--¿Qué es lo que tramas, hermanito?

--No tramaba nada, pero ahora sí.

Sasuke y Shikamaru se habían reunido con Itachi y Naruto en un lugar algo apartado de la fiesta que ya había dado inicio. Aunque no lo dijera en voz alta, Sasuke había estado planeando un plan de escape para Ino, pero al saber que era muy arriesgado, desistió de él; sin embargo, al saber las circunstancias en las que se encontraba la muchacha, no vio más remedio que ponerlo en práctica. Para ello era indispensable la ayuda de su hermano mayor y de Naruto, por esa razón los reunió en ese lugar.

--¿En verdad no eres noble? Jamás lo hubiera creído. ¡Te ves como cualquiera de nosotros!-- dijo Naruto sorprendido.

--¿Cierto, Naruto? Ni yo que lo vi trabajando al lado de mi hermano lo podía creer-- agregó Itachi --Definitivamente la nobleza te sienta bien-- bromeó haciendo que Shikamaru sonriera.

--Dejemos las bromas para otro momento. Necesitamos sacar a Ino de aquí-- dijo Sasuke.

--¿Por qué?-- se preguntó Naruto. ¿Pasó algo malo?

--Mucho-- respondió Shikamaru con pesar --Pasaron muchas cosas que han hecho sufrir a Ino desde hace mucho tiempo.

Sasuke y Shikamaru iniciaron su relato. Necesitaban contarles toda la verdad. Lo sucedido con Shikamaru, el motivo de su visita, la disputa que habían visto entre Ino y Sai y el disparatado plan de escape para ella.

--¡Maldito bastardo! ¡¡Se las verá conmigo ese estúpido de Sai!!-- reventaba de cólera Naruto. Él siempre había tenido un gran aprecio por Ino, la consideraba como una hermana menor y no iba a permitir que alguien se burlara de ella.

--Cálmate, Naruto. Debemos sacar a Ino de aquí primero.

--Claro, pero después mataré a esa sabandija-- trató de reprimir su furia.

Itachi se había quedado pensativo. Al igual que Sasuke, también le costaba aceptar la verdadera naturaleza de su hermano menor.

--Ese mocoso me va a escuchar-- decía por lo bajo. --Quizás nuestro padre no haya tenido una buena charla con él pero yo sí lo haré.

--No se precipiten-- rogó el joven Nara --Comprendo su sentir. Créanme que nada me daría más gusto que reventarle la cara a ese desgraciado, pero Ino es primero. Debemos asegurarnos que ella esté a salvo.

Los hombres quedaron en silencio. Ya se habían enterado del gran amor que se profesaban la rubia muchacha y él, por lo que entendieron su pesar. Sabían lo mucho que debió haber sufrido lejos de ella al haberla dejado en manos equivocadas. Ahora estaba ahí, siendo capaz de arriesgar su vida entrando a la propiedad del hombre que lo buscaba para matarlo.

--Tú... ¿en verdad amas a Ino?

--Claro que sí, Naruto. No hay nada en este mundo que me importe más que hacerla feliz-- respondió con los ojos enrojecidos.

--No tengas dudas de ello, Naruto. A mí me consta-- reafirmó Sasuke.

--Bien. Entonces cuenten conmigo para lo que sea. ¿Cuál es el plan?

Shikamaru cambió su rostro melancólico por uno más animado. Agradecía poder contar con el apoyo de personas tan comprensivas. Definitivamente, en el mundo había gente buena y mala, sin distinción de clases sociales. Se arrepintió de haber juzgado a los Uchiha únicamente por la actitud de Sai, asimismo de la familia Yamanaka, pensando que el único ser bondadoso era Ino. Ahora veía con más claridad que el destino había puesto en su camino a personas de buen corazón; personas como Kiba, Hinata, Sakura, Sasuke, Itachi y Naruto, quienes lo ayudaron sin necesidad de juzgarlo; y por supuesto a Ino, que lo amó incondicionalmente sin esperar a cambio nada más que su amor sincero.

--Debemos sacar a Ino sin levantar sospechas-- empezó Sasuke --para eso necesitamos distraer a Sai, Inoichi, Tsunade, Deidara y mi padre, quienes son los que estarán pendientes de todo lo que suceda por aquí.

--Yo puedo encargarme de Sai, hermano; además Izumi se encargaría fácilmente de Tsunade.

--Bien, Itachi. Cuento contigo-- le dio un sentido apretón en el brazo --Shikamaru, tú y yo debemos permanecer en la fiesta, a la vista de todos todo el tiempo-- le dijo al joven Nara --Tú eres el único desconocido para la familia, el único a quienes los Yamanaka no invitaron, así que es importante asegurarnos de que nadie sospechará de ti, de paso que vigilamos a Inoichi y a mi padre.

--Comprendo.

--¿Qué haré yo, Sasuke?-- preguntó Naruto intrigado.

--Tú tendrás la labor más importante, mi amigo. Serás tú quien se lleve a Ino de aquí.

--¿Pe-pero a dónde?-- exclamó Shikamaru preocupado. Le hubiera gustado intervenir y decir que sería él quien se llevaría a Ino pero Sasuke tenía razón; si él desaparecía, sería el primer sospechoso.

--La llevará a mi casa-- trató de tranquilizarlo. --Naruto es de la familia, nunca nadie sospecharía que raptó a su propia prima el día de su compromiso. Eres el único que la puede sacar de aquí-- finalizó dirigiéndose al rubio.

--¿Y qué hay de Deidara?-- cuestionó Itachi --Si ese niño mete sus narices donde no lo llaman puede resultar siendo un gran dolor de cabeza.

Sasuke se quedó pensando, tratando de idear una manera de librarse del problemático adolescente.

--Tengo una idea. Conozco a alguien que nos puede ayudar-- dijo Shikamaru recordando la pelirrosa debilidad del hermano menor de Ino.

[...]

Todos se unieron a la celebración que había dado inicio hace un buen rato. Los músicos tocaban una melodía armoniosa y alegre que amenizaba la velada mientras los invitados paseaban de un lugar a otro, recorriendo el bello salón y parte del jardín. Al pasear la mirada por todo el recinto, Shikamaru pudo ubicar una cabellera dorada como los rayos del sol que iluminaba el lugar. Reconoció el aura angelical que la rodeaba y deseó correr a sus brazos, mas se contuvo para no revelar su verdadera identidad. Agradeció al destino que aún no había rastro de Sai. En su lugar, se encontraba la baronesa, quien junto a ella observaban a su alrededor mientras conversaban de algún tema que solo ellas conocían.

--Ahí está la aliada que nos faltaba, Sasuke-- señaló con la mirada en dirección a las mujeres y caminó hacia ellas haciendo que el Uchiha lo siguiera.

--Te lo dije-- susurró Ino a su amiga, quien se veía visiblemente asombrada por la aparición del Nara frente a ellas.

--¡Shikamaru! ¡Qué alegría verte!

--Lo mismo digo, Sakura-- sonrió con sinceridad --Aprovecho para agradecerte por lo que hiciste por mí. Kiba me dijo que fuiste tú quien planeó todo. Gracias en verdad.

Sakura no pudo esconder su emoción y lo abrazó. Se sentía tan feliz de poder ver sano y salvo a su amigo. Por su parte Ino, quien permanecía de pie al lado de la baronesa, envidiaba a la pelirrosa por tener la libertad de abrazarlo. Una sensación desesperante carcomía sus entrañas al no poder acercársele y sentir su aroma. Sin poder hacer nada, trató de contenerse pues no sería una actitud adecuada para una mujer que se va a comprometer con otro.

--Por cierto, les presento a un buen amigo mío. Probablemente ya lo conozcas, Ino, pero creo que Sakura aún no.

--¿Eh? Yo no...-- Sakura se quedó anonadada al reparar en el apuesto caballero que acompañaba a Shikamaru.

--Claro que conozco a Ino perfectamente pero aún no había tenido el placer de conocer a esta bella dama-- se acercó a ella y tomó su mano para besarla --Sasuke Uchiha, a sus órdenes, baronesa-- la miró fijamente a los ojos haciendo que la muchacha se ruborizara.

Shikamaru e Ino intercambiaron un par de miradas cómplices y sonrieron al ver la evidente conexión que surgió entre ambos. El joven Nara carraspeó luego de unos segundos haciendo que al fin sus dos amigos volvieran a la realidad. Nervioso, Sasuke se acercó a Ino y la saludó más cálidamente, dándole un beso en la mejilla y un suave abrazo. A Shikamaru le pareció gracioso ver por primera vez una faceta menos rígida y seria de su amigo.

Volviendo a tomar la compostura del caso, Sasuke habló con las mujeres.

--No sé si sería posible que vayamos a un lugar más discreto. Necesitamos hablar con ustedes en privado.

--Claro. Espérennos en la parte menos iluminada del jardín que yo veré la manera de librarnos de todo este gentío-- respondió Sakura.

--Bien. Entonces... te espero...-- susurró Shikamaru dirigiéndole una intensa mirada a la rubia muchacha haciendo que ella asienta.

Los jóvenes se retiraron caminando hacia el lugar pactado, impacientes por volver a encontrarse con las jóvenes damiselas.

--¿Qué te pareció la baronesa?-- preguntó Shikamaru sabiendo la respuesta que obtendría.

--Es... es muy hermosa-- sonrió manteniendo las manos en los bolsillos.

--Así es. Además es viuda-- agregó riendo.

Sasuke sintió su rostro sonrojarse. Respirando profundamente, pasó una mano por su rostro, extendiendo su caricia hasta sus cabellos para soltar un poco la tensión que le causaba el tema.

--Sigue caminando, tortolito-- fue lo único que atinó a decir en respuesta provocando una gran sonrisa en Shikamaru.

--Como usted diga, jefe-- rió haciendo que Sasuke le diera un pequeño empujón en el brazo.

31/05/21