Sólo una vez, al mes (1-?)
Narra Shadow:
- No importa que tanto insistan, no voy a salir - reclamo molesto al erizo cobalto.
- Oh vamos Shadow, estas celebridades solo ocurren una vez al año - me empieza a jalar de la camisa poniendo ojos de perrito suplicante (pero que ridículo se ve) - ándale no seas así.
Desde hace unas semanas ha estado viniendo a mi casa tratando de convencerme que vaya a su fiesta del día de Halloween que lo esta organizando junto con Rouge. En si la festividad no me desagrada, en realidad, ni siquiera le tomo importancia. Pero prefiero pasarla tranquilo en mi casa viendo televisión o quizás leer un libro. Lamentablemente no podré, por tener a un amigo tan molesto e impulsivo cómo lo es Sonic y sé que no dejará de insistirme hasta que acceda a ir con él.
- Esta bien! - exclamo ya cansado por sus repetidas palabras suplicantes acabando ya con mi paciencia
- Genial!, entonces nos vemos mañana - el por su parte suelta una sonrisa victoriosa mientras se dirige a la puerta de mi casa - vendré a recogerte a las ocho o nueve de la noche, espero verte arreglado para ese entonces.
- No pensaras que vaya disfrazado o si? - le hablo seriamente.
- Naaaa en tu caso tal vez no sea necesario - sonríe divertido
- Maldito Faker! - me levanto enojado del sofá con la intención de ir a partirle la cara, sin embargo, el muy cobarde sale corriendo de mi casa.
Dejo soltar un suspiro y me voy a mi biblioteca para distraerme con algún libro, aprovechando que tengo esta semana libre de clases (o al menos por ahora). Tengo toda clase de libros, la gran mayoría son informáticos o manuales ya que es lo que permiten avanzar mejor con mis estudios. Es por ello que me encuentro siendo el primero de mi clase, sin embargo, hoy estoy interesado en leer novelas de ficción y mis favoritos son las historias de terror. Cuándo lo veo en películas es bastante aburrido, siempre editan las partes menos apropiadas para menores o aquellos que son sensibles y probablemente sufrieran un ataque cardíaco por el susto. Pero cuando lo lees, esta bien narrado y detallado que a veces te da la sensación de que estas dentro de la historia. Es por ello que me fascina la literatura (tal vez algún día me anime a hacer mi propio libro). Escojo un par de libros y me siento en mi sillón individual con la única iluminación de mi lámpara dando inicio a mi lectura.
No sé cuanto tiempo habrá pasado ni cuantos libros abre leído, pero puedo sentir mis parpados bastante pesados por el cansancio. Levanto mi muñeca para ver era la hora llevándome una sorpresa (aunque por el cansancio seguramente no se notaría), son casi las once de la noche, con razón el sueño ya me estaba venciendo. Sin mas me levanto de mi sillón estirándome un poco por el hecho que estuve un buen rato sentado. Apago mi lámpara y como si fuese un muerto viviente me dirijo a mi cuarto con pasos lentos.
Al llegar, me tiro sin cuidado a la cama sin siquiera tomarme la molestia de taparme con las sábanas dejándome llevar a los brazos de Morfeo cayendo plácidamente a un sueño profundo.
Mañana será otro día.....
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31 de octubre, 8:00 p.m.
- Que bueno que al final accediste a venir cariño - me habla Rouge quien estaba acompañada con su pareja el equidna rojo, Knuckels. Ambos sonriéndome complacidos de que esté aquí.
- No te ilusiones Rouge, estoy aquí en contra de mi voluntad - le respondo con desagrado al recordar cómo vino a recogerme el Faker junto con la cabeza de marihuana, Silver, técnicamente sacándome a la fuerza de mi propia casa.
- Oh vamos amigo! - un golpe no tan fuerte recibo en mi hombro por parte del equidna haciendo que de un leve gruñido - no te hace bien permanecer solo en tu casa nada mas que con tus libros, acabarás volviéndote loco.
Tras ese comentario absurdo, ambos comenzaron a reír mientras que yo los miraba con cierto enfado.
- Tranquilo gruñón, no te enojes con mi rojito - interviene Rouge despreocupada acurrucándose más en el brazo de su novio (que empalagosa) - sólo relájate y disfruta de la fiesta. Preparé bastante bocadillos y bebidas para esta gran noche, por lo menos podrías disfrutar de mis delicias.
- Espero no intoxicarme - le respondo con sarcasmo desviando mi mirada hacia otro lado a la espera de que ya se vayan.
- Lo que tu digas, vámonos cariño que tengo ganas de bailar - toma de la mano a Knuckels y lo jala a la pista con los demás que se la pasaban bailando.
Me alejo de ellos dirigiéndome a la mesa de bebidas y me voy sirviendo un copa de vino, disfrutando de su sabor amargo y dulce. No me agrada el hecho de estar rodeado de mucha gente, pero he de admitir que Rouge se lució en esta fiesta. Las personas no estaban disfrazados con trajes tontos y ridículos, eso ya sería demasiado infantil, con suerte llevaban algún que otro detalle con respecto al maquillaje, dientes falsos de vampiros y cosas así.
Veía desde mi rincón a todos mis amigos que hablaban animadamente en la fiesta, otros haciendo sus juegos típicos de competencia y alguno de ellos pasarla bien en la pista de baile con sus parejas. No le tomo importancia y me sigo concentrando en mi bebida, cuando en eso, se me va acercando el Albino erizo con una sonrisa divertida en su rostro y un notable enrojecimiento en sus mejillas, quizás se haya pasado un poco de copas.
- Shadow, que haces en este rincón solo - apoya su brazo en mi hombro teniendo su rostro lo suficientemente cerca a mi, pudiendo percibir el desagradable aroma del alcohol.
- Silver, aléjate de mí que tu hocico apesta - le respondo con enfado mientras quito su brazo con algo de brusquedad.
- Ay que delicado te has puesto - habla divertido apoyándose a la pared - se nota que te hace falta la compañía de una mujer -.
- Blaze no debió dejarte tomar alcohol - ruedo los ojos - estás delirando cosas sin sentido -.
Silver se ríe tomando una lata de cerveza que se encontraba en la mesa.
- Aún no he llegado a mi límite - veo como habré su lata - puede que esté algo desorientado y enérgico pero soy consciente de lo que te estoy diciendo. Hablo en serio de que deberías buscarte una pareja.
- Estar en una relación no es algo que tenga en mente - le doy un último sorbo a mi trago - y tampoco es algo que me interesa.
- Deberías darle oportunidad a alguna de éstas chicas de aquí. María esta dispuesta y dar un intento contigo - Silver señala con la mirada a una eriza rubia de ojos azules, una compañera que está en mi misma clase, llevaba puesto una blusa corta que hacia mostrar su abdomen descubierto y shorts tipo lejin. Ese conjunto se ropa en realidad le queda bastante bien, no voy a negar de que ella es muy bonita, sin embargo, no es de mi tipo. Puede que sea hermosa por fuera, pero por dentro es todo lo contrario. He notado que se la pasa coqueteándome en cada momento, incluso en clases, obviamente no paso desapercibida en la pista de baile donde intentaba llamar mi atención con pasos provocadores que me los dedicaba. Lo único que esta provocando en mi es repugnancia. Odio a las mujeres que sólo te quieren por tu físico y no por algo más.
- Olvídalo - al final me limito a responderle al erizo albino - no perdería mi tiempo en alguien como ella.
- Como quieras - le da un sorbo a su bebida - de todas formas...siento que esta noche...se volverá especial.
- A que te refieres? - le cuestiono extrañado.
Parecía que iba a responderme, pero en eso aparece Sonic tambaleando y con la mirada perdida.
- Muchachos, que hacen aquí? - empezó a balbucear tomando del brazo a Silver quien lo veía divertido.
- jaja Sonic, al parecer te pasaste de tomar los cócteles - dice riéndose el albino mientras lo sostenía ya que éste parecía perder la estabilidad en sus piernas.
- Sólo espero que no vayas a cometer una locura Faker - lo veo con desagrado al estar en ese estado.
- Señora! - se dirige hacia a mi elevando la voz el erizo cobalto llamando la atención de algunos de los presentes.
- Jaja te confundió con una mujer - empezó a reírse a carcajadas el erizo albino.
- Ah esto es absurdo, me voy de aquí - resoplo enojado mientras lo aparto con brusquedad, dirigiendome hacia la salida.
Estuve a punto de tomar el picaporte cuando en eso siento que me detienen sujetando mi brazo. Al voltear mi mirada me sorprendo al encontrarme con María. ¿Cómo pudo llegar tan rápido, si hace unos momentos estaba en la pista de baile?.
- A donde crees que vas, mi erizo precioso - me habla de manera coqueta sin soltar mi brazo. Por chaos. ¿Es que acaso ella también está ebria?.
- María que haces? - trato de zafarme de su agarre pero ella se niega a hacerlo.
- Es que acaso no puedo divertirme contigo? - noto como poco a poco va acercando su rostro hacia mí sintiendo el desagradable olor a cerveza que emana de su aliento.
- Para, no sabes lo que haces -.
Mi paciencia está llegando a sus límites.
- Shadow...- dice en un leve susurro estando a pocos centímetros de que nuestros labios se junten.
Antes de que suceda eso, la separo de mi tomándola de sus hombros sin ser tan brusco, pero si aplicando algo de fuerza.
- Suficiente -.
No sé que paso, pero de un momento a otro mi casaca de cuero se encontraba manchado de una sustancia viscosa verde-amarillenta con algunos rastros de comida. No puede ser, ¡María había vomitado encima mío!. Y para el colmo en mi casaca favorita.
Me quedé estático sin poder creer lo que había pasado.
- Ups, perdona - dice ella mientras se limpia su boca con una servilleta.
Ahora sí, hasta aquí fue la gota que derramó el vaso.
La hago a un lado para abrir la puerta con furia y cerrarla atrás mío de un golpe.
Me siento del asco, mi casaca apesta a una mezcla de alcohol y comida, no lo voy a tolerar en todo el camino. Así que me la quito de mala gana y busco con la mirada algún cesto de basura y tirarla en ese mismo instante. Es ahora que me estoy arrepintiendo de haber accedido en venir a esta ridícula fiesta. Estoy harto. Es la última vez que vengo a estos sitios.
Me dirijo al estacionamiento a recoger mi motocicleta. Inserto las llaves para encender el motor mientras me voy poniendo mi casco. El frio cada vez se intensifica a cada minuto que pasa, y se siente aun mas considerando que ya no poseo mi casaca que era lo que me mantenía abrigado. Será mejor que vuelva ya a casa antes de que coja un resfriado.
Doy marcha a mi moto aumentando la velocidad cuando de repente una eriza rosada se aparece en mi camino sin fijarse por los costados.
- ¡Oye! ¡Hazte a un lado! - le grito alarmado tocando la bocina pero la chica no se inmuta a siquiera tomar mi atención.
Ya estaba lo suficientemente cerca a ella por lo que detenerme sería demasiado tarde, así que de un movimiento rápido giro la moto con brusquedad desviando mi dirección hacia un poste de luz estrellando en ella causando que recibiera unos golpes. No son tan graves por suerte, pero, eso no quita el hecho de que si me haya hecho daño, y todo por culpa de esa niña. ¿Es que acaso no sabe ver por los costados?.
Me recuesto en el suelo con dificultad intentando calmar el dolor cerrando mis ojos con fuerza y frustración. Vaya esta noche no pudo haber sido peor. Gracias a esto ahora creo que empezaré a odiar este día.
- Vaya problema, ¿es que acaso no le enseñaron a manejar a este tipo? - mis ojos se abren con dificultad debido a la luz del poste, sin embargo, al final logro visualizar a la eriza rosada parada frente a mi. Al parecer esta bien, no tiene indicios de haber recibido algún daño, me alivie al saberlo pero eso cambia al oírla decir eso sin mencionar que me dedicaba una expresión desaprobatiria. O sea, en cima de que me arriesgo en salvarla por su falta de atención al cruzar la pista ¿tiene el descaro de decirme que conduzco mal? ¿quién se cree?.
- Es la última vez en que arriesgo mi vida por alguien - le reclamo enfurecido tratando de levantarme - por cierto "no fue nada" -.
El semblante de la eriza cambia a una de sorpresa y por lo que veo confundida también.
- ¿A quien le estás hablando? - ella voltea por los costados algo perdido causandome gracia.
- Al fantasma que está al costado tuyo - le respondo sarcásticamente pero termina haciéndome caso volteando su cabeza a la derecha sacándome de quicios- ¡estoy hablando contigo niña tonta!
- ¿Con migo? - se señala así misma algo desconcertada.
- ¿Ves a otra niña tonta por aquí? -.
- ¡Oye! ¡No me llames así! - de algún modo su forma de enojarse, inflando los cachetes y que su cara se torne roja, me parece algo adorable y gracioso - s~solo me sorprendió que me hablara -.
- Bueno da igual - trato de levantarme, sin embargo, no lo consigo cayendo nuevamente a suelo. Gruño de bajo por el dolor que aún no se me pasa. Demonios en esta condición dudo mucho que pueda irme manejando.
Sin previo aviso siento que alguien me toma del brazo agarrándo me por sorpresa. Mi vista se centra en la eriza rosada quien me ayuda de a pocos a levantarme con cuidado.
- No te muevas mucho o te dolerá más - con una voz suave y tranquila me advierte mientras me ayuda a sentarme en uno de los bancos de espera para los autobuses - lamento por mi comportamiento de hace unos momentos, no fue mi intención ser grosera pero la verdad no me esperaba que una moto pudiese llegar atropellar me -.
Sus ojos jades se distorsionan confundidos al ver mi expresión de incredulidad. ¿En serio quiere que me crea eso?.
- ¿Que tus padres no te enseñaron a ver a los costados antes de cruzar? - le cuestiono entrecerrando mis ojos mirándola fijamente haciendo que la ponga nerviosa. Adorable.
- ¡P~pero claro que me e~enseñaron! - se queja de una manera infantil desviando su mirada de la mía con un leve rubor en sus mejillas - es solo que...bueno...no sabría como explicarlo.
- Bueno da igual, lo único que importa es que estas bien, sólo eso - al igual que ella, desvió mi mirada para no tomarle más importancia este asunto, sin embargo, eso no dura mucho al notar como la chica me mira con un brillo en sus ojos, lo cual de algún modo....la hace ver...tierna
Su mirada tan fija y penetrante me esta poniendo algo inquieto y nervioso. Estuve a punto de hablarle y tratar de romper el hielo del silencio incomodo cuando de repente siento que ella rodea sus brazos con delicadeza en mi torso apegándo su cabeza en mi pecho, sus orejitas rozan mi nariz provocando que me diera cosquillas pero también logro percibir un fragante olor dulce a rosas. Estar en esta posición hace que me olvide de todo lo malo que me ha pasado esta noche convirtiendo lo en algo único y especial disfrutando el momento de forma pacífica y serena. Pero mi mente regresa a la realidad al sentir unas cuantas gotas en mi pecho ¿es que acaso esta llorando?.
- Oye, ¿qué tienes? - mi vista baja hacia ella quien aun sigue apoyada sobre mi negando levemente con la cabeza.
- Nada - dice en un susurro que apenas logre alcanzar oír - es sólo que...
No logra articular palabra alguna comenzando a temblar. Probablemente tenga frío, considerando que no lleva ningún abrigo en sima salvo su vestido blanco que descubría sus brazos y gran parte de su espalda. Al final me decido corresponder su abrazo para así mantenerla caliente. Me causa gracia al ver como mis brazos la rodean por completo su delicado cuerpo, ¿soy demasiado grande para ella? O ¿es ella demasiado pequeña para mí? Para empezar ni siquiera sé por qué lo hago, sin embargo, no me molesta.
- ¿Ya te sientes mejor? - le susurro al oído suavemente.
- Y~yo - parecía querer decir algo cuando de repente se sobresalta separándo me de ella con rapidez dejándome sorprendido y confuso - ¡olvide tu estado!.
¿Espera, qué?
- Ay por chaos, discúlpame por ser tan distraída - apenada se aleja de mi levantándose rápidamente - espera aquí, iré a buscar ayuda para que puedas regresar a tu casa -.
- E~espera! - trate detenerla pero ya era muy tarde, veo como voltea la esquina desapareciendo de mi vista.
Con algo de esfuerzo intento levantarme pero es inútil. Mis piernas aún siguen entumecidas. Maldición, y tan bien que estábamos juntos, espera, ¿pero qué rayos estoy diciendo?. Suelto un suspiro sin mas opción que permanecer sentado en el banco esperando su regreso con un taxi.
Ya han pasado 20 min, el frío cada vez esta aumentando y ella todavía no vuelve ¿le habrá pasado algo?.
Un segundo...¿por que me preocupo?
Lo más seguro es que habrá tenido el momento oportuno de dejarme tirado aquí librándose de toda culpa. Como pude llegar a pensar que una desconocida chica pudiese ayudarme solo he conseguido que me vea como un estupido al creer en eso. Me abrazo más intentando conseguir un poco de calor pero sin mi casaca de cuero es inútil y....sin ella a mi lado. ¡No! Shadow ¡ya basta!.
La bocina de un carro me sobresalta sacándo me de mis pensamientos y al mismo tiempo aturdiendo mis oídos sensibles. Algo nervioso levanto la mira para encontrarme con la eriza rosada saliendo del auto, corriendo hacia mi preocupada y con cuidado me ayuda a levantarme para subirnos juntos en el auto.
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O al menos....
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Eso me estaba imaginando que sería.
- Pero mira nada más a quien tenemos aquí - una voz femenina que es lamentablemente conocida y molesta a la vez me habla con cierto aire burlesco - querido, ¿Qué estás haciendo solo aquí?, esperaba que ya estuvieras en tu casa -.
Me encuentro con un vehiculo cabriolet negro estacionado frente a mi, en el cual estaban la murciélaga albina y su molesto novio. Aún que me tomo por sorpresa ya que no me esperaba verlos por aquí.
- Y yo que aún siguieras en la fiesta - le respondo fastidiado.
- A bueno, eso es por que tenemos otras cosas pendientes - se le acerca al equidna rojo de forma seductora provocando que se ponga nervioso - no es así mi rojito? -.
- ¡Rouge! - le reclama avergonzado - no en frente del Darketo -.
- No me importa lo que hagan, sólo larguen se de una vez - desvío la mirada enojado por lo sucedido. ¡Maldición! ¡en verdad me dejo como una basura!
Escucho como Rouge sale de su auto dirigiéndose a mi.
- Cariño, estás hecho un asco - me inspecciona con algo de gracia - que sucedió? Te caíste de tu moto?.
- Si vas a estar de payasa, sera mejor que te vayas, no estoy de humor para tus estupideces - con dificultad me incorporo del banco mientras la veo con el ceño fruncido.
No puedo evitar soltar un quejido alarmando a los chicos.
- Hombre, con esas heridas no podrás llegar tu solo a casa - me habla el equidna rojo con un tono severo.
- Eso no te importa cabeza hueca - le contesto enojado. Quise dar el primer paso pero soy detenido por Rouge quien cambió su mirada a una más seria.
- Knuckels tiene razón - me habla firme como si fuese mi madre - será mejor que te llevemos a tu casa y de ahí, te pondrás a descansar - su vista regresa al equidna - querido ayuda a subir su motocicleta mientras que yo me encargo con este terco - el equidna asiente para luego bajarse del coche
- No les pedí su ayuda - respondo secamente pero ella solo me ignora subiéndo me a la fuerza en su auto. De todas formas no podía oponerme ya que aún me encontraba adolorido.
Pasaron unos 10 min en la que terminan de subir mi moto, da inicio a prender el motor y comenzamos a avanzar. No sé por qué, pero por inercia volteé mi mirada hacia la ventana buscando a la eriza rosada que ni siquiera pude saber su nombre.
Al final....jamás se apareció.
*********** un mes después *********
30 de Noviembre, 3:45 pm.
- ¡Nooooo! - grita eufórico el Faker desgraciado dañando mis oídos - ¡por que nos manda el profesor hacer trabajos imposibles de hacer! -.
- Relájate Sonic - intenta tranquilizarlo su amigo el zorro amarillento - sólo nos pidió hacer una infografía de los autores que menciono en la clase, no es nada complicado -.
- Para ti es fácil decirlo Tails ya que te especializas en publicidad y diseño, pero yo apenas se manejar el Word /nota: aplicación para hacer trabajos en hojas/ - estrella su cabeza contra la mesa haciendo saltar los cubiertos y tazas - voy a jalar el año si no lo presento para antes de los exámenes -.
- Ten cuidado con la mesa imbecil - le reclamo seco mientras le doy un sorbo a mi café - o tu te encargaras de pagarlo si lo dañas con tu cabezota -.
- A ti sólo te preocupa la mesa o que? - se incorpora rápido viéndome con fastidio.
- No quiero tener problemas con el dueño de la cafetería, sólo eso - le respondo desinteresado mirando hacia otro lado.
- En fin, no se olviden pasarme sus partes del trabajo por correo - aclara Silver mientras acomoda unas ojas - en especial tu Sonic, siempre eres el ultimo en entregar.
- No te preocupes Silver, pero...- y ahora que? - ¿como se usa el correo?
- No puede ser, ¿ni siquiera sabes usar eso? - lo veo ya harto que a las finales no parece saber nada de nada, lo cual provocó que él se asuste con sus nervios a flote. No espera, su mirada parece suplicante.
Demonios, esto tiene que ser una broma.
- Por favor -.
- No - lo interrumpo antes de que pudiera terminar la frase.
- Sólo por esta vez, te prometo que te pagaré con intereses -.
- Eso mismo me prometiste cuando te presté dinero y que por cierto aún me debes - recojo mis cosas para luego levantarme de mi asiento - como sea, me voy.
- ¿Ya te vas? Pero aún es temprano - dice el pequeño zorro viendo el reloj de su muñeca
- Tengo otras cosas que hacer en casa, además que iré avanzando el trabajo - respondo desinteresado.
- Pero tenemos una semana para entregarlo - dice tranquilo Silver recostando su cabeza en la mesa - no te apures en entregarla.
- Quiero tener la semana libre sin tener que escuchar sus pedidos para ultimo momento. Adiós - dejo en la mesa mi parte del pedido y sin más me retiro del lugar. Quiero llegar lo antes posible a mi casa y tumbarme a la cama. Siento que me voy a desmayar por el cansancio.
8;55 pm. trin, trin..., trin..., trin...
El sonido del molesto aparato del que me despierta. Maldición, tan bien que esta durmiendo, a regañadientes apago la alarma y sin más opinión con flojera me levanto de la cama aún con los ojos somnolientos.
- Por chaos, ¿cuánto dormí? - le hablo a la nada mientras me estiro para estar un poco más despierto. Cojo mi celular del escritorio sin saber la sorpresa que me llevaría - ¡¿que rayos?! Son casi las nueve de la noche, ¿estuve durmiendo por casi 6 horas?.
Dirijo mi vista hacia la ventana y en efecto, ya era de noche. Que extraño, juraría que había puesto el temporizador para que sonara en una hora, seguramente estaba tan cansado que ni lo abre escuchado. Bueno que más da, no le tomo más importancia y me dirijo a la cocina por un vaso de agua fría, pero antes de eso reviso en mi escritorio a ver si aún me quedan algunos cigarrillos (es lo que me mantiene despierto). Busco por todos los cajones y no hay nada, quizás en mi chaqueta estén. Rebusco nuevamente en los bolsillos y tampoco.
No voy a tener más opción que salir a comprar por unos cuantos. Agh que fastidio, quisiera conformarme con tomar una taza de café.
Tomo mi chaleco y doy por salir de mi casa.
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El camino está muy silencioso y tranquilo, tal como me gusta. Llego a la tienda más cercana hacer ya mi compra. Mala suerte la mia al ver el letrero indicando que dice "cerrado".
Diablos, debería volver a mi casa, pero en serio que me urge un cigarro. Tomo otro camino un poco
más largo hacia el minimarket, ese sitio siempre anda abierto, solo espero que no tener malos encuentros esta noche.
- ¡Hola de nuevo! -.
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Discúlpenme no me peguen😖😖
Se que he estado inactiva esto días pero los trabajos que me dejan no son para nada fáciles. Aparte que aveces se me va la inspiración.
Para recompensar hice este pequeño corto, para la siguiente semana quizás suba la siguiente parte (espero :v)
También ya iré avanzando con las demás historias solo pido que sean pacientes 🥺
Y espero que les guste 😁
Sin más que decir....
Sayonara ricuritas 😘
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