*Darle play al video más adelante cuando avise, por favor~♡*

—Al parecer has bajado 2 kilos desde la última vez que nos vimos, Jimin

—¿De verdad? — asintió — supuse que bajaría de peso, las náuseas han sido muy recurrentes

—¿Han seguido la dieta? — me miró

—Al pie de la letra — hice una mueca y tomé la mano de mi pequeño esposo

—Continúen así, pronto notarán las mejorías — asentí — fuera de eso, todo va bien con Jimin

—¿Y… mi bebé? — cuestionó tímido, le miré con ternura

—Ahora mismo veremos como se encuentra — dijo Jungkook poniéndose de pie — Jimin, acuéstate aquí, descubre tu vientre y baja un poco tu pantalón, vamos a ver que tal va tu bebé

Mi pequeño me miró emocionado, tomé su mano y la besé.

Ambos nos pusimos de pie, Jimin se recostó en la camilla y descubrió su área abdominal

Solo una ligera y suave curva se lograba apreciar en su vientre

Ahí se encuentra mi hijo…

Jungkook vertió un poco de gel en el vientre de mi esposo y comenzó a esparcirlo con el aparato mientras buscaba a nuestro bebé

Manteníamos nuestra vista fija en la pantalla donde solo de veían sombras en movimiento

—¡Oh! Aquí está — señaló con su dedo en la pantalla

Fijé mi vista a lugar donde nuestro gineco-obstetra señalaba. Su tamaño era tan pequeño…

Volteé a ver a mi pequeño quien miraba emocionado y algo confundido, creo que no le encontraba forma. Sonreí y besé su mano, se veía tan tierno

—Su tamaño es el adecuado para sus 8 semanas, se está desarrollando de manera correcta — comentó Jungkook

—Oh, eso me alegra mucho —respondí — ¿Escuchaste eso, cariño?

—Sí, estoy muy feliz — sonrió — pero…

—¿Pero…?

—Pero creo que jamás le encontraré forma a los ultrasonidos… — hizo una mueca, Jungkook y yo reímos

—Es un poco complejo pero tranquilo, conforme tu bebé vaya creciendo, menos difícil te será verlo cuando hagamos un ultrasonido

—Uhh… eso espero — soltó una risita

—Ahora… ¿Están listos para escuchar su corazón?

—¡Oh sí, lo estamos! ¿Verdad, YoonGi? — habló muy emocionado y le dio un apretón a mi mano

Me encanta verlo así de entusiasmado

—Lo estamos

—Muy bien, aquí vamos — presionó un botón

No sé como explicar como me sentí en el momento en que el sonido de sus latidos llenaron mis oídos. No eran muy fuertes, pero tampoco muy débiles, latían muy rápido como si de un tren se tratase

Mis ojos picaron y mi corazón se contrajo de un sentimiento inexplicable ¿Felicidad? ¿Emoción? ¿Orgullo? No lo sé pero se sentía jodidamente hermoso

—YoonGi… e-es su corazoncito — lo escuché sollozar — ¡su corazoncito está latiendo!

—Sí mi amor, está latiendo — besé su mejilla y limpié sus lágrimas con mi pulgar

—Oh dios, me siento tan feliz — continuó sollozando

—Su latido es fuerte, el pequeño se está desarrollando muy bien, chicos

🍃⏳🍃

Un par de días después llegó mi ansiado fin de semana al cual me dedicaré completamente a andar en pijama, dormir hasta tarde y abrazar a mi Jiminnie

En este momento nos encontrábamos en nuestro living, dándonos besos y mimos mientras veíamos televisión

Yo estaba recostado en el sofá y Jimin sobre mi regazo como si fuera un pequeño bebé

Llevé mi mano a su vientre comenzando a acariciar en círculos sobre la tela, mi pequeño escondió su rostro en mi cuello donde plantaba unos besos húmedos

La noche anterior habíamos hecho el amor tres veces y luego dormimos. Así que mi Jiminnie solo traía puesta una camisa blanca mía de manga larga que le llegaba a medio muslo, un bóxer negro y un par de calcetines. Mientras que yo un pantalón gris de pijama y una camisa interior, ambos con el cabello desordenado

Todo el día estuvimos vestidos de esa manera, cómodos sin ninguna molestia

Con mi mano libre acaricié sus largas y suaves piernas. Enfoqué mi atención a la televisión la cual estaba en el noticiero

“Oficialmente inicia la temporada de lluvias, tormentas eléctricas y fuertes vientos, tome sus precauciones y no salga de casa de no ser necesario y si es así no olvide su paraguas o impermeable, porque las lluvias serán muy fuertes según nos informa el centro meteorológico nacional”

Detesto esta temporada. La electricidad empieza a fallar frecuentemente por culpa del viento fuerte que azota o también los fuertes truenos y relámpagos que asustan a mi Jiminnie

Planté un beso en la cabeza de mi pequeño y el timbre comenzó a sonar ¿Quién será? No esperamos a nadie, ya son las 5 de la tarde

—Yo abro… — alejó su rostro de mi cuello e hizo el intento de levantarse pero se lo impedí abrazándolo por la cintura — Oye…

—Ni creas que dejare que vayas a abrir la puerta vestido de esa manera, cariño… — besé su mejilla — solo yo tengo permitido ver estas hermosas piernas

—¡YoonGi! — comenzó a reír tratando de zafarse de mi agarre

—Iré yo

—Nop, yo iré — se levantó y yo lo miré serio, el timbre volvió a sonar — Oh vamos ¿Quién podría ser?

Lo vi caminar a paso veloz a la puerta de entrada y entonces lo perdí de vista

Dejé escapar un resoplido ¿Qué tal si es un tipo o algo y se lo come con la mirada? No, no, no, Jiminnie es solo mío

Me puse de pie dispuesto a ir con él cuando lo vi regresar con sus mejillas completamente sonrojadas

Me miró e hizo un puchero y cruzó sus brazos

—Uhh… alguien te busca… — dijo bajito volteando a otro lado

—¿A mi? — asintió y caminó escaleras arriba

Enarqué una ceja y me dirigí a la entrada ¿Quién podría ser?

Rasqué mi nuca y bostecé, cuando llegué a la entrada me llevé una gran sorpresa

¿Qué hacía ella aquí?

—¡Oh YoonGi! — sentí sus brazos rodearme, yo solo me quedé estático en mi lugar — Creo que batallé un poquito en encontrar tu casa — comentó separándose de mi — Ya casi desconozco por completo esta ciudad

—Taeyeon… uhh, que ¿sorpresa? Verte aquí — ahora entiendo el porqué Jimin se puso así

—He he… — se rió y rascó su cabeza — le pedí a tu madre la dirección de tu casa, le dije que vendría a visitarte… y ehm bueno… ¿Me dejas pasar? Creo que está comenzando a llover — miró al cielo

—¿Qué? ¡Ah! Oh si — me hice a un lado — adelante

Cerré la puerta después de ella, volteé a verla y la encontré mirando la enorme fotografía de Jimin y yo el día de nuestra boda

—El living está por aquí — señalé y caminé

La sentí caminar detrás de mi. Llegué al sofá en el que hace unos minutos nos encontrábamos mi pequeño y yo. Recogí la manta que con la que nos cubríamos y la hice a un lado sentándome. Ella hizo lo mismo en el sofá individual.

—Uhh… lo siento si interrumpí algo — jugó con sus dedos

—No tranquila… los fines de semana solemos descansar todo el día y ver televisión — reí, ella asintió

—Tu casa es muy bonita — miró alrededor

—Gracias… y bueno… no quiero sonar descortés ni nada parecido pero… ¿Qué te trae por aquí?

—¡Ah, si! Quería disculparme por como me fui el otro día — rió nerviosa

—No pasa nada, tranquila

—Y uhm… ¿Recuerdas que te pedí ayuda para conseguir un departamento por aquí?

Es cierto…

—L-lo siento, lo había olvidado — es en serio con el pasar de los días lo olvidé

—Lo supuse — se rió — pero no te preocupes, mi padrastro ya me consiguió un departamento ¡Y amueblado! ¿Puedes creerlo? — comentó emocionada

—Vaya, esa es una buena noticia — sonreí

—¿Verdad? Bueno pues, venía a invitarte para que lo conocieras y… me gustaría charlar un rato con mi viejo amigo… — desvió la mirada — ¿Se puede?

—¿En este momento?

—Sí… ¿Estás ocupado?

—Bueno… — volteé a ver las escaleras 

—Oh, creo que comprendo ¿Tu esposo se molestará?

—Es un poco celoso… pero tal vez si es solo un par de horas…

No creo que Jimin se enoje ¿verdad?

—Con un par de horas es más que suficiente — sonrió y miró una fotografía enmarcada donde nos encontrábamos Jimin, Yeri y yo en su cumpleaños número 3

—¡Ay, ay! Ahh… — escuché un quejido, dirigí mi vista a las escaleras y vi a mi pequeño saltando en un pie

Rápido me levanté y fui con mi esposo quien se encontraba con una mueca de dolor y ya traía un pantalón puesto

—¡Jimin! ¿Estás bien? — lo sostuve de los hombros

—No, nada. Solo… Au… — se quejó — me golpeé el dedo chiquito del pie con la mesa — señaló con su cabeza — solo venía por algo de comer, continúen con su charla no quiero interrumpir

—No pasa nada, ¿Seguro que no te lastimaste? — asintió y bajó su pie

—Uhh… ¿Jimin? — habló Taeyeon cerca de nosotros

—Uhm, hola… — trató de sonreír pero solo hizo una mueca

—Hola… eh, me gustaría salir un par de horas con YoonGi, ya sabes para charlar por todos estos años que no nos vimos ¿Lo dejarías?

—Y… ¿Por qué me preguntas a mi? Él tiene que decidir — me miró

Oh no…

—Serán solo dos horas, cariño — le miré también — volveré para que veamos esa película que querías ver ¿Sí? — asintió

—Está bien… — sonrió, se soltó de mi y subió de nuevo las escaleras

—¿Me esperas un momento? Iré a vestirme

—Oh sí, aquí te espero — sonrió

Fui escaleras arriba y entré a nuestra habitación encontrándome con Jimin sacando ropa del clóset

Me acerqué y lo abracé por la espalda colocando mis manos en su muy pequeño vientre, besé su mejilla

—¿Qué haces, cariño? — susurré en su oído

—Me iré a duchar

—¿No me vas a esperar?

Negó e hizo un puchero

—¿Estás molesto?

—No… lo siento — susurró — puedes ir tranquilo

—Si no quieres que vaya, dímelo y me quedo…

—No, no… ve está bien — se volteó y quedamos cara a cara — tengo que controlar mis celos

—No tienes porqué ponerte celoso, no amo nadie más que a ti. Confía en mi ¿Sí?

—Sí confío en ti… pero no en ella

—Dudo que intente hacer algo

—Bueno… — suspiró — mejor vístete ¿No piensas ir así, verdad?

—Antes dame un beso… — susurré cerca de sus labios

Negó sonriendo y me besó. Lo tomé de la cintura y lo apegué más a mi mientras continuaba besando esos deliciosos labios que tanto me encanta degustar

Nuestro beso era lento y suave, como nos gusta… de repente un estruendo sonó tan fuerte haciendo que mi pequeño cortara el beso y me abrazara asustado

—Odio cuando el cielo truena así —dijo con la voz más aguda de lo normal

—Comenzó la temporada de lluvias…— acaricié su espalda tranquilizándolo — ¿Estarás bien solo?

—Eso creo… mejor apresúrate, antes de que empiece a llover fuerte

—Volveré en una hora, está por oscurecer así que si llega a fallar la electricidad recuerda que hay una linterna y velas en la cocina — asintió

—Estaré bien…

🍃⏳🍃

—¿Verdad que es muy lindo?  — se sentó en el sofá grande

—Me agrada — me senté al otro extremo del mismo sofá que ella

Hace media hora llegamos a su departamento. Fuimos en mi auto ya que ella había llegado en taxi

Y justo después de llegar comenzó a llover muy fuerte. Me hizo un pequeño recorrido por todo el lugar.

Luce cómodo, espacioso y es perfecto para una persona

—Y bueno… ¿Cómo te ha ido todos estos años que no nos hemos visto? — preguntó de manera tímida

—Bastante bien diría yo…

—¿4 o 5 años teníamos sin vernos?

—Algo así, pues hace poco más de tres años me gradué y hace casi cuatro años me casé

—Vaya… no esperaba encontrarte ya casado… y menos con un chico…

—¿Qué?

—¡No, no me malinterpretes! — negó moviendo apresuradamente sus manos — es solo que no sabía que te gustaban los chicos…

—Bueno porque no me gustan… solo me gusta Jimin… — comenté divertido

—¡Oh! Bueno… — rascó su nuca y miró al suelo — supongo… supongo que adoptaron ¿verdad? Tu hija es muy bonita

—¿Mi hija? — asintió

—Si la niña que tomó los colores que sacaste de tu auto aquel día… vi también las fotos de ella enmarcadas en tu casa

Ah… ya entendí ella cree que mi sobrina es mi hija…

—¡Oh hablas de Yeri! — me reí — Yeri no es mi hija, Taeyeon

—¿A-ah no? — abrió los ojos sorprendida — pero ella dijo algo de unos dibujos para sus abuelos…

—¿Recuerdas a Namjoon? ¿Mi hermano? — asintió — bueno pues esa niña, es su hija

—¡Ohh! Vaya si, recuerdo que Namjoon ya se casó, no pude asistir a la boda, mi madre me había castigado por bajar de calificaciones — se rió bajito

—Sí, recuerdo no haberte visto

—Y bueno, ¿ustedes tienen pensado adoptar?

—Bueno… no exactamente

—¿Ah? No entiendo…

—Jimin está esperando a nuestro primer hijo — dije con orgullo

—¿Qué?

—Así como lo escuchas, Jimin está embarazado. Él es un doncel

—Va-vaya… ¿Él… embarazado? Es… es genial — respondió muy sorprendida diría yo — Es increíble… uhh… conozco a unas cuantas personas que también son así y ehh… no esperaba que tu esposo lo fuera, eso es genial

—Sí bueno, hemos tenido complicaciones pero todo va bien ahora…

—Oh que bueno… y ¿cuánto tiene?

—Tiene dos meses

—Oh…

Un silencio bastante incómodo se instaló entre nosotros, ninguno decía nada. Solo se escuchaba la lluvia caer y unos cuantos truenos

¿Cómo estará Jimin en este momento? ¿Estará asustado?

—Taeyeon… ¿Puedo hacerte una pregunta?

—¿Qué? — volteó a verme — Ah si, si

—¿De casualidad tu padrastro se llama Lee Teuk?

—¿Cómo lo sabes? — preguntó sorprendida

Lo sabía

—Ya veo… me dijiste que tu padrastro te tenía asegurado un puesto en su hospital, ¿Verdad?

—Sí, pero ¿como lo conoces? — se acercó más a mi

—Yo trabajo en su hospital

—¡¿En serio?! — se emocionó — ¡Trabajaremos juntos!

—Eso parece…

🍃⏳🍃

Ya eran alrededor de las 7:30 y ya había oscurecido, la lluvia comenzó a caer más fuerte provocando que el tráfico fuese más lento.

El departamento de Taeyeon no quedaba muy lejos de mi casa pero ya llevaba atorado quince minutos aquí en el tráfico.

Me encontraba preocupado por Jimin, él le teme mucho a los truenos y mucho más si la electricidad comienza a fallar

Desde hace más de media hora me quería regresar a casa cuando noté que la tormenta comenzó a aumentar, pero Taeyeon me detenía hablándome de otras cosas y preguntándome sobre el hospital en el que trabajaría

No quise ser descortés y respondí a todas sus preguntas, hasta que al fin pude evadir lo que decía para poder salir de su departamento

Prometiendo que iría a mi hogar a visitarme nuevamente…

7:45 y al fin entré a mi vecindario, notando que todo el lugar se encontraba a oscuras mientras la lluvia seguía cayendo

No había electricidad en todo el lugar. Mi Jiminnie ha de estar asustado…

Metí el auto a la cochera y entré a casa, la cual se encontraba en penumbras ¿Dónde estará Jimin?

Fui avanzando con cuidado y alumbrando el camino con mi celular, cuando un fuerte trueno me sobresaltó

—¿Jimin? Ya estoy en casa — hablé en voz alta

Pero no recibí respuesta ¿estará dormido?

Subí las escaleras y me dirigí a nuestra habitación

Entré sigiloso y alumbré con mi celular en dirección a la cama donde encontré un bulto

Mi Jiminnie estaba bajó las sábanas, sonreí enternecido

Me senté en la cama y lo descubrí. Se encontraba acostado en forma fetal mientras tenía sus ojos fuertemente cerrados y con sus manos cubría sus oídos

Besé su mejilla y él abrió rápidamente sus ojos

—¡YoonGi! — se lanzó contra mi rodeándome con sus brazos

—Ya estoy aquí, cariño — lo abracé y sobé su espalda

—Tardaste mucho… — susurró contra mi pecho

—Lo siento… tardé como media hora en el tráfico. Todos avanzaban muy lento por la tormenta

—Y la electricidad tiene como quince minutos que se fue — lo sentí temblar y se apegó más a mi al escuchar otro trueno

—No quise dejarte solo tanto tiempo — susurré y besé su cabello

—Lo importante es que ya estás aquí… — asentí

—Bajaré por la linterna y encenderé algunas velas ¿Me esperas aquí?

—¡No! Te acompaño… — tomó mi mano

—Okay, vamos

Juntos bajamos las escaleras y entramos a la cocina buscando las cosas

Jimin sostenía la linterna mientras yo colocaba velas en unas partes de la casa

Todo el tiempo mi pequeño sostenía mi brazo y cada que se escuchaba un estruendo se apegaba más a mi

—Estás tenso mi amor, tranquilízate… — acaricié sus brazos

Nos encontrábamos acurrucados en el sofá de la sala mientras que la lluvia seguía cayendo y la luz de las velas nos iluminaban un poco

—Me dan miedo… — se escuchó otro estruendo y se apegó más a mi — no me gusta que se escuchen tan fuerte…

—Lo sé, lo sé… — lo abracé más juntándolo a mi pecho — trata de calmarte, le puede hacer daño al bebé…

—Tienes razón… — susurró

—Ya sé… — tuve una idea y con cuidado me puse de pie moviendo un poco a mi pequeño

—¿A-a donde vas?

—Ven conmigo — tomé su mano y lo jalé

Tomé otra vela y me dirigí a la enorme puerta de cristal que da al jardín trasero. Encendí la vela y la coloqué sobre el piano que estaba a lado de la puerta

*Play al video*~

Me senté frente al piano y jalé a Jimin sentándolo a mi lado

Con el sonido de la lluvia, truenos y relámpagos comencé a tocar el piano

Mis dedos se movían de forma suave y hábil sobre las teclas

Tenía tiempo sin tocar. Cuando era pequeño mis padres me mandaban a clases de piano, yo no quería porque pensaba que jamás me iba a servir de nada saberlo tocar

Con el pasar del tiempo y las clases comencé a tomarle afecto, el sonido simplemente me relajaba, tocar me relajaba

Cuando me sentía molesto o frustrado simplemente me iba a tocar esas hermosas e impecables teclas

Tocando suaves y hermosas melodías. Le tomé tanto cariño al piano que decidí comprar uno por mi cuenta y es justo el que estoy tocando

Sentí a Jimin recargarse en mi hombro y suspirar. Sabía que esto lo tranquilizaría. Miraba fijamente como se movían mis dedos sobre las teclas para recrear esa hermosa melodía

Giré un poco mi rostro y besé su cabeza, escuché una ligera risita de parte de él

Mis dedos seguían viajando de tecla en tecla mientras la lluvia se escuchaba de fondo

Decía que jamás me serviría de algo saber tocar el piano pero si que me sirve… Mi pequeño se ha tranquilizado…

—Tocas hermoso, Min YoonGi… — susurró, dejé escapar una ligera risa

—¿Te encuentras mejor? — pregunté suave y lo abracé

—Sí… gracias, mi amor — levantó su rostro y sentí sus labios sobre los míos

Movíamos nuestros labios al compás, de manera lenta disfrutando los labios del otro. Llevé mi mano a su mejilla acariciándola y con mi otra mano tomé la suya

Mientras continuábamos con nuestro beso la electricidad llegó iluminando toda nuestra casa y así iluminando los bellos ojos de mi pequeño

—Al fin… — susurró en mis labios viéndome a los ojos

—Que triste… me encanta como te miras bajo la tenue luz de las velas

—Bobo… — sonrió y volvió a besarme — ¿vamos… a darnos… un baño? — preguntó entre besos

—Creí que ya te habías duchado… — me separé tomándolo de las mejillas

—Decidí esperarte

—Entonces vamos…

🍃⏳🍃

Un fuerte gemido llenó mis oídos al momento en el que me introducía lentamente en Jimin. Con mucho cuidado terminé por completo dentro.

Jiminnie enredó sus piernas alrededor de mi cintura a como pudo por el espacio reducido en el que nos encontrábamos

Lo tenía sentado en mi regazo chocando nuestros pechos y sus brazos rodeando mi cuello mientras escondía su rostro en el hueco entre mi hombro y cuello

Poco a poco Jimin comenzó a mover sus caderas de manera suave mientras dejaba escapar pequeños gemidos en mi oído. Yo también sentía la necesidad de mover mis caderas pero si lo hacía sentía que me resbalaría ya que no logré sostenerme de ningún lado, mis manos se encontraban abrazando el pequeño, suave y delicado cuerpo de mi esposo

Dejé que Jimin continuara con sus movimientos sobre mi miembro. Solo escuchaba el ligero salpicar del agua

Me siento un poco frustrado por no poder moverme. Creo que fue mala idea hacer el amor en esta posición dentro de la bañera

Jimin se puede cansar al hacer todo el trabajo, quiero ser yo quien le de placer

—Jimin… — susurré con mi voz un poco ronca

—¿Mhm?... Ah… — jadeó

—¿Vamos a la cama? No puedo moverme en esta posición y no tienes idea de lo frustrado que me estoy sintiendo, cariño — detuvo sus movimientos y me miró

Sus ojos estaban cristalizados, mi pequeño siempre llora cuando hacemos el amor, me provoca ternura. Sus mejillas se encontraban sonrojadas, quiero comerlo a besos

—Va-vamos… — susurró

Despacio se hizo para atrás haciendo que mi miembro saliera de él, lo cual provocó un jadeo de parte de él

Salí de la tina secando mi cuerpo rápidamente. Extendí mi mano y ayudé a Jimin a salir de la tina

Sus piernas temblaban… parecía un pequeño ciervo queriendo aprender a caminar

Lo abracé contra mi pecho, tomé la toalla que anteriormente usé y también sequé un poco su cuerpo

Escuché su respiración fuerte e irregular, sé que también a comenzado a frustrarse al haberlo interrumpido en medio acto

Tomé su barbilla levantando su rostro. Sus ojos estaban completamente dilatados a causa del deseo y también jadeaba muy fuerte

—YoonGi… — tragó saliva — t-te necesito…

—Te haré sentir bien, mi ángel — susurré sobre sus labios antes de besarlos

De un hábil movimiento logré sostener a Jimin y él enredó sus piernas en mi cintura mientras continuábamos con nuestro beso

Caminé torpemente hacia nuestra cama donde lo recosté con suma delicadeza, colocándome sobre él cuidando de no aplastarlo, sobre todo su pequeño vientre

—Ya… hazlo, YoonGi… — jadeó

—Lo que pida mi melocotón… — besé su cuello y nuevamente me introduje lenta y tortuosamente en él

—Ahh… Y-YoonGi… — sentí sus manos en mi cabello

Comencé a moverme de manera lenta y apasionada. Como nos gusta a ambos, el sexo agresivo o fuerte no es lo nuestro, nosotros disfrutamos de suaves y lentos roces, sintiendo plenamente cada sensación que nos provoca el sentir nuestros cuerpos unirse, complementarse, volviéndose uno solo

Acariciar nuestros cuerpos, saborearnos enteramente. Ambos conocemos por completo la anatomía del otro, es un mapa que hemos recorrido muchísimas veces el cual conocemos de memoria...

—Mhmm… Ohh YoonGi…

Una de las cosas que me encantan de el embarazo es que su cuerpo se vuelve el triple de sensible, cualquier roce lo hace gemir y eso me encanta

—Eres hermoso, Jimin... — susurré — jamás me cansaré de repetírtelo…

Todo él es jodidamente hermoso, desde sus bellos ojos, sus esponjosos labios, sus regordetas mejillas, su suave piel, su perfecto cuerpo, su encantadora voz…

Jimin es una completa obra de arte

Y me alegra saber que soy el único en conocerlo plenamente…

Aumenté un poco la velocidad de mis embestidas al sentir el cuerpo de mi pequeño tensarse

Levanté mi rostro para mirarlo y su expresión es algo tan hermoso y erótico

Sus ojos fuertemente cerrados, sus labios entreabiertos dejando escapar suaves y hermosos jadeos, su frente aperlada y sus mejillas sonrojadas

Una imagen digna de ser plasmada en un lienzo en blanco para poder ser solo admirada por mi…

Sentí caer el líquido caliente en nuestros vientres. Su cuerpo sufría pequeños espasmos producto del orgasmo

Dejé escapar un gemido gutural al también llegar al ansiado clímax

Me dejé caer sobre él recargando mi peso en mis brazos. Nuestros pechos subían y bajaban muy rápido tratando de regular nuestras respiraciones

—¿YoonGi?

—¿Uhm?

—Te amo… — acarició mi cabello, yo sonreí

—Yo también te amo, mi amor — susurré contra su cuello

Cerré mis ojos descansando un momento pero un sonido me hizo abrirlos de nuevo y reír

—C-creo que tengo hambre…

—¿Mis dos tesoros están hambrientos? — asintió — vamos abajo a cenar entonces

—Sí, por favor — soltó una risita

Con cuidado salí de él provocando un jadeo de su parte

—¿Tienes hambre, pequeño? — me acerqué a su vientre y toqué con suavidad

—¿Qué haces? — preguntó riendo

—Hablo con nuestro bebé — sonreí

—Bueno, nuestro bebé dice que sí tiene hambre

—Entonces vamos a alimentarlo… — planté un beso en su pequeño vientre

—Sí, vamos

—Prepararé algo delicioso para mis dos tesoros…

Porque sí, el bienestar de mi Jiminnie y ahora también de mi hijo son mi mayor prioridad…

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¡Holaaaa! Espero les guste es capítulo ;u;

El siguiente cap se viene lo bueno wuuuh~ drama 7u7

Esperaré sus comentarios

¡Nos vemos en el próximo capítulo!

S.S~♡