★⌒ヽExtra 1
Extra 1: Papá Changbin y una propuesta de matrimonio.
—¿Crees que haya alguna manera de invocar a papá? —preguntó Jeongin mientras veía a su mejor amigo, quien se encogió de hombros.
—Uh, no lo sé, sabes que siempre ignora los portales para venir al mundo humano —respondió el rubio una vez tragó de la tarta que estaba comiendo—. Además, sabes que sus cuadros son sumamente escasos, creo que quedan tan solo como cinco.
—¿Podríamos intentarlo? Minho y Chan no volverán hasta dentro de horas y Channie tiene un cuadro de Changbin aquí. A Daisy no le vendría nada mal conocer al hombre que, según yo, es su abuelo —Jisung sonrió con complicidad y asintió—. Bien, ve preparando todo en la habitación principal, yo me fijaré que Daisy esté durmiendo en su cuna.
Ambos rieron antes de levantarse de las sillas dónde estaban y empezar a preparar todo para invocar a su 'padre'.
—Señor... —Soyeon llegó hasta donde Changbin, el demonio de la lujuria, se encontraba.
—¿Qué pasa, Soyeon? —cuestionó el mayor mirando con desinterés a la chica, quien se encontraba nerviosa.
—Hay un nuevo portal, están invocando otra vez —Changbin suspiró e iba a mandar al demonio a la chica, pero esta habló primero—. La sangre con la que están intentando invocarlo pertenece a Jisung y Jeongin.
—¿Esos dos mocosos están intentando llevarme al mundo humano? —bufó el mayor antes de levantarse de su cómodo asiento—. Bien, vamos a darles con el gusto.
—¡Papá!
—¡Viejo decrépito!
La voz de Jeongin y Jisung se escucharon al mismo tiempo, claramente diciendo cosas distintas lo que causó que el mayor de los mirara mal al menor.
—Te mostraré quien es el viejo decrépito, mocoso tonto.
Changbin rió antes de empezar a perseguir por el pequeño apartamento al ojiazul que siempre que podía le molestaba y jugaba bromas.
Jisung solo soltó carcajadas antes de caminar a la habitación de la pequeña bebé de ya dos años y con cuidado sacarla de su cuna para que fuera a ver a su padre y abuelo.
—¡Papá! Ella es la pequeña de Jeongin, ¿no es bonita? —Jisung se paró frente a las dos personas que ahora peleaban en el piso por quién era más fuerte.
Changbin levantó la vista y sonrió enternecido al ver a la linda bebé que Han tenía en sus brazos.
—Es muy linda —Changbin estiró sus brazos para cargar a la bebé con sumo cuidado, la pálida abrió sus pequeños ojitos para ver al hombre que la estaba cargando—. ¿Cuánto tiene ya?
—Cumplió hace poco sus dos años, mira —Jeongin se acercó a su hija, mostrando los pequeños dientecitos que le salían y que eran un poco más grandes que los demás—. Tiene colmillitos, es igual a mí excepto en su pelo.
—Es hermosa, será una bonita chica, tendrás que cuidarla porque habrá muchos chicos y de seguro chicas detrás suyo —el mayor tocó la pequeña naricita de la niña que, ante la sorpresa, rompió en llanto buscando a su padre.
—Ah~ ni la hija de In te quiere, debe saber que intentaste matar a su padre más de una vez —dijo Jisung en tono de burla—. Por cierto, de mí parte también serás abuelo —avisó el pelirrubio con una sonrisa en su rostro, dejando a ambos chicos sorprendidos—. ¡Ya! No me vean así, me hacen sentir rarito.
—¡Felicidades, Sunggie! ¿Cuánto tienes ya? —Jeongin fue el primero en hablar, acercándose a su amigo—. Daisy dile felicidades al tío Jisung —la bebé, sin entender nada, intentó murmurar lo que le había dicho su padre, lograndolo de una manera muy torpe.
—Ah~, mis hijos ya están tan grandes, ambos tienen una familia ya hecha —Seo dejó un beso en la frente de cada uno—. Hablando de familia, ¿dónde están los idiotas que hicieron sufrir a ambos?
—Entonces, ¿le pedirás matrimonio a Jeongin al fin? —preguntó Minho mientras ambos iban camino al apartamento del mayor.
—Sí, esta vez planeo hacerlo bien sin nada de mandarlo al reino de la lujuria otra vez, sin peleas ni celos tóxicos sin razón —Chan suspiró mientras continuaba conduciendo—. Aunque me da miedo, siento que me dirá que no en cuanto lo haga.
—Pues estoy seguro que eso no sucederá, se nota a kilómetros que a pesar de todo Jeongin te ama —Minho le sonrió a su amigo.
—Espero que tengas razón.
Chan suspiró mientras estacionaba su auto y finalmente ambos bajaron. En total silencio subieron al ascensor, Chan intentando pensar en cómo pedirle matrimonio a su lindo novio y Minho pensando en por qué ese día su Jisung había amanecido de mal humor y con náuseas.
Así ambos finalmente llegaron al apartamento del menor, miraron el lugar con el ceño fruncido, ya que se encontraba todo oscuro, y cuando iban a encender las luces fueron agarrados por atrás, sus ojos fueron tapados y sintieron que eran tirados al que creían era el sofá del lugar.
—Quítenle todo lo que tienen —una voz algo grave y desconocida se escuchó, tanto Chan como Minho sintieron el miedo invadirles, ¿dónde estaban sus parejas?
Ambos chicos, mientras intentaban que no les quitaran las cosas y fallando en el intento, se hacían la misma pregunta. ¿Qué estaba pasando? ¿Sus parejas estaban bien?
Bang sintió como su corazón se iba cuando la pequeña cajita con el anillo fue sacada del bolsillo de su abrigo.
—Changbin, espera —la voz de Jeongin finalmente se escuchó, la luz fue prendida y Yang sintió los nervios invadirle al ver aquella cajita que contenía un anillo. Se acercó a su pareja para quitarle lo que le habían puesto en los ojos y le miró—. Channie, ¿qué es esto?
Chan suspiró calmado al ver a su novio allí, sin embargo, los nervios lo invadieron nuevamente al ver que tenía la cajita con el anillo en su mano. Miró a Minho, quien ya también estaba sin el pañuelo en sus ojos, y éste entendió la señal por lo que agarró a su novio y al señor que no conocía para sacarlos del apartamento unos segundos.
—Uh, no se supone que debería ser así —dijo el mayor soltando un pequeño suspiro. Llevó una de sus manos a la mejilla de su pareja y con la otra agarró la pequeña cajita—. Innie, te amo tanto, sé que no soy el mejor novio y que tuve muchos errores, pero eres mi todo y no quiero vivir con otra persona que no seas tú. Entonces, Innie, ¿quieres casarte conmigo?
Hubo algunos segundos de silencio antes de que Jeongin se abalanzara al mayor para dejar besos en sus labios, murmurando mil veces "sí", asintiendo con la cabeza. Chan sonrió ante la respuesta e iba a besar a su, ahora, prometido cuando un golpe fuera del departamento se escuchó. Pronto Changbin entró con un Minho en sus hombros y un Jisung sin dejar de reír.
—Uh, creo que este chico no se tomó bien que será padre.
Entonces Jeongin también empezó a reír y Chan solo pudo admirarlo, estaba tan enamorado de ese bonito chico.
—Entonces... ¿Se van a casar? —Changbin habló luego de unos segundos y tanto Chan como Jeongin asintieron con emoción—. Bueno, entonces tendré que quedarme en el mundo humano hasta entonces para entregar a mi pequeño Innie en el altar.
—Pero, papá... Tú puedes pasar al mundo humano cuando desees.
—Que me quedaré en el mundo humano hasta entonces dije —Changbin miró mal a Jisung haciendo que empezara a reír nuevamente.
—¿Él es el demonio de la lujuria? —preguntó Chan en el oído del peliblanco.
—Ujum, y quiere rendir algunas cuentas contigo por hacer sufrir a uno de sus hijos.
—Ven, pequeña Daisy, veamos como tu papá huye de su suegro —Jisung cargó a la pequeña, que hasta entonces se encontraba en una amaca que la entretenía y caminó hacia el sofá.
—Ah~. ¿Alguna vez te imaginaste que terminaríamos así, Sung? —preguntó Jeongin apoyando su cabeza en el hombro del mayor.
—No, pero no me arrepiento en lo absoluto.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top