Capítulo 18
Estaba aburrido y además solo en casa. No tenía nada qué hacer, además de que lo del trabajo me había dejado tan desocupado últimamente.
Me dirigí hacia la cocina por algo de vodka y al no tener nada qué hacer como mencioné anteriormente, pensé en comprobar cuánto podía soportar aproximadamente bebiendo de aquello. Esperaba no terminar mal y poder superar las cantidades normales que solía beber.
Serví una buena cantidad en un vaso de vidrio dando inicio con todo eso. Fueron luego unas más y más. Lamentablemente había perdido la cuenta después de tantos sorbos e incluso ni me percaté cuándo me había puesto ebrio pese a tanto.
Estaba sentado en el sofá con el vaso en mi mano que tenía ya muy poco vodka. Tenía mi mirada fija en la puerta ya que la oí y noté abriéndose.
Karma pasó por ella e inevitablemente sonreí porque se había dado cuenta de mi estado actual, pero no lo noté tan preocupado. Por haberlo visto nuevamente varios pensamientos y sentimientos empezaron a invadirme, después de todo tenía dudas del tipo de cariño que le tenía, aunque debía ser solo amistad porque era lo que quería creer.
Él se acercó a mí y rodeó mi cuerpo con uno de sus brazos ayudándome a levantarme del sofá. Tenía demasiada fuerza, aunque yo no tenía demasiado peso de todas formas.
—Vamos a acostarte. Ven conmigo. —me sonrió.
—Eso es, llévame a tu habitación. Toma la iniciativa. —dije riendo levemente.
—¿Por qué me haces esto? ¿No ves que debo controlarme? —preguntó. ¿Controlarse respecto a mí?
Me llevó hasta su habitación evidentemente dejándome sobre la cama justo cuando llegamos, pero él iba a retirarse para dejarme ahí descansando o eso es lo que creía.
Antes de que se fuera lo tomé del borde de su ropa deteniendo su huida. Él inmediatamente me miró atento e incluso se giró para oír lo que le diría.
—Quédate conmigo hasta que me duerma, por favor. —pedí imitando un tono dulce para que así aceptara a mi petición, aunque ya tenía en mente que de todas formas él lo haría.
Tal como lo pensé, Karma se metió bajo las sábanas conmigo incluso sin quitar sus prendas laborales.
Y como siempre me abrazó, pero yo me separé lo suficiente como para acariciar su cabello con mi mano. Su expresión me llenaba de felicidad y a pesar de estar ebrio el ambiente me estaba haciendo sentir demasiado bien.
Hasta todo eso me hizo ver a Karma de la forma que me negaba a admitir...
—Karma, ¿por qué eres tan guapo? —reí porque había causado sorpresa en él—. Me gusta tu personalidad, el cómo me tratas y cómo eres conmigo, también me gusta tu cabello, es tan suave.
Decidí no decir nada más por el momento, me dediqué a simplemente disfrutar de su presencia y su mirada sobre la mía buscando alguna explicación en todo eso.
—Karma, creo que me atraes, me atraes mucho —solté de la nada y no sabía cómo interpretar el tipo de expresión que Karma había tenido después de que dije eso. Solo tenía muy en claro que me encantaba, y no solo su expresión.
Me estiré hasta que mis labios se estamparon con los suyos, él correspondió notándose emocionado. Parecía que no le importaba que yo no estuviera en mis sentidos completamente y solo se dejó llevar junto a mí.
La coordinación entre nuestros labios se hizo más intensa y veloz, hasta ser con necesidad de sentir más allá de eso. Me estaba sintiendo demasiado bien, él me hacía sentir de tal forma, solo por estar así con él.
Yo me encontraba sobre él con mis piernas en sus costados. No sabía cuándo había terminado en esta posición, pero si de ser uno se trataba no veía problema alguno.
El calor estaba invadiendo mi cuerpo y me estaba sintiendo sensible, refiriéndome a el modo sexual.
Empecé un vaivén lento sobre él, se podía ver en su rostro que lo disfrutaba tanto como yo.
De repente me percaté de algo...
—¡Por fin se me puso dura! —exclamé totalmente feliz—. Al fin podré volver al trabajo.
Extrañamente Karma me envió una mirada fulminante y frunció su ceño. Con nada de delicadeza me quitó de su encima y se fue de la habitación notablemente enojado. Me di cuenta de que se había ido en dirección hacia la cual solía ser mi habitación.
¿Por qué se había enojado? Yo no sentí haber hecho nada incorrecto.
•••
El día siguiente desperté aún estando en la cama de Karma y justamente la resaca tuvo que aparecer. La cabeza me dolió por un buen rato, me dolía el cuerpo y me sentía mareado. Fue duro recordar lo sucedido, pero tuvo que pasar y todo volvió a mi mente de a poco.
Lo primero que recordé fue haber bebido vodka de más, eso era obvio que lo recordaría, fue uno de los primeros sucesos. Luego de eso Karma llegó y me llevó a su habitación, todo muy normal hasta que cierto recuerdo hizo aparición...
¡¿Por qué le había dicho a Karma que me atraía?! Había sido un total estúpido por haber dicho eso y otras cosas que tuvieran que ver con atracción hacia Karma. También estaba arrepentido de haberlo besado... y casi haber tenido sexo con él porque nos tocamos y todo lo demás. Creo que no hace falta decirlo, solo que seguía la duda de su enojo.
Pero no debía ser, seguía sin querer aceptarlo. Él no debía enamorarme por más atrayente que fuera y cantidad de cualidades que poseyera. Era muy extraño para mí todo eso, pero tenía en claro el seguir negándolo.
Esperé a que la resaca disminuyera un poco, bebí algo para apaciguarla y me levanté dispuesto a ir a trabajar ya que por fin podía excitarme nuevamente luego de tanto tiempo.
Ya en el estudio el equipo me animó a retomar mi labor. Estábamos tan emocionados porque había bastante por hacer y no veíamos la hora de comenzar por todo el tiempo ya perdido por causa mía.
Estábamos grabando y justamente venía la parte sexual. Yo estaba con una chica, lo veía conveniente después de tantos vídeos homosexuales.
Solo que en el momento en el que ya estábamos desnudos algo salió mal. A pesar del buen cuerpo que ella tenía y lo excitada que se veía, yo no pude excitarme, tampoco se me puso dura. ¡Pensar que me había hecho horribles ilusiones!
¿Cómo es que cuando estaba con Karma sí pudo pasar...? ¡Eso era! Extrañamente debía pensar en Karma para que los deseos sexuales fluyeran como debía ser...
Me hice una imagen mental de Karma, al igual del momento que pasamos la noche anterior aunque no hubiera sido mucho. Sorprendentemente funcionó y en menos de nada estaba excitado como hace algún tiempo cuando podía trabajar sin problema alguno.
Seguía con la duda... ¿por qué solo se me paraba pensando en Karma o estando con él? ¿Habría sido cierto lo que dije la noche anterior sobre que me atraía? ¿Era eso? Sabía lo buena persona que era y sus magníficas cualidades, pero no sabía si enamorarme de él.
Me había quedado estático en mi lugar. Se suponía que ya debía estar penetrando a la chica, pero ni siquiera eso me emocionaba.
No podía quitarme a Karma de la cabeza, incluso me sentía mal por estar en este lugar y no sabía muy bien por qué. En ese momento concluí algo, ya iba siendo hora de aceptarlo.
—¿Pasa algo, Shiota? —me preguntó el director y yo asentí.
—Tengo que retirarme. Lo siento. —me vestí tan rápido como pude y salí del estudio a la misma velocidad dejando a un lado los gritos del elenco que me decían que regresara o al menos diera una explicación.
Sí, estaba enamorado de Karma. La poca calentura me hizo darme cuenta de eso, pero que él la provocara me lo confirmó.
Había dejado la grabación para aclararle las cosas, al igual que confesarle mis sentimientos. ¡En definitiva él debía saberlos! Estaba tan feliz porque todo lo que me gustaba de Karma podía ser visto por mí de una forma más profunda y hermosa.
Y no, Karma no había empezado a gustarme gracias a trabajar en proyectos homosexuales. A pesar de que yo fuera tan heterosexual, también hubo chicos que pudieron atraerme en el pasado, pero solo de forma física, con Karma era diferente, muchísimo más diferente.
En lo que iba de camino me dispuse a pensar y a analizar... ¿acaso Karma también estaba enamorado de mí? Fue algo que surgió de la nada, pero que tenía mucha lógica también. Eso explicaba por qué había sido tan bueno conmigo desde el principio sin conocerme muy bien, el querer seguir manteniendo contacto seguidamente conmigo, sus halagos, sus miradas, su trato, algunas discusiones y tal vez también por qué se había enojado. ¿Estaría celoso porque estuviera con otras personas?
Lo único importante era que todo concordaba. ¡Qué alegría! Así habría mayor razón para decirle sobre mis sentimientos, todo sería exitoso si era como lo pensaba.
🍊
Muy buenas, malditas perras.
Con amor.
¿Cómo están? Yo colapsando, casual.
AHORA VAN A SER FELICES POR SIEMPRE FODNXKDN, ya quisieran. Ay, ¿eso es spoiler? Mmm, nah, no lo es.
Ah, la semana pasada no actualicé porque me olvidé y estaba muy ocupada de todas formas :^).
En fen, aprovecharé de desearle un feliz cumpleaños a esta preciosa mujer:
¡Happy Birthday Lisa!
Ya tiene 22 T-T (23 allá en Corea), crecen tan rápido. ¿Por qué es tan bella? 💜
Cjau, hasta Abril¿.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top