Desde que regreso de la misión del distrito rojo, saliendo victoriosos y vivos de un brutal enfrentamiento contra una luna superior Kyojuro Rengoku no sonrie. Mantuvo su amabilidad con una clara muralla entre el mismo y otras personas, incluso su propio hermano sufrió el doloroso cambio. durante su estancia no hablaba mucho, solo miraba el techo o por la ventana, contemplando el cielo azul.

Recibió muchas visitas que saludo con cortesía, carente de la vitalidad que todos acostumbran a tratar. Dejo de gritar "Umai" cada vez que comía y no terminaba el plato, incluso las batatas no parecían animar mucho al pilar de la flama.

Una vez suficientemente estable y libre de riesgo de infecciones de sus heridas. Shinobu lo dió de alta a su domicilio. el pilar agradeció sus atenciones y se retiró sin hacer mayor comentario.

En la finca Rengoku se mantenía buena parte de su tiempo en su habitación, salía a tomar aire fresco y darse un baño pero nuevamente volvia a encerrarse. Veía su nichiri entre la amargura, sintiéndose indigno de tomar de nuevo su arma con tanta determinación.

No fue lo suficientemente fuerte.

Senjuro hacia lo posible para animar a su hermano, sea con cartas de sus amigos o lecturas de libros que son sus favoritos aún cuando los kanjis sean muy avanzados para su comprensión, se esmeraba por el. No era el único, Tanjiro junto con sus amigos hacían el esfuerzo, sea recordándole que es su maestro y debe dar el ejemplo pero solo obtenía respuestas ambiguas. Los demas pilares intentaban cooperar pero tal como dijo Murata, la empatía no es lo suyo.

Solo aumento el deseo de encerrarse en si mismo.

– supongo que ahora entiendo porque te mantenias alejado - comento con amargura mientras mira la ventana. El viento mecia las ramas más delgadas. Escucho la puerta de su habitación ser abierta con cuidado. No tenía que preguntar quién era, su aroma de naranja es frescante y alegre. Casi lo hace sonreír.

Casi

– aniue, hice batatas con salsa de miso dulce. Tus favoritas - señala el enorme plato con rebanadas del tubérculo naranja rebosadas en un líquido espeso de color marrón.
– muchas gracias Senjuro - le dió un suave mimo en su cabeza que si bien fue cariñoso, se sentía algo frío.
– aniue... - vio el anterior plato con soba, apenas y había Sido tocado, solo el vaso con agua está vacío. – aniue, quisiera que... -

La puerta se abre de golpe, alertando a los dos hermanos. La presencia imponente del patriarca Rengoku entra en la habitación sin pedir permiso. Para el menor de la familia, se sorprendió de verlo ahí parado, sin estar ebrio pero su mirada continúa siendo severa.

– fuera de aquí Senjuro - ordenó.
– pero chichiue... - el casi cachorro intenta defender a su hermano mayor. No quiere que sufra alguna represalia más.
– no me hagas repetirlo - la severidad aumento. Viéndose derrotado, obedeció mansamente. Se sentía mal por no haber ayudado pero la gentil y vacía mirada de su hermano mayor le ofreció un vago consuelo.
– estaré bien Senjuro. Me comeré todas las batatas -

Sintiéndose temeroso y rogando a algún dios piadoso que ayude a su hermano, tomo la bandeja con comida a medio terminar y salió con pasos pesados. Salió cerrando la puerta detrás de si y se apuro para ir a la cocina.

Mientras tanto en la habitación, el ambiente pesado gobierna. Es difícil respirar con calma pero ninguno de los dos decía nada. El rubio mayor tomo asiento de forma descuidada junto Kyojuro, mirando hacia la misma dirección que su hijo. Las débiles ramas seguían siendo mecidas por el viento.

– lo siento...- dijo de repente el alfa de aroma neroli. – yo... Tenía la duda porque si nos tenías, porque continuas descuidando tu salud, si se supone que somos familia... Ahora lo entiendo... -

Apretó sus dedos contra la ropa. Esperando la crueldad de las palabras de su padre. Llamándolo "inútil" o "alfa mediocre". Tampoco supo cumplir sus promesas. No pudo cuidar la empuñadura de la nichiri de Tomioka que se perdió en la batalla contra la luna superior 6. Mucho menos a el.

– el dolor que sientes, jamás se irá. Habrá días que podrás dormir sin pesadillas y otros que deseas tomar la katana y cortarte el vientre con tal de volver a ver a tu destinado - Kyojuro miro hacia su padre. Sorprendido por la gentileza de su voz, tal como la recuerda de niño.

–yo no tengo razones propias para continuar pero tu. no importa que tan indigno y miserable te sientas. Aprieta tus dientes y lucha por mantener tu corazón ardiendo - Shinjuro miro a su hijo mayor sereno pero firme.

–  a diferencia de mi. Tu tienes promesas que cumplir todavía. Antes de tu destinado, le hiciste una promesa a mi Tsuma. - relajo la postura sin dejar de observar a su hijo. Este abrió los ojos recordando esa tarde de verano cuando estaba con su amada madre y ella aún estaba embarazada de su hermano.

«las personas que nacieron y fueron bendecidas con mayores habilidades que otras. Tienen que usar su poder para el mundo, para la gente.»

– no he cumplido bien mi promesa... - da una mirada amarga. Recordando las veces que lastimo a sus compañeros por sus arranques violentos. Es vergonzoso verse en sus recuerdos siendo irracional con sus compañeros cuando ellos intentaron ayudar.

– ellos Jamás entenderan. - sentencia Shinjuro. – nunca estaré de acuerdo con eso que seas pilar en una misión sin sentido pero si esa fue la voluntad de tu Okasan debes honrarla. -

Kyojuro sintió una cálida caricia en su mallugado corazón. Era lo más cercano que su padre reconoce su lugar en la cofradía y es la primera vez en mucho tiempo que menciona a su madre. Su cuerpo temblo un poco, su fuego interior empezaba a volver despacio.

– además, tu destinado tenía bajo su custodia al mocoso Kamado y su hermana demonio. Protegerlos en su nombre. será la mejor forma de honrar a su nombre.-

El cuerpo de Kyojuro tembló estremecido por esa repentina realidad. Olvidó por completo que Tanjiro y Nezuko son protegidos de su destinado. Ellos también sufrían la perdida de Tomioka quizás hasta igual a el pero se ven obligados a ser fuertes para sobrevivir. Están solos. Giyuu prácticamente los crío desde que los encontró.

Son los cachorros de quien ama tanto.

– así será Chichiue -
–por último. - ambos cruzan miradas. El brillo de sus ojos es parecido, aunque el de Kyojuro está un poco más vibrante que los de su padre.

– siento que hayas perdido tan pronto a tu destinado - las lágrimas del alfa menor volvieron a sus ojos. Sintió su corazón romperse de una forma completamente diferente. una mezcla de comprensión y dolor. Shinjuro guío a su hijo mayor a su regazo dónde le permitió llorar cuánto quisiera.

– duele... - murmuró Tanjiro desde el suelo. Mirando el cielo aún nocturno, su cuerpo está muy lastimado y hay una hemorragia interna peligrosa que prácticamente puede llevarlo a la muerte. Pero había valido totalmente el esfuerzo, derrotaron al demonio del tren que usaba los sueños de las personas como carnadas para comerlos.

Era una estrategia muy cruel.

Aunque le pareció bonito revivir esos bellos momentos con su familia, en su humilde casa en las montañas recolectando leña para el hogar y cortando algunos árboles para preparar leña para el invierno. Pero no eran los únicos, se dió cuenta de sus propios deseos de su corazón cuando vio a Rengoku llegando de visita con Giyuu. Ambos sonriendo, juntos de la mano. Al parecer, los habían conocido mientras ellos viajaban y decidieron hospedarse con ellos. Desde entonces, se volvieron amigos de la familia.

Sus hermanos jugando divertidos con el alfa rubio o ayudándolo a llevar carbon al pueblo en la carreta mientras que Giyuu cooperaba con su madre y Nezuko con los alimentos y uno que otro pendiente de la casa. Las noches donde podían ver las estrellas sin temor alguno, solo el suave ruido de los insectos y viento nocturno. Poder Comer todos juntos en la mesa completamente despreocupados, únicos en una familia numerosa y alegre.

Si, fue una ilusión muy bonita.

– ¡Hola mi muchacho! ¡¿Que haces ahí?! - inesperado llegó a su campo de visión el susodicho alfa rubio de aroma neroli. Su expresión es alegre con brillo de alivio.

– Rengoku-san... - murmuró algo adolorido.
– veo que tienes una hemorragia. Usa tu respiración de concentración total para cerrar la herida. - pone un dedo en la frente de Tanjiro. –concentrate en la herida -

–e- está bien - tartamudeo. Obedeció de inmediato la indicación del mayor. Le es difícil concentrarse mientras siente dolor y los aromas en el aire son variados. Percibió el aroma de la tierra, el acero, la sangre y uno que otro aroma propio del bosque pero también, el aroma de la tristeza y lágrimas secas. Venía del alfa rubio aún cuando tiene una sonrisa animada. Lo entendía, el vivió también esa técnica demoníaca. No tenía que hacer demasiadas conjeturas para saber que había soñado.

Porque dentro de su aroma triste, había notas de amor.

Lentamente enfoca su atención en el sitio de mayor gravedad. Respirando profundo y controlado, permitiendo controlar el ritmo, fuerza y distribución se los latidos de su corazón. Despacio, la herida fue cerrando, lo suficiente para que le diera unos minutos extra para poder llegar a la finca mariposa y atenderse de forma adecuada.

– ¡Pude hacerlo! - exclamó contento.
– excelente mi niño. Ahora hay que esperar que lleguen los... -

Sus alertas se maximizaron a un punto crítico y saco su Nichiri de brillo carmesí justo en el momento que un ataque iba dirigido hacia el omega de cabello Borgoña. Usando su técnica de aliento de llama regreso esa repetina agresión en un furioso movimiento. el agresor se alejo lo suficiente para caer de forma pesada contra el suelo, formando un pequeño crater y una nube de polvo que rodeo el sitio.

Kyojuro rápidamente se puso en guardia, afilando sus sentidos, sus instintos están al punto máximo de alerta. Algo en ese recién llegado grita "peligro" en cualquier ángulo.

– tal como esperaba... Un cazador con tanta fuerza y voluntad... - la nube de polvo se despejó, con la luz del astro nocturno y las casi inertes luces del descarrilado tren, revelo la figura poderosa de un demonio con franjas como tatuajes, cabello rosa e iris amarillos que recuerda mucho al topacio pulido.

Pero lo que más hizo estremecer al dúo fue leer en sus ojos los kanji: tercera luna. No le dió tiempo de procesar la profundidad de la situación cuando otro ataque, parecido a una ráfaga de aire fue elodida por el hábil pilar.

– aunque es repulsivo que protegas a alguien tal débil. - el pilar de la llama gruño en respuesta.

–  ¡Mi nombre es Akaza!! - se señala con orgullo. Su aroma denso a invierno esconde el eucalipto y Mejorana. Un alfa – ¡¿Cuál es tu nombre?!! - pregunta con una sonrisa divertida, mostrando sus colmillos.

– Kyojuro Rengoku, Pilar de las llamas - se incorpora alejándose de Tanjiro, no lo expondría a una batalla pero continúa en su rango de visión por si el demonio insiste en su agresión al menor.
– oh... -

Fue en un parpadeo.

Akaza dió de lleno contra su katana, un golpe que provocó una onda de choque leve. Aún con el impacto, Kyojuro no retrocedio ningún centímetro. ambas miradas chocaron en un enfrentamiento de voluntad.

– nunca he enfrentado a un pilar de las llamas en todos mis años. Y veo que tienes un poder increíble - comento sin dejar de sonreír. – ¡Muéstrame más Kyojuro!! -

Una oleada de ataques a base de puñetazos y algunas patadas fueron contrarrestados con los movimientos de su nichiri. No despega los ojos de sus movimientos, al mismo tiempo, busca hacerlo retroceder. El alfa rubio bicolor se percató que no usa armas ni técnicas demoníacas como otros, es su fuerza pura y destructiva. Se la paso contraatacando en varias ocasiones, solo podía rebanar sus brazos que se regeneran en un pestañear.

– ¡Increíble!! ¡Eres increíble!! - halago deteniendose un poco. – ¡Tus movimientos! ¡Esa fuerza de voluntad! ¡Eres perfecto Kyojuro!! -

Solo lo observa en silencio, manteniendo la guardia en alto. Aún con la luna, La noche no da mucha oportunidad de mantener una visión más precisa.

–¡Tecnica destructiva!! ¡Aguja de brujula! - en el suelo se dibuja una figura geometrica, un hexágono con varias puntas. y en ellas, kanjis en medio de hexágonos más pequeños. El aire se cargó de energía, poder explosivo de una luna demoniaca.

– ¡Muéstrame más Kyojuro!! - preparo su siguiente movimiento. A la distancia, arrojo un puñetazo al aire, dejando algo confundido al pilar pero aún cuando sus sentidos estaban en alto, por poco no evade el impacto de aire comprimido que golpe duramente su Katana.

Más ataques llegaron con características similares, haciendo tintinear la hoja metálica. Uno tras otro, sin mas opciones, fue a la defensiva. realizó una de sus técnicas de respiracion de la llama, cubriendo su cuerpo con las lenguas de fuego. Aún si no pudiera ver  hacia donde iban, el sigue siendo el objetivo. Una vez que lo vio ceder su oleada de golpes, rápidamente se dirigió a el, dispuesto a cortar su cuello.

– ¡Que gran velocidad!! ¡Eres increíble!! - continuo Halagando el pelirrosa con una sonrisa complacida. Continuo peleando sin importar las heridas y quemaduras. – pero todo eso se perderá por ser un humano... -

– ¡Conviértete en demonio! ¡Lucha contra mi para toda la eternidad! - ofreció mientras sus miradas chocan, la tensión entre la nichiri y el brazo izquierdo que sangra a causa del filo metálico.

– ¡Me reuso!! -
– entonces muere mientras seas joven y poderoso -

Tanjiro desde su lugar apenas puede creer lo que ocurre. Primero un demonio usando un tren para esconder su presencia, la carnada son los sueños. Lo considero muy difícil de eliminar, no tanto como la sexta luna superior pero ahora. Que si bien tomo un poco más de confianza y fuerza gracias al entrenamiento.

Se sentía muy pequeño ahora.

–no puedo distinguir nada - murmura incrédulo. Solo escucha crujidos e impactos de metal, también los movimientos de las técnicas del pilar del fuego.

–¡Gonpanchiro!!! - la voz de Inosuke no lo hizo responder, ni despejar su vista de la situación. –¿Dónde está el ojos raros? -
– está ahí... - aún así, hizo ademan de levantarse.

–¡No te muevas!! ¡Si lo haces, morirás! - volteo brevemente, ambos menores se quedaron en su lugar al escuchar la voz del pilar.

– pero ... -
–¡Es una orden Tanjiro! - tuvo que usar su voz para obligar al Omega de ojos Borgoña a no moverse, Inosuke también se vio afectado aún si la indicación no era para el, quedando rigido en su sitio.

– ¡No te distraigas! ¡No apartes la vista de mi, Kyojuro!! - un ataque que casi golpea de lleno en su abdomen. aunque logro bajar el daño, su costado derecho se vio lastimado, dos costillas pagaron el precio de su distracción.

– tal vez deba eliminar a ese mocoso. Así dejaras de ignorame - Akaza tomo postura para realizar más golpes al vacío. – ¡Eliminar las anclas!! -

Los puñetazos al aire se deslizaron hacia Tanjiro pero ninguno alcanzó su objetivo. Akaza abrio los ojos sorprendido como emocionado al ver el brillante fuego azul de la técnica del pilar. Rodeando los cuerpos de los más jóvenes y el propio Rengoku en una llamarada de vibrantes lenguas de fuego.

–¡Asombroso!! ¡Asombroso!! ¡Definitivamente tienes que convertirte en demonio! ¡Tu técnica podrá perfeccionarse! - insistió extasiado.

– ¡Me reuso!! ¡Jamás me convertiré en demonio!! - afianza sus manos al mango de su nichiri para volver a atacar y alejarlo de Kamado y el niño Jabalí.

Su relación con Tanjiro volvió a cambiar, está vez por algo que los hizo sentir cómodos a los dos. Después de la misión contra la sexta luna,  Kyojuro se mantuvo receloso de Tanjiro. Dudaba de las intenciones del Omega de ojos Borgoña, levantando una muralla densa de frivolidad, solo manteniendo la cordialidad por ser su Tsukako. Solo fue hasta que su padre lo hizo entrar en razon. Tanjiro es solo víctima de las circunstancias de su extraña situación.

Hablo con él, disculpándose nuevamente por su comportamiento. Tanjiro fue comprensivo, el podía oler que realmente lo sentía y no lo culpa, el dolor de perder a alguien tan importante es horrible, por experiencia propia de perder a su familia. Kyojuro  deseo que jamás experimente su mismo pesar.

El pilar del Fuego comenzó a tratar a Tanjiro y a su hermana como al inicio. Una relación amistosa con mayor tinte de hermano mayor aunque para los más avistados, sería más bien como un padre. Cuidandolo y alejando a pretendientes del Omega de cabello carmesi, guiandolo y haciéndolo pasar tiempo con su hermano menor.

No perdería lo que lo ayuda a mantenerse anclado a la tierra, tampoco permitiría que ni una sola vida se perdiera en ese lugar aún si eso significa que le cueste la propia.

El amanecer se está acercando cada vez más, el aire del bosque cambia lentamente y los ruidos naturales se modifican por tonos más vivos.

Murata corría lo más rápido que puede por el bosque, su cuervo le había dicho que Tanjiro, Zenitsu, Nezuko e Inosuke están en peligro. Tambien le dijo que hay una luna superior que está siendo contenida por el pilar de las llamas. El alfa de aroma boscoso si bien le tiene cierto resentimiento, no evita el sentimiento de admiración y preocupación. Es un hombre fuerte, noble y lleno de virtud pero seguía siendo un humano.

– ¡Al menos ayudaré a distraerlos! - pensaba que aún había más de un demonio. se dijo en un jadeo, animado su propio espíritu. No es tan fuerte ni hábil pero haría su parte para ser aunque sea de escudo. Lo hace porque ahí están los cachorros de Giyuu cuido y sabía que el no dudaría ni un momento en acudir al sitio.

Se detenía en ratos a tomar aire y volver a correr. Está cansado pero no desiste a su auto impuesta tarea. Brinca raíces, pisa charcos y rodea árboles de enormes dimensiones pero de forma lenta se detiene cerca de un solitario y joven de árbol de glicinas que apenas está alcanzado su altura máxima, apoyándose en los muros de una casa abandonada.

Su respiración es pausada, quedándose quieto unos segundos antes de echarse a correr nuevamente pero esta vez con mayor efectividad que antes.

Kyojuro Estaba más que mal herido. Esta de pie por pura fuerza de voluntad.

Varias costillas rotas, su clavícula izquierda también, músculos dañados por los impactos y que decir de su ojo izquierdo, sospecha también que tiene algún órgano dañado como un pulmón o su estómago pero no lo haría retroceder. No mientras Akaza siga presente, además el sol ya está por llegar, sería una carrera de resistencia que haría todo lo posible para ganar.

Aún con dolor penetrante en su cuerpo, tomo postura para el movimiento definitivo de su familia, aquella que ha marcado una leyenda y definición absoluta de su fuego interior. Soltó una pequeña sonrisa, Internamente sabe que puede morir. No tiene miedo, es más, está orgulloso de morir por algo que cree firmemente, por el bienestar de los inocentes.

Sin decir ni una palabra, se despidió de su padre y pidió perdón a su pequeño hermano por no cumplir su promesa. Vería a su querida madre más pronto de lo que imagino, cuanto la extraña y...

Su corazón dió un brinco.

Vería a Giyuu.

Eso lo hizo sonreír aún más. Podría estrecharlo en sus brazos una segunda vez, le pediría perdón por confundirlo y decirle a la cara cuánto lo ama. Sobre todo, decirle que no importa cuántas vidas le tome, buscaría la manera de volver a encontrarse.

– ¡Eres magnífico Kyojuro!! -  extasiado comento el demonio de cabello rosa. Gracias a su habilidad, puede ver su fuerza y voluntad de pelea. De un momento a otro está se incrementó de golpe, está dispuesto a darlo todo en su pelea.

– ¡Conviértete en demonio Kyojuro!! ¡Y lucha contra mi para toda la eternidad!!-  también se preparo para ese brutal impacto.
– ¡respiración de la llama, novena postura: purgatorio!! -

Tanjiro junto con Inosuke veían incrédulos el escenario frente a ellos. El poderoso impacto entre ondas de vacío y llamas, levanto una columna de fuego hasta el cielo.

Con la vista hacia la columna de fuego dorado, rubi y destellos zafiro en algunos sitios. El joven Kamado teme por la vida de su maestro, confía que podrá salir victorioso, que continuara viviendo pero muy en el fondo sentía que sería la última vez que lo vería. Lo percibió en su última posición y por el extraño silencio de Inosuke confirma sus terribles sospechas.

– por favor... - cerro lo ojos por un momento. Pidió a cualquier dios que lo escuché.

Después todo paso tan rápido y a la vez lento, como si el tiempo se hubiera detenido un instante, en el momento exacto que vio pasar a su lado una figura de ropa negra, propia de un cazador de demonios. El chico de la máscara de jabalí logro percibirlo también y lo único que salió de su boca fue un ruido incomprendido.

Kyojuro sentia el toque de la muerte en su hombro derecho, es extramente fresco y muy ligero, no lo sabe explicar y mucho menos al tercero en aparecer de la nada, usando el uniforme de cazadores y la nichiri de filo azul como lapislazuli, Ejecutando perfectamente una técnica de la respiración del agua, cortando de Tajo el brazo de Akaza. Entendió una parte de esa situación cuando su cuerpo recordó que la gravedad existe, el recién llegado lo aparto jalando su cuerpo hacia atrás y ataco a la tercera luna superior. Pensó que era Tanjiro, pero había algo en el que... Un momento...

¡¿Acaso atravezo las llamas infernales para ayudarlo?!!

– ¡Oh! ¡Menuda sorpresa!! - Akaza no se inmuta por perder un brazo, de hecho, lo regeneró tan pronto como lo perdió.

– un usuario del aliento del agua. ¡Que día tan lleno de sorpresas!! ¡Hace más de 50 años que no enfrentó a uno!! - observa con mayor detalle, a simple vista, luce como un alfa común usando una máscara de Okame. Mismo que se pone en guardia para volver a atacar al Demonio con otro de sus movimientos de estilo agua. Lo alejo lo suficiente de Kyojuro y mucho más de Tanjiro pero no por mucho tiempo.

La batalla nuevamente inicia, ahora con el brillo de la olas de mar formando una danza mortal que aún con la bella forma de sus movimientos, al menor descuido te arranca la vida. Akaza solo responde a sus ataques con igual o mayor entusiasmo.

– ¡Dime tú nombre!! - insiste por quinta ocasión cuando sus rostros se acercaron. – ¡Seguiré insistiendo hasta que lo hagas!! -

Sin respuesta.

– no te gusta hablar pero a mí me encanta. ¡Dime tú nombre usuario del agua!! ¡Tu y Kyojuro vuelvanse demonios!! ¡Lucharemos para toda la eternidad!! - nuevamente arremetió con sus malditamente precisos golpes haciendo resonar el metal de la katana.

Aún con su atención en la batalla, tanto Kyojuro como Tanjiro compartían un pensamiento. Había algo en ese valiente recién llegado que hace vibrar sus mentes y corazones. Claramente se trata de Murata pero había algo que no conhicidia. Sus movimientos, ese silencio profundo, de vez en cuando sus ojos fallan haciéndolos ver algo más. Cuando el pilar de la llama vio que recibiría un golpe, aún con el dolor en su cuerpo, se movió rápidamente en ejecutar una técnica como contraataque.

– ¡No lo tocaras!! - bramo Kyojuro.
– así que lo conoces. Dime su nombre - exigió interesado por esa reacción. – y no hablo de la marioneta, hablo de quién está detrás -

Para Akaza era fácil de ver. sus ojos nunca se equivocan y en ese cuerpo había una voluntad de pelea mucho más grande de lo que cabe en el. Aunque parecía que encajan, tenía momentos que se perdía la resonancia, aunque había algo más pero no sé preocuparía por ello ahora.

Esa exclamación detuvo cada hilo de pensamiento de los presentes. Si no fuera porque nuevamente el pelinegro nuevamente arremetió contra la luna superior, se hubiera quedado parado.

Tanjiro creía muy poco lo que escucho pero tenía sentido. Murata no dominaba una respiración y aunque hubiera entrenado para alcanzar una, dudaba que en pocos meses hubiera alcanzado ese nivel de maestría. Inosuke curioso de lo mencionado por el demonio, decidió comprobarlo el mismo.

–¡Respiracion de la bestia! ¡Séptimo colmillo! ¡Cognición espacial!! - clavo sus espadas al suelo y comenzó a rastrear. Veía a Tanjiro, el ojos raros, el demonio de marcas y el llorón que se orino en los pantalones que se encontró en la montaña de las arañas.

Inesperado.

Tal como escucho. Había dos presencias ahí, ambas familiares, una más intensa que la otra. Pero al aumentar su rango, vio algo más, difuso y lejano pero que claramente percibía que le dió una sonrisa y el símbolo universal del silencio.

Salió de su concentración de golpe, cayendo al suelo sobre sus glúteos. Algo lo hizo volver a la realidad, su cuerpo tiembla ante esa sobrecarga de estímulo, como si le hubieran llenado sus células de energía y no puede usarla. Escucho a Tanjiro llamarlo pero está demasiado aturdido para responder en el momento.

En cuanto a Kyojuro, usaba sus poderosas técnicas sin miedo a lastimar al joven de la máscara, su increíble flexibilidad acordé a su naturaleza ayudaba a atacar al mismo tiempo. Su corazón vibra y su alfa interno está en éxtasis, no era momento de hablar y aclarar dudas, no con ese demonio persistente.

– ¡Veamos de lo que eres capaz!! - el de cabello rosa dió una patata justo en el estomago del alfa rubio que se había metido para proteger al otro. Retrocedio varios pasos, sin aliento, podía sentir como un trozo de costilla penetró más sus músculos torácicos. Iba a volver a recibir más impactos pero la figura de pelinegro se interpuso.

–¡Giyu-san!! - clamo Tanjiro asustado levantándose un poco de su lugar.
–¡Ese es tu nombre!! ¡Giyu, el usuario del aliento del agua!! -

– calma... - fue un susurro apenas audible pero tuvo tanta potencia en ejecutar la defensa casi perfecta de Giyu, solo unos cuantos impactos dieron en sus muslos y la máscara se fracturó un poco. Akaza vio con enorme alegría esa postura. Su cuerpo muy cerca del enmascarado, respirando casi el mismo aire. Su puño clavado en el filo de la nichiri.

–¡Esa postura es nueva! ¡¿De dónde la has sacado?!! ¡La creaste tu! ¿Cierto? - señala con una enorme sonrisa –aunque le falta perfeccionar. Sería una lastima que se perdíera si llegarás a morir Giyuu... - lame la gotita de sangre que llegó a su mejilla.

– ¡Lo sabía!! - grito emocionado, pegando más su cuerpo contra el pelinegro que mantenía su postura para mantenerlo en su sitio – entre más fuerte el usuario del agua, es más hermoso. Y tú... Definitivamente te llevas el premio -

El alfa rubio bicolor aleja a la luna del pelinegro con un poderoso movimiento, sus llamas azules cortaron de tajo sus brazos mientras su rostro forma una predadora mirada. Akaza dió unos brincos, retrocediendo del alcance de las lenguas de fuego.

– ¡Hahahahaha!! ¡Ves! ¡Estás destinado a ser un demonio Kyojuro!! - la mirada asesina del pilar de las llamas es intimidante. Pero lejos de tomarla con seriedad, solo aumenta su entusiasmo – ¡Conviértete en demonio!! -

– no - fue una dura respuesta. Ignorando el dolor, empuño su arma y volvió a atacar. «Akaza quería lastimar a Giyu» era lo único que resonaba en su cabeza. Sobre su cadáver permitira eso.

Otra vez la lucha reinicio, el amanecer está llegando lentamente y tanto Kyojuro como el pelinegro están llegando su límite. Pero tal como al comienzo, Kyojuro era protegido de los impactos más poderosos por el enmascarado, en ocasiones salía ileso, otras lo  impactan en otro extremo de la zona de batalla, incluso rompió la parte inferior de la máscara, revelando su boca manchada de su propia sangre. Pero en esa ocasión, aprovechando que Kyojuro estaba fuera del alcance de Akaza, se preparo para arremeter directamente.

– ¡Eso!! ¡Lucha hasta el final Giyuu!! - sus golpes de aire tocaban el suelo por los desvíos y saltos de evasión.
– respiración del agua... - otra vez ese susurro tan delicado – doceava postura... -

¡¿Doceava?!!

– rocío benevolente... - un corte delicado traspaso el pecho del alfa demoníaco, no fue un daño crítico y solo recibió como respuesta un golpe en la espalda que lo hizo estrellarse al suelo.

– eso fue bastante patético. Pero se que no me equivoqué contigo - pretendía acercarse más pero la cuchilla carmesi interrumpió sus intenciones. Otra vez Akaza logro evadir el daño pero el segundo ataque corto brazo en un  azote de fuego.

– no importa cuántas veces cortes, no serviría - levanta su brazo cercenado pero el nuevo miembro no sale de forma inmediata. De hecho, se ve que el demonio hace el doble de esfuerzo para volver a regenerar, tanto que lo hizo gruñir de frustración.

– pero que... - el pilar del fuego nota ese nuevo suceso. entonces, ve el pecho. Aún sigue sangrando. – sus heridas... No sanan cómo antes -

Nuevamente arremete contra la luna superior. Tenía una oportunidad de eliminarlo si perdía una ventaja tan enorme. No sabe que hizo su destinado pero no importa por el momento, le dió una ayuda extraordinaria.

Con el campo de batalla parcialmente nivelado, Kyojuro siguió atacando siendo correspondido por el alfa demoníaco pero no solo su regeneración se vio afectada, también la potencia de sus ataques. Igual seguían siendo mortales pero la diferencia es enorme. Continuo luchando un poco más pero cuando vio que el sol empezaba a tocar el suelo, Akaza empujó lo bastante lejos a Kyojuro para poder escapar. El rubio intento alcanzarlo pero un latigazo de dolor en su torax lo hizo desistir y quedarse en el suelo respirando profundamente, sintiendo su conciencia al borde de la oscuridad. Lo vio marcharse mientras escucha a su Tsukako decirle unas cuantas verdades al demonio, le hizo sonreír un poco.

– Giyuu... - escucho un pequeño ruido. Con su único ojo alcanzó a ver al pelinegro de la máscara rota levantarse con mucho esfuerzo y empezar a caminar hacia otro extremo de su ubicación.

– aguarda Giyuu - pidió intentando moverse pero su cuerpo ya no puede más, la sangre en uno de sus pulmones lo hizo toser duramente. Pero ver la figura tambaleante alejarse lo alteró más.
–¡Giyuu-san!! -
– ¡Haori doble patrón!! -

–¡Giyuu!! - volvió a llamar, usando su llamado. Una súplica de su corazón, necesita hablar con el, es tan cruel tenerlo tan cerca pero lejos. lo vio tambalearse, incluso arrastrar sus pies en reversa, pero no desistió.

– ¡Aguarda Giyuu!! ¡No te vayas!! - volvió a toser, su conciencia se perdía pero mantenía su mano hacia su dirección. – ¡Giyuu!! -

– ¡Okasan!! - Tanjiro grito lo más fuerte que podía, un llanto de cachorro que pensó que ya no tenia. Ya sufrió demasiadas perdidas y con la última del pilar del agua había demasiadas palabras que jamás se animó a decir. Verlo alejarse de nuevo fue suficiente para que su cansado corazón decidiera de una vez por todas decir lo que no dijo en su momento.

– ¡No te vayas Okasan! ¡Vuelve!! ¡Okasan!! - insistió el pelirrojo desde su lugar, dejando sus lágrimas salir, mojando sus mejillas y el suelo.

Detuvo sus pasos y giro hacia ellos completamente. No veían completamente su rostro pero la ruptura de la máscara deja ver las lágrimas bajar de forma abundante, manchandose de sangre por culpa de sus labios.

– no... Puedo... - su voz aún baja, esta distorsionada. Cómo si fuera un montón de vidrios rotos en una cueva con eco. El hablar parecía un enorme esfuerzo, mucho más que moverse.

– yo... aun... No es tiempo...  - justo cuando el sol tocó su cabeza. cayó al suelo como si su cuerpo fuera de plomo dejando a todos con un manojo de sentimientos en sus almas.

Los siguientes tres meses fueron pesados para todos. Una suma de estrés por el inicio del invierno, los demonios abundan más por la escaza duración del día, emociones mezcladas en cada corazón que aún conservará empatía y humanidad.

Y el epicentro de todo ese maremoto es en la finca mariposa donde está recuperándose el pilar de la llama. Shinobu ha estado sobre esforzándose con apoyo de Kanao y Aoi. Iniciando desde que llegó de la misión del tren infinito, primero que Rengoku haya sobrevivido es más que un milagro que sale de toda lógica. Luego las extenuantes cirugías que realizó por orden de prioridad.

Control de la hemorragia, Órganos dañados: bilis, parte del intestino delgado, el ojo derecho y parte del pulmón izquierdo no tuvieron salvación. fracturas de huesos de zonas vitales, uso de placas que fortalezcan esos huesos con temor que el cuerpo rechacé esos implantes. Es una tecnología nueva para ella, una cosa es que el hueso soldé por si mismo y otra reemplazar casi completamente. Los músculos dañados que afortunadamente no están desgarrados en cortes brutales que impedirían su correcta conexión pero si habria una que otra distrofia que le causaría molestias.

Pero como al inicio, su recuperación es un milagro. Duro mucho tiempo en coma a causa de Kocho, si lo despertaba antes de tiempo, el dolor sería insoportable.

El hermano menor del rubio no se separaba de el. Le ayuda a Shinobu y su equipo en todo lo que pudiera para la recuperación de su querido hermano, incluso con otros pacientes, aprendiendo sobre la marcha a ser sanador. Sabía que la pilar insecto está agotada pero aún así no se queja de su noble misión. También leía en voz alta las cartas de sus aprendices y anuncia las visitas de sus amigos/compañeros pilares. Durante esos días y noches, Senjuro no para de agradecer que su hermano siga vivo y pide también que despierte para continuar con su recuperación.

No era el único paciente crítico en la finca mariposa. El misterio de Murata es algo que pasa en boca en boca por todos.

Oficialmente el crédito es de Rengoku por la duración de la batalla pero también agregan que el alfa de aroma bosque se involucró y dió pelea como ninguna vez. Usando una técnica de espada magistral junto con el aliento de agua. Nadie lo podía creer y mucho menos en tan poco tiempo. Además, están los rumores que se levantaron a causa de la inocencia de Tanjiro. El Omega puro de aroma Melisa aseguro firmemente que esa madrugada no era Murata el que atacó a Akaza, sino Giyuu. Que de alguna manera, volvió usando otro cuerpo para ayudarlos.

Un cazador de demonios poseído por el fantasma de un pilar. Nada más para ayudar a sus compañeros que estaban pasándola terrible

Y precisamente Giyuu Tomioka.

La idea sencillamente es demasiado fantástica pero no había forma de comprobarlo. Murata no da señales de despertar y tiene un pronóstico un poco más desalentador que Kyojuro. El impacto en su espalda fue tal que fracturó varias vertebras dorsales, posiblemente sus nervios también. Zonas vitales para el movimiento corporal. Solo quedaba esperar.

Kyojuro durante ese tiempo soñaba cosas que escuchaba y otras que son recuerdos nebulosos de su vida. Algunas bonitas, otras le causan dolor pero lo mantenían entretenido, en ocasiones se enfocaba tanto en un recuerdo que se deja absorber  hasta que escucha a Senjuro decir «buenas noches»

"Senjuro trata de ajustar mejor la venda"

"Rengoku-san espero que se recupere pronto"

"Ya ha sufrido demasiado por ese cadáver"

"Por favor Aniue, vuelve pronto. Te espero aquí"

"Es un día maravilloso Kyojuro-san. La nieve le da un toque mágico al bosque"

" Siento mucho lo ocurrido"

"¡Despierta ya hombre!! No es nada extravagante que estés ahí tirado todo el día"

"Sabes..."

Esa voz es nueva.

" hasta los milagros tardan un poco "

"Despierta"

Su ligera risa lo hizo abrir el ojo exhaltado, la luz de la ventana le lastimo un poco y volvió a cerrarlo. Lentamente se habituó a la claridad del lugar, escucha un suave ruido de fondo en su cabeza que despacio se va aclarando. Cambio a suave cantar de los pájaros y la brisa del aire. Despacio mueve su cabeza para ver a su hermano menor dormir con su cabeza apoyada en la cama y sus brazos alrededor de esta. Una posición algo incomoda.

– Senjuro... - murmuró muy bajo. Dió una sonrisa agradecida y como pudo movió su mano derecha para darle unas suaves caricias a su cabeza. Está acción hizo reaccionar al menor de los Rengoku y volteo a ver. Dió un brinco de la impresión al ver la sonrisa amable de su hermano mayor.

–¡Aniue!! ¡Ya despertaste! ¡Señorita Kocho!! ¡Señorita Kocho!! - llamo intentando controlar sus emociones pero nunca fue muy bueno en ello. Casi de un brinco se arroja a abrazar lo más que podía al mallugado pilar del fuego. Sintió las lágrimas de su hermano mojar sus vendas y piel expuesta, solo le dió un suave consuelo en su espalda.

Poco a poco la habitación se fue llenando de ruido y personas. No posee buena audición pero reconoce cada timbre de voz y palabras. Todas son de felicidad, alivio, felicitación y procesos a seguir con su recuperación. Kyojuro sonrie agradecido por estar vivo y rodeado de tantas personas que lo estiman.

Aunque también, el pesar de su corazón sigue latente y hace que su ojo deje fluir escasas lágrimas.

El invierno está extramente amigable esta temporada, las nevadas son suaves, el cielo es gris pero el sol permanece claro.

A Kyojuro no le llamaba mucho la atención la fría estación, siempre fue de colores cálidos y llenos de energía que estimulan su corazón y mente pero en esta ocasión, lo siente reconfortante. Familiar.

Sentando en el enawa de la finca mariposa, mirando el jardín cubierto de escarcha y plantas adaptadas al invierno, toma un pequeño descanzo de su rehabilitación. Aún le duelen los músculos dañados y en ocasiones sufre algo llamado "dolor fantasma" en el sitio de su ojo perdido. A palabras de la pilar insecto, es la combinación del dolor neurológico y emocional aún si ya no hay razón para sentirse. Lo toma de buena manera, es una forma de recordar que está vivo y no es un sueño.

Nada de lo que pasó fue un sueño.

– ¿puedo sentarme? - la inusual voz tranquila de Uzui lo distrajo de su contemplación.
– adelante - dejo que el platinado tomara asiento cerca de el, ambos con la vista al frente, mirando el paisaje hogareño.
– ¿Cómo va tu recuperación? Kocho dice que vas por bien camino. ¿Volveras a la acción? -

– Kocho-san dice que voy de maravilla. Mi cuerpo de va recuperando estupendamente pero aún no puedo comer con normalidad. Extraño el sabor de las batatas - eludió esa pregunta. El sabe que probablemente no volvería a ser cazador y se dedicaría a entrenar reclutas, ser apoyo en caso de una emergencia o consultor cómo Uzui. No le molestaría nada de eso, los cambios son buenos y lo ayudan a crecer como persona pero...

Confía que volvería a luchar.

– ya veo. -
– el invierno está siendo muy gentil. - vio las flores ocultas en la nieve. Visqueo un poco, aún le costaba un poco definir la profundidad de las imágenes.
– me alegro que sea así. Los cazadores no estarán tan presionados ¡pero es una excelente oportunidad para entrenar en estas condiciones! - hizo su clásica pose, orgullosa y sonriente.

– Kyojuro... - el aludido hizo un ruido de comprensión. – quiero disculparme contigo -

El alfa rubio vio como su amigo hacia una reverencia pronunciada. No esperaba eso, Uzi siempre mantenía una posición orgullosa y repleta de confianza, nunca se disculpa aún si mete la pata.

– aquella vez, te dije que lo sentía sin ser realmente conciente. No fue hasta hace poco que casi pierdo al Zenitsu - soltó una sonrisa amarga.

El rubio si bien no era su destinado, poco a poco se fueron acercando. Desde que lo tomo como su Tsukako por la habilidad de audición, la convivencia fue casi diaria. Le encanta sus rabietas y lo tierno que puede ser, sus gritos estruendosos o sus lloriqueos que le provocan risas. sus momentos de reflexión y lo fácilmente que de deja llevar por las cosas bonitas.

Cayendo sin remedio en las dulces mieles del amor. hablo con sus esposas y estás aceptaron que el rubio se les unieran, se habían acostumbrado a su presencia, tomandole cariño, además, su aroma de picante jengibre y dulce jazmín es alegre y escándaloso cómo ellos.

Cuando el rubio acepto (muy a su modo) ser su pareja. Obviamente esperaron al celo del Omega para el marcaje. La conexión de sus almas fue solemne. Una sensación que no había experimentado, un calorcito tierno se depósito en el centro de su cuerpo, entendía mejor los sentimientos de su ahora pareja. Las caricias y discusiones absurdas son mucho más disfrutables. Eso si, Tengen mantenía los pies en la tierra sobre no rechazar a sus esposas ahora que la conexión con Zenitsu es mayor. Incluso el rubio hacia segunda con ellas.

Es extraño pero agradable. Muy pleno y ligero.

Pero en una misión particularmente peligrosa, fue herido casi de muerte. Uzui sintió su corazón temblar de miedo, muchas veces intento ingresar a su habitación para ver su estado para ser sacado a patadas por Shinobu.

Sus esposas intentaron calmarlo pero el efecto no era tan duradero. Ellas mismas también sentían el dolor la incertidumbre y trataban de darse consuelo mutuamente. Cuando Zenitsu recobra la conciencia, todos sintieron sus corazones volver a latir y ese pesadumbre dolor de diluía lentamente por la alegría.

Lloro mucho aquella vez.

Actualmente está sano y de regreso a la acción. Confía en sus habilidades pero eso no evita sentirse algo tenso cuando se va y siente su pánico al enfrentar un demonio.

– es una mierda...  - recordó esos instantes. Pensó que el la paso severamente con tan solo un mes, se detuvo a pensar en el pilar de la llama y en todo ese tiempo que ha estado erratico, aferrado a una esperanza. – me sorprende que sigas vivo -

– aún tengo promesas que cumplir Tengen - dió una suave expresión.
– siento mucho no haber ayudado a tu destinado. Me avergüenzo profundamente. - el ex pilar continúa con su rostro en el suelo – no hay palabras que pueda justificar mis acciones. Entenderé si buscas alguna represalia -

– al comienzo estaba enojado. Muy enojado. Quería destrozar cada parte de ti. Prácticamente me arrebataste mi oportunidad de estar con Giyuu pero también... Reflexiono que si hubieras llegado, quizás hubiéramos perdido a dos pilares, tampoco tendríamos pistas sobre los demonios que enfrentaron. Las consecuencias hubieran Sido mayores. - suspiro discretamente  y volteo a ver a su amigo/compañero pilar.

¿Que ganaría con insultarlo? ¿Recriminar? ¿Haciendole daño o buscando alguna venganza? Nada. No ganaría nada. No lo atraería a la vida, tampoco le daría satisfacción porque en el fondo no es lo que busca. Solo mancharia la memoria de quien ama.

Quizás a otros les funcione o el es demasiado noble pero no lo haría. Aunque el perdón es muchísimo más difícil de lo que pensó.

– es la vida que elegimos. -
– Kyojuro... -
– sabes, le empeze a tomar cariño al invierno. Me recuerda mucho a el.- sonrie aligerando la carga de su corazón.

– eres un buen tipo, ¡Joder! Eres el tipo más genial que conozco, claro después de mi. Todos te aman, has hecho muchas cosas buenas y salvaste a más de 200 personas. Creo que son suficientes méritos para cumplir un deseo- anima el peliblanco de ojos vino, se acomoda más cerca de el, más relajado. Kyojuro solo escucha, da una sonrisa agradecido por su buena voluntad.

– si... Si pudiera pedir un deseo. Sería verlo otra vez - pensó mientras su vista se enfoca en la nieve que cayo lentamente desde una rama delgada hacia el estanque congelado.

Es la segunda semana de invierno, la nieve es gentil y no obstruye el paso de forma excesiva. Así que puede avanzar sin miedo.

Usando ropa abrogadora y de colores sobrios. Senjuro camina hacia el pequeño tembló que está a las afueras del pueblo de cazadores. Es un trayecto retirado pero no es inseguro por los árboles de glicinas y es frecuentemente recurrido por cazadores cuando van a la sede o a la finca mariposa. Se le hizo constumbre desde que su hermano regreso casi muerto de la misión del tren, cada mañana después de realizar sus tareas principales, acude al templo para agradecer a alguna deidad misericordiosa por permitir que su hermano regrese con bien y este vivo.

Pero ahora, va por otros motivos.

El acudía al pequeño lugar sagrado para pedir por su aniue. El sitio luce más como una capilla que un templo, rodeado de robles sin hojas, está un poco descuidado y solitario. cosa que tiene cierto sentido, en esa zona, No hay sacerdotes o sacerdotisas que atiendan. Si está en pie es porque algunos cazadores y Kakushis lo restauran en ocasiones. La madera cruje un poco por sus pasos y observa un poco el lugar. Es tranquilo, el aire fresco y relajante.

Toca la vieja campana, deja su ofrenda en la caja y junta sus manos cerrando sus ojos. Su respiración es lenta, concentrando toda su energía en su agradecimiento y petición.

– por favor. Concede a aniue la oportunidad de volver a ver a Giyuu Tomioka. Aunque sea en otra vida - pide desde el fondo de su corazón. No sabe si se hará realidad pero haría el intento.

–¡auch!! - se queja ante la abrupta interrupción. Algo de consistencia extraña y dura golpea su cabeza haciendo trastabillar. Penso que se trataba de alguna de las niñas de la finca que últimamente lo siguen mucho y en esta ocasión, decidieron hacerle un pequeña broma. Volteando a su alrededor noto que no había nadie más, solo algunas huellas suyas en la nieve. Un leve graznido junto con un aleteo disparejo atrajo su atención al suelo.

– ¿Estás bien? - se inclino para ayudar al cuervo y sacudió su pequeño cuerpo con cuidado. Después de esa abrupta presentación, el animal volteo a ver al rubio de mirada clara.

– paquete para Kyojuro Rengoku - efectivamente había un pequeño saco de tela roja atado a su pata derecha.
– ¡ah! Lo siento, es el mi aniue. - no le sorprende. Varios cuervos nuevos en la corporación se confunden con ellos y más últimamente. varios mensajes de admiración provenir de cazadores de menor rango llegan a las manos de su hermano y en ocasiones a las suyas propias por la misma confusión.

– aunque no estás... -
–¡Oh no!! ¡Kazanburo se volvió a equivocar!! - lamento el cuervo, abre sus alas para irse – ¡Kazanburo tiene misión! ¡Kazanburo tiene mensaje de Giyu! -
–¡¿Has dicho Giyu?!! - exclama completamente exhaltado, recupero la postura cuando vio que tomaba vuelo para irse. Logro atrapar en el aire al cuervo, el cual dió un chillido de sorpresa.

– ¡¿Eres el cuervo de Tomioka-san?!! - sacudió el animal aún sin creer lo dicho.
–Kazanburo siempre está al lado de Giyuu. Kazanburo es el cuervo kasugai de Giyuu -
–¡Oh por dios!! ¡Oh por dios!! - empezó a dar leves brincos mientras su sonrisa crece y crece hasta formar una muy similar a la de su hermano.

Sin soltar al cuervo emprendió carrera hacia la finca mariposa, debía decirle a su aniue ¡Le devolvería el espíritu!! Antes de irse completamente, regreso a la capilla y dió «gracias» con demasiado entusiasmo junto con unas leves reverencias. Hecho su acción, regreso corriendo. Mientras corría por el sendero casi nevado, algunas personas lo veían con curiosidad por su extraña energía mientras carga un cuervo.

Primera vez en su vida que corre en la nieve, se sentía cansado y con el pecho frío pero no le importa, es demasiado importante que no puede esperar nada.

– ¡ah, buenos días Senjuro!! - Tanjiro que pasaba por ahi junto con su grupo de amigos y más reciente Genya lo vieron pasar por el camino de piedras.

– ¡Días! - corresponde descuidado, sin dejar de correr y se alejo dejando a todos sin comprender ese inusual comportamiento. Aunque si sorprendidos que tenga la misma energía del pilar de la llama.

– ¿Que sucedio? - el Omega pelirrojo lo mira algo preocupado.

– dijo algo de Rengoku-san y cuervo. No le entendí - explica el rubio genuinamente intrigado. No es normal ver al tranquilo Senjuro correr como loco por las calles.

– ¡entonces vamos!! ¡Porque tengo hambre y traía comida en sus manos!! - Inosuke comenzó a perseguir al rubio bicolor. Tanjiro lo siguió para evitar que haga una locura, Zenitsu porque Tanjiro iba con Nezuko en su espalda y Genya, bueno, no tiene nada mejor que hacer en ese momento.

Kyojuro salía de la finca mariposa en compañía de Uzui para ir a comer algo a escondidas de Kocho. Aprovechando que la joven médico estaba ocupada torturando a otro pobre individuo y Aoi está con Murata.

–¡Aniue!! ¡Aniue!! - escucho a su hermano. Lo vio correr por el camino.

– ¡Senjuro! ¡Buenos días! ¡Cuánto entusiasmo!! - está contento de ver a su pequeño hermano lleno de vida tan temprano aunque no evito preocuparse un poco al verlo temblar un poco a causa del frío. Le dió su capa para que entrara en calor. Entonces vio un cuervo en sus manos. a su parecer, algo viejo.

–¡Aniue tienes mensaje! - dijo sin aliento. Tomando bocanadas de aire para recuperarse.
– que extravagante manera de ser mensajero -
– agradezco tu entusiasmo pero no te hubieras molestado y menos venir así corriendo.- le dió suaves mimos en su hombro.

– es importante, este cuervo... -
– ¡paquete para Kyojuro Rengoku de Giyuu!! ¡Kazanburo trae paquete para Kyojuro Rengoku de Giyuu!! - grazna moviendo la cabeza.

– ¡¿Que?!! - un fuerte y explosivo grito general causo una gran conmoción. El grupo del pelirrojo llegaron a tiempo para escuchar al viejo cuervo, están atónitos. No podían creer que el ave de plumaje negro será el mismo que lo dieron por muerto y mucho menos traer un mensaje del difunto pilar del agua.

Tanto asi que hubo un pequeño escándalo que atrajo la atención de la pilar insecto y sus protegidas. El escándalo creció más, todos dando su punto de vista de distintos enfoques: una trampa, una broma, sorpresa, incredulidad. Todos hablaban.

El único que guardo silencio fue Kyojuro, veía con cierta cautela al viejo cuervo Kasugai.

– toma paquete - insistió. El ave está cansada pero orgullosa de cumplir su tarea sin tanto retraso.

Con sus dedos temblando, desató y tomo el pequeño saco con su mano derecha. Su único ojo despide un brillo de incertidumbre y duda, por más que su mente grita que es mentira, su corazón busca tomar ese hilo de esperanza. Kazanburo brinco al hombro del rubio, espera paciente alguna respuesta.

Alejándose un poco del debate, lentamente a abrió el pequeño saco, topandose con tres cosas: una moneda plateada con un símbolo extraño con forma de "E". no reconoce el caracter. Una pequeña hoja de papel y un mechón de cabello negro con un suave brillo azul oscuro. Con escéptico espíritu, toma el cabello y le da una leve holisquiada.

Su corazón se detiene unos segundos, su mirada se abre junto con torbellino de emociones en su alma.

– Giyuu... - reconoce el aroma. Huele a Lima, Ylang Ylang y tomillo además del propio del pilar del agua. Las diferencia entre la gota de extracto que había en la carta y el cabello es clara: Uno parecía un perfume y el otro es un olor vivo. Lentamente su único ojo empieza a derramar lagrimas, su corazón palpita tembloroso, la llama de su interior chispea con mayor ímpetu, aprieta el cabello contra su pecho. Limpia su rostro rápidamente, procediendo a leer la nota, cuidando de no mojarlo por sus dedos húmedos. Así como el cabello, el papel huele a su destinado.

«encontremonos en Aoiseichi. Giyuu Tomioka»

Es corta y simple pero tiene tanto peso que apenas puede creer que esté ocurriendo.

– Rengoku-san  - Tanjiro que trata de mantener la calma en el grupo se percata del silencio de su tutor que está de espaldas a ellos. Al acercarse a el, percibe el aroma rápidamente y al igual que el rubio alfa, no evita llorar. Es inconfundible, es el aroma de quién llamo "madre" hace unas semanas.

– huele... Huele a Okasan - su voz es frágil y tiembla un poco. Lo desconcierta el saber que es un omega con una mezcla de aromas tan peculiar pero agradable y familiar. Todos los presentes se acercaron para comprobar lo dicho, al menos, solo los que conocieron de primera mano el aroma Omega de Giyuu.

– ara~ si es el olor peculiar de Tomioka-san - Shinobu evito lo más posible fruncir el seño, irritada por el desagradable hedor que despide el cabello. Aún no entiende porque Rengoku le gusta tanto, quizás sea cosas de destinados. Aunque no explica el interés de Shinazugawa mayor. Tal vez el logro ignorar el pesado olor del tomillo.

– efectivamente es el - dijo Uzui aún sorprendido. no sabía cómo empezar a ordenar sus ideas, es tan extraordinario, tan irreal. No podía creer que Tomioka siga vivo, la cantidad de sangre en escena era enorme y contra dos lunas superiores ¡Simplemente supera su imaginación!! Pero también, el olor había cambiado, el tomillo es muy bajo pero nota mucho la lima y el ylang ylang pero asemejándose más a una caricia conciliadora.

Y más importante ¿Porque su percepción cambio?

– aniue ¿Piensas ir? - pregunto Senjuro acercándose un poco más, atraído por la mirada profunda de su hermano y el olor cítrico-floral. Es dulce, fresco pero también le da confort. Entendió un poco más porque su aniue está tan enamorado de el, su corazón se siente más ligero, como si las cargas del pesar se diluyeran lentamente.

– ¡por supuesto! Pero tengo que pedirle permiso a Okayama-sama - aún con un solo ojo, despedía tanta luz como antes.

– are~ Rengoku-san, tienes que considerar la opción que tal vez sea una trampa o sea una nota muy vieja. después de todo el cuervo de Tomioka-san se solía perder a menudo. Además, Aoiseichi está a 3 semanas de distancia aún si tomas el tren. No es lógico que este allá- no le gusta ser la portadora de situaciones decepcionantes pero debía ser honesta. Simplemente ver qué el viejo cuervo se quedó dormido en el hombro del pilar del fuego no ayuda mucho a tener una expectativa muy alta.

– igual iré Kocho-san. - la convicción en su mirada es clara. – aunque sea una trampa o demasiado tarde, no moriré con la duda en mi corazón. -

– entiendo. Pero antes debes pasar por rehabilitación unos días más. Los músculos de tu abdomen aún falta que se fortalezcan. - sabe que no puede decir o hacer algo que lo haga pensar de lo contrario.

– además... ¿Que se supone que haces aquí afuera Rengoku-san? - el seño fruncido con la tensa sonrisa de la pequeña pilar hizo estremecer un poco al rubio. Sería una larga mañana potencialmente dolorosa pero aún con eso en perspectiva, no disipa el tierno calor en su corazón y su alma renovada con esperanza.

– solo espera un poco más, Giyuu -

Kagaya está en el jardín, disfrutando un poco de aire fresco y la sombra que los árboles de su hogar ofrece. La nieve fue retirada para su seguridad y el biestar de sus hijos que en ese momento hacen compañía.

Su conversación con Kyojuro lo dejo esperanzado. no solo en la posibilidad de que el pilar del agua aún esté vivo, en muchos otros aspectos que estan fracturados a causa de su ausencia puedan restaurarse.

Escucho perfectamente la ilusión en la voz del pilar de la flama, no hablo el valeroso alfa que todos admiran. solo Kyojuro. una persona que sufre y ama en partes iguales, alguien que busca a su complemento. También sintió en sus dedos la evidencia: las hebras de cabello, la nota y la moneda. El olor de Giyuu es sin duda peculiar pero agradable, a su parecer equilibrado. Logro disimular una pequeña risa al escucharlo soltar un pequeño gruñido, un poco celoso y luego percibió cómo se tenso, posiblemente avergonzado por su arranque.

Es comprensible.

Era evidente lo que pediría y no se lo negó. Sea lo que le espere al final del recorrido, desea de corazón que el viaje logre ayudarlo a sanar sus heridas tanto fisicas cómo emocionales. Su hijo es muy noble y concentrado en el deber, tanto que no está acostumbrado a tratar el resto de sus emociones, en eso tiene en común con Tanjiro Kamado.

Cuando anuncio que serían pareja, fue una sorpresa. Mas porque el había notado el muy sutil interes de Rengoku por el pilar del agua, algo fácilmente confundible por camaderia, en su momento también pensó lo mismo pero una corazonada le decía lo contrario. Conforme paso el año donde se vio necesaria la convivencia entre ambos, esa ligera tension fue creciendo. Kyojuro prestaba más atención de lo debido a Giyuu que a Tanjiro y por como escuchaba la voz del pilar del agua era tímidamente correspondido.

Pero no hubo forma de prevenir lo que ocurriria.

Tantos acontecimientos desafortunados por una simple accion. una tan simple como guardar silencio cuando es necesario o mirar hacia la esquina de una puerta.

Pero el dolor hace que apreciemos lo que tenemos, si se reflexiona debidamente.

Kagaya confía que lograran superar con madurez la situación y aprendan la lección para mejorar su futuro. Kyojuro es muy noble y justo aún si paso por una etapa sombría. aún cuando intenté mantener frialdad, Giyuu es muy gentil aún cuando muchas personas le han hecho daño.
Además, tiene el presentimiento que muchos cambios vendrán apartir de la llegada del viejo cuervo de Tomioka.

– eso... Paso ... - Kazanburo termino de narrar su versión de los hechos. Está agotado de tanto hablar pero es parte de su trabajo y dar razones de la ausencia de Giyuu.

– muchas gracias por tu esfuerzo. - le da una gentil caricia. – ve con tu parvada. Te esperan con alegría. -

No podía verlos, pero si escuchar los pequeños brincos en las ramas. los cuervos kasugai son muy unidos y ver de regreso a uno de los suyos es maravilloso, además, están ansiosos de saber que ocurrió en esos meses.

En una región boscosa cubriera por el manto de la noche y una delicada bruma que pasa entre los árboles, arbustos y rocas de gran tamaño. La visibilidad es limitada pero no resta belleza misteriosa en el sitio.

Los sonidos naturales de la noche no son interrumpidos por unos pasos ligeros, avanza con confianza, conocía el lugar. Una figura se desliza entre los árboles y raíces, parecía que flotaba por su forma de moverse atravez del bosque hasta que encuentra lo que su silenciosa presencia rastreaba por el sitio conocido.

– sigues pensando en ello - el pelinegro de piel clara no escondió su sobresalto.
– ¿Realmente vendrá? - pregunto un poco cohibido. Su mirada de azul profundo de volvió a concentrar en el pozo natural de agua formado gracias a una formación rocosa en el suelo. no es profundo y el agua es tan limpia que podía ver el fondo aún con la oscuridad de la noche.

– por lo que me has contado de el, vendrá. - se acercó a el, tomando asiento a su lado. El pelinegro volteo a verlo con su mirada intranquila.
– La pregunta real es ¿cómo vendrá? -
–... -
– sea lo que te espere en unos días. Lo mejor para ti es darle resolución. No solo para ti, también los implicados. Es necesario sanar y volver a empezar -

Se pone de pie, manteniendo la mirada al frente. Es seguido del pelinegro de mirada preocupada.

– después de todo Giyuu-san. El amor se gana, se pierde y también se teje...-

Este capítulo quizás es más corto que los anteriores pero considero que tuvo tanta relevancia y belleza.

Ahora los chismesitos de la era Tashio:

💖 Una vez más, la autora no sirve de mucho en escenas de batalla pero se compenso con los hermosos plot twist que salieron.

💖 Shinjuro sabía que su hijo estaba mal pero mientras Kyojuro no razonara, no tendría caso. Así que espero. Por aquellas que pensaron que sería un ser culero e insensible con su hijo.

💖 Shinjuro podrá ser negligente, culero y descuidado pero sabe lo que es perder a alguien tan importante y sentir que tu vida pierde sentido. Algo que el resto de los pilares no entiende. Claro que han perdido personas pero no destinados.

💖 Una vez más, Ruka hizo su acto de presencia e inspiración.

💖 Uzui entendio un poco el dolor de Kyojuro al sentir que casi pierde a Zenitsu. Era necesario para demostrar tanto el punto de Shinjuro y que demostrará una disculpa real.

💖 Senjurito está aprendiendo medicina gracias a su estancia en la finca mariposa y le gustó.

💖 Las niñas de la finca están interesadas en Senjuro y de vez en cuando lo molestan para llamar su atención. Es técnica de las Kocho xD

💖 Sip. Giyuu creo otra postura estando en Aoiseichi. Más detalles en el siguiente capítulo.

💖 Aoiseichi significa: terreno sagrado azul. Puede interpretar como "paraíso" "el cielo".
¿Verdad que las/los engañe?

💖 Inosuke pudo ver lo que se refiere Akaza porque su percepción es parecida a la del demonio.

💖 Máscara okame: representa dama de compañía, buena fortuna y bellezas. Pero también quien participa menos.

💖 Akaza logro ver el rostro verdadero de Giyuu al aumentar la cercanía. Y si, le gustó lo que vio.