Cariño

- ¡¡Deje de hacer eso Koro-sensei!!- grita Kayano-san al verse obligada a usar un traje de porrista.

Hoy nos enfrentamos de nuevo a la clase 3-A así que estábamos terminando de pulir nuestra estrategia y Koro-sensei se había tomado el tiempo de conseguirnos equipo, darnos un nombre, conseguir unos pompones y hacer trajes de animadoras para las chicas, a pesar de conocer su grandiosa velocidad, aún me sorprende que pueda hacerlo. Nakamura-san intentó ponerme su traje de animadora, lo cual, consiguió a medias, logró ponerme la falda, estaba por quitarme la camisa, pero Karma la detiene, no sin antes aprovechar la oportunidad y tomarme una foto.

- Definitivamente no tienes remedio- dice divertido Maehara- Solo consigues que la colección de Karma aumente y la vergüenza eterna de Nagisa persista.

La rubia intentó tomarme alguna foto pero mi novio no se lo permite y le pide a Ritsu que revise por si lo ha logrado para que la elimine de inmediato.

- ¡Te has vuelto un aburrido Karma!- bufa la ojiazul- Si no estuvieras de novio de Nagisa, me dejarías hacerlo.

- Exactamente- habla gruñendo un poco, consigue tapar un poco mi parte inferior para ponerme el pantalón correspondiente del equipo- Él es MI novio y soy el único que tiene derecho a verlo de ese modo- le golpeó la espalda, por esa acción casi me caigo al intentar ponerme el pantalón.

- Nyurufufufufu- escucho la risa de nuestro maestro- Muy bien clase, es tiempo de irnos, hay que estar quince minutos antes de que comience el juego.

- ¡No pienso salir así!- se queja la peliverde.

- ¿Por qué tengo la impresión de que lo dice por los senos?- menciona Hada-san. La ojimiel deja de dar excusas para evitar mostrarse en ese atuendo a todos en la preparatoria.

Termino de ponerme los pantalones. Karma se aleja para intentar golpear a Nakamura-san pero Maehara e Isogai no se lo permiten. Reviso por completo mi equipo, recuerdo que mi novio me había dicho que hablaría con el presidente de la clase respecto a mi estatus en el campus y en como podría ayudar, pero sigo pensando que debería quedarme en la banca.

Comenzamos a bajar la montaña, soportando el calor y la incomodidad de los trajes, pero nada que no pudiéramos soportar, Karma no quería soltar mi mano por nada del mundo, tenemos las manos entrelazadas mientras escuchamos a nuestro maestro regañarnos por ello.

- ¡¿Quieres callarte ya?!- exclama irritada la voz de bicth-sensei.

- ¡Irina-sensei!- exclama exasperado- ¡Pero esta prohibido!

- ¡Deje de actuar como si nunca te hubieras enamorado!- le gruñe la rubia.

- Eso solo me hace recordar a Yukimura-sensei- menciona divertido Karma, logrando poner nervioso a Koro-sensei.

- ¡Karma-kun!- le grita Kayano-san entrando en la discusión- ¡No digas esas cosas!, ¡Es mi hermana!

- Si las cosas hubieran sido de otra forma, es posible que este de aquí fuera cuñado tuyo- le señala con el pulgar.

Veo como ambos se miran, sin quererlo comienzan a hacer señas nerviosas. Karma no puede evitar reír burlonamente.

- Ya es suficiente- habla Karasuma-sensei- No estamos en momentos para burlarnos de nadie.

- Gracias Karasuma-sensei- agradece.

- He~ ¿Eso significa que podemos seguir con la conversación más tarde?- pregunta con esa sonrisa igual a la de nuestro maestro, llena de malicia.

- ¡Ni de broma!- gritan ambos, logrando que el pelirrojo ría feliz.

- ¿Ya todos saben el plan de juego?- pregunta Isogai caminando adelante de nosotros, Megu-san y Maehara están a su lado.

- Esto... Yo no lo sé- respondo- Ni siquiera se porque estoy vestido si en ningún momento escuché mi nombre en las jugadas de las que estuvieron hablando.

- Ah... Sobre eso...- se rasca la mejilla- Te lo diré cuando lleguemos, solo serás parte de una jugada, con tal de que Karma no me mate a mi por dejarte entrar.

- ¿Eh?- menciona confundido- Pero si yo te pedí expresamente que agregaras a Nagisa en una jugada o dos- aquello no me gusta, tiene esa mirada en su rostro y su tono de voz era idéntico a cuando quiere desafiar a alguien.

- Todo esta bien- menciona el pelinegro- Lo tengo todo listo.

Mientras ellos sabían de que hablaban, yo no tenía ni la más mínima idea de que hacer.

...........

Ahora me arrepiento de dejar que me incluyeran en el juego.

Cuando llegó mi turno, sabía que debía hacer, Isogai se encargó de decírmelo en el tiempo que esperábamos a que aparecieran los otros jugadores y expectadores, desafortunadamente, el miedo de fallar y que me ocurriera algo fue mayor a mi momento de reacción, la primera vez que tuve en mis manos el balón, me derribaron dos sujetos aprovechando que estaba pegado al piso, la segunda... Fue un milagro que el equipo contrario no ganara de forma automática.

En resumen, Karma acabó defendiendome de los que intentaron volver a tirarme, pero se le fue la mano, en su gran estilo de torturar a la gente, su reacción ocasionó que le dieran el punto a ellos, a pesar de que nosotros logramos hacerlo, ganamos... Pero por un pelo perdemos por la actitud que tuvo el pelirrojo aún después de que me sacaran del partido.

- ¿Era necesario que tomaran una acción tan temeraria?- pregunta la vicepresidenta al pelinegro.

- B-bueno... No pensé que Nagisa se paralizara y pues... Que ocurriera dos veces y que Karma se descontrolara...- dice intentando explicar lo que pasó.

- Si no fuera porque el pulpo ese lo estuviera reteniendo, estaría golpeando a toda la clase A ahora- menciona Terasaka.

Todos volteamos a mirarlo, tiene el rostro enrojecido y las venas de su cuello se marcan a la perfección, su aura definitivamente da miedo, pero por alguna razón, me preocupa más lo que pueda llegar a ser por mi causa. Me levanto de mi lugar.

- ¿Nagisa?- me llama Kayano-san- ¿Te sientes bien para caminar?

- Me duele todo el cuerpo, pero debo intentar tranquilizar a Karma- menciono para caminar adolorido hacia Koro-sensei.

- ¡Karma-kun!- exclama desesperado el pulpo- ¡Calmate por favor!- era sorprendente la fuerza que tiene mi novio, es entendible sabiando que la mayoría de los jugadores contrarios salieron lastimados.

El pelirrojo solo gruñia e intentaba soltarse, me acerco y posó mi mano sobre su mejilla, si no se tranquilizaba por las buenas, tendré que hacerlo a las malas.

- Karma- le llamo, este voltea a mirarme y deja de aplicar tanta fuerza- Estoy bien, no te preocupes.

- Nagisa...- dice mi nombre en un gruñido molesto, ¿Estaba molesto conmigo?, lo veo apretar los dientes.

- ¡Koro-sensei!- este acerca uno de sus tentáculos a la carótida derecha del ojidorado y aplica un ligero masaje, ocasionando que el lado agresivo de Karma disminuya, tranquilizandolo.

- Haz escogido a un chico realmente problemático Nagisa-kun- aquello me hace sonrojar.

- La naturaleza de Karma siempre ha sido así desde que lo conozco, ya estoy acostumbrado, además, lo acepté y lo quiero por quien es- admito frente a la persona que no debería, ¡Es un pésimo momento para darle esa información!

- Nyururufufufufu- ríe- Por ahora, volvamos al campus.

...........

Despierto sintiendo unas cuantas caricias en mi cabello, abro los ojos mirando borroso, distingo una especie de mancha de un tono celeste, los cierro y vuelvo a abrirlos, identifico de mejor manera el rostro de Nagisa, este al notar que he despertado, inclina un poco la cabeza hacia abajo para mirarme y sonreír.

- Hola- me saluda en voz baja- Me alegra que despertaras, perdiste el control en el juego.

Las imágenes de lo ocurrido en el partido llegan a mi mente y no puedo evitar enfurecerme, soy consciente que le dije a Ikemen que incluyera al ojiazul en el juego, pero que casi lo aplastaran, eso sí me molestó.

- Karma por favor, estoy bien- me sigue acariciando los cabellos- Ha sido de cierta forma mi culpa, no creí que me quedaría estático en mi lugar.

- Soy consciente de lo que pasó Nagisa, lo vi todo y por esa misma razón, quiero torturar a todos los de la clase A- gruño con fastidio.

- Pero fue tu idea que jugara.

- Si, fue mi idea, pero no creí que el mejor asesino de todos se quedara paralizado y que casi muriera aplastado.

- ¿Aplastado?- pregunta desanimado.

- No quiero hablar de eso, quiero evitar el impulso de crear un infierno en la academia- cierro los ojos, el enojo podría conmigo.

Siento como se mueve, abro los ojos al sentir un suave toque en mi frente, Nagisa besó mi frente, tal parece que quiere que me olvide de mi enojo.

- Te quiero Karma- dice en un susurro, su rostro está cerca del mío, pero por la posición, cada uno besaria la frente del contrario.

- ¿Qué estás intentando hacer pequeña serpiente?- pregunto más calmado- Si se debe a mi mal humor, tienes que hacer algo mejor para disminuirlo- hablo mirando su mirada azulina- ¿Seguimos en el campus principal o en el nuestro?

- En el nuestro- me sonríe- Estamos en un breve receso, el partido dejó a todos totalmente cansados y las chicas... Bueno, la mayoría está tomándose fotos con el uniforme de porrista.

- ¿Estás seguro de estar bien?- pregunto para luego alzar un poco la cabeza para besar su frente.

- Estoy mejor, no te miento- se incorpora, intento levantarme pero no me deja- No te levantes todavía, quedate unos minutos más recostado.

- Está bien, solo porque Nagisa-kun es comodo~

- No digas esas cosas Karma- dice nervioso- ¿Qué vas a hacer mientras no estoy después de la escuela?

- Supongo que quedarme a dormir en tu habitación mientras terminas- respondo.

- ¡No!- exclama con cierto miedo- ¡No te quedaras en mi casa!

- ¿Eh?~ ¿Y por qué no puedo?

- No confío en que te quedes solo en mi casa, ¡Tú historial habla mal de ti!- inclina la cabeza, así que puedo apreciar su rostro.

- Pero que cruel Nagisa- sonrío con malicia- No iba a buscar algún vestido o ropa de mujer que tuvieras en tu armario- sus pómulos se tornan rojizos- No desconfíes tanto cariño~

Veo como abre un poco los ojos por la sorpresa de mis palabras, incluso se me hace extraño haberlas dicho.

- Karma... Yo...- tartamudea haciéndolo ver muy lindo, en especial ese sonrojo que tiene en todo el rostro.

- No hace falta que digas algo- hablo cerrando los ojos, esa vista solo hacia que quisiera molestarlo, besarlo y no quiero descontrolarme.

Siento como se remueve un poco, acto seguido siento algo en mis labios, abro los ojos de repente, llevándome una grata sorpresa de mi querido ratón presionando sus labios con los míos, mis cabales no pueden contra eso, muevo mis labios, ansioso de hacerlo más profundo, Nagisa no me corresponde de inmediato pero se deja llevar luego de unos segundos.

Definitivamente, adoro degustar esos labios tan suaves, esos labios que algún día, me llevarán a la locura.

..........

- Deja de armar un escándalo innecesario Nagisa- le corto sus quejas y dudas con respecto a quedarme o no en su casa mientras él no está- No puedo creer que te moleste que me quede en tu hogar, más sabiendo ahora que somos pareja y que por consiguiente, confías en mi, ¿O me equivoco?

- K-karma...- baja un poco la mirada- No es por eso que estoy siendo tan histérico, molesto y demás, me preocupa que mamá vuelva antes, la mayoría de veces vuelve sin avisar.

- Me haré cargo de tu madre si hace falta.

- ¡No te atrevas!- me amenaza con su mirada azulina.

- No le haré nada, aunque lo desee con el alma- me mira molesto- Estaré en tu habitación y saldré de la casa si ella hace acto de aparición, confía en mi Nagisa.

Me mira dudoso por unos segundos, pero luego se resigna ante mi propuesta.

- Está bien, no causes problemas por favor- asiento como respuesta- Debo irme ya, a Sakura-san no le gusta que llegue tarde a sus lecciones- se acerca y me da un beso en la mejilla para alejarse corriendo por la colina de la montaña.

Me limito a observarlo hasta que lo pierdo de vista, desvío mi mirada para mirar el cielo, algo extraño me hace ponerme alerta de lo que pudiese pasar en estos días.

..........

- Estoy en casa- escucho levemente una voz dulce, apenas soy consciente de mi entorno, ¿En qué momento me quedé dormido?- ¿Hay alguien?- me remuevo en la cama, me embriago con el aroma de mi pequeño- ¿Karma?- comienzo a quedarme dormido de nuevo, al confundir mi mente con el aroma de las cobijas, pensando que son Nagisa, alcanzo a escuchar sus pisadas- ¿Karma?, esta dormido.

Observo al pelirrojo por unos segundos, con una gran sonrisa, gracias a Sakura-san, he podido aclarar mis dudas de que haré después de graduarme y pensaba decírselo a Karma apenas llegara a casa, pero no quiero interrumpir su sueño, así que esperaré a que despierte, para hablar más tranquilos.

Me siento en mi escrito para comenzar a mirar lo que necesito con respecto a mi siguiente paso a seguir después de la graduación.

............

Cuando levanto la vista de mi computadora, me doy cuenta de lo tarde que es, he estado tan concentrado en mis investigaciones, que no noté como la noche aparecía adornando el cielo.

- ¿Has terminado ya Nagisa?- volteo a mirar hacia mi cama, sus ojos cobre me mira con atención.

- ¿Cuanto tiempo llevas despierto?- pregunto intentando no pensar en que he estado siendo observado todo este tiempo.

- No hace mucho- bosteza- Tu cama es muy cómoda~

- Oh... Emm... ¿Gracias?, supongo- responde confundido- Hay algo que debo decirte Karma.

- ¿Tiene que ver con tu infidelidad?

- ¿Ah?- inclino la cabeza hacia un costado- ¡¡NO te estoy engañando Karma!!- grito molesto.

- Ya lo sé- me hace una seña con la mano para que me acerque, lo dudo por unos minutos pero termino cerrando la pantalla de mi computadora para acercarme a mi cama y acostarme a su lado, me abraza por la cintura, acercándome a su cuerpo- ¿Qué necesitas decirme?

- Ya se que quiero hacer después de graduarme.

- Eh~ ¿Seguirás los pasos de Koro-sensei?

- ¿Cómo lo...?

- De alguna manera intuí lo obvio Nagisa- siento sus labios sobre mi cabeza- Tus ojos reflejan la admiración que sientes cuando miras al pulpo, me hubiera sorprendido bastante que me hubieras dicho que seguirías otro camino.

- Karma...- mi corazón late, me siento... Conmovido, me gusta que le importe tanto a mi novio, que pueda ver en mi lo que me agrada y lo que me disgusta- Podrías haberme ayudado antes, ¿No crees?

- Quería que te dieras cuenta tu mismo, por eso no mencioné nada- se explica- Si no te dabas cuenta, tendría que decírtelo mientras intento robarte el aliento.

- ¡P-pero...!- enrojezco de inmediato- ¡¿De qué diablos hablas?!- chillo avergonzado por su comentario, algún día moriré por culpa de un paro cardiorespiratorio.

- Pues que pensaba comerte a besos antes de decírtelo- mi cerebro se desconecta por completo, dejando un caparazón inerte por unos segundos- Me encantas Nagisa.

Y eso último, solo produce que caiga en un coma inducido y no estoy seguro de cuando despertaré.

..........

- Ne~ Nagisa- me llama pero no le contesto, intento preparar una cena decente para ambos, después de todo lo dicho en mi habitación, intento ignorarlo para evitar estar al borde de la muerte de nuevo- Na-gi-sa...- insiste, lleva haciéndolo por cinco minutos- Nagi-chan- ese último llamado me molesta pero no le doy el gusto- Cariño, ¿Por qué me ignoras?

Abro los ojos como platos al escucharle por segunda vez en ese día la palabra "cariño".

- ¿Acaso me dices eso por molestarme?- volteo a mirarle.

- ¿Decirte cariño?- pregunta. Asiento con la cabeza- No, no lo hago por eso Nagisa- mi corazón da un vuelco, ¿Lo dice de verdad?- La primera vez se me escapó, esta vez si lo dije conscientemente, además, ¿Las parejas no se dan apodos o algo así?

- No creí que quisieras hacer algo tan cursi y común.

- Mientras sea solo contigo, no le veo ningún problema.

He sufrido un nuevo preinfarto.

- ¿Por qué eres así Karma?- pregunto sonrojado y un poco nervioso.

- Especifica por favor.

- ¿Por qué te muestras tan cariñoso y meloso cuando estamos solos?- apago el fogón al terminar de cocinar el curry- Vas a terminar matandome en un día cercano.

Me sorprendo un poco al escucharlo reírse a carcajadas.

- Nagisa- habla cuando termina de reírse- Quiero que tu conozcas todas mis facetas, incluso las que pueda mostrarte de manera inconsciente- sonríe un poco mostrando sus comillos- Y soy cariñoso contigo, porque no creo que estés cómodo con alguien que no sea tan expresivo y te moleste como yo lo hago.

Desvío la mirada, es nuevo para mi estar en una relación, en especial cuando es mi primera relación, con la persona que he querido por un buen tiempo y sobretodo, que ambos somos hombres. Será un poco complicada nuestra relación, pero estoy seguro que no nos separararemos por cosas insignificantes como esa. Además, que Karma solo sea así conmigo, me hace sentir especial y avergonzado, demasiado. Me atrevo a acercarme para darle un fuerte abrazo que es correspondido al instante.

- Sabes como arruinar todo y arreglarlo- hablo disfrutando del abrazo.

- Un aspecto que puede ser bueno para nuestra relación, ya que no soy el sueño de cualquier persona- responde mientras juguetea un poco con una de mis coletas.

- Puede que no seas el sueño de toda persona, pero me alegra que estés conmigo- me alejo un poco de su lado para sonreírle un poco sonrojado.

- Pero que romántico Nagi~

- Ay por favor... No digas eso- el nerviosismo comienza a florecer- Es hora de comer.

Me alejo de su lado para servir el arroz con el curry y nuestras bebidas. Al igual que ayer, nuestra cena es silenciosa, pero, sinceramente, me agrada la compañía del pelirrojo.

............

- Ya te dije que no dormirás conmigo- intenta evitarme el paso a su cama.

- ¿Es qué acaso tienes miedo de que te haga algo?- pregunto levantando una ceja.

- P-puede ser- balbucea- Pero si en serio te tuviera miedo, no estarías en mi casa y tampoco seríamos novios.

- Suena algo cruel, pero tiene todo su sentido.

Hago un nuevo intento, me acerco al peliceleste para abrazarlo por la cintura, veo que no baja la guardia a pesar de estar nervioso por mis acciones. Sonrío complacido cuando apoya su pequeño cuerpo en mi torso, permitiendome abrazarlo mejor, ¿Acaso está cediendo?, lo dudo, el peliazul no me lo haría tan fácil, pero aún así, me gusta que deje de lado un poco la timidez y tome la iniciativa en la relación.

Quiero dormir con Nagisa, porque, descubrí al dormir en su cama, que una extraña tranquilidad me envolvía y aliviaba cualquier cosa que me causara malestar, estoy comenzando a volverme dependiente de mi pequeña serpiente.

- Gracias Karma- me agradece mientras pasa sus brazos por mi cuerpo correspondiendo el abrazo.

- ¿Por qué me agradeces?- pregunto un poco extrañado.

- Por corresponder mis sentimientos y por dejarme ser parte de tu vida- abro un poco los ojos al escucharlo decir esas palabras, siento un ligero calor en el rostro, agradezco que nadie esté cerca para verme.

Aunque intente decir alguna palabra, nada sale de mis labios, simplemente, me dejó sin habla, ¿Cómo era posible que me agradeciera tal cosa?, es decir, estamos juntos, sentimos lo mismo por el otro más sin embargo... Muevo la cabeza de lado a lado, sonrío sinceramente.

Gracias a ti Nagisa, no volveré a estar solo.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top