos adueñamos de este barco.

—Igual. Pero ya sabes que he estado en rehabilitación por meses. Y no quiero cometer abusos ni por parte tuya. Prefiero evitar que me comas el cerebro.

—¡Ok, mariquetas! Entonces te me cuidas.

Dicho esto, la chica zombi iría nadando por la parte principal del mar. Así como también seguiría viendo a Bolo pescando. Pero a la vez se aburría fácil a causa de no tener con quién jugar.

—Ugh... Es una pena que él no quisiera jugar conmigo. ¿Será por algo malo que dije o hice?— la chica zombi pensaba mientras suspiraba.

Pero todo cambiaría cuando llegaron Shantae y Sky. Quienes estaban buscándoles por casi varias playas cercanas a Scuttle Town. Al ver a Rotty en traje de baño, Shantae y Sky se cambiarían también.

—¡Rotty! ¡Bolo! Los buscábamos en todas partes pero al fin lo conseguimos.— la chica mitad genio estaba emocionada. —¿Qué tanto hacen?

—¡Shantae! Y... Sky, supongo.

—¡Aprovecha que estamos bien, cabeza de brócoli!— Sky dijo emocionada. —¿Y qué rayos hace este cabeza de erizo? Parece un caimán suicida. ¿Estará deprimido?

—¡Nah! El taradazo dijo que pescaría para ganar gemas.— la chica zombi responde. —Por lo que veo solo comienza a llevar menos de cinco.

—¿Y te hizo algo malo este idiota?— la chica mitad genio preguntó. —¿Abusó de ti o se atrevio a meterse contigo?

—No. En realidad cambió demasiado.— la chica zombi respondió suspirada. —Si bien me cocina muchas cosas y vivimos juntos, siempre que le pregunto si duerme conmigo, me responde negativamente. Y encima, solamente usa su rehabilitación como excusa. Como acabo de mencionar, antes de que ustedes llegaran, le pregunté si quería nadar conmigo pero me dijo no.

—... Por mi parte puede estar bien.—Sky dice aliviada. —Así no nos molesta.

—Lo mismo.— Shantae dice también aliviada. —Ese chico era un estorbo. Así que para mi opinión, al menos las tres tendremos un tiempecito para jugar con esta pelota.

Había pasado media hora. Mientras el chico peliazúl pescó diez percas amarillas, las chicas todavía jugaban.

—Qué chorada...— el chico peliazúl suspiró. —¿No puede haber por lo menos un pez diferente?

Al no haber atrapado otro pez diferente, Bolo se quedaría mirando cómo las chicas jugaban y reían. Pero la chica que más se quedaría mirando es a Rottytops. Esa sonrisa que la chica zombi mostraba, hacía que el peliazúl sonriera también. Pero sobretodo, se quedaba asombrado al ver cómo la piel y el cabello de su chica reflejaba mucho el sol. Dejando un brillo totalmente increíble aún esta tarde y con un cielo azul. Dando a entender que Bolo comienza a enamorarse sin saber poco a poco de ella. Sin embargo todavía aguantaría sus límites. Pero el sonido de un pez que mordió el anzuelo le cambiaría de vista. Al cansar al pez para atraparlo, resultó que se ganaría una buena lotería.

—¡Después de tanto tiempo atrapo una perca dorada!

La emoción del peliazúl no podía contenerse. Sin embargo continuaría pescando hasta encontrarse con otras especies diferentes. Tras terminar de jugar, Shantae y Sky hablarían con Rottytops un momento.

—Sí que se nota el cambio de ese baboso.— Sky suspiró de alivio. —Aun que me sorprende demasiado su habilidad en la pesca.

—Y ni hablar de su fuerza que ganó.— la chica zombi expresó. —Eso significa que podría ser un gran y humilde héroe. Solo si él quiere.

—¿Sabes? Ahora que lo pienso, tú y él harían buena pareja.— la chica mitad genio expresó emocionada.

—Más por que ambos son unos cabezas de chorlito. Perdona la ofensa...

—Está bien, Sky. Mientras intente no coquetear con nuestras enemigas, todo bien.

Era el atardecer. El sol estaba a punto de meterse. Por lo que Shantae y Sky volverían a Scuttle Town. Entonces fue que Rottytops acompañaría a Bolo para vender los pescados. Solo recibiría 2500 por 10 percas amarillas y una dorada.

—¿Es todo?— dijo el peliazúl enojado. —¿Y esta maldita miseria? Escuché que daban más.

—Pues fíjese bien.— el barbudo Jike dijo con una sonrisa malvada. —Si me diera especies menos comunes, le pagaría más de lo usual. Así que la próxima, también si trae algunas grandes e inusuales, podría dar pasta extra.

Tiempo después y de vuelta al barco...

—Creo que con esto nos alcanzaría para los muebles y parte de la remodelación de interiores.— Rotty dijo con satisfacción.

—Al menos nos quedan provisiones para estos días... De lo contrario no habría ni carne ni cerebro para ti. Así mismo pensaría decir de ese arroz para mí.

—¿No tendrás alguna mejor idea? No sé... ¿Conseguir 100 percas en un día y venderlos? ¿O bien volverte cazarrecompenzas?

—Lo haría... Pero luego Shantae y Sky nos atrapan para al final matarnos a ambos...

—Bueno. ¿Entonces dirás que la negociación de pesca ya está decidida?

—¡Afirmativo y confirmativo!— el chico peliazúl dijo de buena gana.

Y así fue como los dos se pusieron de acuerdo para un trabajo fácil de esfuerzo medio. Pescar y vender pescados de todo tipo. Pero sobretodo, algunos inusuales...