No puedo creer que todo saliera bien en esta cena

Es mi pensamiento inicial desde el momento en que Karma puso un pie fuera de mi hogar. Es tan inusual que no se creara una tercera guerra mundial en la sala de este pequeño departamento. Justo ahora tiendo a desviar mi mirada de mi celular–al cual le llegaban mensajes del grupo de la clase 3-E–para ver la expresión tranquila y hasta satisfecha de mi madre. ¡Nunca creí que se sentiría complacida por todo aquello!, por muy paranoico que pueda sonar, siento que las cosas están fluyendo mejor de lo que esperaba, aunque tengo el ligero presentimiento de que es muy bueno para ser verdad.

- Nagisa- me llama, meto un respingo por el susto.

- ¿S-si?- digo nervioso.

- Dime la verdad- dice ella- ¿Qué has visto en ese chico?- me sorprende un poco su pregunta, no puedo evitar desviar la mirada ante su pregunta.

Esa era una pregunta complicada...

- Y-yo...- tartamudea- Es difícil responder...- estoy seguro que el sonrojo en mi rostro es demasiado notorio- Realmente no estoy seguro en que momento mi corazón comenzó a ver a Karma de manera romántica, llegué a un punto donde, al verlo con atención, el corazón me latía con rapidez, me sentía nervioso y por supuesto, a veces no podía evitar el sentimiento de querer verlo todo el tiempo... Mis sentimientos por él... Creo que noté lo que sentía por él cuando fue suspendido...- al notar mis palabras no puedo evitar mirar a mi madre.

Por alguna razón su expresión neutra no me daba buena espina, era diferente a la expresión que le ví durante la cena, en ese momento, sentí que había aceptado mi situación de ser un chico enamorado de otro hombre, soy consciente que este tipo de casos no son del todo bien vistos... Pero quizás, solo por esta vez, pueda aceptar mi condición de parecerme a una chica, para que las personas no lo vean extraño, pero estoy seguro que llegará el momento en que ya no se podrá aparentar y tampoco quisiera hacerlo, me he prometido a mi mismo ciertas cosas desde que decidí ser maestro y entre ellas, está liberarme de todo aquello que concierne mi apariencia.

A pesar de que Karma quiere que mantenga mi cabello largo, no puedo cumplir con su capricho, debe entender que esta es mi decisión, ya va siendo hora de que me vean como un hombre y no como una mujer.

- Mamá- le llamo- Si no aceptaste a Karma no quiere decir que vaya a termi...- me interrumpe.

- No he dicho nada de eso Nagisa- habla sin entrar en su estado oscuro, lo cual me sorprende aún más, mi madre ha estado cambiando su actitud desde el incidente donde intentó quemar el edificio de la clase E- Puede que quizás me sienta un poco culpable de que en lugar de que mi hijo ame a una mujer... Su corazón le pertenece a otro hombre.

Aquello me dejó mudo por un momento, ¿Eso quiere decir que ha comenzado a verme más como un varón?, sonrío levemente.

- Mamá no te culpes- le hablo- Nadie garantiza que si, desde un principio, me hubiesen tratado como un chico, mi elección serían las chicas, nosotros mismos no escogemos de quien enamorarnos, simplemente los sentimientos comienzan a aparecer y en ocasiones no se pueden frenar aunque quisiéramos hacerlo.

Se queda callada por unos minutos, mi celular deja de vibrar en mi mano, al parecer, han terminado de confirmar nuestra última reunión de mañana, espero que los chicos hayan ideado un buen plan para infiltrarnos en la montaña, aunque, estoy seguro de que Karma ha ideado la estrategia perfecta, no sería nuestro mejor estratega aparte de sádico burlón por nada.
Noto cuando mamá se levanta de su lugar. La observo por unos segundos, con la esperanza de obtener una señal aprobatoria de mi novio, pero al parecer no la obtendré o al menos no por ahora.

Dejo a un lado mi celular para hacerme cargo de la limpieza de la cocina, luego me haré cargo de mis problemas que llevan como nombre Koro-sensei.

..........

- ¡Deja de decir eso!- exclamo avergonzado ante los comentarios de Karma.

Justo ahora hacemos videollamada ya que nuestros amigos, se han desconectado, ya tenemos todo planeado solo falta pulir unos detalles, mañana determinamos que nos reuniríamos para terminarlo todo, después de todo, el 12 de marzo está a la vuelta de la esquina.

- Nee Nagisa... ¿Por qué no puedes hacerlo?... ¿No tienes la puerta cerrada?

- ¡A pesar que la tengo no voy a hacer eso!- digo indignado.

- Al menos solo sueltate el cabello~ - dice sonriendo de forma juguetona- Ya sabes que me gusta verte con el cabello suelto.

Endemoniado pelirrojo demente. Suspiro molesto.

- Está bien- digo haciendo mala cara- A veces pienso que me prefieres como chica y no como chico- suelto mi cabello dejándolo caer sobre mis hombros.

- ¿Qué estas diciendo?- pregunta mostrándose en desacuerdo, parece que no le gustó lo que dije- El Nagisa que quiero y del que estoy enamorado es un lindo chico del cual estoy orgulloso.

Aquellas palabras me tomaron con la guardia baja, ¿Acaso Karma piensa en mí de otras maneras que no me ha expresado?, no puedo evitar pasar mis dedos por mi cabello intentando calmar mis nervios.

- Supongo que ya no puedo retractarme- murmuro.

- ¿Ehh~?- escucho la voz burlona del pelirrojo, olvidé que estoy utilizando los audífonos- ¿Entonces si me vas a cumplir el capricho?

- ¡Ya te dije que no!

- Puedes llegar a ser malo Nagisa~- dice un poco decepcionado, pero estoy seguro que siente el deseo de molestarme ahora mismo, aunque no es nada extraño eso- ¿Qué ha pasado en mi ausencia?- pregunta curioso y poniéndose serio de repente.

- Nada realmente grave...- digo no muy seguro- No ha ocurrido absolutamente nada y me preocupa que en algún momento estalle el lado oscuro de mi madre- digo nervioso, intento arreglarme un poco los cabellos de mi flequillo, definitivamente tengo que cortarme el cabello.

- No te preocupes por ello Nagi, sabes que solo debes decirme lo que ocurra y yo mismo me haré cargo.

- ¡Por esa misma razón no quiero que se genere la tercera guerra mundial en mi departamento!- me quejo indignado ante sus palabras.

- Exageras- dice rodando los ojos- Nada de eso va a ocurrir, solo le daré una cucharada de su propia medicina.

- ¡Ya te he dicho muchas veces que no le harás nada de eso Karma!

- Esta bien, dejaré el tema- dice fingiendo la derrota, sabía que el tema no moría ahí, pero por el momento era lo mejor.

- Gracias- digo suspirando- Karma, por ahora ya me iré a dormir, fueron muchas emociones mezcladas en un solo día.

- Ok Nagi~ - dice aceptando la situación- Nos veremos mañana con los chicos, después de la reunión tu y yo tendremos una cita.

- ¿Cita?- pregunto sorprendido, que tomará la iniciativa así de la nada de una cita era extraño, ya que solíamos pasar mucho tiempo juntos desde que formalizamos nuestra relación.

- Si- responde- ¿No te interesa?

- ¡Por supuesto que sí!- exclamo para que no se haga ideas equivocadas- No me negaría a tener una cita contigo.

- Eso quería escuchar- sonríe, por un momento, me sorprendió el no ver ni una pizca de malicia o esa sonrisa socarrona que suele demostrar, esta vez es diferente...

Sonrisa pura y sincera...

No puedo evitar sonrojarme ante esa vista, hubiese querido verla en vivo y en directo, pero guardaré ese pequeño momento en mis recuerdos, puede, que no vuelva a verla.

- Muy bien mi pequeño ratón, descansa- habla trayendo devuelta a la realidad- Espero tengas dulces sueños, donde esté yo en ellos.

Me sonrojo por su comentario, Maldito demonio.

- Tu también descansa Karma, espero no tengas sueños indecentes en donde yo esté involucrado- hablo fruncido el ceño.

- ¿Eso quiere decir que prefieres que tenga esa especie de sueños con alguien más?- me pregunta ofendido- Sólo estoy interesado en ti Nagisa, no quiero que alguien más aparezca en mis sueños.

Definitivamente este demonio logra sorprenderme a cualquier costo.

- Bien- desvío la mirada- Sólo... No te ilusiones demasiado, ¿De acuerdo?

- ¿De qué estás hablando?- me pregunta con seriedad- He dejado volar mi imaginación por demasiado tiempo Nagisa, no sólo te quiero, te deseo solo a ti, así que, el evitar pensar en que pasará cuando obtenga tu aprobación es inevitable.

- Ya te lo dije- hablo comenzando a impacientarme- Si sigues con esa intensidad te prometo que tus pensamientos se quedarán en solo fantasías.

- Tu empezaste con el tema Nagisa- me recuerda- No pensaba mencionar nada pero ya que lo dijiste no pude evitar hablar de mas.

No puedo evitar sentir mis mejillas arder, él tenía razón, yo comencé con el tema y cuando se le da pie al pelirrojo sobre cualquier tema el aprovecha la oportunidad para aprovecharse de ella, es como si a veces olvidara la naturaleza de mi novio. Suspiro cansado, sigo sin entender porque tal deseo de su parte de que lleguemos a "eso" siento que todo va bien entre nosotros, hemos sabido lidiar con los problemas los desacuerdos y por supuesto, el tema de Koro-sensei que sigue en el aire, todo eso me da mucho que pensar, pero realmente, no me he detenido a pensar–a profundidad–en ese tema en específico, no puedo evitar pensar en cómo se vería el cuerpo de Karma desnudo, principalmente su torso, a pesar de que hemos compartido habitación, no lo he visto sin camisa, ni siquiera en la oportunidad de la piscina creada por Koro-sensei se quitó la camisa o quiso bañarse en ella.

- ¿Nagisa?- su voz me trae de vuelta a la realidad de nuevo- ¿En qué tanto piensas?

- ¡E-en n-nada!- tartamudeo nervioso- No es nada.

- Eh~ ¿Seguro?- presiona- Esa expresión que acabo de admirar no la había observado antes.

¡¿Expresión?!, ¡No puede ser!, ¡¿Por qué debo de ser tan expresivo y transparente para él?!

- Qu... ¿Qué c-cara hice?- preguntó intentando no arrepentirme de mi decisión.

- Verás mi ratón...- le veo sonreír satisfecho- Sólo te diré que me alegra saber que también tienes esa especie de pensamientos y por supuesto, curiosidad por mí.

Es oficial... No puedo ocultarle nada a este maldito demonio.

- Lo siento...- me disculpo ocultando mi rostro.

- Cariño... Por favor no lo hagas- dice un tanto decepcionado- Si dices eso pensaré que realmente lo que acabo de ver no es de tu agrado.

- B-bueno yo...- descubro mi rostro- Llegará el momento sin que lo pensemos siquiera así que...- dejó de evitar mirar hacia la pantalla de mi celular- Sólo... No apresuremos las cosas, ¿Si?

Observo la expresión de sorpresa de mi novio, este se queda callado por unos segundos antes de responder.

- ¿Karma?

- Tienes razón- responde con una sonrisa ladina- Esperaré ese momento.

Puede que el tema a partir de ahora deje de ser tan implicado en nuestras conversaciones y si aparece, espero que sea cuando me sienta del todo listo de querer entregarme en cuerpo y alma con Karma.

- Ahora si creo que es momento de despedirme, descansa Nagi~

- Tu también.

Le sonrío antes de colgar la videollamada.

..........

Sus expresiones... Su sonrisa... Su mirada iluminada... Todo en Nagisa me atrae de una forma tan potente que no creo que, en el momento cuando estemos juntos sea suficiente para satisfacer mi deseo de él. No puedo creer que pasé de temerle a querer tenerlo solo para mí.

- Que irónico es el mundo...- suspiro- Pero aún así, no creo que haya alguien más que me acepte como soy- no puedo evitar sonreír al pensar en él.

Cierro los ojos con la intención de poder dormir, pero una notificación de mensaje no me permite disfrutar de mi ensoñación. Abro los ojos, tomo el molesto aparato y verifico quien está molestando a esta hora, abro los ojos como platos cuando veo de quien es el mensaje.

- Tiene que ser una jodida broma.

"Volveremos a casa luego de tu graduación"

- Tan cariñoso como siempre padre- menciono frotandome el puente de la nariz, pensaba dejarle en visto, al querer bloquear mi celular, recibo otro mensaje, pero esta vez es de mi madre.

"Cariño, volveremos a casa un par de días después de tu graduación y parece que nos quedaremos un tiempo contigo, así que, espero nos presentes a la persona con quien estas en tu foto de perfil"

Sabía que mamá era muy perceptiva, pero aún así, eso no me detuvo en demostrar que estaba saliendo con Nagisa, supongo que ahora es mi turno.

"Esta bien mamá, lo haré"

"No me esperaba que me respondieras, ¿Cómo ha ido todo cariño?

"Todo bien mamá, nada extraordinario ha pasado"

"¿Estás seguro?, tu foto de perfil dice otra cosa"

"Mamá, si tanta curiosidad tienes te diré, su nombre es Nagisa y es mi NOVIO"

"¡No me esperaba que fueras a ser tan directo!"

"Así que Nagisa... Tiene un lindo nombre"

Leo una y otra vez el mensaje, ¿Dónde está la pregunta del millón?

"Si, nos conocemos desde primero de secundaria, pero llevamos más de un mes saliendo"

"¿No pensabas contárselo a tu madre?"

"Pensaba hacerlo, cuando estuvieran aquí, así que era muy posible que no ocurriera"

"Karma, se que no estamos muy presentes en tu vida, pero no puedo perderme de ese acontecimiento tan importante en tu vida, ¡Es tu primera pareja!, claro que quiero saber de él"

Me quedo mirando las respuestas de mi madre y no puedo evitar pensar que lo está aceptando demasiado bien, tendré que esperar a tenerla frente a frente para ver sus reacciones.

"Por esa misma razón quiero que invites a Nagisa a cenar el día después de nuestra llegada, quiero preparar la mejor cena para poder conocerlo"

"Le diré mamá, estoy seguro que Nagisa también querrá conocerlos"

Lo mejor será que le comente después de la graduación, lo más importante ahora es la muerte de Koro-sensei.

"Tendrás que decirme lo que diga, ¡Le comentaré a tu padre la buena noticia así que espero una aprobación de tu parte"

"Si madre"

Decido salirme del chat antes de seguir con la conversación esto es demasiado extraño y normal para mí, en cualquier sentido. Dejo el celular en silencio y a un lado de mi cama, ya es hora de dormir, debo estar descansado para el día de mañana, va ser agotador, además, voy a tener una cita con Nagisa... Aún no estoy seguro a dónde lo llevaré... Pero quizás, pueda recuperar esa cena la cual tu ve que cancelar por culpa de su madre...

- Hablaré de ello con Ritsu mañana, cuando tenga la confirmación... Hablaré con Nagi...

..........

Al día siguiente

Fue una mala idea dejar el celular en silencio, la estúpida la alarma no se escuchó y por ello, me he despertado tarde, todo gracias al estruendo del teléfono de mi hogar que fue interceptado por Ritsu ya que no obtenían señales de mi vida por mi parte.

- Ritsu- hablo de mal humor- Quiero que hagas lo posible para que mi planeación de la cena que hice anteriormente para Nagisa se efectúe hoy mismo.

- ¡¿Hoy mismo?!- exclama conmocionada- ¡¿No pensaste decirme eso por tarde ayer?!

- Hasta anoche quedándome dormido decidí recuperar mi cena junto a Nagisa- respondo.

- Será difícil... ¡Pero haré lo posible!, ¡Te avisaré el resultado de mi trabajo!

- Gracias Ritsu- agradezco para levantarme de mi cama, parezco una piedra que se quiere dejar llevar por la gravedad.

Cojo mi celular para revisar los mensajes y llamadas pérdidas, entre ellas, están las de mi pequeño ratón. Decido llamarlo para tranquilizar sus nervios, estoy seguro que Ritsu en estos momentos pudo haber pasado la información de que sigo vivo, pero prefiero hacerlo. Al segundo pitazo, escucho su dulce voz al otro lado de la línea.

- ¡¿Karma?!- me llama preocupado.

- Hola Nagi~ - logro decir antes de bostezar.

- ¡Nada de hola!, ¡¿Por qué no contestabas?!

- Lo siento, me quedé dormido y mi celular lo puse anoche en silencio.

- ¿En silencio?- pregunta dudoso- Tu no sueles dejar tu celular en silencio, ¿Ocurrió algo?

- Mis padres vienen después de la graduación.

- ¡¿Tus padres?!

- Si, me escribieron después de que colgara contigo.

- ¿Ya les dijiste...?- pregunta conmocionado.

Sonrío levemente pensando en eso.

- Les diré cuando ya estén aquí- le digo una mentira blanca- Prefiero que sea así.

- Entiendo... Crees... ¿Crees que les agrade?

Se notaba lo preocupado que estaba por esta situación, si tan solo le dijera la reacción de mi madre cuando le confesé mi relación con un chico, esa ansiedad desaparecía en un abrir y cerrar de ojos, pero, como lo decidí, no lo abrumaré por ahora con el tema de la cena familiar.

- No te preocupes por eso- respondo con un tono suave- Estoy seguro que les caerás bien, papá es algo serio, pero es comprensible y mamá... Ella tiende a ser muy dulce, pero cuando está enojada es mejor esconderse- pongo el celular en altavoz.

- En... ¿En serio?

- Si, pero como te dije, no tienes porque temer- digo mientras busco la ropa adecuada para el día de hoy.

- Amm... Karma... ¿A quién te pareces más?

- Pues verás... Realmente soy una combinación de ambos- sonrío con malicia, a pesar de que no pudiera verme.

- ¿C-combinación de ambos?- tartamudea.

- Si, ¿Hay algún problema?

- ¡No!, ¡Quiero decir...!- lo escucho suspirar- Creí que tu personalidad de buscapleitos y sádico la habías adquirido con el tiempo.

Me lo pienso un poco antes de contestar, me retiro mi camisa para dejarla aún lado, luego la llevaré con la demás ropa sucia.

- Verás mi pequeña serpiente- comienzo a hablar, tomo el celular y me dirijo al baño- Desde pequeño he sido la oveja negra que le ha traído problemas a mis padres, puede decirse que siempre estaba dispuesto a buscar pleitos, pero claramente mi faceta de buscapleitos fue más marcada en la secundaria, por otro lado, creo que la parte de torturar durante mis peleas lo adquirí con el tiempo.

- ¿Eso quiere decir que tus padres no son así?

- Quiere decir que tengo muchas facetas Nagi~ y una de ellas no la has conocido todavía.

- ¿Qué?- pregunta sorprendido- ¿Hablas en serio?

- Por supuesto, se refleja más que todo cuando estoy con mis padres, así que, es probable que la conozcas pronto.

- Conocer una nueva faceta de Karma...- dice en voz alta- ¡Quiero conocerla!

Aquello me deja sorprendido por unos segundos, no puedo creer que aún pueda sorprenderme de esa manera con algo tan simple, sólo es la forma en la que actuo frente a mis padres, no es nada del otro mundo, pero sin importar eso, a Nagisa no le importa y quiere conocerla.

- Pequeño ratón por favor calmate un momento- digo sonriendo inconscientemente- ¿Ya estás arreglado?

- ¡Oh!, ¡Si!, dentro de poco saldré de casa.

- Ya veo...- miro la pantalla de mi celular, encontrando a Ritsu de fondo, me hace una seña para confirmarme las buenas noticias- Espero que estés vestido de manera formal.

- ¿Qué?, ¿Por qué?

- ¿No lo recuerdas?, tenemos una cita.

- No lo he olvidado, pero, no entiendo para qué necesito ropa formal.

- Cumpleme ese caprichoso Nagisa, verás que no te arrepentirás de la sorpresa que te tengo preparada.

La gran sonrisa de Ritsu se me contagia de alguna manera, esta vez no voy a permitir que mis planes decaigan tan fácil, no por nada soy el estratega de la clase E y por supuesto, no tendría el título del mejor de la clase E y de la secundaria Kunugigaoka, por encima del segundon de Asano. La imagen de la chica cibernetica de cabellos rosas desaparece de la pantalla, luego le agradeceré adecuadamente.

- Está bien...- le escucho decir- Me pondré algo más decente entonces, ¡Pero espero que no me salgas con alguna tontería Karma!

- Me sorprende tu poca confianza cariño- saboreo esa palabra mientras la pronuncio- Deberías ponerte un ves...- me interrumpe.

- ¡Que te jodan Karma!- recibo su negación, indignación y sobretodo su molestia en un merecido grito, aunque sólo lo hago para molestarlo.

Me río por sus palabras, no me sorprendía en nada su reacción, pero no podía evitarlo.

- ¡No te burles!- me recrimina molesto.

- Tranquilo Nagi~ - me quito mi pantalón quedando en ropa interior, sentía que la conversación seguiría- Sabes que solo lo digo para molestarte, no me emociona del todo verte con un vestido.

- ¡¡En el pasado lo insinuaste muchas veces!!

- Oh bueno... Eso fue por curiosidad y por supuesto... Para ver tus reacciones- antes de que comenzara gritarme de vuelta- Me pareció tierna tu reacción cuando tuviste que disfrazarte con ese vestido que encontramos en aquel viaje a la isla.

- ¿Tierna?

- Ese sonrojo en serio me pareció lindo- admito al recordar su rostro en esa ocasión.

- ¿Lo dices en serio?

- Por supuesto que sí-  admito con sinceridad y era cierto, en ese momento, a pesar de que bromee, una parte de mí quería ocultarlo, evitar que alguien más pudiera ver esa misma expresión que me encantó, pero, no podía actuar de esa forma, no podía monopolizarlo, después de todo, no teníamos ninguna relación.

- Entonces... ¿Por qué estuviste de acuerdo cuando apareció Yūji-san y me querías obligar a usar un vestido de maid?

Al mencionar esa situación, no encontraba del todo una buena explicación, era consciente de que en ese momento, me dieron celos de que un completo extraño apareciera buscando a Nagisa, lo peor de todo es que creía que era una ¡Chica!, me hirvió la sangre al pensar que un don nadie apareciera con la intención de acercarse a él y sin pensarlo demasiado le seguí la corriente a la estúpida de la rubia oxigenada, mi única opción era acercarme y aparentar, se que actúe de forma muy natural, pero eso no me fue gratificante del todo.

- ¿Karma?- su voz me trajo a la realidad al recordar a ese idiota ricachon.

- ¿Quieres saber la respuesta a eso?

- Pues claro, por eso te lo pregunté.

- Te lo diré en nuestra cita- escucho sus reclamos- Ahora, si me disculpas, tengo que tomar un baño, ya estoy muy retrasado.

- ¡Ah no!, ¡Me dices ahora mismo que es lo que está pasando por tu cabeza!

- ¿En serio quieres saberlo?- utilizo un tono picaro para que la conversación se terminara, si no lograba avergonzarlo para obligarlo a que cuelgue la llamada, no sabría que contestarle en estos momentos.

- ¡S-si!- exclama a pesar de que su voz se oye nerviosa, parece que no será tan fácil, tendré que recurrir a los medios poco convencionales que no le agradan al peliazul.

- ¿En serio quieres escucharme hablar de cómo me imagino ahora tu cuerpo mientras te estás cam...?- sigo utilizando ese tono desvergonzado, al escuchar un silencio en la otra línea entiendo que me pasé un poco con mis comentarios, pero era por un bien mayor, ya pensaría que responderle a su pregunta, incluyendo de por medio la palabra "Celos" que era lo único seguro que tenía para defender mi postura de aquella ocasión.

- ¡Vas te vale decírmelo en la cita o te prometo que...!- se queda callado por unos segundos, encontrando las palabras correctas para amenazarme- ¡Dejaré de usar el anillo que me diste y no te hablaré ni veré por un mes!

Era un desafío poco justo, pero debía admitir que esa era una especie de espina que no se debía tocar, después de todo, no podía pasar un día ser verlo o simplemente escuchar su dulce voz, soy consciente de que eso solo me convierte en un novio dependiente, pero supongo que yo mismo estoy consiguiendo ello al no querer alejarme de Nagisa.

- Ok...- acepto su amenaza- Hablaremos esta noche entonces de nuestros problemas de pareja.

- Me parece perfecto- habla con un tono de voz serio y decido- Nos vemos más tarde Karma.

- Así será Nagisa.

Y de esa forma mi pequeño ratón colgó la llamada, debía pensar que decir en esos momentos, pero quizás no me serviría decir alguna mentira, después de todo, Nagisa podía leer las frecuencias de las personas, así que podría notar si le miento en ese aspecto y ahí si pasaría un mes sin saber nada de él. Lo más probable era que terminara confesandole lo que sentí en esos momentos y esperaría su reacción esperando que no fuera negativa.

Tiempo restante
Dos días.