Mujeriego/College Au

Mención del Tododeku, Kirimina,Miritama,Dabishiga y Momojirou.

El fin de semana está a solo 4 días.

El fin de semana está a solo 4 días.

El fin de semana está a solo-4-días.

Hanta repite su mantra el primer día del tercer año.

Agradece a sus padres que lo hayan podido inscribir en la universidad de sus sueños, en dónde podrá realizar su amada carrera de veterinaria, pero no puede controlar su "extravagante" personalidad.

Tiene buenas notas, una buena educación, pero también es un casanova. Adora ver y atraer bellezas, más que nada a mujeres hermosas, a pesar de ya haber besado a varios chicos en su vida y disfrutar de eso.

En lo que va de su vida universitaria, ha estado relacionado con varias chicas, ya sea en su escuela, de otra academia o en sus vacaciones de verano. Sin embargo, si hablamos de una relación más allá de un día o una noche, entonces nos quedamos en 0.

Es la hora del almuerzo, su hora favorita no solo porque no hay ninguna clase, sino porque puede mirar con atención a todas las mujeres, no solo a las de su carrera.

Está tan absorto viendo a las chicas del curso de artes, que no se da cuenta de que su amigo Eijirou, estudiante de enfermería, trata de llamar su atención, a pesar de estar sentados en la misma mesa.

—Oye, Hanta. Te preguntaba si esta tarde quieres conmigo y Mina al cine.

—¿Eh? Ah sí, lo que sea.

—Hanta, deja de estar mirando a las chicas como si fueran donas de panadería —regaña el pelirrojo—, deberías irte por algo serio, si no, no experimentarás el amor por primera vez en tu vida.

—Por favor —se acomoda—, para que necesito sentimientos cuando tengo una hermosura mimandome.

Su sonrisa es rápidamente borrada por un muy cariñoso sape de su amiga de cabello rosado, quien cursa la carrera de diseño.

—Es en serio Hanta, tus padres quieren que busques una pareja, no una aventura —se sienta—. Ya hasta me preguntaron si estoy disponible para ti, y varias veces les tuve que repetir que tengo novio.

—Por favor, aunque estuvieras soltera, eres como una hermana para mí, y no puedo verte más allá de eso.

—Aw, que tierno. Pero en serio, no puedes pasar toda tu vida siendo un mujeriego.

—¿Jamás te has preguntado cómo sería estar más de una vez con alguien?

—No sé, a veces me lo pregunto —juguetea con su comida—. Tal vez es que aún no encuentro a mi chica ideal.

—¿Quien está hablando solo de mujeres? —Mina mueve las cejas.

—Bueno, admito que esa noche besándome junto a Todoroki no estuvo tan mal —recuerda al estudiante de medicina—, y también esa fiesta en casa del estudiante de pediatría, amé bailar pegado cuerpo a cuerpo y besar esa linda cara.

—¿Te refieres a Midoriya? Irónico que ahora él y Todoroki estén en una relación. ¿Ves? Incluso tus ex parejas ya tienen noviazgo.

El pelinegro está a punto de decir algo para defenderse, pero se calla al oler el aroma más dulce y delicioso del mundo pasar a su derecha. Al fijar la vista, deslumbra a un precioso chico de cabello rubio de maravillosa sonrisa, la cual resalta sus perfectos pomulos.

Es increíble que se haya fijado por primera vez en el rostro de alguien y no en su cuerpo.

—¿Quién es ese bombón?

—El que acaba de pasar —señala Mina, la experta en enterarse de todo—,es un nuevo estudiante de segundo año en psicología, se llama Denki Kaminari. Tuvo que presentar el primer período en línea por asuntos personales, y es su primer año en la academia. Según me cuentan, es posible que sea pan o por lo menos bi.

—Oh no. No me digas que vas a ir tras él. Hanta, es apenas el primer día.

—Creo que iré a presentarme —se peina—. Con su permiso, voy a conocer a número 15 —se levanta.

—¿En serio lleva una cuenta de todas sus conquistas?

—Solo las de este mes, Mina —reprocha Eijirou una vez que Hanta se va.

La mirada de iris oscuras se fijó en la mesa ocupada por el rubio, concentrado en sus apuntes mientras escucha música. El volumen le permite descubrir que la canción es de Green Day, su banda favorita. Esto le empieza a gustar más.

—Hola, chico lindo —se sienta delante de él.

Lleva su mano a la vista del chico y logra que este lo vea, regalando su sonrisa más brillante.

—¡Buenos días! —se quita los audifonos—. Es un placer, soy Denki Kaminari.

—El nombre perfecto para la perfección personificada —toma su mano—, yo soy Hanta Sero —besa sus nudillos, haciendolo reír.

—Pues, es un gusto Hanta.

—Veo que te gusta mucho estudiar.

—Si con eso puedo graduarme antes y trabajar antes en mi propio consultorio.

—Ya veo. Oye, ¿te gustaría tener unas lecciones privadas en mi dormitorio? Digo, soy de la carrera veterinaria, pero se algunas cosas de psicología.

—Es muy amable de tu parte Hanta.

—Entonces hay que vernos a las...

—Digo que es muy amable de tu parte, pero no voy a aceptar la invitación. Ya quedé con unos amigos para estudiar. Puedes acompañarnos si gustas. Creo que el novio de Touya estudia veterinaria —revisa su telefono—. Oh, tengo que irme —empieza a tomar sus cosas—. Si quieres venir estaremos en el dormitorio 235 del edificio H a las 4:30 hoy y el jueves.

Hanta se quedó estupefacto por la respuesta de Denki y su rápida desaparición de la mesa.

—¿Acaso acaba de... rechazar a Hanta? —Mina y Eijirou estaban tratando de aguantarse la risa, pero no pudieron y fueron escuchados por su amigo casanova.

—¡Pensé que no había quien se te resistiera! —Kirishima se limpia una lágrima.

—Bueno, nada mal para un primer intento. De seguro solo es tímido. Ya saben, Amajiki fue una misión difícil para Togata, y ya hasta se van a casar.

—Pero a diferencia de ti, él fue mucho más tranquilo y agradable, no coqueto y lujurioso.

—Sí, cada quién conquista como quiere y como puede. Con su permiso, debo ir a mi salón.

—Te deseamos suerte —contesta Mina burlona.

Durante los días siguientes, Sero se dedicó a investigar más acerca del rubio de la cafetería, interesandose cada vez más al descubrir más sobre él. 

Luego de una exhaustiva investigación, tiene los siguientes datos.

Denki Kaminari, 19 años. Clase media, llegó a la universidad con una beca. Originario de la ciudad del este. Sus padres fallecieron hace un año y por eso tomó el primer año en línea. Se mudó hace poco y vive con su tutora Nemuri, la propietaria de la cafetería Midnight. Tiene un pequeño trabajo organizando los libros en la biblioteca. Se presume que es el mejor de su clase y de toda la facultad.

Le gustan las hamburguesas, los pikachus, las películas, los mimos y las flores. No se resiste a una ida al cine.

Ya tiene un poco más de información acerca del rubio, lo que representa una pequeña ventaja.

Con el fin de tratar por segunda vez seducirlo, Hanta se fue el jueves a la hora citada a los dormitorios del edificio H.

Toca dos veces a la puerta del 235 y es recibido por un chico con muchos tatuajes y mirada amenazante. Casi puede imaginarse lo con un cigarrillo en mano de no ser porque está prohibido fumar en los dormitorios.

—¿Se te ofrece algo? —siente como si le estuviera hablando el villano de una película de terror.

—Am... es que... me invitaron a una sesión de estudio aquí.

—¿De parte de quién?

—Denki Kaminari.

—¡Hanta! Bienvenido —se asoman Denki y un peliceleste—. Que bueno que llegaste. Él es Touya —señala al pelinegro—, es dos años mayor que yo en la carrera de psicología, y el es Tomura —saluda el peliceleste—, estudia veterinaria.

El pelinegro lo miro un segundo y parece reconocerlo. El está un año arriba y a veces lo ve en los pasillos de la división.

—Es un gusto conocerte Tomura.

—Igualmente, Hanta.

Pasaron la tarde hablando de temas relacionados con las materias, sobre los próximos eventos escolares y sobre la nueva película de superhéroes que se estrenaría en dos meses.

—¡Estoy emocionado por verla! Es la segunda película que saca la franquicia y se que será igual o mejor que la primera.

—Tou-chan —abraza a su novio—. Promete que compraras los boletos en preventa en cuanto salgan.

—Claro que sí, mi vida. Por ti, lo que sea —besa sus labios—. Y te compraré los dulces y palomitas que quieras.

Mientras ese par se empezaba a poner un poco meloso, Sero decidió aprovechar la distracción para empezar a coquetear con Kaminari con un par de caricias en su hombro para llamar su atención.

—¿Y tú irás con alguien a ver esa película?

—No, en realidad. Casi siempre termino yendo solo al cine. O tal vez vaya con mi tía, bueno, si no está ocupada.

—Oh, que pena. Te prometo que si tengo tiempo libre ese día, te acompañaré. Oye, hablando de cine, ¿te gustaría ir al cine conmigo mañana? Podríamos ir a mi dormitorio después para... platicar sobre la película.

—¿Ir al cine mañana? —sus ojos parecen brillar—. ¡Me encantaría!

Hanta se felicita a si mismo por eso, pero su sonrisa se borra casi al instante.

—Kyoka y Momo también quieren ir al cine a ver la película de terror nueva y me dijeron que podía acompañarlas. Si vas conmigo me sentiría un poco más seguro, porque no conozco mucho de aquí, solo tengo 3 meses viviendo en esta ciudad —una alarma suena en su teléfono—. Uy, me tengo que ir, tengo que ayudar en la biblioteca —recoge sus cosas—. Adiós chicos, nos vemos mañana.

La mirada negra lo contempla irse y se frusta decepcionado. No solo no logró un avance, si no que ahora tenía que ir a ver una película de terror, su género menos favorito de todos los tiempos.

—¿Crees que no sabemos lo que tratas de hacer? —le llama la atención Touya, cuyas manos estaban abrazando la cintura de su novio—. No somos idiotas, te conocemos perfectamente, que eres un casanova.

—No vamos a permitir que seduzcas a nuestro niño para luego botarlo, lo educamos para que sea un persona sensata e inocente.

—Pff, no me dan miedo sus amenazas. Y no sé de que hablan, no intento seducirlo.

Aunque no lo parezca, hay algo de verdad en eso.

En esos 3 días, mientras más sabía sobre Denki, más le interesaba y más quería conocerlo. Es extraño, normalmente no se pone tan serio al momento de conocer a alguien y mucho menos con un varón. Si no tiene interés, lo olvida en un día. Ya pasaron 3 y ese rubio de cara bonita aun no sale de su mente. Incluso rechazó a las más hermosas de su clase con tal de poder ver al chico.

Así que por eso se ha implementado el código Chico Objetivo Número Quince Unico Increíble Seria Tarea Amorosa.

En otras palabras, la operación CONQUISTA.

La cita en el cine no pudo ser el peor lugar o momento para intentar llegar a terrenos más románticos con Denki, pues las amigas de este no los dejaban solos. Cuando tuvo su oportunidad en la dulcería, de la nada Momo se lo llevó a hacer fila para la entrega de boletos y tuvo que quedarse bajo la mirada seria de Kyoka. En la sala fue peor, porque la pareja se sentó en los dos asientos que lo dividian de su objetivo 15. No hace falta decir que Sero tuvo pesadillas luego de ese espectáculo de terror.

Lo único bueno de ese día es el hecho de que Denki tomó su mano para tranquilizarlo una vez salieron de la sala. Lo acompañó hasta su edificio y se despidió de el con un cálido abrazo. Quien lo diría, ahora es él quien siente una sensación atractiva con un irresistible chico.

Una semana después, mientras se recuperaba del shock de la película tan gráfica y aterradora que en nada pareció afectar a Denki, Hanta visito la cafetería Midnight con la esperanza de encontrarse con su objetivo, el cual está estudiando en una de las mesas mientras bebe un poco de café. Lleva un precioso suéter de cuello de tortuga color café cremoso, unos lentes que resaltan sus ojos dorados y una sonrisa preciosa.

Estaba a punto de acercarse a él, aprovechando que no hay casi clientes cerca de esa área, pero se tropezó al ver a un pelimorado de ojos pequeños acercarse a la mesa y tocar su hombro.

—Hola, mi vida —por primera vez, la hermosa carita sonriente se apanica frente a sus ojos.

—Seiji, ¿qué haces aquí?

—Inasa me dijo que te encontraría aquí, te gusta venir a estudiar en el café —acaricia su cuello.

—Seiji, ya te dije que no quiero nada contigo.

—Oh vamos. Se que quieres que te ponga en mi cama y te haga quedar ronco mientras estés gimiendo por más —lame su cuello.

—¡Ya déjame tranquilo! —se levanta bruscamente.

—¿¡Por qué me rechazas!?, ¿¡Por qué no aceptas que eres un fácil, Denki!? No creas que no supe a base de que sobrevivías antes de mudarte aquí luego de que tus padres murieran.

—Por favor —empieza a temblar—. Déjame tranquilo.

—Solo a cambio de una cosa —se acerca a sus labios.

Es suficiente. No se va a quedar de brazos cruzados viendo algo así. Incluso él, siendo un seductor, conoce los límites del espacio personal.

Su puño rápidamente impacta contra la cara de Seiji y con su cuerpo esconde a Denki detrás de él.

—¿Eres sordo o imbécil? Creo que eres ambas cosas. Te dijo que lo dejes en paz.

—¿Y tú quien carajos eres? Nada te importa esta conversación.

—Me importa porque no quiero que un amigo sea acosado por alguien como tú.

—Tsk, lo dices como si no supiera que eres como yo. Mi amiga Camie te manda saludos.

El ceño de Hanta se fruncio rápidamente, conteniendo su puño para que no impacte nuevamente en la boca de ese tipo.

—Yo no soy como tú. Si alguien me dice que no, es que no. Nunca forzaría a alguien a quererme, mucho menos si en serio me gusta esa persona —un pequeño rubor se hizo presente en las mejillas del más pequeño.

A punto de decir algo más, los tres se sobresaltaron por un fuerte golpe en la mesa.

—Vaya, vaya. Pero si es mi querido amigo el acosador sexual —la mujer levanta el meú azotado—. Más vale que te largues de aquí, ¡O ni tu propia madre será capaz de reconocerte cuando acabe contigo! —lo amenaza con su escoba.

El tipo se fue finalmente, para alivio del pequeño rubio que aún temblaba.

—Ya paso cariño, no te preocupes —Nemuri lo abraza.

—Te juro que no es cierto lo que dice tía, yo no hice nada de eso —solloza.

—Nunca le voy a creer una palabra a ese imbécil —besa su frente—. Siéntate, te traeré unas galletas. Y tú —mira a Hanta— gracias por defender a mi sobrino. Te invitaré algo, también te puedes sentar —se retira.

Hanta espero a que se le bajará un poco el susto y se sentó adelante de Denki.

—Oye, yo... Lo siento. No tenía idea de que estabas pasando por algo así.

—No sabía que eres un casanova.

—Lo sé, se que soy un casanova. Pero te diré algo: no me siento como uno cuando estoy contigo.  No sé como llamar tu atención, no sé como llegar a otra base contigo, no sé como conocerte, a pesar de que nunca ha sido un problema para mí hacer esas cosas. Creo que... debería empezar de cero.

—¿De cero? ¿Ya estabas tratando de conocerme?

—Pero ahora no lo haré como un amante o pretendiente, sino como un amigo. ¿Te parece? —sonríe con sinceridad.

—De acuerdo, Hanta —le regresa la sonrisa.

Pasaron muchas cosas después de que se volvieron amigos.

Para empezar, supo que el rumor sobre su trabajo de dudosa procedencia era eso, un rumor. En realidad, luego de la desafortunada pérdida de sus padres, Denki estuvo viviendo en un hogar temporal con un maestro de la universidad, él cual logro localizar a su tutora en la ciudad donde estaba su campus. El rumor se hizo luego de que Denki rechazará a una chica, la cual amenazó con arruinar su vida si no aceptaba una cita con él. Subió fotos editadas y notas sobre el trabajo del becado y aprovecho su mudanza para justificar su mentira. Para su mala suerte, no esperó a que perdiera una demanda por difamación por parte del rubio, gracias a su amiga Momo y sus muy importantes padres abogados.

También descubrió que fue en clases en línea que hizo amistad con Touya, ya que esté se había convertido en su tutor y después un guardián junto a su novio Tomura.

Kaminari también supo muchas cosa sobre Sero: Le gusta el cine policiaco, la comida asiática y salir a patinar.

Un semestre pasó y, durante las vacaciones, Hanta llevó a su amigo a casa de sus padres, quienes quedaron encantandos con él, casi al punto de quererlo como a un segundo hijo

Entre muchas cosas que hicieron durante toda la universidad están sus visitas al centro de patinaje —en dónde Denki casi se cae varias veces— maratones de películas —no de terror— y pequeñas citas en Burger King.

Su graduación coincidió el mismo día , en el cual celebraron con sus amigos, los padres de Hanta y la tía de Denki.

Rentaron un departamento juntos, consiguieron trabajo en la misma clínica, pero, lo más importante, es que se formalizaron en una relación al final.

Hoy, exactamente en la fecha de que conocieron, Hanta deja al rubio en la cama del hotel antes de besarlo nuevamente.

—Nunca te lo había dicho, pero amo como te ves vestido de blanco —besa la mano en dónde tiene su anillo.

—Ay Hanta —se sonroja—. Tu también te ves muy guapo.

—Lo sé. Solo quería recordarte que eres muy hermoso —besa sus labios.

En esa habitación, finalmente descubre lo que es probar la gloria. Los dulces besos de su chico, la delicada piel que permite acariciar, sus hermosos gemidos al estocar en su punto dulce y su cálido abrazo. Son todas esas cosas que jamás imaginó encontrar en Kaminari y que nunca encontró en ninguna otra chica.

Después de celebrar su primera noche de casados, Hanta se despertó levemente y contempló el cuerpo semidesnudo de su ya dormido esposo, acariciando su cabeza y dejandole un beso.

—Te amo, cariño.

Cuando conocía a una nueva conquista, siempre usaba el apodo de cariño, pero nunca sintió algo tan profundo como lo siente ahora.

En ese preciso momento, sintió como si saliera de un trance. De pronto, sintió como si solo hubiera pasado una semana en lugar de 7 años.

En el preciso momento en el que se conocieron, Hanta ya no había vuelto a intentar conocer a otra chica, ni cuando salieron de la universidad, ni en la clínica donde trabajaban unas muy coquetas enfermeras, ni en la boda de Mina y Eijirou con las muy atractivas primas de la pelirosada. Mucho menos en los preparativos de su propia boda, cuando conoció a una muy entusiasta y proporcionada mujer. No, ya ninguna mujer le llamaba la atención, ahora es un hombre fiel, cuyo único interés actual es su querida estrellita Denki, su cariño.

De todas las veces que ha dicho el apodo cariño, finalmente tiene a la persona indicada para decírselo por el resto de su vida.

Y no podría estar más feliz por eso.

La operación CONQUISTA fue un éxito pese a modificarla como Chico Objetivo Número Quince Ultimo Interés Sobre Todos Aquellos Demás Objetivos.

En síntesis, jamás volvió o volverá a ser un casanova gracias a la operación aplicada sobre él.

Operación CONQUISTADO

CURIOSIDADES

1-Originalmente la pareja de Kirishima en este one-shot sería Bakugou, pero el Kirimina es uno de mis shipps favoritos de Kirishima, así que pensé, ¿por qué no agregarlo aunque sea una vez?

2-La canción que Denki está escuchando es Boulevard of Broken Dreams, de Green Day.

3- Denki estaba tan acostumbrado a los coqueteos forzosos que por eso no entendía los coqueteos tiernos por parte de Hanta.

4-Fue difícil haber creado el acrónimo de conquista y conquistado, la verdad está más o menos a mi parecer.

¿Les gusta el separador? A mi me gustó mucho el resultado uwu.

Próximo cap: ¿Cómo conociste a mamá?

Sayonara, Woxi fuera.