- Vayan y busquen a sus hermanos, a Thiago, Calista y Marcus- dijo mamá- sus hermanos tienen que saber lo que ustedes ya saben y a Marcus y Calista le tengo que presentar a mi esposo como se debe y a Thiago amenazarlo como se debe.

Negué por eso

-Vamos pelirrojo- dicho eso me subí a la espalda de Jayden, al rodear su cuello con mis brazos me quejé del dolor por la herida por en mi brazo.

-¿Que te paso?- pregunto papá preocupado.

-Es solo la herida en mi brazo, está muy reciente todavía.

-¿Cómo que herida?- pregunto está vez mamá.

-Cuando fui a buscar a Charlie tuvimos una pequeña pelea en dónde me hizo un corte un poco profundo en el brazo, yo pensaba que era superficial, pero no fue así- vi que se alarmaron- pero ya me curaron y todo.

-Ese imbécil me las va a pagar, va a sufrir- dijo con un tono de voz amenazante mamá.

-Primero te curas y después ya veremos eso, yo tengo mis influencias y también lo voy hacer sufrir- dijo papá, mamá aplaudió feliz y beso su mejilla.

Son el uno para el otro.

Nos despedimos de nuestros padres y Jayden y yo salimos de la habitación, yo seguía en su espalda.

-Sabes pesas mucho- dijo bajando las escaleras.

-Tú calla, no quiero caminar, porque estoy cansada y te aguantas

-Lo sé, pásate por mucho y siento mucho lo de tus abuelos.

-Son tus abuelos también, más tarde te muestro fotos de ellos.

-Me encantaría- bese su mejilla- ¿y sabes que es lo mejor?

-¿Qué cosa?- pregunté y Jayden se dirigió a la derecha.

-Que ya Thiago no puede matarme por estar cerca de ti, porque somos hermanos

-Eso es lo único que te preocupa, que te mate.

-No quiero morir tan joven- una de sus manos soltó mi pierna y se la llevó a la frente- soy demasiado hermoso para morir.

-Te vas a llevar bien con Toby, que es nuestro hermano, los dos son igual de dramático.

-Necesito que me digas algunas cosas de ellos

-Esta Toby que viene después de mí, que tiene quince y después está Chloe que es la menor de nosotros con nueve años, los dos tienen los ojos grises- él asintió- ¿A dónde vamos?

-A la cocina ahí están todos.

-¿Las insoportables arpías también?- pregunte y la verdad estaba deseando que no estuvieran.

-Ellas no, la reina les dijo que hay una situación delicada, las mando a sus habitaciones y no pueden salir hasta que les digan.

-Ojalá y las dejen encerradas hasta que termine la competencia, sería lo mejor.

-No creo que sea posible.

-Cállate y déjame pensar que sí.

Después de eso nos quedamos en silencio y Jayden siguió caminando, llegamos a la cocina y abrió la puerta para entrar, ya adentro se nos quedaron viendo todos los que están ahí, que son: Marcus, Calista, Thiago, Trevor, Katrina, Gwen, Dakota, Kaia, Desa, Grace y mis hermanos.

Me baje de la espalda de Jayden y él me abrazo.

-Antes de que tú empieces una escena de celos- señalo a Thiago, que lo está mirando mal- no la pienso dejar de abrazar, porque es mi hermana.

-¿Hermana?- preguntaron todos al mismo tiempo.

-Sí, nos acabamos de enterar de eso- dije

-Así que tu padre es el Ministro Damián Cooper- dijo Trevor- eso sí que no me lo esperaba.

-Mamá quiere hablar con Thiago, los reyes y con Toby y Chloe- dijo Jayden, Katrina se acercó a él y lo abrazo, me separé de ellos.

-No te vas a librar tan fácil de mí, tendrás ahora dos hermanos mayores- dijo Trevor y lo abrace.

-Me parece perfecto.

-Tú, suelta a mi novia- llegó Thiago y me separó de Trevor.

-Eres un celoso a más no poder- dijo Trevor

-Vamos para que se aclare todo y que podamos descansar un rato- dije y salimos de la cocina.

Marcus y Calista iban de primeros, Jayden de segundo hablando con Toby y Chloe y por último Thiago y yo. Caminamos y caminamos hasta llegar a la habitación, Jayden se acercó a tocar la puerta de la habitación.

-Ya tienen cuatro hijos y por los momentos así estamos bien- dijo entrando y mamá y papá que se estaban besando se separaron y lo miraron mal.

Nos acercamos y rodeamos la cama. Mamá empezó hablar relatando todo evitando decir malas palabras porque está Chloe en la habitación, ella contó desde que conoció a papá y todo por lo que pasó más unas de cuando estuvo secuestrada, que me provoco salir de la habitación para pegarle a esos hijos de puta que la lastimaron.

-Thiago, ella es tu madrina-dijo Calista señalando a mamá- estuvo ayudándome contigo en el embarazo y después de que nacieras también

-Esperen, esperen. Si Thiago y Jayden tienen la misma edad ¿por qué nunca se enteraron del embarazo de mamá?- pregunté.

- Mi barriga era pequeña y usaba ropa ancha así que no se veía, ellos se llevan meses de diferencia y cuando Jayden nació dije que estaba enferma y no sospecharon nada- dijo mamá sonriendo.

Sí que es buena para esconder cosas.

-Es un gusto verte, aunque no me acuerdo casi nada de ti- hablo Thiago.

-Es normal eras muy pequeño- mamá sonrió y después se puso sería- si lastimas a mi niña te las vas a ver conmigo y créeme no voy a ser nada considerada contigo.

-Todos en tu familia me amenazan- me susurro Thiago y yo asentí

-Antes de que me vuelvan amenazar, no pienso hacerle daño a Kolette, ella es muy importante para mí.

Papá sonrió

-Ya me caes mejor, pero igual estás advertido- dijo y Thiago asintió.

Seguimos hablando entre todos, Le di a Chloe y Toby sus collares, les hice prometer que los cuidarían y nunca se los quitarían, ellos aceptaron y sé que van a cumplir eso, y papá le dio uno a Jayden. Todos hablamos, reímos y pasamos un momento tranquilo.

Marcus, Calista, mamá y papá contaban cosas de su pasado, que eran muy entretenidas. Y contaron cosas vergonzosas de Jayden y Thiago

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Ya ha pasado casi una semana de todos los sucesos, mamá se está recuperando rápido, todavía está algo débil, pero no es mucho. También en esta semana he convivido más con papá y Jayden, nos hemos conocido más y ya tenemos mucha confianza y me alegro de eso, nada fue incómodo y todo fluyó bien y tranquilo.

En estos momentos estoy con Thiago, después de todo lo que pasó, él ocupado con cosas del reino y yo con mi familia, no hemos pasado mucho tiempo juntos, así que tomamos este día para nosotros.

-Vamos.

-¿A dónde vamos?

- A mi habitación, preciosa- paso un brazo por mis hombros- yo conozco la tuya, pero tú no conoces la mía

-Eres todo un caso, además ¿Por qué me interesa conocer tu habitación? - él se encogió de hombros

-Te va interesar y mucho- me dio una mirada pícara y abrió la puerta, para que pudiéramos entrar.

La habitación de Thiago es más grande que mi habitación, las paredes grises, un estante con libros, una cama enorme y unas mesitas de noche a cada lado de la cama, un escritorio con algunas fotos, dos puertas-supongo que una es el baño y la otra el closet- y una venta con una hermosa vista.

Me pare enfrente de la ventana para poder apreciar la maravillosa vista.

Sentí a Thiago detrás de mí, sus manos fueron a mí cadera y la presiono un poco pegándome a él. Enterró su cara en mi cuello y yo incliné mi cabeza dándole acceso por completo, empezó a besarlo suavemente, poco a poco sus besos se hicieron más intensos hasta que sentí que succionó un poco de la piel de mi cuello, suelto un jadeo sorprendida.

-Eso es para que todos sepan que eres mía- me volteo y quedamos frente a frente- me importa una mierda el concurso y la prensa, yo te escojo a ti y siempre lo voy hacer, nunca voy a cambiar de opinión con respecto a lo que siento por ti

-Más te vale que el chupetón que hiciste no quedará demasiado marcado.

-Tienes razón, no quedo lo suficiente marcado- dicho eso bajo su cara hasta mi cuello y volvió a succionar más fuerte, un gemido se escapó de mi garganta- ahora sí quedó perfecto. Te dije que, si te iba hacer el chupón, yo siempre cumplo.

Sin darme tiempo de decir algo más, se sentó en la cama y me puso encima de él, mis piernas quedaron a cada lado de su cuerpo. Me tomo de la nuca y me besó ferozmente, nuestras bocas se movían al compás, tomo mi labio superior entre sus dientes y después lo soltó, repitió lo mismo con mi labio inferior y se encargó de chupar antes de volver a besar e introducir su lengua en mi boca, el beso se volvió más dominante.

Sus manos hicieron presión en mi cintura y me hizo moverme encima de él, haciendo que gruña de satisfacción y yo solte un pequeño gemido al sentir su dureza debajo de mí. Me quito el enorme suéter -que es de él, se lo robe hace unos días, cuando se quedó a dormir en mi habitación- quedando en sostén

-Amo verte con mis camisas o suéteres, pero me gustas más verte así- beso la piel sobresaliente del sostén y acariciaba mis muslos, poco a poco se fue acostando y yo quedé encima de él. Dirijo mi rostro a su cuello y lo empiezo a besar de arriba abajo, él suspiro encantado, succione a mitad de su cuello, dejando una marca roja.

-Teníamos que estar iguales ¿No crees? - acaricie su pecho por debajo de su camisa, me separó un poco de él y se quitó la camisa dejándome ver su abdomen marcado.

-Todo lo que venga de ti me encanta- acaricio mi trasero por encima de short- vamos a disfrutar mucho y te voy hacer olvidar ese mal momento por el que pasaste.

Me volvió a besar, la ropa empezó a desaparecer de nuestros cuerpos quedando desnudos, Thiago nos volteó dejándome acostada en la cama, beso y cada parte de mi cuerpo y lo recorrió con sus manos, una de sus manos fue a mi seno derecho lo apretó haciendo que suelte un gemido. Mis manos recorrieron todo su cuerpo, lo beso y dejé una que otra marca por su cuerpo, Thiago bajo su cabeza y succionó en medio de mis senos dejando otra marca, sus manos recorrieron todo mi cuerpo de un momento a otro dos de sus dedos comenzaron acariciar mi parte intima, apreté mis manos en sus hombros cuando uno de sus dedos se adentró en mí, apreté mis labios debido al placer.

-Quiero escucharte gemir de placer y que grites mi nombre, no te contengas ni aprietes esos hermosos labios- sus ojos llenos de lujuria y excitación me miraron para después besar mis labios.

Sus dedos siguieron haciendo maravillas en mi zona intima, haciendo caso a lo que dijo, gemí su nombre cerca de su oreja cuando me hizo llegar al orgasmo. Después de todo le previo y maravilloso él se puso el condón y fue adentrando poco a poco en mí, me moví un poco incómoda por lo grande, Thiago se quedó quito un momento hasta que me acostumbre y fue moviendo sus caderas lento hasta que empezó un movimiento más rápido predomino, pase mis manos por su espalda y después apreté sus hombros debido a todo el placer que me provoca, sus manos apretaron mis caderas y subió una de sus manos a mis senos para darle atención. Todo es maravilloso, Thiago acelero más sus movimientos y lo único que hice fue dejarme llevar por todo lo que estaba pasando entre nosotros, entre esas cuatro paredes se escucharon nuestros gemidos, suspiros y confesiones. El momento fue maravilloso y nunca lo voy a olvidar

Cada día estoy más enamorada de Thiago.