Capítulo 1. Starry Night (2 de 3)
Acabo de comprar un nuevo par de zapatos Gucci
Gasté los fondos de mi universidad solo para lucir bien.
Cuarenta minutos pero parece que lo hice en dos
Tal vez soy vanidoso al igual que tú.
Si, desearía ser libre
Me pregunto si alguien ve lo que yo veo
¿Por qué me importa? ¿Por qué yo?
Intro (Gucci shoes) - Grace Vanderwaal.
Memoria del Jardín en Etten - Vincent Van Gogh (1888).
Starry Night
Parte 2
—Así que ¿quién es JongIn? —Kyungsoo pega un brinco en el sofá tras escuchar la voz detrás de él. No ha sentido a su amigo, generalmente es muy bulloso especialmente en las mañanas.
—Baek ¡por dios! me has pagado un susto —Lleva su mano a su pecho sintiendo los latidos acelerados—. Te creí dormido ¿Cómo te sientes? —pregunta luego de reponerse del susto.
—Ya me siento muy bien. Gracias por cuidarme —Sonríe antes de treparse por detrás del sofá hasta caer a su lado—. Ahora, ya no me cambies de tema, ¿quién es ese tal JongIn?
—Uhmm alguien que conocí ayer —Kyungsoo continua con una expresión neutra puliendo el boceto en el que ha estado trabajando desde la mañana; espera que Baekhyun lo deje en paz, pero desde luego no sucede y su amigo insiste.
—¡Vamos, Soo! ¿Qué pasó? ¿Quién es y por qué te dejó en las nubes?
Es zarandeado por su amigo, Kyungsoo lo mira fríamente así que lo deja de empujar; suspira profundamente y con sumo cuidado, deja sus lápices a un lado junto al bosquejo ya terminado. Observa a Baekhyun acomodarse en el sofá flexionando sus rodillas sobre su pecho. Kyungsoo intenta en vano no sonreír, pero lo hace radiantemente, por lo que no tiene de otra que contarle que conoció a alguien mientras lo esperaba y que se sintió bastante cómodo mientras conversaban, como si fueran dos almas viejas que se volvían a encontrar.
—No sé cómo describirlo... —concluye con anhelo—, fue como si tuviéramos una conexión, como si estuviéramos predestinados... ¡Ah, estoy siendo demasiado cursi con esto! —Termina avergonzado descansando su cabeza sobre el hombro de su amigo, quien parece disfrutar verlo de ese modo.
—Wow, es decir.... Creo que es la primera vez que te veo realmente interesado en alguien, no es nada comparado cuando te referías a Minseok —Baekhyun opina haciendo que Kyungsoo se tense por un momento al escuchar el nombre de su exnovio—. Ni siquiera te he tenido que insistir para que te explayes hablando de tus sentimientos. Ese JongIn debe ser muy especial, tus ojos brillan hablando de él, esto es...
—Lo sé, lo sé —Señala con un rastro de verdadera frustración en su voz—, ni siquiera puedo reconocerme hablando así es... —Kyungsoo mira al mayor sosteniendo su celular en la oreja—. ¿A quién llamas?
—Dame un momento —Le dice cuando se aleja de la bocina.
«¿Chanyeol? Finalmente pasó ¡Sí! Nuestro bebé Kyungsoo se ha enamorado» —su amigo lo vuelve a mirar—. «No, no es nada como esa vez, tienes que verlo. ¡Auch! Me acaba de pegar con un cojín».
—Dice que ya viene... —informa tranquilamente tras finalizar la llamada. Kyungsoo alista un segundo cojín para golpearlo, su amigo sigue como sí nada—. Así que, ¿quién va a llamar a quién?
—¿Cómo? —Kyungsoo pregunta confundido.
—¿Él te dio su número o tú se lo diste a él? —pregunta.
Probablemente su cara lo está alertando que algo no está bien, ve a Baekhyun llevar su mano a su boca y de inmediato lo está reprendiendo
—¡Ay Kyungsoo! no me digas qué... no me digas que no.
Kyungsoo silenciosamente niega encogiéndose de hombros.
—En parte tienes la culpa, Baekhyun. Sí no me hubieras mandado ese mensaje, no hubiera salido a toda carrera —justifica malhumorado, aunque es consciente que no ha sido culpa de su amigo.
—Ay si claro, la culpa es de la vaca —resopla—. Entonces ¿cómo piensas hablarle nuevamente, genio? —Le interroga al tiempo que pellizca su brazo.
—Se llama JongIn, estudia Diseño de Interiores en nuestra facultad, no debería ser tan complicado.
Veinte minutos fueron los que tardó Chanyeol en entrar a su apartamento y Baekhyun le confirmara lo que sucedía con él. Después de eso, sus dos amigos empiezan a bailar ridículamente a su alrededor, cantando rondas infantiles como los niños que son. Kyungsoo entretanto intenta no golpearlos, así que cierra los ojos y los deja ser.
Cuando ya están lo suficientemente embriagados de felicidad se sientan a su lado, ahora con Chanyeol debe contar todo desde el principio, obteniendo las mismas reacciones que Baekhyun; estos chicos en verdad parecen cortados por la misma tijera, se aterra al pensar que son como almas gemelas.
Al final, el pelirrojo opina lo mismo acerca de no haber obtenido un número al que llamarle; por lo que Kyungsoo replica, insistiendo en que conoce su nombre y carrera. En verdad, no cree que sea tan difícil dar con él.
—¿Estás seguro, que no hay ningún JongIn inscrito en ese programa? —pregunta atónito luego que el mayor, Baekhyun, hiciera un par de llamadas y corroborara la información desde su celular.
—Es peor que eso, bebé Soo; pregunté a varios de mis otros amigos y nadie ha escuchado de un JongIn que estudie en la Uni.
Debe ser así, ya que Baekhyun tiene muchos conocidos, y otros amigos en la Universidad con los que de a ratos se junta, especialmente cuando realmente pelea con Chanyeol. Kyungsoo cree que es su forma de darle celos; sus formas retorcidas de evidenciar su atracción, Kyungsoo sacude su cabeza porque se ha ido por las ramas.
—¿Y si fue un fantasma? —propone de repente el pelirrojo. El menor le da una mirada fría a su amigo.
—Cállate Chanyeol —En seguida Baekhyun lo golpea con una almohada.
—Lo digo en serio, con eso que no distingues los rostros, podría ser —insiste.
—¿Sí ves lo que haces?—Baekhyun reprende al más alto—. Mira la cara de bebé Soo, está dudando.
Kyungsoo rueda lo ojos ante tal ridiculez.
—En primer lugar, no seas tan idiota, Chanyeol, los fantasmas no existen; y en segundo lugar, no estaba dudando, estaba intentado recordar algún otro detalle de JongIn.
—Esto me parece que es un trabajo para el detective Byun, joven Do —expresa seriamente Baekhyun como si se tratara de un interrogatorio real—. Por favor, me podría dar alguna información adicional del sospechoso acusado de robar el corazón de mi amigo.
Chanyeol empieza a reír como idiota. Kyungsoo permanece estoico.
—¡Yah! No seas payaso Baekhyun, y tú—agrega señalando al más alto—, ya en serio, hazte revisar ese cerebro, no es normal reírse por cualquier cosa.
—No seas malo y contesta la pregunta del Detective Baek —Chanyeol ignorando su petición, le sigue el juego.
—Par de idiotas —Kyungsoo masajea el puente de su nariz, pidiendo más paciencia para soportarlos.
Tras serenarse y que Baekhyun amablemente les preparara café con algunas galletas, Kyungsoo recuerda elementos, como su traje y accesorios, informando de esto a sus amigos.
—Entonces, lo que tenemos es lo siguiente —Baekhyun toma la palabra luego de apuntar cada detalle en una libreta, siguiendo con el rol de «detective»—. Se llama JongIn, no tenemos apellido, presuntamente estudia Diseño de Interiores en nuestra universidad, la noche en la que fue visto, usaba un traje azul oscuro, par de guantes negros y una bufanda roja, su cabello es de un castaño oscuro y mide alrededor de ¿1.80? —Baekhyun lo mira de soslayo.
—Sí —confirma— es el promedio entre sus alturas —Baek mide 1.75 y Chanyeol 1.86, cree que JongIn está entre la mitad de esos números.
—Tiene un timbre de voz ronco, su fragancia tiene toques de mentol, y algo de limón —sigue con la descripción.
—¡Momento! —Interrumpe Chanyeol alzando su mano.
—No tienes que alzar la mano —interviene Baekhyin—, continua.
—Usa accesorios de invierno, voz ronca, mentol, limón... ¿qué tal si este chico estaba en realidad resfriado?
Eso parecía una buena deducción, debe reconocer Kyungsoo. Tras discutirlo en grupo se llega a un consenso. Baekhyun sigue socializando lo que escribió.
—Por último, esta persona presuntamente tenía un resfriado en el momento de los hechos ¿algo más?
Sus amigos, quedan en silencio, releyendo los apuntes. Baek lleva su lápiz a su boca y el más alto jala algunos mechones de su cabello, quedará calvo algún día, reflexiona Kyungsoo, quien en ese momento recuerda un detalle; sus ojos se amplían viéndose emocionado.
—¿Si, Kyungsoo?
—Él dijo que la gente solía confundirlo con ¿Kai Kim?
Sus amigos estallan en risas, Chanyeol termina rodando por el suelo, preguntándole si está seguro que eso dijo ese JongIn a lo que asiente sin entender cuál es el chiste. Su amigo, de cabello plateado, limpia algunas de sus lágrimas y estando más calmado le expresa:
—Bebé Soo, nadie que no sea el dios Kai, se puede parecer al dios Kai.
Kyungsoo asiente sin estar muy convencido; lo que más le molesta es que la última pista solo haya generado burlas. Se frustra, al pensar que todo esto sería más sencillo sí no tuviera ceguera facial. Recuerda tener un único momento de lucidez, al captar perfectamente los labios abultados de JongIn formando un puchero de tristeza... eso fue diferente, ha tardado años, en poder reconocer instantáneamente alguna expresión facial con cada uno de los detalles que implica, y solo sucede con sus padres y de vez en cuando con Baekhyun, quien lo conoce desde su adolescencia.
—Ya que parecen saberlo todo ¿Quién es ese Kai Kim?
—Danos un momento, Kyungsoo, tus amigos están ocupados — informa el más alto.
Kyungsoo apenas nota que sus amigos han estado concentrados en el celular del mayo. Los dos se miran antes de chocar sus manos en un gesto de victoria.
—¡Que comience la misión Cenicienta! —expresa Baekhyun.
—¡Qué! —exclama horrorizado—. Ustedes par de tontos qué hicieron —Kyungsoo se acerca y lee la pantalla del celular.
Es una historia en el instagram de Baekhyun, que inicia con la leyenda «Estoy buscando a esta persona que conocí en la pasada fiesta de la Uni» a continuación están todos los detalles recopilados, excepto el que se parece a ese tal Kai.
—¿Qué han hecho? —interroga pasando sus dedos por su enmarañado cabello negro.
—Buscando a tu príncipe encantador, obvis —indica el mayor.
—Pe-pero —no sabe por dónde empezar— ¿Y por qué aquí dice que eres tú el que lo busca? —pregunta señalando a Baekhyun
—Es el más popular de nosotros tres, eso aumenta las posibilidades que el tal JongIn vea el mensaje y aparezca —añade tranquilamente el pelirrojo.
—¿Si saben que JongIn ¡sí! puede distinguir rostros no? Si ve a Baek, ¿Qué creen que va a pensar? —Kyungsoo cruza sus brazos sobre su pecho indignado y aterrado; por otro lado, sus amigos comparten miradas antes de replicar.
—No pensamos en eso... pero la descripción si es de él y su nombre está ahí. ¡Oh! Alguien ya ha respondido!
🎭📸🔖
Kai se encuentra caminando por los alrededores del set en Ámsterdam, el cual es un camino rural de tierra café casi anaranjada rodeada por algunos campos de trigo bajo un cielo azul despejado. Se detiene en un jardín de diferentes clases de flores, reconociendo las dalias y tulipanes, de colores, rosa, blanco, amarillos y bermellón; y en el fondo, árboles cipreses; lo que parece toda una escena sacada de una pintura. Kai suspira imaginado a Kyungsoo en ese lugar, ver su rostro iluminado al descubrir un sitio como este, de seguro hará que su creatividad vuele.
Ha pasado casi una semana desde que lo conoció, y no ha dejado de pensar en él por cada sitio que arriba, desde Roma, Milán y ahora en los Países Bajos; imagina a Kyungsoo apreciando la vista, que para él hace mucho tiempo dejó de ser novedosa, tiene cientos de fotos de esos sitios, así que ya ha perdido un poco del encanto.
JongIn sigue su camino por el sendero rural que lo conecta con una pequeña aldea de arquitectura tradicional, cerca de algunos molinos de viento para su sesión fotográfica. A unos metros de ahí, apoyado sobre el alfeizar de una casa, está Oh Sehun, un modelo de alta costura, de nacionalidad coreana como él, con el que ha establecido una amistad que se alimenta cuando coinciden en algún evento, casi siempre lejos de casa.
—¿Qué estás viendo? —Le pregunta a Sehun que se ve bastante entretenido riendo en su celular.
—Yo... nada especial, solo una post en Instagram que se ha vuelto viral en nuestra Universidad.
Los dos estudian de manera virtual en la misma universidad, eso era otro punto en común.
—Ah, ¿sí? ¿Qué es? —JongIn se muestra curioso.
—Es un niño que está buscando a alguien que conoció en la última fiesta de la Uni, ha dado una peculiar descripción y hay muchas personas interesadas; así que solo estoy leyendo los comentarios. Además el chico es bastante apuesto —dice esto último pasando su lengua por sus delgados labios.
Realmente se encuentra bastante intrigado, «¿podría ser Kyungsoo?» Considerando que se le pasó pedir su número telefónico, la idea que él estuviese preguntando por él lo pone ansioso.
—Tú estuviste en esa última fiesta de la Universidad ¿verdad? antes de encontrarnos en ¿Milán? —indaga su amigo a lo que asiente y este le muestra la pantalla— Mira, es este chico ¿lo reconoces?
JongIn espera ver un par de ojos grandes, labios abultados, pero la persona en la foto de perfil tiene los ojos pequeños como un cachorro, labios delgados, además su cabello es gris ¡No se parecen en nada!
—Te ves decepcionado ¿Estabas esperando a alguien más? —interroga Sehun con un gesto evaluador arqueando una de sus delgadas cejas.
—No, bueno, ¿tal vez? No lo sé.
—Vaya, el gran Kai Kim está titubeando. ¿Quién eres? —pregunta divertido. JongIn suspira pesadamente.
Después de eso, su amigo es llamado a grabar, ya que Kai ha finalizado su itinerario en ese país, tiene que regresar ese mismo día a Seúl.
—Hoy desde Ámsterdam mañana desde cualquier parte del mundo —Se despide Sehun.
JongIn mira su reloj, todavía tiene un par de horas antes de su vuelo; así que camina por algunas calles de Ámsterdam, hasta que divisa en lo alto de una colina de césped recién cortado, una edificación de una arquitectura moderna. Esta vez por razones personales, visita el Museo de Van Gogh, sintiendo de inmediato una fuerte conexión con el museo y el chico que conoció en su última noche en Seúl.
🖼🎨🖌
Entre tanto Kyungsoo, en el estudio del apartamento que comparte con su amigo, finalmente termina su última obra, sonríe devotamente al cielo nocturno que ha pintado. Ya que no pudo capturar el brillo de sus ojos, pintó las estrellas que brillaron intensamente la noche en que lo conoció.
Al día siguiente, se encuentra en los pasillos de su universidad después de salir de su última clase, cuando alguien que viene desde el otro lado del corredor lo saluda efusivamente, el chico le sigue hablando, entretanto, intenta descifrar quién es y no verse confundido ante la persona que le dice «tiempo sin verte» y le pregunta cómo ha estado. Kyungsoo responde educadamente, devolviendo las preguntas por cortesía, pero nada de esta persona le es familiar, todas sus respuestas son generales, aunque el extraño parece saber que estudia artes.
—Kyungsoo, gusto en saludarte, nos vemos por allí —Se despide tocando su hombro fraternalmente antes de seguir su camino. Le sonríe deseándole que tenga un buen día y se queda allí mirando en la dirección que ha seguido el extraño, hasta que alguien lo pellizca por detrás.
—¡Auch! —exclama volteando para encontrar a una cabellera plateada, divisa lo que cree es una expresión pícara en Baekhyun.
—Hola Kyungsoo bebé —saluda alegremente. Kyungsoo odia que su amigo lo llame así, pero es algo que a estas alturas ya se ha resignado y lo deja pasar.
—¡Baek! ¿Viste a la persona con la que estaba hablando?
—¿Te refieres a Jongdae? con él hice un dueto para una de mis clases, estuvo varias veces en nuestro apartamento para los ensayos... creo que le caes bien —Kyungsoo asiente en comprensión, es el chico divertido aficionado a los dinosaurios.
—Oh, ya lo recuerdo —reconoce—, pero su cabello ha cambiado ¿no? Ahora es castaño y con rizos. Yo pensé que podía ser... —concluye e inevitablemente suena derrotado. De inmediato siente los brazos de su amigo rodeándolo.
—Mi bebé Soo —musita su amigo acariciando tiernamente su cabello—. Ha pasado una semana y ese JongIn no se ha aparecido, pueda que...
—¿Crees que murió? —pregunta aterrado disolviendo el abrazo.
—¡Qué, no! Iba a decir que probablemente se coló en la fiesta y para no quedar mal, te dijo que estudiaba aquí.
Kyungsoo durante todo el día medita la respuesta de su amigo, es más tranquilizadora esa opción; y precisamente por estar tan distraído contemplando esa opción, esta vez no pudo esquivar al profesor Kang, como lo ha estado haciendo desde hace unos días. El hombre, con su marco de gafas negro con puntos blancos, se va acercando, haciendo grandes señas con su mano en su dirección.
—¡Kyungsoo! Soy yo, el docente Kang —Prácticamente le ha gr itado en medio de la salida del campus; provocando quelos estudiantes voltean en su dirección.
—Profesor Kang, buenas tardes —saluda al otro hombro sin necesidad de alzar la voz.
—¿Me pudiste reconocer?
Por supuesto, sí ha estado gritando su nombre y manoteando al aire, cómo no lo podría haber reconocido; claro que no le dice nada de esto, solo responde afirmativamente y le sugiere que en el futuro, no hace falta que grite, ya que fácilmente lo podrá reconocer por su ropa tan habitual y el marco de sus gafas. «No tenía por qué gritarle, porque ¡no está sordo!» También omite esto último. El mayor es una persona bastante carismática, cree que siempre tiene una sonrisa amable para todos los estudiantes.
Sin más largas, le pregunta sobre su autorretrato. Kyungsoo intenta no hacer una mueca porque no ha tenido cabeza para eso, sabe que tiene otras cinco semanas, pero el tiempo corre en contra, solo espera no entregarlo el último día.
—Justo cuando el concurso de este año se trata sobre el Self-Portrait de Van Gogh —expresa apenado tocando su hombro—. Es una lástima que solo puedas participar este año.
Kyungsoo asiente bajo una incómoda sonrisa, sabe que es el estudiante con peor suerte, cuando en los anteriores años, el concurso dirigido solo a los estudiantes de tercer año, estuvo enfocado en el paisajismo estilo posimpresionista. Pero, justo este año, deciden cambiar las reglas y solo puede participar con un autorretrato impresionista, en el que se vea la influencia del artista de Países Bajos.
—Y es por eso que lo veo como un reto personal —comenta Kyungsoo sonando determinado.
—Y eso está muy bien, yo espero que pronto... —Las palabras del docente se ven interrumpidas por una algarabía.
Kyungsoo mira hacia la izquierda, a un grupo de alrededor de diez estudiantes rodeando a alguien más; frunce el ceño sin apartar la mirada, pronto al círculo se unen más personas, igual de emocionadas. A sus espaldas, escucha un jadeo, se voltea para encontrar a su profesor acomodando sus gafas sobre su cara.
—¡Es Kai Kim! No puedo creer que haya estado tan cerca —habla el mayor agitado
—¿Profesor? —pregunta extrañado. Incluso el docente que ya pasa de los cincuenta años es fan de un chico modelo.
Kyungsoo mira nuevamente en dirección al círculo y por pura curiosidad intenta captar a esta persona; puede ver cuando el llamado Kai levanta su rostro y se detiene mirando justo en su dirección, Kyungsoo no aparta la mirada confundido, hay una especie de magnetismo allí que no puede explicar. Sigue sin estar seguro a quién o qué observa el modelo, ignorando al grupo que exige su atención. Es una sorpresa para casi todos allí, cuando el modelo alza su brazo agitando su mano como si lo estuviera saludando ¿a él? Ni siquiera intenta devolver el gesto o cambiar su expresión, mantiene su ceño fruncido mirando extrañado, no puede ser a él. Da media vuelta para encontrar a su profesor devolviendo el gesto al modelo; por supuesto, es a su profesor que el modelo saluda, se siente como un idiota al pensar por un momento que lo saludaría a él, pero nuevamente, «porqué tendría que saludarlo, cuando ni siquiera se conocen».
—Kai Kim me acaba de saludar, es decir, apenas tuvimos una agradable charla en esa fiesta y se acordó de mí ¡Qué honor! —El profesor parece bastante emocionado. Kyungsoo siente que un par de ojos lo están perforando desde atrás, no sabe sí son ideas suyas, así que ni siquiera intenta mirar nuevamente al grupo detrás de él.
—Eh ¿Felicidades? —dice poco convencido, sin saber muy bien que se dice en situaciones cuando se presencia a un profesor teniendo un momento de fan—. Debió ser memorable para él, sí aún lo recuerda, quizá quiera acercarse y saludarlo —sugiere.
—¿Tú crees? —pregunta inseguro.
No, no creía, pero qué otra cosa puede decirle. Así que solo asiente, está vez con algo de convicción.
—Tal vez pueda inculcar al modelo en el mundo del arte —comenta. No cree que un modelo conozca algo más haya de verse bien, por lo que sí esta persona se pavonea por su universidad, debe salir al menos aprendiendo algo—. Por cierto ¿qué está haciendo en este Campus? —La pregunta es apenas murmurada, pero el mayor lo escucha y se acerca a su oído.
—No lo escuchaste de mí — informa en tono confidencial—, él estudia aquí, se me hace que Diseño de Interiores, sus clases no son presenciales, por eso no lo vemos por el Campus, salvo en algunas oportunidades como esta.
Kyungsoo resiste un jadeo y con sorpresa vuelve a mirar al grupo, no es tan cabeza hueca como piensa. Esta vez no tiene suerte de encontrarse con lo que cree es la mirada de Kai; el grupo que lo asedia parece haber crecido al punto que solo puede ver la gorra negra que usa.
—Solo intenta no comentarlo, imagina sí los estudiantes se enteran que el grandioso Kai Kim es un estudiante como todos.
—Eso es... —Kyungsoo intenta decir algo, pero no sale de su asombro y confusión, justamente de todos los programas debía ser ese.
—Increíble, lo sé. Creo que voy a actuar como profesor, a impartir algo de orden, deséame suerte —decide su profesor, estirando su espalda hasta llevar sus hombros hacía atrás para mejorar su postura. Kyungsoo se despide de su profesor con una sonrisa débil y con su mano en puño, susurra un ¡Fighting!
En seguida oye al docente, con voz autoritaria, exigiendo que se disperse el grupo, escucha una serie de resoplidos desilusionados y poco a poco el grupo se va dispersando. Es cuestión de unos segundos, cuando el modelo mira nuevamente en su dirección, con una expresión que, por su enfermedad, no puede descifrar; antes de dar media vuelta guiado por su profesor quien lo ha tomado por sus hombros como si fueran grandes amigos, y por lo que dura ese momento, su corazón late aceleradamente contra su pecho. Pestañea repetidamente, sin saber a qué se debe esa sensación; se siente nervioso sin razón, como si se hubiera olvidado de algo importante.
***
Al llegar al apartamento, Baekhyun está flipando emocionado, al saber que Kai Kim ha estado merodeando en su Facultad, pero no estuvo allí para pedirle un autógrafo. ¡Lo que le faltaba! otra persona más en el séquito de ese modelo. Bufa malhumorado.
—Es un simple modelo, no entiendo por qué tanta emoción —transmite su inquietud de forma tajante; su amigo parece que lo juzga con la mirada.
—Mi pequeño Soo, todavía está molesto porque el chico que conociste te dijo que se parece a Kai —suelta de forma cantarina.
—No es eso, es... —niega, sin realmente encontrar las palabras, sí, en parte es eso y por otro lado... no lo sabe pero está cansado y algo fastidiado; así que dice lo que su amigo quiere escuchar—. Me has pillado, Baekhyun, estoy molesto porque fue más fácil que el chico famoso apareciera primero en la Universidad antes que JongIn.
En seguida, Kyungsoo toma sus cosas que ha dejado olvidadas en el suelo cuando llegó y se encierra en su habitación, a pesar de las protestas del otro hombre, para que al menos coma algo.
Acostado sobre su cama, mira al techo blanco, concentrándose en esa noche, en lo genial que fue, en las sensaciones que sintió; toma un par de hojas de su block y con sus lápices intenta dibujar aquel rostro. Hojas hechas bolas arrugadas se encuentran más tarde en el piso de su habitación, cuando la cabeza de su amigo se asoma sigilosamente, Kyungsoo está terminando su última creación.
—¿Estás bien? —Baekhyun le pregunta como si estuviera esperando alguna reprimenda por parte del menor; al ver que esto no sucede se sienta en su cama.
—Define bien —responde tajante, arrepintiéndose al instante.
—Sé que has estado un poco malhumorado con ese asunto—comenta Baekhyun desarrugando algunas de las hojas que cayeron al piso— ¿Es este tu autorretrato?
Kyungsoo ríe amargamente, sus bocetos ni siquiera pueden ser diferenciados de un autorretrato a un retrato cualquiera.
—Estás viendo a JongIn allí —señala.
—Oh —reconoce Baekhyun rascando su cabeza—, al menos sabemos que tiene unos labios bonitos, como los tuyos. Es... —Su amigo ladea la cabeza en busca de un cumplido.
—Terrible, lo sé.
—Iba a decir, que mejor que el que me hiciste hace unos años —Kyungsoo empieza a reír al recordar.
—Es que, en serio, ni siquiera me hiciste orejas —expresa en tono de reproche pero sabe que no va en serio—. Yo aún lo tengo guardado, en caso que algún día valga mucho dinero.
—Gracias, tu ambición te llevará muy lejos —El artista le sonríe alejando su cuaderno de bocetos, Baekhyun lo toma, sin decir palabra, está observando detenidamente su último trabajo.
—Uhm —musita Baekhyun. Kyungsoo alza una de sus cejas, curioso por su reacción.
—¿Que significa «Uhm»?
—Uhm, significa que este retrato te quedó mejor y tiene algo que me es familiar, me parece que he visto esta cara antes —Baekhyun acerca el boceto a sus ojos, incluso toca el rostro allí plasmado—. Es...
—Es Kai Kim —replica.
—¡Qué! ¿Cómo?
Kyungsoo tampoco lo sabe, así que se encoge de hombros, realmente estaba intentando enfocar a JongIn, pero recordó su encuentro unas horas atrás con el modelo, así que sus manos, como si tuvieran vida propia, lo empezaron a dibujar, aún sí realmente no tener idea cómo luce su cara; al parecer algo ha logrado transmitir, pues su amigo sigue mirando y tocando el block, como si no lo creyera.
—Wow, Kyung... es impresionante. Es la primera vez que realmente captas un rostro que es algo familiar al verdadero. Es genial, Kyungsoo. Parece que tú también estás cayendo ante los encantos de Kai.
Al instante sus mejillas se ruborizan ante esa idea, niega pero no es convincente. Su amigo debe pensar que está avergonzado.
—Cállate... —ordena esquivando su mirada—, solo intenté plasmar lo que creí ver.
—¡Un momento! ¿Tú lo viste? ¿Tú estabas allí cuando el gran y glorioso Kai se apreció en la Universidad? —Baekhyun lo bombardea con preguntas apretando su brazo y enterrando sus uñas en su piel.
—Auch. Duele —Se queja a lo que su amigo se detiene—. Y sí, pueda que lo haya visto, ¿sabías que el profesor Kang estaba haciendo fangirleo intenso al ver al modelo? fue bastante raro de presenciar.
—¡No puedo creer que lo hayas visto!... y al mismo tiempo no lo hayas visto —Su amigo sigue lamentándose, limpiando unas lágrimas falsas—. Definitivamente diosito le da pan al que no tiene dientes.
Kyungsoo ríe antes de golpearlo con una almohada para que su amigo reaccione.
🎭📸🔖
JongIn arruga las sábanas de su cama al sacudir sus piernas infantilmente, no puede conciliar el sueño sin pensar que ha actuado tan estúpidamente. Saludarlo desde lejos, no fue la mejor idea, no, cuando en ese momento no era JongIn, sino Kai el modelo asediado por fans. Recuerda ver algo de confusión y decepción en ese rostro cuando se alejó, debía saber que eso pasaría. Lo peor es que no puede preguntar abiertamente por Kyungsoo, el estudiante de artes plásticas, sin parecer sospechoso; considerando que cada malintencionado escándalo de citas ha empezado al preguntar por alguien y en seguida las personas encuentran «pruebas de su relación» como algunas prendas de vestir en común, nombres de mascotas o lugares que visitaron en fechas cercanas; su mánager lejos de molestarse, le sonríe pícaro y le dice una frase ya retorcida del escritor Oscar Wilde «Es mejor que hablen mal de ti, Kai, a que no hablen». Finalmente, pasada las dos de la madrugada, puede conciliar el sueño; con suerte, mañana podrá encontrarlo y arreglar las cosas.
Notas finales
Campo de Tulipanes en Holanda - Claude Monet (1886).
Vi esta pintura y creí conveniente dejarla aquí, ya que es lo que tenía en mente cuando Kai se encuentra a las afueras de Ámsterdam.
El retrato de Baekhyun por Do Kyungsoo (2018) 😂
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