Me puse una bata de satin negra, de esas que brillan de una manera espectacular cuando un destello de luz las ilumina. Freezer se puso a un lado mío, cerca de la mesita de centro, donde había tres velas y unos pétalos de rosa.

-¿Quieres que sigamos con la clase?- preguntó en voz baja y tierna.

-Sí,

Abri mis labios para decir algo, pero Freezer me besó casi comiéndose mi boca. Moví mis labios sobre los suyos lenta y suavemente. De repente su mano viajó por mi pecho bajando hasta mi abdomen. Me aguanta el gemido que casi se escapaba de mi garganta.

-Fre...freezer- susurré.

-¿Sí?

Siguió besando la piel desnuda que se mostraba por la bata.

-Espera.

Puse una mano sobre su pecho y lo empujé lejos de mi rostro.

-¿Qué pasa?- abrió sus ojos como platos y enarcó sus cejas.

-Es. lo que pasa es que... - tartamudeé.- No estoy seguro de poder seguir haciendo esto.

-¿Qué?

-Sí. No creo poder seguir con esto.- Tapé mi pecho con la bata y me levanté haciendo que Freezer  hiciera para atrás y quedara justo frente a mí.

-¿Por qué lo dices?

No lo sabía, no sentía que fuera algo correcto tener sexo todo el tiempo, igual y
era eso, o también podría ser que estaba cayendo en sus redes, así como un salmón. Sí, era eso. Dios mío, esos profundos y oscuros ojos y esa boca y esa sonrisa pícara que. ¡Frost, cállate!

-Siento que estamos pasando más tiempo de lo necesario-dije.

-¿A qué te refieres con eso? Digo, yo he seguido las reglas, sólo que hay una regla más.

¿Otra regla? Como si no fuera suficiente con las que tengo que cumplir cada que me toca.

-Tienes que conseguirte una pareja. Fui tú primera vez y apuesto a que eso crea una especie de vínculo o conexión conmigo y no quiero que nada de eso te ilusione. Eres guapísimo, uno de mis alumnos más guapos más joven, de hecho, eres el más joven y no y quiero que te ilusiones o cosas así.

-Bien.

Me levanté enojado y empecé a recoger mi ropa del suelo. Tomé mi celular y le marqué a mi mejor amigo.

-¿Hola? ¿Kyabe?- dije con la voz
entrecortada mientras salía de la habitación,dejando al guapísimo pero estúpido de mi profesor atrás.

-¿Frosti? ¿Pasa algo?- dijo. Al parecer se dio cuenta que estaba a punto de ponerme a llorar y me puso toda la atención que pudo.

-¿Puedes, puedes venir por mí?- dije ya llorando.

Sentí un jalón desde mi antebrazo. Me dio vuelta para verlo, ver a sus estúpidos ojos Oscuros.

-¿Frost? ¿Qué pasa?- sus labios temblaron un poco. Su mano izquierda subió a mi mejilla limpiando las lágrimas que salían incesantes de mis ojos.

-¡Déjeme!- le dije soltándome de su agarre. Lo miré con odio. Ni siquiera yo sabía por qué me ponía así. -Sabía que eras como todos. ¡Que va! Eres el idiota más patético que haya conocido en mi estúpida vida. Sólo me quieres para revolcarte conmigo en tu cama y después que ya no te importe nada de lo que yo siento.

Su rostro cambió. Su entrecejo y su nariz se arrugaron. Otra vez esa escena, esos pensamientos, ese fantasma que se apodera de mis pensamientos y de todo lo que soy.

-Bueno, no solo lo hago contigo, lo hago con todos mis clientes. Crei que teníamos en claro las reglas.

-¡Eres un estúpido! -solté mis cosas y empecé a golpear su pecho.

Tomó mis muñecas entre sus manos y me puso de espaldas a él. Tomó el celular del suelo y lo puso en su oído.

-¿Kyabe? - pronunció el nombre de mi
mejor amigo.- Frost se puso mal. ¿Puedes
venir al hotel? Piso 5, habitación 5043. Si
pudieras venir solo, te lo agradecería.

Colgó y me levantó aún de espaldas a él y me metió a la habitación. Cerró la puerta con su pie y nos sentó en la cama. Me abrazo y acarició mi cabello mientras me tranquilizaba.

- Eres  una estúpida Kale!

-Frost, soy Freezer , tu profesor.

- ¡Kale! -grité entre sollozos y lágrimas.

-Hey, tranquilo, Kyabe  ya viene en camino.

Unos minutos después Freezer me abrazó contra su cuerpo, sin dejarme solo ni un segundo. Empezó a cambiarse como pudo sin soltarme. Le aseguré que ya estaba mejor y podía irse a cambiar antes de que mi mejor amigo llegara y lo viera casi desnudo. Después me dio su camisa para que me la pusiera encima de la ropa interior.

-¿Estás realmente bien? - me dijo Freezer mientras se hincaba frente a mí y pone sus manos sobre mis muslos.

-Estoy bien, sólo necesito a Kyabe

Me rasqué los ojos y le sonreí amargamente. Torció la boca y me miró directamente a los ojos.

-Sé que no estás bien, y creo que esto de las clases te ha puesto peor..

-No, no pasa nada, lo entenderás todo cuando llegue Kyabe, lo juro-le aseguré.

Me guiñó un ojo y se levantó a abrir la puerta cuando unos nudillos hicieron un toque rápido contra la madera. La abrió y mi amigo entró como rayo a mi presencia. Me abrazo y me levantó para que me acomoda en su regazo como niño pequeño. Acarició mi cabello,sobó mis brazos y mis manos y golpeteó dulcemente mis rodillas.

-¿Qué pasó, pequeño?- me pregunto mientras acomodaba mi cabello.

-Kyabe-Susurré a regañadientes.

-¿De nuevo?

Asentí.

Yoongi le ofreció a mi amigo tomar asiento cerca de la mesita para conversar. Él aceptó sin soltarme en ningún momento. Se sentó a mi lado y Freezer al otro extremo. Prendió una lámpara y se sentó como buen empresario.

-Necesito que me expliquen quién es Kale y porque Frost se pone tan mal..

Kyabe me miró de reojo pidiéndome permiso con la mirada. Le hice un gesto para que le contara.

-Kyabr era una chica, ya sabes, linda, con dinero y deportista. La clase de chica que todo chico querría en su adolescencia. Mi pequeño Frost empezó a tener interés por ella al igual que ella por Frost, digo, ¿quien no? Frost es preciosísimo. - Freezer rió bajito y me miró divertido.- Kale empezó a cortejar a Frost; le buscaba cuando salía del aula, le daba regalos, le llevaba una rosa todos los días... todo ese tipo de cosas. Frost no resistió y cuando Kale le pidió que fuera su novio, aceptó. Frost siempre se ha vestido bien, se arregla bastante y todo eso.Kale un día le pidió a Frost verlo en el gimnasio del colegio. Yo sabía que él iría. Le repetí miles de veces que no era buena idea, pero aún así, él fue. Después de la clase de matemáticas corrio desesperado al gimnasio, arreglado y preparado para ver a su hermosa novia.Kale le convenció de que sólo le demostraría que lo quería si tenía sexo con él. Frost no aceptó. Supongo que con mucho dolor. Vino conmigo y durmió en mi casa, se sentía fatal. - tomó una pausa y me acarició suavemente. -Al siguiente día, Kale publicó en todos lados de internet que Frost era una maldita zorra barata, dijo que se había acostado con ella más de quince veces y que había aceptado hacer un trío con ella y otro amigo suyo. Todos se burlaban de Frost, de eso que los chicos le acorralaban para pedirle sexo grupal. Después de un tiempo Frost dejó de ser el mismo en el exterior, pero siempre el mismo en el interior. Kale lo lastimó mucho y creo que al día de hoy le lastima.

-Ya detente-le pedí a mi mejor amigo. Una lágrima volvió a escaparse de mis ojos.

Freezer tenía los suyos cristalizados. -Ese maldito hijo de puta-gruñó Freezer entre dientes- tengo una tarea para ti,Kyabe