Itachi se mecía con el pequeño en brazos llorando con desesperación, su ojo derecho parpadeaba entre el sharingan y el rinnegan brillando con fuerza. Sasuke y los sannin observaban el estado del Uchiha, Sasuke limpió una lágrima mientras Jiraiya lloraba cubriendo su rostro, Tsunade se abrazó a su cuerpo temblando sin poder aguantar el llanto, su pequeño estaba muerto -Naru, Naru, bonito -balbuceaba el líder Uchiha, la guerra la tenían ganada, sólo esperaban terminar con esas plagas blancas. El resto del equipo siete y la generación del rubio al ver desaparecer a los bijus y el alboroto se acercaron -¿Sasuke? -kakashi fue quien se atrevió a preguntar, el nombrado negó limpiando una lágrima -el dobe -el sensei y los presentes abrieron sus ojos con miedo, Sakura comenzó a llorar desesperada, era de sus mejores amigos, Shikamaru negaba con lágrimas en sus ojos negándose a creer que uno de sus mejores amigos estaba muerto, tapó su rostro llorando con fuerza. Hinata se desmayó en los brazos de su primo, kakashi tapaba su ojo para no mostrar sus lágrimas y dolor, había perdido de nuevo a un ser querido, al hijo de su sensei.

Itachi tomó el cuerpo de su pareja, se levantó de golpe sorprendiendo a los presentes, respiró hondo, levantó el rostro mostrando un rinnegan en todo su esplendor brillando con intensidad al igual que su sharingan, exhudaba poder, un escalofrío recorrió sus cuerpos al ver su mirada. Itachi levantó una mano, con la otra sostuvo el cuerpo inerte de su pareja -bansho tenin -el cuerpo de Obito que se encontraba en el suelo con un sello de bloqueó de chakra llegó a sus pies, lo vio con un enorme odio, los presentes abrieron sus ojos con sorpresa al ver el nuevo poder del azabache. El zorro sonrió al recordar el poder de su padre, una esperanza nació en él.

Desde hace unos minutos, Itachi escuchaba un susurro, como cuando obtuvo el mangekyou y este le indicaba como usar el amaterasu y sus demás ataques, estaba seguro que tenía un nuevo poder en sus manos, si el doujutsu le susurraba es porque algo podía hacer -Rinne Tensei no Jutsu -Jutsu de la Vida Celestial de Saṃsāra -una gran cabeza salió del suelo creando un pequeño terremoto, se irguió en alto a su lado. Los presentes no sabían qué demonios sucedía -shinra tensei -lanzó sin importarle nada y con bastante odio el cuerpo de Obito -rey del infierno, te entrego esta vida y las almas en mi espada a cambio de la vida de mi amor -sacó su espada Totsuka con la mitad del susanoo mostrando su enorme poder al igual que Sasuke y Naruto, ahora mostrando un poder superior con el rinnegan, el alma de Madara, Kabuto, Orochimaru y Zetsu entraron a la cabeza gigante, los gritos de sus almas se escuchaban inhumanos en agonía intensa atemorizando a los presentes, todos veían con terror la escena, pero esperaban enserio que funcionara.

Kakashi lamentaba el destino de Obito, pero no se oponía en lo absoluto a ello si con eso su pequeño alumno regresaba. Jiraiya veía con esperanza al Uchiha, rezaba a kami porque el milagro existiera. Itachi caminó hacia la boca del gigante, colocó el cuerpo de su amor besando sus labios con cariño -vuelve por favor bonito -lágrimas salían sin parar de sus ojos. La lengua del gigante entró arrastrando al pequeño, el gigante cerró su boca, comenzó a masticar, el tiempo corría lento, todos veían con esperanza la cabeza.

La boca se abrió dejando salir un pequeño cuerpo quien se veía con la mirada muerta, una luz verde lo cubrió por completo mostrando el tamaño inmenso del alma del rubio a diferencia de las que entraron en ofrenda, eso los sorprendió bastante, más al sentir el calor que esa alma demostraba, el pequeño cayó de rodillas, la cabeza del rey del infierno desapareció.

Itachi de inmediato lo abrazó con fuerza, comenzó a besar su rostro con desesperación -Naru, creí que no volvería a verte -el rubio sonrió un poco enterrando su rostro en el pecho del mayor al entender lo que sucedió y lo que hizo por él, un chakra rojo lo envolvió indicando que Kurama había regresado a su cuerpo, formó un puchero que comenzó a moverse, se aferró a la ropa de su pareja, comenzó a llorar en sus brazos -gra... gracias amor… gracias -Itachi abrió sus ojos con sorpresa, se separó un poco viendo a los ojos a su pareja quien estaba exageradamente rojo, con sus gemas humedas, sonrió enternecido -¿puedes repetirlo? -el pequeño hizo un puchero, tapó el rostro de su pareja para que no lo viera -no lo haré bastardo, ya lo dije ttebayo -Itachi sonrió divertido, lo abrazó nuevamente enterrando su rostro en su cuello absorbiendo el aroma a vainilla que le encantaba de su pareja.

Itachi comenzó a cerrar sus ojos, había exagerado en el uso de chakra, un mechón blanco comenzó a cubrir el cabello del azabache, el chakra de Kurama lo cubrió para evitar que perdiera su vida recuperando su red de chakra y parte de su energía vital perdida, todos vieron con sorpresa la situación. Sasuke corrió a su lado preocupado por su hermano -tienes mi agradecimiento cachorro Uchiha, el cachorro es importante para mí y lo regresaste a mi lado, no permitiré que mueras después de lo que hiciste, descansa -Itachi sonrió agradecido, besó el cuello del pequeño.

-Itachi idiota, pudiste morir ttebayo -susurró un poco más bajito sonriendo el rubio con un gran sonrojo por lo que diría -te amo amor -el Uchiha lo abrazó aún más con sus ojos llenos de amor y de ilusión, estaba feliz de tener a su rubio en sus brazos con vida -también te amo bonito -Sasuke tomó a su hermano cargándolo, mientras el sannin abrazaba con adoración a su renacuajo, Tsunade se unía en el abrazo a ellos -eres un idiota Itachi, pero eres el idiota al que admiro y mi hermano, el dobe también es importante para mí, gracias -Itachi sonrió divertido con debilidad -gracias otouto-

-Kakashi organiza nuestro regreso, que terminen con esos desgraciados, llevaremos a Naruto y a Itachi al hospital, será lo mejor, ambos ocupan recuperarse -el sensei sonrió alegre, la generación también lo estaba, después irían con el rubio, debían darle su espacio, ahora todos sabían de la relación de la pareja, algunos se conflictuaron, pero entendían y agradecían a Itachi regresarles a su amigo. Jiraiya cargaba a su renacuajo con amor junto a los Uchihas y a su rubia -Uchiha, tienes mi aprobación y mi agradecimiento -

Itachi abrió sus ojos con sorpresa en la espalda de su hermano, sonrió alegre mostrando sus dientes -gracias Jiraiya-sama, es muy importante para nosotros su aprobación -el sannin sonrió, el pequeño lo vio con un brillo lleno de amor, se acurrucó haciéndose bolita en sus brazos -gracias Ero-sennin -la rubia y Sasuke sonrieron por las paces que formaron en ese momento.