Hitoshi volvió a aplicar los vendajes de hace unos días, a pesar de que los cortes ya estaban casi curados. Sus matones lo habían apartado por el momento, demasiado asustados de que su misterioso respaldo saliera de las sombras en cualquier momento. Hitoshi sabía que era mejor no esperar que eso durara para siempre, especialmente una vez que se dieran cuenta de que el chico al que tenían tanto miedo era en realidad un chico sin quirk de otra escuela que tenía sus propios matones de los que preocuparse. Aún así, el descanso fue agradable mientras duró. 

Hitoshi se estiró y se subió a la cama para buscar en su teléfono hasta que se sintió lo suficientemente cansado como para dormir. A sus padres adoptivos realmente no les importaba lo que hacía cuando tenía insomnio, siempre y cuando estuviera callado y no saliera de su habitación. Pero, de nuevo, la regla silenciosa había sido bastante constante desde que cumplió cuatro años, por lo que no fue tan malo. Al menos no tenía que preocuparse por compartir una habitación, incluso si le dolía un poco que los otros niños prefirieran dejarlo tener el ático para él solo en lugar de compartir una habitación con el villano.  

Una vez que sus padres adoptivos actuales se dieron cuenta de que un compañero de cuarto no iba a funcionar, limpiaron el pequeño espacio sobre el garaje y lo empujaron allí para dejar espacio para los otros niños. La mitad de las paredes eran de madera contrachapada desnuda y hacía un calor miserable en el verano, pero Hitoshi no podía quejarse. Al menos tenía una ventana en el techo para poder mirar las estrellas cuando inevitablemente se aburría de su teléfono. Esta noche estaba nublada, pero miró hacia arriba de todos modos para ver qué constelaciones estaban afuera, luego rápidamente se levantó de la cama, apenas sofocando un grito mientras vislumbraba una sombra, una sombra con forma humana, mirando a través de su ventana. Hitoshi estaba medio convencido de que lo había imaginado...

Hasta que la sombra llamó. 

Hitoshi consideró seriamente huir por su vida, sin importar lo que dirían sus padres adoptivos, antes de reunir coraje y tomar su teléfono. Encendió la linterna y la enfocó hacia la ventana. Probablemente no fue nada, ¿verdad? Solo un mapache o tal vez la rama de un árbol, aunque no había árboles cerca de su ventana. Aun así, no tenía sentido meterse en problemas por una falsa alarma. 

Cuando vio que era el chico del callejón, Hitoshi solo pudo parpadear desconcertado. El niño le dio una sonrisa brillante mientras saludaba. A través de su ventana. En su techo. 

"¿Qué diablos ..." respiró Hitoshi. 

"¡Hola Shinso!" La voz del niño se apagó levemente a través del cristal. "¡Déjame entrar!"

La curiosidad de Hitoshi venció a su inteligencia y antes de que se diera cuenta, extendió la mano y abrió la ventana. El niño cayó sobre su cama con un golpe silencioso y alborotó sus rizos, lo que no hizo absolutamente nada para hacerlos más presentables, antes de mirar hacia arriba, "¡Gracias! ¡Soy Izuku Midoriya, por cierto! Creo que nunca llegué a mencionar eso el otro día".

"Pensé que te había dicho que te fueras". Hitoshi dijo sin comprender. 

"¡Oh, lo hiciste!" Midoriya asintió con agrado. "¡Por ​​cierto, tienes una peculiaridad realmente genial! ¡Podrás hacer tantas cosas increíbles con él! "

"¿Entonces por qué estás aquí?" Hitoshi sintió que se acercaba una migraña. "En realidad, retrocede, ¿cómo estás aquí? Ni siquiera te dije mi nombre ".

"Oh, bueno, um ..." Midoriya parecía casi avergonzado. "¿De hecho empecé con tu uniforme?"

"Mi uniforme ..." Hitoshi lo miró dos veces. "Espera, ¿empezaste?"

Midoriya asintió, "Bueno, sé que hay muchas escuelas que usan el mismo uniforme, así que miré a qué hora terminaron y taché las que estaban a poca distancia de donde nos conocimos. Luego examiné los sitios web de los que quedaron porque al menos en mi escuela los acosadores son los que tienen las quirks más fuertes y terminan apareciendo mucho, así que pensé que podría encontrar uno de los tuyos. Una vez que encontré tu escuela, investigué un poco más y descubrí que también es tu último año, pero no pude encontrar en qué clase estabas o cómo te llamas, así que pregunté por un niño con un peculiaridad de activación verbal, descarté el 90% de los rumores, descubrí cuál era tu nombre y lo usé para encontrarte".

Hitoshi miró a Midoriya, quien lo miraba expectante, "Eso es ... un poco espeluznante."

Para su sorpresa, Midoriya sonrió "¡Lo sé! ¿No es genial?"

"Uh ..." Hitoshi arqueó una ceja. "¿No?"

"Ok, bueno, no tradicionalmente, pero ..." Midoriya se mordió el labio. "Quieres ser un héroe, ¿verdad?"

Hitoshi asintió vacilante, "Voy a ir a UA. ¿Estás aquí para detenerme?"

"¡No!" Midoriya se tapó la boca con una mano al darse cuenta de lo ruidoso que había sido. "Uh, no, yo también quiero ser un héroe, ¿así que esperaba que pudiéramos ayudarnos el uno al otro? 
¿Alguno tal vez sea, como, socios héroes? Porque, eh ... bueno ... "

Hitoshi le hizo un gesto para que continuara, "¿Porque qué? ¿Porque crees que estar con el villano te hará menos objetivo?"

"No ..." Midoriya infló las mejillas con frustración. "Es solo ... seamos sinceros, ninguno de nosotros va a ser el tipo de héroe que le da esperanza a la gente. Los niños como nosotros no pueden ser héroes como All Might "

"Quizás tú no puedas". Gruñó Hitoshi. "Pero voy a demostrar que están todos equivocados y seré ..."

Midoriya agitó las manos frenéticamente, "No, no podemos ser héroes como All Might, pero podemos ser diferentes! Has visto cuánto prejuicio hay. Tienes un quirk de villano, Shinso, y yo no tengo ninguno. Incluso si algunos de los civiles más abiertos deciden confiar en nosotros, todavía habrá muchas personas que nunca estarán dispuestas a ver más allá de nuestros quirks".

Hitoshi resopló, "Ouch, está bien. Gran charla de ánimo. Realmente inspirador".

"Déjame terminar." Dijo Midoriya. "Puede que no seamos el tipo de héroes que pueden hacer que los civiles piensen ' oh, gracias a Dios que estamos salvados ' cuando lleguemos a la escena. Entonces, ¿qué pasa si, en cambio, nos convertimos en el tipo de héroes que hacen que los villanos piensen, 'oh, mierda, estamos jodidos'? "

La expresión de Midoriya se había transformado en una sonrisa astuta, pero Hitoshi se quedó atrás, "¿Qué estás sugiriendo exactamente?"

"Estoy diciendo que no tenemos que traer esperanza si podemos convertir el miedo en un arma. La gente ya te tiene miedo ". Dijo Midoriya. "Y están asustados por mí o piensan que soy débil. Creo que podemos usar eso a nuestro favor. Nunca seremos muy populares, ¡pero aún podemos salvar a la gente!"

Hitoshi se quedó en silencio por un largo momento, "Estás loco".

El rostro de Midoriya decayó, pero Hitoshi estaba demasiado ocupado pensando en todo lo que acababa de escuchar para consolarlo. Las tácticas de miedo se asociaban normalmente con los villanos, pero también lo era el lavado de cerebro. Sin mencionar que el miedo había sido suficiente para mantener alejados a sus acosadores durante unos días. Así que sí, la idea de Midoriya era una locura, pero, curiosamente, era tan loca que podría funcionar. Además, no era como si literalmente tuviera algo más a su favor.

"Ok, claro, me apunto. Vamos a hacerlo." Hitoshi dijo finalmente, haciendo que Midoriya lo mirara dos veces. "Pero eso todavía no explica lo que estás haciendo en mi casa en medio de la noche. ¿Sabes en cuántos problemas podría meterme si mis padres adoptivos te atrapan?

"¡Iba a esperar hasta mañana y encontrarte después de la escuela!" Insistió Midoriya, sonrojándose. "Pero, eh ... me emocioné demasiado".

Él al menos tuvo la gracia de parecer avergonzado y, a pesar de sí mismo, Hitoshi sonrió y negó con la cabeza, "Sí, estás loco".

Midoriya sonrió vacilante, "Yo, eh, supongo que lo tomaré como un cumplido".

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