Itachi veía con preocupación a su pareja, su sharingan giraba con precaución. kakashi lo veía con la mirada afilada, no sabía que ambos eran tan buenos amigos, tal vez en esos días que ha vivido el rubio bajo su techo, Naruto sabía ganarse a la gente fácilmente. Yamato sostenía su mano en alto para mantener estable el chakra bijuu del pequeño. Naruto sostenía la mitad de su cuerpo con el chakra biju, la otra mitad se veía libre, una batalla interna se mantenía en el sello del rubio -demonios, esto es demasiado difícil ttebayoooo -el zorro volteaba los ojos con fastidio -¿eres mi jinchuriki o no? deja de mostrar debilidad, me da asco, concéntrate en las personas que amas, tus amigos y familia, deja el chakra fluir y transformarse en energía pura -el pequeño levantó un puchero -zorro no seas así con el niño, es difícil, tu chakra, está bastante corrupto -el Uzumaki abrió sus gemas con ilusión -¿tu no me odias? -la tortuga negó con una sonrisa -dejen sus cursilerías, concéntrate -el pequeño trataba, pero era difícil -eso intentoooooo aaaaahhhh -un grupo de cadenas salieron de su pecho sosteniendo el chakra maligno, comenzando a purificarlo, el zorro abrió sus ojos con sorpresa, sonrió "kushina" una luz blanca comenzó a rodear al pequeño hasta que se vio un espacio en blanco, dos luces de colores comenzaron a formar dos chakras, estos a su vez formaban dos personas frente al pequeño quien agotado levantó su vista, abrió grandes sus gemas al reconocer a ambos de las fotos de Mikoto-san.

Ambos sonreían con cariño, el pequeño formó un puchero que comenzó a moverse, sus gemas parecían dos lagos por derramarse, hasta que no aguanto más, las lágrimas comenzaron a correr  por sus mejillas bronceadas con una tonalidad rosita, los dos sujetos abrazaron al pequeño con amor, besaron su rostro con emoción contenida -mi Naru-chan, estás tan grande y tan hermoso ttebane -

El pequeño sonrió divertido en sus brazos, se dejó mimar y apapachar, unos brazos fuertes lo rodearon a él y a la pelirroja con fuerza -mi familia, mi Naru-chan -el pequeño levantó sus gemas hacia sus padres, sonrió sincero como muy pocas veces en su vida, lleno de amor -papá, mamá, los amo, gracias por ser mis papás -ambos sonrieron, comenzaron a platicar sobre su vida antes del pequeño y del día del ataque -cariño, hay algo que me molesta -el rubio mayor mostraba una sonrisa fingida, Kushina de inmediato sonrió divertida -deja al niño Mina-kun, mi sueño de unir nuestra familia a la de Miko-chan va muy bien, no lo molestes -Naruto abrió sus gemas con miedo al entender qué quería decir su padre -es que ese Itachi-kun es un abusivo, mira que acosar a mi bebé -la Uzumaki negó -nada de eso Mina, Itachi-kun hizo su labor de conquista, es tan romántico, es un gran chico y lo sabes, sólo estas celoso -

Minato abrazó a su hijo con amor apretandolo a su pecho, el pequeño enterró su rostro disfrutando del calor de su padre -¿ves?, está chiquito -el pequeño rio divertido en sus brazos -no seas así pa, Itachi es un bastardo acosador, pero en verdad me quiere, lo ha demostrado, vamos a darle una oportunidad, ¿quieres? -el mayor sonrió divertido por como su hijo llamo al sujeto abusador de bebés, respiró hondo, soltó el aire con molestia -está a prueba, si te lastima jalaré sus pies en la noche, me le apareceré en sueños -a ambos Uzumakis les corrió una gota por la nuca, pero al final el pequeño soltó una carcajada, aceptó -así será pa, se lo haré saber -sus padres lo vieron con amor -es hora de irnos Naru-chan, te amamos desde que supimos que venías al mundo, nunca lo olvides, estamos en tu corazón -el pequeño puchereaba, asentía con tristeza -dile a Miko-chan que le agradezco te cuide, dile que estoy igual de feliz que ella por Itachi-kun -Naruto sonrió en grande, asintió -los amo, los amo tanto -la imagen de ambos desapareció, dos luces se elevaron en el cielo, se disolvieron, cuando el pequeño salió del espacio en blanco las cadenas habían absorbido la energía negativa, la habían purificado, cuando abrió sus gemas los tres shinobis lo veían con asombro, pero en especial Itachi, lo veía con orgullo y cariño, sonrió con un leve sonrojó al darse cuenta.

Kakashi afiló su mirada, algo pasaba, esas miradas no eran de amistad -¿se puede saber qué es lo que hay entre ustedes? ¿Kohai? ¿Naruto? -el pequeño de inmediato bajó el rostro con la piel roja de vergüenza, sólo podían verse sus rojos oídos, tenía miedo a ser rechazado. Itachi lo vió6 con su mirada seria y rostro en blanco, levantó un poco su mano, tomó la del pequeño con cariño acariciándola para tranquilizarlo. Naruto sonrió un poco al ver ese acto de cariño del mayor. Yamato veía todo con sorpresa, guardó silencio, no le correspondía opinar -somos pareja senpai, hace poco aceptó serlo, espero que pueda entender y aceptarnos-

Kakashi endureció el ceño, no le agradaba nada esta situación, estaba seguro que a Jiraiya-sensei tampoco le agradará, la orientación era lo de menos -espero que tus intenciones sean buenas kohai, veo algunos años de diferencia aquí. Naruto ha sufrido bastante, aún es muy inocente, no voy a permitir que lo lastimen una vez más -Itachi no cambió su mirada estoica observando al peliplata quien lo veía con molestia, respiró hondo, entendía la sobreprotección del sensei, sabía que esto sucedería, su pequeño aún era inocente, había gente que lo amaba -le prometo que mis intenciones son serias senpai, madre y Sasuke están enterados, he estado esperando a Jiraiya-sama para hablar con él y con Hokage-sama, para pedir su autorización para llevar una relación con Naruto -el peliplata ablandó la mirada un poco, sabía que su kohai era buen chico, pero aún así -no me opondré a esa relación, pero no te quieras pasar de listo -el azabache asintió -Naruto, ¿esto es lo que quieres? -el rubio levantó sus ojos para ver a su sensei, asintió con una leve sonrisa -si Kakashi-sensei, gracias por preocuparse -el peliplata acarició su cabello con cariño -estaré al pendiente, quiero estar el día que hables con ellos -el azabache asintió -así será senpai, gracias por no oponerse -Kakashi lo vio con cuidado, iría de sorpresa a su casa en distintos momentos para vigilar esta relación y la integridad del pequeño.