🍃Capítulo 36

Gracias a todas esas personitas que comentaron y me ayudaron con mi bloqueo:") este capítulo va dedicado a ustedes💜

《⏳》

La cena estaba por ser servida y tanto Jimin como YoonGi, se preguntaban por qué sus amigos, aun no llegaban.

El lindo castaño de bonitas mejillas, se mantenía sentado en la cama, acunando a su pequeña bebé en brazos. SunMi estaba algo inquieta, no le gustaba escuchar mucho ruido, sus padres la tenían acostumbrada a la tranquilidad y con música suave — y en ocasiones instrumental — a muy bajo volumen.

—¿Por qué eres tan bonita, SunMi? — murmuró Jimin muy bajito, sin dejar de observar la suave carita de porcelana y mejillas sonrosadas.

—Porque se parece a mi — interfirió la muy conocida voz de su esposo, entrando a la habitación. Jimin volteó a verlo y rió bajito ante su comentario

—Cuánta modestia, Señor Min… SunMi es aún más bonita, lo siento

—Por supuesto que SunMi es aún más hermosa, eso no te lo puedo negar — se acercó dejando un sonoro beso en la regordeta y suave mejilla de su bebé — toma, te traje un analgésico y un vaso con agua

—Oh… — tomó la tableta y la introdujo a su boca. Después tomó el vaso y bebió hasta pasarla por su garganta — gracias…

—¿Te sigue doliendo mucho?

Negó — Sólo es un leve dolor de cabeza, con la pastilla se me quitará

—Está bien… — dejó el vaso sobre un mueble y se sentó a lado de Jimin. Pasó el brazo por la estrecha cintura, recargando su mentón en el hombro, observando con atención a su hija que descansaba en los brazos del menor — Jin está por servir la cena…

—Oh, ¿debería ir a ayudarle?

YoonGi negó — Ya tiene suficiente ayuda allá abajo… — restregó la nariz por el cuello de su amado — quedémonos nosotros tres solos un ratito más…

—Me parece una idea maravillosa — suspiró sintiendo los besitos en su cuello — pero creo que deberíamos bajar, están todos allá abajo y sólo faltamos nosotros, ¿no es descortés?

—Pues… — se separó un poco

—También faltan Hoseok y Ta-...

Fue interrumpido por la puerta abriéndose abruptamente, dejando entrar una alta y delgada figura.

—¿Taehyung?

—ChimChim… — sus labios formaron un puchero

YoonGi tomó en brazos a su pequeña hija lo más rápido que pudo, al ver las intenciones del otro. Jimin se puso de pie y cuando menos lo esperó, Taehyung ya lo tenía fuertemente abrazado.

—Lo siento, lo siento mucho — sollozó — perdóname, por favor…

—Taehyung… — se sorprendió ante tales palabras y correspondió al abrazo — No tengo nada que perdonarte, todo está bien

—Claro que sí — murmuró entre lágrimas — Te dije cosas feas, lo lamento tanto

—Sé que no lo dijiste enserio, tranquilo…

YoonGi se mantenía en silencio, observando al par de amigos reconciliarse. Ambos murmuraban cuanto se querían y que siempre estarían juntos, siendo mejores amigos para toda la vida.

La puerta se abrió de nueva cuenta, dejando ver ahora al mejor amigo del pálido, con un bultito en sus brazos. YoonGi sonrió y palmeó su hombro.

—Taehyung… — habló acercándose al par de amigos que no dejaban de abrazarse. Ambos voltearon ante el llamado — alguien quiere verte…

—TaeHoo… — con rapidez se separó del abrazo con Jimin, para extender ansioso sus brazos

El pequeñito fue colocado con suavidad, en los brazos de su progenitor. Taehyung, sonrió al ver a su bebé abrir levemente sus ojitos

—Oh, mi bebé… — con la yema de sus dedos tocó la tersa piel de la mejilla de su hijito — Papi está de vuelta, Hoonie...

Las tres personas ahí, presenciaron el emotivo momento en el que Taehyung abrazó y llenó de besitos a su hijo, mientras entre lágrimas se disculpaba por haberlo descuidado.

Taehyung finalmente volvía a ser el mismo de antes.

🍃⏳🍃

Los días continuaron pasando, diciembre estaba por terminar, y un nuevo año estaba por iniciar, dispuesto a formar nuevos recuerdos.

Navidad, había finalizado muy bien. Todos en compañía, disfrutando de bellas anécdotas y una deliciosa cena, concluyendo con un alegre brindis y los más pequeños, abriendo regalos.

Era treinta de diciembre, a muy temprana hora de la mañana y muriendo de frío, YoonGi había salido a casa de su hermano a revisar si había quedado bien asegurada. Pues Namjoon llevó a su pequeña familia a un corto viaje a España, donde pasarían año nuevo y las primeras dos semanas de enero.

Min SunMi, estaba a sólo seis días de cumplir un maravilloso mes de nacida. Con el pasar de los días, la belleza de la niña fue saliendo a relucir, donde el parecido con YoonGi era innegable. La pequeña era muy tranquila, no lloraba mucho, ella simplemente amaba estar en los brazos de sus padres, siendo rodeada por su calor y mimos. No le gustan los ruidos fuertes, ama la voz de sus padres, sobre todo cuando Jimin le canta con esa bella y aterciopelada voz. Las caricias en su cabecita le relajaban, en tanto era acunada en los cálidos brazos de sus progenitores.

Otra de sus actividades favoritas, era dormir sobre el pecho de papá. Escuchar su palpitar, era como una canción de cuna que la hacía dormir. Y YoonGi más que gustoso, amaba compartir ese cálido momento de padre e hija con su bebé. Ese pequeño peso descansando en su pecho, le hacía sentir sumamente feliz.

Eran las ocho de la mañana, SunMi yacía sobre el sofá del living, dormida en su cómoda sillita acolchada, después de haber sido alimentada. En tanto Jimin se encontraba en la alfombra, haciendo abdominales una y otra vez.

—Diecisiete… dieciocho… diecinueve… y vein...te…  ¡Ahh! — se dejó caer de espalda, en tanto su pecho subía y bajaba agitado — vaya que estoy… fuera de forma… — se quejó en voz alta cerrando sus ojos

Antes del embarazo, Jimin lograba hacer más de treinta abdominales en tres minutos. Y ahora había logrado sólo veinte en cinco minutos. Además, minutos antes, ya había hecho sentadillas y lagartijas. Y definitivamente, ya se sentía agotado.

—Tengo que hacer, veinte abdominales más… — suspiró adolorido — mi abdomen no se volverá plano si continúo aquí tirado…

Recargó su peso en sus antebrazos y le echó un vistazo a su bebé, verificando que continuara dormida. Una vez lo comprobó, comenzó de nuevo con sus flexiones.

Su abdomen no había quedado tan mal después del nacimiento, aún así se sentía incómodo y no le gustaba verlo frente al espejo. Así que tomó la decisión de volver a ejercitarse, si quería su abdomen plano de regreso.

Veinte minutos después, la puerta principal fue abierta por el mayor de la casa. YoonGi venía tiritando de frío después de haber revisado el hogar de su hermano. Cuando ingresó al living, logró ver a su pequeña bebé en su sillita sobre el sofá. Sonrió quitándose el abrigo y los guantes y se dirigió a ella. Pero en medio del living yacía Jimin recostado de espaldas, luciendo muy cansado.

De manera silenciosa, se inclinó a su lado y plantó un dulce beso en sus labios que se mantenían entreabiertos. El menor al sentir ese efímero contacto, abrió sus ojos para rápidamente encontrarse con los de su amado. Sus mejillas se sonrojaron levemente y con una tímida sonrisa le dijo: —Hola, Yoonie… ¿Cómo te fue?

—Hola, cariño — se acercó dejando otro besito — bien, todo está en orden por allá… — Jimin asintió y se recargó en sus brazos — ¿Terminaste con tus ejercicios?

—Eso creo… YoonGi estoy fuera de forma, me canso muy rápido… — formó un puchero

—Tómalo con calma, no hay prisa ¿O sí?

—Un poco… estoy oxidado — Lo miró sin dejar de abultar sus labios — También he perdido flexibilidad…

—Mhmm… ¿Es eso? — acarició el mentón del menor con su pulgar — recuerdo que… la última vez que tuvimos relaciones, antes de que tu vientre nos impidiera hacer ciertas posiciones… tenías una grandiosa flexibilidad…

Jimin se sonrojó violentamente, ante la insinuación — T-tú lo has dicho, “tenía”… ¡Eso ya hace más de cinco meses!

—Entonces, te ayudaré a recuperarla… — dejó un corto beso en los labios ajenos haciéndolo suspirar — en nuestra cama… ¿Qué dices?

—¡YoonGi! — se dejó caer nuevamente en la alfombra, cubriendo su rostro muy avergonzado

—¿Qué? — se rió bajito observando tiernamente a su pequeño esposo — amo que después de casi cuatro años de casados, aún te avergüences cuando digo algo con connotación sexual

—B-basta… — murmuró con su rostro rojo

—Vamos… — se colocó sobre él. Con sus brazos, lado a lado de la cabeza del más pequeño — ¿Mi pequeño está avergonzado?

—No lo estoy…

—Sí lo estás… — sonrió intentando quitar las manos que cubrían su rostro — hemos hecho muchas cosas, Minnie… no tienes de qué avergonzarte…

—Lo sé, pero… — descubrió sus ojos. Sorprendiéndose de encontrar el rostro de su esposo muy cerca del suyo — detente, por favor…

—Amo verte avergonzado por cosas que son normales entre nosotros, cariño… — besó su nariz — Tu inocencia y ternura me matan...

Jimin se quedó en silencio, incapaz de decir algo. Pues realmente se sentía muy avergonzado. YoonGi hundió su rostro en el cuello del menor. Jimin estaba calientito a causa de sus ejercicios, YoonGi aún sentía frío, así que suspiró gustoso cuando los brazos de su pequeño esposo lo abrazaron y sus piernas rodearon su cintura.

YoonGi levantó su cabeza para mirar directamente los ojitos de su amado. Este le sonrió tímidamente en tanto le acariciaba el cabello a su mayor. El pálido sonrió, para después, terminar uniendo sus labios.

Tranquilo, sin prisas, simplemente disfrutando del roce de sus labios, y las castas caricias en sus cuerpos.

El leve sonido de suaves quejidos, llegaron a los oídos de ambos, haciéndoles detenerse. Se sonrieron mutuamente y con un pequeño piquito en sus labios, se separaron. YoonGi se puso de pie y entre dulces palabras, tomó a su hija en brazos.

—¿Qué sucede mi dulce y bello melocotón? — la acomodó en su pecho, en tanto acariciaba su pequeña espaldita y besaba su pequeña cabecita — ¿Por qué lloras, uh?

Jimin podría pasar horas, viendo a su amado esposo, interactuar con su bebé. Estaba completamente embelesado de la forma en la que YoonGi trataba a su hija…

—¿Jimin?

Sacudió su cabeza y salió del sus pensamientos al escuchar su nombre

—¿Eh? ¿S-sí?

—Te preguntaba si, SunMi ya tomó su biberón

—Oh, sí — se puso de pie — pero bebió muy poco, termina de darle lo que dejó — YoonGi asintió dándole besitos a su bebé — Por cierto, Taehyung y Hoseok vendrán en una hora más y dejarán a TaeHoo un rato en lo que le hacen unos estudios a TaeRin

—Ok, entendido… ¿Escuchaste, SunMi? — le habló a su niña haciendo su voz un poco más aguda — Tu primo, TaeHoo vendrá a visitarte~

Jimin negó divertido viendo el actuar de su esposo

—Oye… ¿Qué no hoy es cumpleaños de Taehyung?

—Lo es, ¿Por qué?

—Bueno, no he escuchado de ninguna fiesta o cena para celebrarlo

—Sí lo sé, ésta vez Taehyung no quiso nada, están muy ocupados con los gemelos…

🍃⏳🍃

El matrimonio Jung había llegado un par de horas después, donde Jimin había llenado de abrazos y besitos a su mejor amigo, felicitándolo por su cumpleaños. Minutos después de haber entregado a TaeHoo, se retiraron rumbo a la clínica a ver a su hija.

Ambos iban realmente nerviosos, los estudios que le harían el día de hoy a TaeRin, van a dictaminar si ella, podría ser dada de alta el día de hoy o no.

Cuando llegaron, fueron directo con su hija, donde le hicieron compañía durante varios minutos. Ellos veían a la pequeña más fuerte y recuperada, a comparación de la primera vez que la vieron dentro de esa incubadora. Sus costillas se notaban menos y sus mejillas lucían un poco más regordetas, e incluso tenían un pequeño rubor.

Su pechito subía y bajaba con más normalidad, ya no se le complicaba tanto respirar, eso era lo más importante.

Poco después, vieron como el médico a cargo del caso de TaeRin se la llevó a otra sala, donde tenían los implementos necesarios para el estudio a realizar.

Taehyung y Hoseok, estuvieron todo el tiempo presentes ambos portaban trajes, gorritos y cubrebocas esterilizados y trataban de tranquilizar a su hija cuando lo que le hacían, le molestaba, provocándole ganas de llorar.

Primero con un estetoscopio escuchó sus pulmoncitos y el ritmo de sus respiraciones.

Segundo, procedieron a hacerle una radiografía de su tórax, aún sin quitarle las sondas de oxígeno en su nariz.

Para último, dejaron lo más complicado. Revisaron a TaeRin en una camilla donde el doctor, le retiró los cables que le brindaba oxígeno y esperaron unos segundos, para ver como TaeRin lograba respirar por sí sola. Hoseok y Taehyung derramaron lágrimas al ver como su niña, había progresado tanto en tan poco tiempo.

El médico tomó otra sonda, para proceder con la endoscopia y revisar los pulmones internamente. Al momento de que esta pasó por la garganta, la pequeña comenzó a llorar, preocupando a sus padres.

Usualmente en este tipo de estudios, ponen al paciente a dormir, pero al saber que la pequeña aún no controla por sí sola de manera correcta su respiración, lo mejor era mantenerla despierta.

Lo interesante fue que, el llanto de TaeRin, era buena señal, este fue aumentando cada vez más. Demostrando la fuerza que sus pulmoncitos habían adquirido. El médico le pidió a los padres que la tranquilizaran para poder proceder con el estudio.

Taehyung la tomó en brazos, sintiendo lo pequeña que era. La arrulló de la manera que sólo él sabía hacerlo. Era la primera vez que la sostenía con tanta libertad, sin necesidad de estar teniendo precaución por las sondas y cables que se encontraban en todo su cuerpecito.

La pequeña reconoció casi de inmediato el calor de su progenitor, así disminuyendo poco a poco su llanto. Hoseok se inclinó a su lado, observando a su bebita con mucho amor y orgullo.

Con su mano cubierta por un guante de látex blanco, tocó sus delgados cabellitos y no pudo evitar derramar un par de lágrimas. Taehyung mantenía sus ojos en la carita de su niña, quien ya casi dejaba de llorar en su totalidad.

TaeRin aún tenía sus ojitos cubiertos con una tira de cinta de papel color piel, para así evitar que la luz le lastimara. Ellos ni siquiera han visto los ojitos de su bebé y ni ella los ha visto a ellos.

Aproximadamente cinco minutos después la pequeña ya estaba completamente tranquila, así que el médico procedió a comenzar con la endoscopia.

Decidió que Taehyung se quedara con su hija en brazos, para que pudiera tranquilizarla más fácil. A Hoseok le pidió que colocara sus manos en ambas mejillas de la pequeña para evitar que ladeara la cabeza.

Poco a poco el médico, comenzó de nuevo, donde TaeRin volvió a quejarse y querer mover su cabeza. No le gustaba eso.

Taehyung y Hoseok se dolieron junto con ella al verla quejarse. El menor la tranquilizó lo mejor que pudo, hablándole con voz dulce y acariciando su barriguita y pechito con suavidad, tratando de transmitirle calma.

—Lo sé, Rinnie… ya va a terminar… — murmuraba Taehyung a su hija

—Eres muy fuerte, mi solecito… — susurró Hoseok con un nudo en la garganta en tanto con sus pulgares acariciaba su cabecita

El médico permanecía inmutable, haciendo su trabajo lo más cuidadoso posible. Veía el trayecto de la sonda por la pantalla. Cuando al fin llegó a los pulmones, los revisó lo mejor que pudo, sintiéndose satisfecho al encontrarlos en buen estado.

Poco después de que terminaran con todos los estudios. Le volvieron a colocar el oxígeno a TaeRin, también la llevaron de nuevo a la incubadora, en tanto el médico examinaba con precisión los estudios recién realizados. Taehyung se había quedado con ella, mientras que Hoseok se fue con el médico para saber cuál era su resolución final, después de ver los resultados finales de los estudios.

Pasaron alrededor de media hora dentro, en tanto Taehyung se preguntaba porqué tardaban tanto. Deseaba tanto que su niña pudiera ir con ellos a casa. Ella ya había podido respirar sin necesidad de usar oxígeno, eso significa que ya debe de estar mejor, ¿No es así?

Poco después, unos pasos se escucharon, volteó encontrándose con su esposo, con la mitad de su rostro siendo cubierto por un cubrebocas. Este llegó a su lado, colocando su mano en su hombro.

—Hobie… — habló bajito — ¿Qué sucedió? TaeRin está bien, ¿verdad? Ella podrá venir finalmente con nosotros

—Taehyung…

El tono en el que habló, desánimo al menor. Esos ojitos que lo miraban con esperanza, se apagaron y miraron al suelo, completamente desilusionado.

—No debí ilusionarme tanto… ¿verdad? — volteó a ver a su niña completamente tranquila

—Ella… — su voz se quebró — Ella irá con nosotros a casa, Taehyungie…

—Sí, lo sé… espera — de inmediato miró a su esposo quien sonreía enormemente — dices qué… ¿TaeRin vendrá con nosotros… a-a casa?

—Así es amorcito, ella ha mejorado y ya es posible que la cuidemos en nuestra casa…

Los ojos de Taehyung se llenaron de lágrimas, su labio tomó forma de un enorme puchero. Cubrió su boca aún sobre el cubrebocas que traía puesto, evitando que su sollozo se escuchara fuerte. Temblando, se puso de pie y Hoseok, lo recibió con los brazos abiertos, en un fuerte abrazo.

Ambos sollozaban silenciosamente. No cabían de felicidad, porque finalmente, su hija se iría con ellos…

•●•

TaeRin, al fin se encontraba en los brazos de Taehyung, lista para salir de la clínica. La pequeña estaba muy bien abrigada con un lindo y calentito trajecito de osito panda, que le abrigaba a la perfección su pechito y garganta. También estaba envuelta en varias suaves mantas. TaeRin era un pequeño bultito, suave y esponjoso.

El médico les brindó un pequeño tanque de oxígeno y un nebulizador, con todos su implementos. Les explicó con precisión, los horarios y el tiempo en el que se deben de usar, incluyendo sus medicamentos.

También les dio varias indicaciones, sobre el cuidado de salud e higiene de la pequeña. También, se le fue retirado el parche que cubría sus ojitos, los dos padres, se emocionaron, pues desde que nació, nunca habían visto sus pequeños ojitos, siempre se habían mantenido cubiertos por precaución.

La pequeña comenzó a quejarse cuando retiraron lo que cubría sus ojitos. Poco a poco comenzó a llorar cada vez más fuerte.

—No llores, RinRin… — Taehyung la arrullaba tratando de calmarla. El médico vio eso y sonrió ladino

—Es  bueno que llore… muy bueno de hecho — comentó el hombre de bata blanca al ver a ambos padres en apuros — su llanto fuerte, demuestra cuanto se han fortalecido sus pulmones

Hoseok y Taehyung intercambiaron miradas emocionados.

—Deberían dejarla llorar un poco, será de gran ayuda — quitó sus gafas y le entregó un documento a Hoseok donde venían prescritos los medicamentos — por cierto, tengo entendido que usted — señaló a Taehyung — padece de asma

Asintió — Sí, es cierto

—¿Hay alguna probabilidad de que nuestra hija también lo padezca? — preguntó Hoseok preocupado

—Sí, existe el riesgo. — se cruzó de brazos y observó cómo la niña dejaba de llorar — Así como es bueno que llore, sus pulmones se fortalecen, tampoco dejen que se agite demasiado, eso podría desatar un ataque de asma. Este padecimiento puede ser heredado por su mismo progenitor, pero con los problemas que tuvo la niña al nacer se agravó aún más

—Entiendo… — murmuró Hoseok observando a su esposo de reojo quien se mordía el labio nervioso, probablemente culpándose mentalmente por heredarle eso a su hija

—Supongo que ya deben de saber cómo atender un ataque de asma — Hoseok asintió — será un poco diferente con la niña, pero reafirmo, no es cien por ciento seguro que la niña lo padezca, sí, hay una gran posibilidad, pero más vale estar preparados. Les pido que estén atentos a ella, en caso de un ataque de asma, lo más seguro es que ella comience a toser y su carita se torne rojiza y probablemente un poco morada

Los dos jóvenes padres, realmente lucían asustados al escuchar lo que podría pasar con su hija. El médico notó eso e inmediatamente trató de aligerar la tensión.

—No lo digo para asustarlos, es para que estén preparados ante cualquier cosa — tomó un muñeco de prueba y lo sujetó con ambas manos — si su rostro comienza a tornarse rojo, la toman con ambas manos y la colocan boca abajo, pasando su brazo por aquí… — señaló por la altura de la pancita — hacen un poco de presión, palmeando su espalda y le colocan esto cubriendo la mitad de su rostro, abarcando la nariz y la boca — tomó una pequeña mascarilla transparente con unas sondas conectadas a una caja plástica blanca de tamaño mediano — Lo encienden y ya que su rostro comience a tomar su color normal, la recuestan sobre su espalda y se lo dejan puesto unos quince minutos más, hasta que se estabilice por completo

Los dos escucharon atentamente, sin perder detalle.

—Yo… cu-cuando tenía seis años, recuerdo que mi madre hizo exactamente conmigo lo que usted acaba de indicar — el médico asintió —  solo que creo que nunca llegué al grado de ponerme morado

—Esperemos que tu hija corra con la misma suerte… pero por si acaso, lo que tienen que hacer en ese caso es, prácticamente lo mismo, pero si no hay señales de que no reacciona, la sostienes justo como la tienes en este momento, le colocas la mascarilla y masajeas su pecho, ejerciendo fuerza a sus pulmones y se vienen de inmediato a la clínica. En todo el camino, no le quiten la mascarilla y no dejen de masajear su pecho, eso ayudaría muchísimo a mantenerla con vida en el trayecto aquí

“Mantenerla con vida” esas simples palabras, pero con mucho poder, les hizo temblar.

—Lamento si todo esto suena muy fuerte, pero más vale estar preparados ante cualquier emergencia.

—Lo sabemos… — suspiró Hoseok sin dejar de ver a su esposo que lucía como que quería llorar — sólo que nos asusta lo que podría pasar con nuestra hija. — volteó a ver a su compañero médico — pero estoy feliz de que estés a cargo de mi hija, Junmyeon… siempre me ha gustado que seas así de directo y hables con la verdad

—Sabes que haré de todo con tal de que tu hija esté con bien. Pero también necesito la ayuda de ustedes dos, para que la pequeña Jung mejore…

Kim Junmyeon o “Suho” como la mayoría le decía. Era uno de los médicos más antiguos en esa clínica, con más de veinticinco años en la rama de la medicina, convirtiéndolo en un veterano. A pesar de ser más mayor que muchos de los de ahí, no le gustaban las formalidades, y le gustaba que lo llamaran con simplicidad sin necesidad de honoríficos. Era un grandioso médico, además cuidaba de sus menores.

—Escucha, Hoseok… sé que todo esto que están pasando no es fácil, todo esto conlleva un gran desgaste mental y entiendo que quieras mantenerte firme y no mostrarte débil ante los demás. — Hoseok lo miró sorprendido — te veo más delgado, cansado y te cargas unas enormes ojeras, no sólo tú, también tu pareja…

Ambos estaban frente a la puerta del consultorio del mayor, ya listos para irse. Pero como siempre, no está de más darle algún consejo a su compañero y amigo varios años menor que él.

—Sí, nada ha sido fácil desde el día del parto… — rió bajito rascando su nuca. Le echó un vistazo a su esposo que estaba más adelante, charlando con una enfermera. Al parecer se estaba despidiendo de TaeRin, ya que ella era una de las que se hacían cargo de su hija. — estas tres semanas han sido realmente duras

—Lo sé, así que de verdad les recomendaría programar una cita con Sehun

—¿Con Sehun? — enarcó una ceja — ¿Estás hablando de una cita con el psicólogo?

Asintió — Creo que realmente les ayudaría a tu esposo y a ti, a sobrellevar todo esto. Por favor, tómalo en cuenta

—Lo pensaré…

Después de unas pequeñas indicaciones más, los jóvenes padres partieron rumbo al hogar del matrimonio Min, para presentarles a su gemelita e ir por TaeHoo. Para finalmente tener a sus dos gemelitos juntos en casa.

🍃⏳🍃

Min YoonGi se hallaba enviándole fotografías de su hija y sobrino, a su madre. El clima tan frío y de grandes tormentas, no les ha permitido ir a visitarlos para que finalmente conozcan a su nieta. Pero sin falta YoonGi les envía fotografías de la niña cada día para que no se pierdan su crecimiento.

Poco antes de enviar las fotografías, había estado en una llamada con su madre, también YoonGi no perdió oportunidad de preguntar sobre la salud de su padre, el pálido quiso hablar con él, pero su madre insistía en que el hombre estaba dormido. De igual forma, YoonGi prometió que irían pronto a visitarlos.

Tiempo más tarde, la  joven pareja se encontraba cómodamente acurrucados en su cama, mientras que en medio de ellos, yacían dos pequeños bebés, con sus ojitos abiertos moviéndose con suavidad.

SunMi era un poco más grande que TaeHoo, obviamente porque él nació de siete meses y una semana después, que la pequeña Min.

YoonGi se acercó un poco más a su amado, colocando sus dedos en su mentón para atraerlo en un dulce beso. Jimin suspiró gustoso ante el contacto de sus labios, y el pálido dejó escapar una pequeña risita.

—¿Qué es tan divertido, Yoonie? — preguntó llevando su vista a los dos bebés en medio de ellos

—Es que… me gusta como se ven dos bebés junto a nosotros… — murmuró besando el mentón del menor

—¿Ah sí? — el mayor asintió — Bueno, finalmente SunMi tiene compañía de alguien de su edad…

—Mhm… — murmuró de acuerdo — por eso pienso que pronto deberíamos poner manos a la obra

—¿Manos a la obra? ¿Para qué? — preguntó Jimin confundido. YoonGi se separó un poco y sonrió al ver el gesto de confusión de su inocente y amado esposo

—Un hermanito para SunMi…

—Pero qué-...

—¿Deberíamos preguntarle a Hoseok y Taehyung sobre cómo le hicieron a los gemelos?

—¿Eh? — sus mejillas se calentaron de inmediato y le dio un manotazo en el brazo al pálido — ¡YoonGi!

—¿Qué? — se rió — SunMi necesitará hermanitos con quien jugar, ¿No lo crees?

—B-Bueno sí, pero aún no… — observó a su esposo — apenas nos estamos acostumbrando a SunMi, un nuevo bebé sería muy apresurado… — sus mejillas se tiñeron de un color carmín — a-además aún no termina la cuarentena, no podemos tener relaciones…

—Lo sé, lo sé… y cada día falta menos…

Unieron sus labios de nueva cuenta, regalándose pequeñas muestras de afecto, hasta que volvieron a prestar atención a los dos lindos bebés que estaban con ellos.

—¿Te imaginas, YoonGi? — el nombrado hizo un sonido dando a entender que lo escuchaba —Que en un futuro… SunMi y TaeHoo terminen saliendo, creo que harían bonita pareja

—¿Qué? — lo miró con los ojos muy abiertos comenzando a negar — No, no y no.

—Pero YoonGi — Jimin se rió al ver a su esposo tomar a su niña en brazos y abrazarla protectoramente contra su pecho, intentando alejarla lo más posible de TaeHoo — ¿Qué haces?

—Protejo a mi hija — dijo con recelo — No permitiré que nadie, ni si quiera TaeHoo, ande detrás de ella. Mi niña tendrá novio, hasta que cumpla treintaicinco años

—Oh mi Yoonie celoso~ — habló Jimin con burla tomando al niño en brazos — estoy seguro de que TaeHoo será un buen chico… además, dices que SunMi tendrá novio hasta los treintaicinco… ¿Te das cuenta que tarde o temprano ella se va a enterar de la edad en la que nos casamos y la edad en la que la tuvimos? No somos un gran ejemplo para ella como para decir que tendrá novio hasta después de los treinta, Yoonie

—Es diferente… — murmuró con los labios abultados

—Sí claro… — rodó los ojos divertido

•●•

Tanto SunMi como TaeHoo, estaban cómodamente dormidos. Ya era medio día y los padres del niño, no daban señales de vida. Jimin realmente esperaba que todo estuviera bien con su pequeña sobrina.

La pareja se encontraba acurrucada en el sofá-cama del living, envueltos en sábanas, mientras en el centro descansaban ambos bebés, muy juntitos. YoonGi aún se mantenía receloso, apesar de que TaeHoo fuera sólo un bebé.

Minutos después, el timbre sonó. YoonGi fue a abrir, encontrándose frente a su mejor amigo.

—¿Cómo se portó mi hijo?

—Bien, aunque… lo mantendré a raya si intenta salir con mi hija, eh

—¿Qué? — rió divertido

—Ahorita te platico — negó con las manos restándole importancia — ¿Cómo les fue con los estudios? ¿Taehyung? ¿Qué haces detrás de-...? — se detuvo al ver un bultito en sus brazos — No…

—Sí… — sonrió Taehyung enormemente con su niñita en brazos — ella vino con nosotros

Jimin escuchó algo de escándalo y risas. Se puso de pie con cuidado de no molestar a los bebés y justo cuando iba a dar un par de pasos, observó a su esposo y amigos entrar al living. Jimin sonrió, pero se detuvo al ver el bultito en los brazos de su mejor amigo.

—E-Es…

—Sí, ChimChim… es TaeRin… —su voz se quebró al ver a Jimin cubrir su boca con sus manos y verlo acercarse muy emocionado

—Oh por Dios… fi-finalmente, ella… — observó el rostro de la pequeña con fascinación y no pudo evitar soltar un sollozo — Hola, TaeRin… bienvenida a la familia, pequeñita…

Al parecer las cosas ya estaban mejorando para todos... ¿verdad?

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¡¡¡ESTAMOS POR ENTRAR A
LA ETAPA FINAL!!!

DE NUEVO, GRACIAS A TODOS LOS QUE COMENTARON PARA AYUDARME EN EL BLOQUEO, REALMENTE ME AYUDÓ EN ESTE CAPÍTULO.♡

Adfshdkga parece que estoy gritando con las letras mayúsculas~ ¡¿QUÉ LES PARECIÓ EL CAPÍTULO?! Wiii~ finalmente, TaeRin está con su familia♡ realmente me esforcé escribiendo esto:")

En fin, me pondré a escribir de ya el próximo capítulo para no tardar tanto en actualizar. ¡GRACIAS POR SU PACIENCIA Y AMOR A SEGUNDOS!

LOSAMOMUCHOMUCHOMUCHOOO~💜💕💖💙💜💚💕💖💜💚💙💕💖

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