—Nagisa, ¿te gustaría ir a Estados Unidos? —me preguntó Karma sentándose a mi lado en la cama. Yo estaba revisando las redes sociales en mi celular, pero lo dejé a un lado cuando lo oí hablar.

—¿Estados Unidos? ¿Por qué?

—Ah, es que una de mis películas fue nominada a un Globo de Oro en Hollywood y yo fui nominado a un Vral Award de Nueva York. Así que debo estar presente en ambas ceremonias. ¿Quieres acompañarme? —sonrió, supuse que para convencerme, pero yo jamás le diría que no.

¡¿Qué tal si Karma ganaba un Oscar?! ¡Sería muy genial que pasara! Sabía que no había dicho estar nominado a un Oscar, pero sonaba parecido.

También me emocionaba de sobremanera el viaje. Jamás había tenido la oportunidad de ir a un país tan grande y reconocido como Estados Unidos. Si podía ir con Karma para nada me lo perdería.

•••

El día del viaje llegó y tardamos más de once horas en el avión que nos dejaron agotados al llegar aquella noche al hotel. Aún con mi gran emoción presente descansamos esa noche y al día siguiente desperté temprano para levantar de igual forma a Karma.

—Vamos, Karma. Quiero ir a conocer el lugar —quité las sábanas de su cuerpo hasta que por fin había cedido ante mis peticiones.

Me bañé, cambié y desayuné tan rápido como pude ya que no quería perder más el tiempo. Sabía que con Karma era distinto, porque él ya había estado en este país varias veces. Admito que algunas veces me arrepentía de ser tan desesperante con él, pero no parecía molestarle sinceramente.
Incluso tuve algo de paciencia con él porque no había sido tan rápido como yo. De todas formas nos quedaríamos varias semanas aquí, en Estados Unidos, así que de cierta forma no tenía tanta prisa...

Al estar ya ambos listos salimos a caminar. A cada segundo le pedía a Karma que me tomara una foto con cada buen lugar que encontraba, y había bastantes.

—Oh, mira, un hombre vestido de eso. ¡Tómame una foto con él! —corrí hacia el hombre y Karma me tomó la fotografía junto a él. Me sorprendía cómo Karma podía soportarme.

Ya que estábamos en pleno Hollywood, Karma mismo me llevó hasta el paseo de la fama que no estaba tan lejos de donde nos encontrábamos. Y por supuesto, él ya había estado ahí antes, pero parecía igualmente emocionado por ver las estrellas con nombres de famosos en el suelo.

Observé encantado las estrellas, tomándoles fotos obviamente. Relucían como si fueran recién hechas. ¡Había tantas! Algunas de las que no tenía idea de que tenían su propio espacio adornado con una estrella en el paseo de la fama.

Continuamos avanzando tomados de la mano, mirando con cuidado cada nombre estampado en las estrellas.

—Karma, ¿qué dirías si tu nombre estuviera en una de ellas? —lo observé esperando atento una respuesta. Había hasta para reconocidos de la radio, ¿por qué no un director tan talentoso como Karma podría tener su propio reconocimiento en una ciudad como esta?

—¿Qué cosas dices, Nagisa? Como si eso pudiera pasar.

—Fuiste nominado a dos premios en este país. Cualquier cosa puede pasar —me alcé de hombros.

—Bueno... tal vez me guste la idea si llegara a suceder.

Terminamos de hacer nuestro recorrido y luego fuimos a comer algo. Regresamos al hotel porque se había hecho de noche y estábamos algo agotados por haber caminado bastante recorriendo California.

•••

El día para ir a la nominación del primer premio de Karma llegó, los famosos Globos de Oro. Me pondría tan feliz si el amor de mi vida ganara aquello.

—¿Me veo bien, Nagisa? —preguntó Karma acomodando su corbata. Lo ayudé a arreglarla y pasé mis dedos por su cabello para peinarlo solo un poco más.

—Siempre te ves bien para mí. No preguntes eso —reí, terminando de arreglarme yo también. Quería verme bien para aquel evento, pero mayormente para Karma. Me acerqué para darle un pequeño beso en los labios— Pero sí, te ves muy bien, elegante y guapo. —le susurré y luego me alejé, caminando a buscar algunas cosas antes de salir, viendo de reojo como Karma me miraba y mordía su labio inferior.

Luego nos transportamos hasta el lugar y al entrar al gran salón me sorprendí por lo grande que era, por la tanta gente que había y la infinidad de cosas también. Ni el estudio más amplio en el que trabajé se comparaba con la grandeza de este lugar.

Karma me tomó de la mano y me llevó con él al que supuse sería nuestro lugar. A diferencia de otras ceremonias, esta estaba llena de mesas redondas con sillas muy bien decoradas por todo el lugar. Por lo que me senté en una de ellas junto a Karma. No quedamos justo al frente del escenario, pero tampoco justo atrás de las personas. En un punto intermedio, podría decirse.

Lo notaba muy ansioso porque la mano con la que tomaba la mía empezaba ciertamente a sudar y a jugar nerviosamente. Su rostro también representaba aquello.

—Sé que vas a ganar, Karma. Confío en tu talento.

Me sonrió y me besó. Pensé que no sería un problema porque no habían llegado todas las personas, por lo tanto, las escandalosas cámaras aún no aparecían.

Justo después, algunos compañeros de Karma que compartieron la película nominada con él empezaron a llegar, por lo que él las saludaba compartiendo su emoción con ellos. Un par de los compañeros de Karma se sentaron con nosotros por el espacio que había y los demás en mesas cercanas a la nuestra.

La presentadora abrió el evento para luego de unos minutos empezar a nombrar las categorías y filmes que estaban nominados a ellos. Porque principalmente los Globos de Oro premiaban a las películas por ser mejores en un género. En cuyo caso, la de Karma fue nominada a mejor película de drama, como era su especialidad.

Nos sirvieron algo de vino a cada uno de los invitados como cortesía. Yo bebía mientras oía todo lo que decía la rubia presentadora. Tenía suerte de entender el inglés para comprender lo que sucedía.

—Mejor película de Drama —nombró la presentadora y no había estado prestando atención del todo a las demás categorías hasta que habló de esta.

Las películas nominadas a esta categoría aparecieron en la pantalla al frente siendo una a una nombradas por la presentadora. Podía ver la muy bien editada portada de la que pertenecía a Karma y su elenco.

Él apretó mi mano de la emoción y yo hice lo mismo.

—Y la ganadora de un premio Globo de Oro por mejor película de drama es... —la presentadora se quedó en silencio por unos tortuosos segundos para darle más intensidad y volvió luego su mirada al sobre en su mano—. ¡Beetwen The stars!

—Lo hiciste, cariño —lo abracé con fuerza al mismo tiempo que lo felicitaba por su logro, también él estaba muy emocionado, se notaba que el resto del reparto de la película estaba igual. Karma agradecía mis palabras, pero antes de ir por el premio, la presentadora daría una descripción de la película.

—Un par de amigos jóvenes están aficionados con la astronomía, así que empiezan a investigarla. Al profundizar en ella descubren que una amenaza cósmica se acerca al planeta. Así que intentarán prevenirla juntos —ella volvió a mirar al frente—. ¡Muchas felicidades, por favor vengan por su Globo!

Luego lo vi levantarse con el resto del elenco para ir al escenario a recibir el premio.

Karma, por ser el director, fue quien tomó el premio levantándolo con una de las sonrisas más bellas que había visto en él. No desaproveché y saqué mi celular capturando imágenes que contemplaría incluso después de esta linda noche.

El micrófono fue dado a Karma para dar las respectivas gracias y palabras como era típico en este tipo de eventos.

Tenía el premio en sus dos manos sosteniéndolo cuidadosamente. Aclaró su garganta para hablar y se acercó un poco más al micrófono que permanecía inmóvil en el centro del escenario, apoyado en una mesa de cristal con el logo de los Globos de Oro.

—Muy buenas noches a todos. Es un gusto estar con mis colegas en esta ceremonia. Tan solo haber sido nominados fue demasiado para nosotros, ahora que hemos ganado no podemos con toda la felicidad —me impresionaba lo casi perfecto que era su inglés. Me fascinaba—. Las experiencias que todos tuvimos en el estudio, con todas las filmaciones, escenas y ediciones dieron un buen fruto para nosotros. Por eso agradezco el trabajo de mis compañeros y la recompensa que hemos recibido por esto. Muchas gracias.

Recibieron un aplauso y todos bajaron del escenario. Karma volvió a la mesa que compartía conmigo y su otro par de compañeros.

—Felicidades de nuevo, Karma —tomé su mano bajo la mesa, brindándole mi total felicidad por tan gran logro.

—Gracias, Nagisa.

Esa noche llegamos agotados al hotel y llenos por la tanta comida que nos dieron en la ceremonia. Unos días más y nos iríamos a Nueva York. Esperaba que Karma también ganara aquel otro premio.

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Buenas, sólo me disculparé por no haber actualizado ayer, estuve muy ocupada con asuntos personales, lo siento. Hoy no me encuentro con ganas ni humor de nada, así que eso, espero que les gustara el cap.