Esa noche Kaneki tuvo una pesadilla que implica ser perseguido por un maletín gigante y sensible. Cuando por fin se despertó fue al tintineo de su teléfono celular. Groggily el joven de pelo negro agarró el teléfono y miró el nombre.

-Buenos días, Hide.- Kaneki dijo frotándose los ojos mientras se sentaba.

-¿Te desperté?- Hide le preguntó como si estuviera levantado un rato.

Kaneki asintió antes de darse cuenta de que tenía que verbalizar para que Hide entendiera. -Sí, de todos modos me levantaría pronto.

-Entonces, ¿quieres salir hoy? Ha sido muy agradable salir para que pudiéramos ir al parque o algo así.

Ocultar ofreció eso sonaba agradable, había sido un poco desde el pasado pasar el rato con Hide fuera de la escuela y cuando llegó a Anteiku. -Claro, ¿a qué hora quieres reunirte?

-¿Qué tal si nos encontramos en ese parque con la gran fuente en cuarenta y cinco minutos?- Hide dijo y Kaneki dio su aprobación.

Colgaron y Kaneki tomó algo de ropa y se preparó para el día. Apartó a Rize, que miraba por la ventana. Kaneki salió muy rápido y llegó al parque cinco minutos antes. Ocultar se presentó exactamente cinco minutos más tarde.

-Hey Kaneki, ¿cómo ha ido el trabajo?- Hide preguntó mientras caminaba.

-El gerente está fuera por las próximas dos semanas, pero por lo demás ha sido bastante normal.

Hide asintió antes de que una sonrisa apareciera en su rostro. -¿Cómo está Touka? ¿Está viendo a alguien?

Kaneki sintió un poco de pena por sus amigos al parecer, Touka probablemente no era la mejor persona para enamorarse. -Ella está haciendo bien, no creo que ella este con alguien. Ella está muy ocupada estudiando ahora.

La sonrisa de Hide se mantuvo. -Ella es tan linda, debería pasar más a menudo, por cierto, cualquier chica nueva te llama la atención.

Kaneki parpadeó, sinceramente no había estado pensando en salir. Siempre el ghoul estaba ocupando la mayor parte de su mente, y después de Rize no lo hizo ahora si podía confiar en cualquier ghouls en fechas. -No en realidad no.

La rubia frunció el ceño: -¡Vamos, amigo!, no es probable que su cita sea aplastada por vigas de acero otra vez.

Kaneki puso los ojos en blanco. -La mayoría de la gente no menciona ese tipo de cosas.

-Oye, es la verdad, todavía debes salir a jugar al campo-. Hide tenía un buen punto.

Hablaron durante un rato más antes de que Hide obtuviera un texto de alguna parte. Aparentemente tenía los ojos puestos en algo más que en Touka. Se fue para ir a reunirse con la chica que tenía el texto y Kaneki se levantó para salir. El día seguía siendo muy agradable, así que decidió caminar a la estación de autobuses más lejos.
Kaneki cerró los ojos disfrutando del buen tiempo mientras caminaba. Fue agradable sentirme normal por un tiempo. Da un paso adelante y su nariz choca contra algo duro. Con pánico Kaneki levanta la vista y sus ojos se ensanchan un poco mientras ve la cara familiar de Yomo delante de él. -Oh, lo siento.- dijo Kaneki al salirse del camino.

-Tengo una amiga que quiere conocerte, está en HySy ahora mismo y está muy cerca si quieres venir-dijo Yomo con su habitual tono indiferente.

La curiosidad golpeó a Kaneki. Él asintió con la cabeza y siguió al hombre más grande a la tienda familiar de la máscara. Yomo sacó su móvil y abrió la puerta. Dentro era lo mismo que Kaneki había visto la última vez. No vio a Uta ni a ninguna mujer dentro. Miró a su alrededor cautelosamente, no quería tener su primera impresión en el amigo de Yomo de estar asustado sin razón.

-¿Dónde están? -preguntó Kaneki.

Yomo buscó su teléfono un poco antes de dirigirse a él, -Itori envió un texto sobre cómo podrían haber ido a recoger un café.

Kaneki asintió con la cabeza, la tensión lo dejó. Así que no iba a tener miedo de nuevo. Kaneki se movió para mirar algunas de las máscaras. Uno de ellos era de una vieja y parecía increíblemente real. Kaneki podría haber jurado que los ojos rosados ​​eran reales.

-¡Soy una vieja! -gritó la máscara de repente.

Kaneki soltó un grito cayendo hacia atrás y siendo atrapado por alguien antes de que pudiera golpear el suelo.

-Hola Kaneki.- Dijo Uta con calma al petrificado Kaneki.

La máscara fue despegada para revelar a una joven bastante bonita con el pelo rosado que emparejaba sus ojos. Tenía una amplia sonrisa. -Lo siento, puedo ayudarte, soy Itori, Ren y U me han contado mucho sobre ti.

-me alegro de conocerte.- Kaneki dijo trémulo tratando de mantenerse solo.

Ella hizo un ruido de arrullo y lo sacó de los brazos de Uta para abrazarlo contra su pecho. -¡You are so cute!-

Kaneki hizo un ruido de sorpresa y un rubor se elevó hasta sus mejillas y se sintió mejor cuando ella lo dejó ir. Se estabilizó y volvió a mirar a la mujer. Todos se sentaron junto a una de las mesas claras.

-¡Ojalá me hubieras dicho que ibas a traer a Kaneki! Entonces podría haber traído algo para poder ver su único ojo- Itori gimió hacia Yomo.

Yomo simple gruñó en su dirección aparentemente no prestar atención. Itori dio una mueca antes de dirigirse a Kaneki.

Itori señaló hacia el parche del ojo. -¿Así que sólo cambia un ojo?- Kaneki asintió y los ojos de Itori brillaron de emoción. -Hace mucho tiempo desde que no oí nada acerca de un ghouls con ojos.

-¿Habían otros ghouls de un solo ojo?- Kaneki se sintió instantáneamente curioso. -¿Ha habido muchos ghouls de un solo ojo? -preguntó Kaneki.

-¿Sabes qué pasa cuando un humano y un ghoul quedan embarazados? -preguntó Itori, cambiando aparentemente el curso de la conversación. Kaneki sacudió la cabeza confundido. -El bebé muere. La probable etapa de embarazo es improbable por sí sola, pero si la madre es humana el bebé no obtendrá suficientes nutrientes y si la madre es ghoul su cuerpo tendrá en cuenta los nutrientes del bebé en crecimiento y absorberlo.
El ojo entrecerró los ojos de medio ghoul que se ensancharon ante la revelación. Fue horrible y un poco triste. Un ghoul y un ser humano que atraviesan todas las dificultades que vienen con ser un humano y un ghoul que intentan estar juntos y entonces no pueden incluso tener niños.

-Pero si un bebé nace será superior a cualquiera de sus padres y el kakugan sólo forma en un ojo-. Itori terminó.

-¿Con qué frecuencia ocurren las relaciones humanas y ghouls? -preguntó Kaneki.

Itori pareció sorprendida por ese comentario, pensó que estaría más interesado en las cosas de un solo ghoul. -No muy a menudo ya que los ghouls y los humanos generalmente se odian, pero el amor lo conquista todo-. Dijo Itori con una risita al final. -He conocido a algunas parejas, pero la mayoría de las veces la relación no dura mucho tiempo y el ghoul nunca dice que son un ghoul. -¿Estás pensando en pedir una salida a una humana?

Kaneki estaba a punto de sacudir la cabeza, pero Yomo de repente se sentó un poco recto antes de sacar su teléfono. Lo guardó en su bolsillo mirando a Kaneki. -Kaneki te importaría ir a Anteiku, Enji tiene algo que hablar contigo.

Kaneki asintió e Itori soltó un ruido triste antes de tirar de otro abrazo aplastante. -¡Tenemos que reunirnos de nuevo en algún momento!

Kaneki asintió ligeramente pero Itori no parecía querer soltarlo. 

-Itori, creo que lo estás aplastando.- Dijo Uta. Kaneki se sintió instantáneamente agradecido al hombre más alto cuando Itori lo soltó. Kaneki se levantó para irse pero fue empujado hacia otro abrazo. Kaneki cerró los ojos, esperando la asfixia del escote de Itori, pero sintió un firme pecho. Uta le había dado un abrazo rápido. Kaneki brevemente devolvió el abrazo y no duró tanto como el abrazo de Itori. -No podía evitarlo.- Dijo Uta. Kaneki dejó silenciosamente HySy y se dirigió a Anteiku.

Cuando llegó la cafetería parecía como normalmente lo hacía. Kaneki se preguntó por qué Enji quería hablar con él. Kaneki se dirigió hacia la puerta y apenas logró evitar que golpeara su rostro al abrirse. Kaneki levantó la vista para ver un rostro familiar delante de él. Kaneki rápidamente dio un paso hacia el lado y sintió un pánico en su corazón. Éste era un investigador del CCG, uno que él había luchado antes. -p-perdóname -Kaneki tartamudeó.

Kaneki sintió que los ojos duros lo miraban fijamente. -¿Qué días trabajas?

-Todos los días, excepto los miércoles y los domingos.- Kaneki lanzó un chorro de agua sin pensar.

Él asintió y salió dejando a un muy confuso Kaneki. Kaneki volteó dentro y fue a encontrar a Enji. El hombre estaba haciendo la orden de alguien.

-Yomo dijo que querías hablar conmigo.- Kaneki dijo caminando.

Enji le sonrió y asintió. -Sí. Irimi está enferma y no puede respaldar los pasteles por un par de días se puede hacer los pasteles. Por lo general, Yoshimura, pero él se ha ido.

Kaneki pensó por un segundo. Él había retrocedido antes que no eran demasiado terribles. Probablemente podría incluso a pesar de que el pensamiento de pastel lo hizo querer vomitar. -¿Por qué yo? -preguntó Kaneki.

-Solías ser humano, así que parecías ser la persona que mejor conociera.- Dijo Enji.

Eso tenía sentido. -Bueno.

Enji soltó un suspiro aliviado. -Eso es genial, nadie más puede cocinar, gracias Kaneki.

Kaneki se fue después de eso y volvió a casa. Había sido un día muy agitado.