Su cuerpo está cubierto por varias cobijas, ese golpe en la cabeza le dejo marca y él se siente apenado por tratarla así, no quería recurrir a la violencia.

Observa las maletas en la sala, ¿pensaba irse?... molesto sale por su camioneta y regresa para guardar las cosas en la cajuela.

Al terminar, entra nuevamente a la casa y la carga con cuidado, deja que su cabeza se recargue en su pecho, nunca la había tenido tan cerca... su dulce rostro, su piel color melocotón y sus púas de un ligero color rosado.

Fue demasiado brusco, pero no podía dejar que se fuera. No cuando las cosas se ponían mejor.

Sale con ella y para su suerte la mayoría de los vecinos se encuentran trabajando como son sus costumbres.

La mete en el carro, le coloca el cinturón de seguridad pues no quiere tener problemas después, peor aún un accidente, aunque sabe que eso no puede pasar.

Para asegurarse, saca una cuerda pequeña para atarle las manos, así puede estar seguro de que no intentará nada.

Termina y cierra la puerta, queda mucho por hacer, ella le ahorró el trabajo de guardar sus cosas, ahora ambos pueden disfrutar en un lugar más privado...

...¿O no?

ılı.lıllılı.ıllı.ıllıllıılı.lıllılı.ıllı.

- ¡Amy, por favor contesta! ¡¿Amy?! - Tails grita asustado, no recibe respuesta alguna y solo escucha interferencia, después la llamada se corta y por más que intenta ella no contestará.

No entiende lo que ocurre, ¿Se fue la señal?. Probablemente fue eso, o al menos es lo que quiere creer. Accidente o no, tiene que hacer algo. Su instinto se lo dice.

Busca en sus contactos a su mejor amigo, Sonic puede llegar rápido y sin problemas. Él sabrá que hacer y de paso ambos pueden hacer arreglar las cosas.

ılı.lıllılı.ıllı.ıllıllıılı.lıllılı.ıllı

El dolor, el frío y la confusión están presentes, apenas despierta puede sentir esas puntadas en su cabeza, todas ocasionadas por el golpe.

Observa el espacio y parece estar en una casa con bonitos pisos de madera, puede escuchar la canción "Unchained Melody" desde otra habitación y por lo que ve ella se encuentra en una muy hermosa recámara con sábanas de color crema y almohadas de chocolate oscuro.

Hay dos ventanas grandes cubiertas por cortinas, un esquinero con una lámpara y una bandeja, en ella hay un vaso de agua y al lado una caja de pastillas para el dolor de cabeza.

Lo duda, ¿Él preparó todo esto?.

Se sienta en la cama y el mareo regresa, su cabeza da vueltas, definitivamente no utilizó toda su fuerza, de ser así ni siquiera estaría despierta.

Debe tomar la pastilla si quiere que eso termine, al intentarlo siente la presión en sus manos y puede notar que están atadas, ¿Cómo va a tomar las pastillas de esa forma?

Acerca las manos a la charola, agarra la caja, sigue hasta sacar una pastilla y poder tomarla.

Cuando la pone en su boca toma el vaso de agua con rapidez para no dejar el sabor en ella, cuando logra mantener el vaso en sus manos lo acerca y traga con facilidad. Por ahora todo bien.

Pero la mayor pregunta de todas, ¿Dónde está él?...

Se levanta cuidadosa, el sonido de la música sigue su curso y apunto de terminar, pero ella no piensa quedarse en la cama a esperarlo.

Busca con la mirada algún o objeto filoso; armario, tocador, perfumes, ¿Es todo?.

Llega un olor a omelette con verduras, debe estar comiendo, su estómago ruge hambriento pero puede soportarlo.

Intenta zafarse de las cuerdas haciendo movimientos con ambas manos, las frota y se mueven pero no consigue lo que quiere y eso solo incrementa su frustración.

Decide salir tal cual, se acerca a la puerta tomando con ambas manos la manilla, tiene que buscar ayuda, un celular, algo para cortar la cuerda ¡lo que sea!

Baja la manilla pero la música se detiene, es imposible que le haya escuchado.

Abre la puerta, aparentemente está en el segundo piso pues las escaleras quedan casi enfrente de la habitación.

La madera en el suelo es nueva y por lo tanto no habrá problema si camina por la casa, tenía miedo de que al pasar la madera hiciera su típico ruido de película.

Deja la puerta abierta y observa los marcos en la pared, pinturas de paisajes que son hermosos.

La luz es clara y ilumina perfectamente todo el pasillo. Un colgante grande pasa por las escaleras hasta el piso de abajo sin exagerar y se ve elegante.

Hay un aroma a lavanda aparte del omelett, le resulta familiar. Es muy similar a las velas que recibió de regalo el día del cumpleaños de Cream, era de esperarse que él le diera el regalo.

Baja las escaleras, repentinamente escucha como a Shadow en la cocina moviendo platos y cubiertos. Aún no termina de comer.

Al llegar al final de las escaleras, se asoma discretamente a la sala, sofás color blanco con cojines negros, una chimenea pequeña, varias ventanas relucientes con persianas.

Varias decoraciones como cuadros, un frutero en el centro de la sala que lo sostiene una mesa elegante, incluso hay una alfombra afelpada y un sillón individual reclinable.

Es sorprendente que tenga todo esto.

Observa las varas de metal que se usan para chimenea, las puntas afiladas que tienen pueden ayudarla.

Entra a la sala y acomoda sus manos encima de la punta, se fija que el filo se quede en la cuerda y después mueve la muñecas, parece funcionar.

Comienza a lograrlo, una felicidad interna incrementa cuando ve la cuerda romperse.

- ¡Ajá! - Inconscientemente grita contenta, se arrepiente al escuchar los cubiertos sonar estrepitosos contra el plato y su primera impresión del azabache es verlo entrar con una servilleta en la mano.

Conmocionado por verla sin el amarre en sus manos, intenta acercarse, pero ella es más rápida y toma la vara de metal apuntándole con el filo.

Él retrocede impresionado pues esperaba verla sumisa, pero aparentemente es lo contrario... y eso le agrada.

- ¡¿Cómo se te ocurre?! - Le grita enfadada sin quitarle los ojos de encima, sostiene la vara con ambas manos y apretándola con fuerza, no piensa quedarse... ¡Obviamente!

- Baja eso Amy, ambos sabemos que no quieres hacerme daño - Se acerca con pasos pequeños mientras le rodea, ella retrocede un poco sin dejar que la vara se le resbale.

- ¿Y tu si puedes hacerme daño? - Recalca al recordar el golpe en la cabeza, la marca aún queda gravada en el costado. Tienen una pequeña curita ahora que se da cuenta.

- No habría pasado si tú no pusieras resistencia - Explica.

- Oh, disculpa - Suelta con ironía - No sabía que tenía que dejarme espiar, dejar que te metieras a mi casa las veces que quisieras, ¡mucho menos que me secuestren, pervertido! - Él se acerca con agilidad y ambos tienen una pelea, el azabache intenta quitarle la vara pero ella se resiste.

No se deja vencer tan fácil y mueve la vara accidentalmente provocando un golpe en la quijada del erizo.

Se queja soltando la vara, por su boca corre un poco de sangre, el filo de la punta le dejó un rasguño en la barbilla y cerca del cuello.

Y mientras la sangre sale, ella tira la vara al suelo y se sube arriba del sofá para saltarlo con facilidad, sus pies tocan el suelo y se apresura a la puerta de enfrente.

El erizo se recupera ignorando por completo su herida y se tira sobre ella. Sus brazos la aprietan de la cintura y ella se queja al caer al suelo con el peso de Shadow.

Sostiene sus manos con fuerza para que no pueda moverse. Le muerde una oreja para intentar calmarla y aunque no funciona, si la ha desconcertado y se queda quieta.

- ¿Eres inteligente? - Pregunta confundiendo a la eriza.

- No te interesa - Nuevamente intenta zafarse.

- Si lo eres... sabrás lo que te conviene - Aprieta sus muñecas y se levanta jalando su brazo para levantarla - Puedes disfrutar, o puedes pelear hasta perder. ¡Aunque lo intentes no vas a salir de aquí! - Ella se mantiene de pie mirándolo con odio.

- ¡Apenas nos conocemos!, ¿Por qué haces esto? - Pregunta separándose de él.

- No te incumbe.

- ¡Me incumbe!

-... - Shadow se mantiene callado, no piensa dejarla escapar y cueste lo que cueste la mantendrá en la casa.

- ¿Y...?

- Te pareces mucho a mi esposa - Suelta sincero - Cuando te ví... cuando me pediste ayuda yo no podía evitar verla en ti, ¡¿Es muy difícil estar conmigo?! - Amy intenta retroceder pero es demasiado tarde.

Shadow le roba un beso, sostiene sus mejillas con ambas manos y le abre la boca a la fuerza.

Un beso lleno de necesidad, de pasión y de locura. Y mientras sus lenguas se unen Amy sabe que no podrá irse... no hasta que alguien más la encuentre.

Pero al final, ¿Esta dispuesta a marcharse?

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¡Muchachos!, entiendo que no he actualizado UwU 💞 y mañana dudo de actualizar a menos que sea en la noche. Sinceramente, no me ha gustado para nada (?) y quiero aclarar que es posible (muy) que lo cambie un día de estos.

Pero igual lo publico para que después se note la diferencia, creo que odio el One-shot.

Hasta muy pronto 🐟🐟💐