La primera vez que Beomgyu fue a un partido de Taehyun fue en el último año de preparatorias de este.

Taehyun nunca había invitado a Choi, y esa no había sido la excepción pero Beomgyu se enteró del partido y sin avisar lo fue a ver jugar.

Cuando Kang lo vio, Beomgyu le lanzó un beso de forma burlona y se rió con ganas aunque algunas personas lo veían mal.

El partido fue bueno. 

Beomgyu se sorprendió cuando Taehyun (que presumía ser el mejor en el fútbol y opacaba a los demás como solía hacerlo) fue fácilmente opacado por el número 02 correspondiente a un tal Jake.

Jake era demasiado ágil y bueno en el deporte. Beomgyu casi muere de ternura al ver al chico de frente. 

Tenía un rostro perfecto y el cabello negro corto.

Era tan lindo como sexy y Beomgyu no pudo evitar sonrojarse al verlo cerca ya que estaba en la primera fila.

Jake era de la misma escuela que Kang y de un momento a otro sintió como alguien se sentaba detrás de él y de repente una voz demasiado aguda y una demasiado grave gritaron tras de él.

—¡VAMOS JAKE HYUNG, DESTROZALOS!

—¡JAKIE HYUNG ERES EL MEJOR!

Beomgyu no volteó por vergüenza hasta que una segunda voz neutra cayó a las otras.

—¡Riki, Sunoo! Dejen de gritar tan alto. La gente nos ve raro.

La voz más aguda respondió.

—Oh, vamos Jay, Jake hyung es mi mejor amigo. Debo apoyarlo.

—Si pero no hagas tanto escandalo, ¡idiota!

El partido siguió y cuando Jake anotó su segundo gol, la voz del chico cuyo nombre parecía ser Jay, fue la que más sonó.

—¡JAKEEE ESO ES TODO, ESOS IMBÉCILES NO PODRÁN CONTIGO!

Beomgyu no pudo evitar voltear asustado por lo alto que se había escuchado ese chico.

El trió lo miró sorprendidos. Claramente no se esperaban que Choi Beomgyu los hubiese escuchado gritar así.

Cuando el partido acabó fue a ver corriendo a Kang y cuando al fin lo tuvo enfrente simplemente le sonrió burlón.

—Así que el mejor en el fútbol, ¿eh? A mi me pareció que ese tal Jake te opacó.

Taehyun lo miró irritado.

—¿Jake Shim? Él es un perdedor. Se tuvo que ir a trabajar a China dos años para pagar su escuela y se atrasó con los estudios. Es un muerto de hambre y un fósil aquí. No debieron haberlo aceptado. La única razón por la que tiene un lugar en el equipo es por que chupa la polla del entrenador Su...

Mientras hablaba, alguien pasó a su lado y chocó con Kang.

—Oh, cuidado Sunoo —era el mismo chico de voz aguda y sonrisa gatuna que gritaba por Jake Shim en la grada de atrás quien había empujado a su amigo Sunoo contra Kang a propósito.

Taehyun los miró con desagrado.

—Ten más cuidado imbécil.

—Oh no, ¿Ya ves Sunnie? Por poco pisas mierda.

Taehyun frunció el ceño y rezongo irritado.

—¿Y tú quien mierdas eres? 

Sunoo se puso junto a ellos.

—Tranquilo Kang, no venimos a pelear, sólo a felicitar a Jake por su triunfo.

—¡Yo también metí un gol!

—Él metió cuatro. Ya deja de llorar y dejamos pasar idiota. Por cierto un gusto Beomgyu. Somos grandes fans tuyos, Kang es un baboso pero tu eres lindo.

Después de eso el trío se fue y Taehyun simplemente caminó hacia la salida.

Beomgyu quiso burlarse pero se contuvo. 

Nadie más que él había ido a verlo, nadie más que él se había acercado después del partido.

La gente que se le acercaba lo trataba mal y Taehyun parecía estar acostumbrado.

Beomgyu sabía que la gente lo trataba así porque conocían a Kang.

Simplemente era un idiota. Pero eso no quitaba el hecho de que Taehyun al igual que él no tenía verdaderos amigos.

Si su nonna Somi no hubiera estado para él, ¿Habría sido como Taehyun?

La única persona que se le había acercado era por su dinero y Taehyun lo sabía.

La persona con la que se iba a casar la se la habían elegido las mismas personas que los habían hecho tan desgraciados.

Beomgyu veía el dolor en los ojos de su prometido y con todo el peso del mundo se acercó a Kang a tomarlo de la mano.

Amaba a Taehyun aunque ese fuera un idiota.

Era engreído, narcisista y altanero. 

Pero sería su esposo y aunque sería difícil, lograría que Kang Taehyun lo amara.

. . . . . . . . . . . . . . . . ꒰ ☁︎ ꒱ ,,  ⌲ 

Cuando Beomgyu le tomó la mano Taehyun no hizo nada para apartarlo.

Había una persona con una cámara a pocos metros y su padre ya le había advertido que debía mostrarse enamorado de Beomgyu.

Taehyun era fiel creyente de que todo lo que hacían era un teatro.

Posar como si no odiaran tener que casarse con la persona que sus padres habían elegido.

Y bueno, como si no odiaran todo lo que sus padres habían elegido para ellos.

El uniforme del equipo era verde menta y Taehyun odiaba ese jodido color.

Pero si sus padres habían incluso elegido su sexualidad, ¿Por qué no elegir su uniforme de fútbol?

Caminaba tomado de la mano de su prometido (elegido por sus padres) usando un uniforme, (elegido por sus padres) caminaba hacia un auto clásico, (elegido si, por sus padres).

Justo antes de subir al carro sintió cómo Beomgyu se separaba de sus manos bruscamente.

Estaba a punto de reclamarle cuando volteó y lo vio junto a Kim Soobin.

—Kim —dijo retomando su postura burlona y superior que con Beomgyu no solía usar. Con él ya no era necesario fingir—  ¿Qué haces por aquí? No eres bienvenido.

Soobin lo ignoró abrazando a Beomgyu y dándole un tierno beso en los labios.

Cuando se separaron le acarició la cara con dulzura mientras lo veía con cariño y admiración. Un gesto tan íntimo, como si le hubiera tocado el culo.

Dejó de ver a Beomgyu para hablar con Kang.

—Vine por Gyunnie, es domingo, ¿Recuerdas? A esta hora ya deberíamos estar en mi casa arreglando las maletas para irnos, pero me pidió permiso para venir a verte.

¿Beomgyu le había pedido de su tiempo para ir a verlo jugar?

Cómo siempre Choi le sacaba de quicio con su actitud demasiado amable.

Choi Beomgyu debía estar muy mal de la cabeza para haberse enamorado de él.

—¿Maletas? No me habían dicho que saldrían —Taehyun estaba molesto.

El guapo, carismático y divertido de Kim Soobin lo molestaba. Lo enfermaba.

Beomgyu merecía alguien como él, no como Kang Taehyun, un completo hijo de puta.

—Nos iremos esta semana a Japón. Acabo de acabar la preparatoria, merezco unas vacaciones. Además gracias a que nos arruinaste las vacaciones pasadas pues ahora tendremos más tiempo. Nos vamos. Despídete, Beomgyu.

Soobin caminó hacia su deportivo azúl metálico.

Justo como el que él siempre había querido pero jamás había tenido porque sus padres odiaban ese tipo de autos.

—Yo… —Beomgyu se aclaró la garganta— debo hablar con Soobin, debo recoger unas cosas a tu casa. Espérame aquí Taehyunnie.

Taehyun se estremeció.

Estuvo a punto de subirse a su coche e irse de no ser porque cuando Beomgyu lo llamaba Taehyunnie, siempre obtenía lo que quería.

Al final Beomgyu había conseguido quedarse hasta el lunes en casa de Taehyun, si prometía levantarse temprano para ir al aeropuerto.

Beomgyu debía empezar a cambiar las cosas entre ellos dos lo más pronto posible, así que en cuanto llegaron a el cuarto a dormir, Beomgyu no desaprovechó el tiempo.

Se sentó en el regazo de Taehyun mientras lo besaba con calma y se quedó sorprendido cuando no sólo Taehyun le respondió con la misma calma, si no también que enredó sus brazos en su cintura y lo atrajo más hacia él.

El beso fue más dulce de lo que esperaba, y en los labios de Taehyun, se sentía derretirse.

Encendió los dedos en el cabello de su prometido hasta que sintió al chico tensarse.

—Taehyunnie —dijo para calmarlo, cosa que logró— por favor, sólo déjame amarte.

Lo miró a los ojos, presionando ambas frentes juntas.

Podía ver la confusión de Taehyun pero, sabía que en el fondo quería simplemente dejar de ser él.

Beomgyu lo amaría como fuera, así que no le importaba si cambiaba a Kang.

—Beomgyu…

—No digas nada. Por favor. Sólo... Besame.

Se besaron así por un buen rato.

Choi jamás pensó llegar a estar así con Kang. Besándose como...como si realmente se amaran y no como si los hubieran obligado a hacerlo.

Se besaban como quien quiere cuidar el uno del otro, no como si quisieran matarse mutuamente.

Estar así con Tae lo hacía tan feliz. Era sólo el inició, el que Taehyun no le hubiera gritado era un avance.

Beomgyu rompió el beso y llenó la cara del contrario con pequeños besitos, así como Soobin lo hacía con él.

Con Soobin se sentía amado, y quería lo mismo con Kang.

—No deberías estar enamorado de mi —el tono en la voz de Taehyun era tranquilo y grave. Algo que jamás había escuchado en él— no soy de quien deberías estar enamorado.

Beomgyu sonrió.

—Yo sólo quiero facilitar las cosas entre los dos, Taehyunnie, tendremos una vida para conocernos y yo quiero que sea una vida feliz. Haré lo que sea... Escúchame bien Kang Taehyun... Lo que sea para que me ames. 

Beomgyu debía jugar bien sus cartas si no quería que el impredecible de Kang Taehyun le cambiara el juego.