Él Tiempo no es Amigo

Cuándo era niño solía creer

qué todas las cosas podía hacer

él tiempo era un aliado

qué me brindaba experiencias tomándome de la mano

Soñaba con estrellas

que formaban mundos que daban vueltas

con burbujas coloridas

que al explotar repartían sonrisas con simpatía

No sé en qué momento pasó

solo sé que de a poco todo se oscureció

la magia dejó de llegar

y mi mano el tiempo llegó a soltar

Las estrellas ya no brillaban

los mundos ya no giraban

las burbujas ya no explotaban

y las sonrisas agonizaban

Todo lo qué conocía

en mis narices se desvanecía

y lo peor de todo era

que aferrarme a ello no podía

Creía que en la vida

todo eterno sería

qué todo lo que conocía

conmigo siempre permanecería

Pero esa idea se comenzó a romper

cuando fuí capáz de comprender

que estaba empezando a crecer

y en los sueños por mas tiempo no podría permanecer

La palabra imposible

carecía de significado

era como algo olvidado

ya que en mis labios nunca lo había pronunciado

Ahora me había acostumbrado

a tomarle mas importancia al significado

por que una cosa era pronunciarlo

y otra muy distinta era aceptarlo

Aceptar viene con crecer ya qué te ayuda a reconocer

que todas las cosas no las puedes hacer

que él tiempo no es tu amigo

ya que se lleva lo que para tí es más querido

Sí tubiera que decir lo que siento a la hora de irme a dormir

la decepción que siento al pensar en lo que me convertí

y las ganas de llorar al recordar lo que fuí

estoy seguro de que jamás lo podría describir

Al final se quedó en eso, en recuerdos que vislumbro a lo lejos

en añoranzas que me quitan el aliento

en decepciones que revivo a cada momento

y en sueños que al final me dejan despierto