《⏳》

11:38 de la mañana y ambos padres recién bajaban con su hija dormida en brazos. YoonGi sostenía a Jimin de la cintura en todo momento.

Jimin lucía más descansado, sin embargo YoonGi, se veía cansado y de lejos se notaba que no había dormido adecuadamente. Sus no tan notables ojeras y bostezos continuos, lo delataban.

Al bajar el último escalón, un delicioso aroma llegó a sus fosas nasales, provocando que sus estómagos gruñeran pidiendo urgentemente comida.

Entraron juntos a la cocina, donde se encontraron con SunHee, yendo de un lado para el otro.

—¿Mamá?

—¡Oh, chicos! — se detuvo un instante —  Buenos días, esto ya está casi listo, anoche no cenaron y les preparé mucha comida, sobre todo a ti, Jimin. — lo señaló — tienes que comer mucho y recuperarte

—P-pero má, yo no…

—Nada de peros — se acercó a ellos y besó la cabecita de la bebé — vayan a sentarse al comedor, esto está casi listo — los empujó despacio por la espalda

—Eh… Suegra, ¿Me deja ayudarle?

—No

Ambos salieron de la cocina en dirección al comedor, donde se encontraron a Jennie viendo su celular. Al sentirlos llegar, los miró de reojo y soltó un suspiro

—¿También a ustedes los mandó para acá?

Los dos asintieron mientras se sentaban.

—Sabes que a mamá no le gusta que se entrometan cuando está cocinando y se pone en su modo “chef”

—Lo sé, no lo entiendo…

•●•

—M-má… — tartamudeó al ver el montón de comida en la mesa, sobre todo los que la señora Park puso frente a él — esto es mucho… tengo hambre pero no creo que pueda comer todo esto…

—Claro que puedes, esto es solo el desayuno. Incluso ya tengo en el horno la comida

—Pero esto es demasiado… — mordió su labio preocupado

—Tienes que recuperarte, hijo. Un parto absorbe todo de ti y todo esto te ayudará a recuperarlo

Frente a Jimin se hallaba “el plato fuerte” que constaba de un omelette con jamón y un pan integral con mantequilla y miel, todo eso contenía proteínas. A lado estaba un tazón con cereal de fibra con trozos de fresa, plátano y miel. En el centro de la mesa había un jarrón de jugo de naranja recién exprimido y del lado izquierdo había otro tazón, pero este lleno de fruta en cubitos. La mujer alegaba que tenía que comer mínimo cinco tazones de fruta al día.

YoonGi observó a su esposo que lucía aterrado con todo eso. Si bien, todo eso era comida ligera — a excepción del omelette — para Jimin todo eso era demasiado para su aún débil estómago y su miedo de no querer comer mucho y subir de peso.

Sabe que SunHee, sólo se preocupa por su hijo. Ella sólo quiere consentirlo y ayudarlo a recuperarse.

Tomó la mano de su amado por debajo de la mesa — la pequeña SunMi estaba con Jennie en el living — y acarició con su pulgar.

—Come lo que puedas, cariño…

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Después de haber acabado todos de desayunar, Jimin, había comido la mitad de cada cosa. Ahora se encontraba en el living acunando a su hija, en compañía de su hermana menor.

Mientras tanto, YoonGi ayudaba a su suegra con los trastos sucios. Pero era tanto su sueño, que se estaba quedando dormido de pie a medio plato enjabonado.

—¿YoonGi? — los mujer se acercó a él viéndolo cabecear — Hey… — lo movió logrando despertarlo

—Oh, yo…

—Mírate nada más, muchacho — colocó las manos en su cintura — te me estás cayendo de sueño. ¿No has dormido nada desde el día del parto, verdad?

—Uhm… — bostezó — …si he dormido un poco

—Pero no lo suficiente — llevó la mano a su sien y negó — entiendo que quieras estar atento a todo lo que Jimin y SunMi puedan necesitar, pero necesitas descansar para estar preparado. Además, no estarán solos aquí estoy yo para cuidarles mientras duermes

—Pero SunHee, usted está de visita no podría…

—Óyeme jovencito, no vine a vacacionar, vine a cuidar a mi hijo y a mi nieta y ahora, a ti también. — lo empujó despacio por los hombros — anda, ve a dormir

—P-pero…

—Nada de peros, necesitas descansar

El pálido salió de la cocina con un ligero puchero en sus labios. Pues a él le encanta ayudar y no le gusta sentirse desplazado. Pero su suegra tenía razón, tenía mucho sueño, se sentía agotado tanto física y mentalmente. Tantas emociones juntas, en menos de cuarentaiocho horas, lo dejaron exhausto.

Observó a unos metros la castaña cabellera de su esposo y su pequeña cuñada. Los escuchaba hablar, pero no entendía sobre que.

YoonGi se acercó en silencio, sentándose a lado de su amado, muy muy cerca y le abrazó por la cintura, para después, recargar su mentón en el hombro del menor y así, observar a su hija que mantenía sus ojitos abiertos.

—Está despierta de nuevo… — murmuró acercando su mano a la manito de su bebé

—Creo que está intentando enfocarnos — Jimin se rió bajito

YoonGi mantenía sus ojos cerrados, mientras escuchaba a su esposo y a su cuñada, entablar una cómoda charla.

No fue hasta que la señora Park, llamó a su hija desde la cocina para que le ayudara con los trastos sucios. Jennie fue a regañadientes.

Luego, el mayor extendió el sofá-cama, donde ambos se acomodaron, colocando a la bebé justo en medio de ambos.

—Hola, bebé~ — Jimin le hablaba con voz dulce acariciando los suaves y delgados cabellitos

—Eres una cosita muy pequeñita, SunMi… — murmuró el mayor — te puedo sostener, perfectamente entre mis dos manos

La niña, simplemente parpadeaba con el ceño un poco fruncido, mientras abría su boquita repetidas veces, dejando escapar pequeños bostezos que contagiaban a YoonGi

El menor, al notar eso, acarició la mano de su esposo.

—Yoonie… — llamó con dulzura, logrando que el nombrado le prestara atención — deberías dormir, mi amor… luces agotado...

—Claro que no… — bostezó enormemente — no tengo sueño…

—Claro que sí

—Claro que no

—Claro que sí, ahora dormirás y punto final. ¿Me escuchaste? — dijo guardando una prenda en la cajita de regalo

—¿Qué es eso? — señaló

—Oh… es el obsequio que dejaron ayer, Tae y Hoseok — desdobló la pequeña prenda — Está bonito, ¿Verdad?

—Es una fresa — se rió bajito — ¿No está muy grande para SunMi?

—Uhm… un poco, se lo probaré más tarde — sonrió guardándolo — Dejaron una nota dentro…

“No encontramos uno de melocotón, sólo había de banana y fresa, así que mejor tomamos este más bonito. Si se lo prueban, toman foto y nos la mandan.
Para la sobrina más hermosa de todo el mundo, de parte de sus tíos favoritos --Tae & Hobie”

—Estos dos… — negó divertido y observó a su hija — ¿Te gustó, SunMi? — la pequeña bostezó contagiándole — ¿Eso es un sí?

—YoonGi… necesitas dormir — el menor tocó la mejilla de su esposo

—Necesito cuidar de ti y de SunMi… — le observó a los ojos

—No iremos a ningún lado — besó los labios contrarios y se puso de pie con la niña en brazos — anda, vamos a la cama, quiero hacer algo

—Pero Minnie, acabas de dar a luz, tenemos que esperar treintainueve días más

—¡No hablo de eso! — dijo sonrojándose viendo como su esposo se ponía de pie y se acercaba a él

—Extraño tanto tenerte bajo mi cuerpo, gimiendo mi nombre… — murmuró cerca de sus labios

—N-no digas eso… — se avergonzó retrocediendo un paso

—Oh sí — besó rápidamente sus labios — en treintainueve días, empezaremos con la campaña “un hermanito para SunMi”

—¿Qué? — abrió enormemente sus ojos — Min, nuestra hija acaba de nacer, ¿Y ya quieres tener otro? — lo miró asentir sin dejar de besar su mejilla y pasar sus manos por su cintura, acariciando con ternura — Claro… como tu no cargas un bebé nueve meses dentro de ti…

—Te veías precioso con tu vientre, cariño… — murmuró con voz ronca, frotando su nariz por el cuello de Jimin — extrañaré tanto acariciarlo… ahhh~ lucías  tan tierno — subió nuevamente a la mejilla y besó una y otra vez — ¿Hacemos otro bebé? ¿Qué dices?

—Estás loco, Min YoonGi — se rió sintiendo cosquillas en su cintura — aún es muy pronto…

—Lo sé, lo sé — le abrazó desde atrás, recargando su mentón en el hombro de su pequeño, mientras observaba a su hija — sólo bromeaba… pero, ¿Más adelante?

A Jimin le provocaba ternura, escuchar a su esposo hablar sobre tener otro bebé. YoonGi siempre le ha dicho que quiere formar una familia enorme y por supuesto que Jimin no se opone, pero se acaban de convertir en padres, será mejor esperarse uno…o dos años, para ir por el segundo.

—Sabes que sí, YoonGi — lo besó — más adelante…

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YoonGi yacía recostado en la enorme cama, sintiendo sus párpados pesar demasiado. No se quería dormir, sin tener a sus dos tesoros a su lado.

Estaba por cerrar sus ojos, cuando ve a sus dos razones de vivir, entrar a la habitación.

—¿Por qué tardaste? — preguntó adormilado con un puchero en sus labios

—El pañal de SunMi estaba húmedo, así que fui a cambiárselo — respondió mientras se subía a la cama

—Oh… necesito que me enseñes a cambiar un pañal — tomó la mano de su amado

—Por supuesto… — sonrió — ahora, recuéstate bien

—¿Por qué?

—Sólo hazlo…

YoonGi obedeció, acomodándose bien sobre su espalda. Estaba por decir algo más, cuando el leve llanto de su hija llegó a sus oídos, pues Jimin la había separado un poco del calor de su cuerpo.

—Tranquila…

Extendió sus brazos y con muchísimo cuidado, la colocó en posición de ranita, sobre el pecho de YoonGi.

—Jimin… y-yo no sé como...

Ser sentía preocupado, pues no sabía como tranquilizar a su hija. Pero se sorprendió cuando el llanto comenzó a disminuir, en el momento en el que el costado derecho de la cabecita de su hija tocó su pecho, justo en el lado de su corazón.

—Está escuchando tu palpitar… — acarició los cabellitos — ¿lo ves? Se ha tranquilizado...

El mayor se sentía maravillado... ¡Su hija se había tranquilizado con sólo escuchar el palpitar de su corazón!

—M-minnie… ella dejó de llorar…

—Te dije que así dejaba de hacerlo… — se acercó a su hija y dejó un besito en su cabecita — coloca tu mano, sobre su espaldita

YoonGi puso su mano sobre la espalda de su hija, sorprendiéndose de que sólo su mano, abarcaba casi todo el cuerpecito de su bebé.

—Es tan pequeña... — acarició

—Ahora, puedes dormir

—¿Qué? — abrió sus ojos — ¿Y si se me cae?

—No se te caerá, mi amor… aquí estaré yo. Además, tú casi no te mueves cuando estás dormido

—P-pero…

Jimin se apegó a él, bajo su brazo libre y suspiró con gusto. Mientras que el mayor, trataba de procesar lo que estaba sucediendo. Estaban ambos recostados en su cama, con su bebé. Al fin con su bebé, Jimin le abraza y su hija recostada en su pecho.

Había esperado tanto tiempo por estar así con su familia, su pequeña familia, que le parece irreal. 

Sonrió, sintiendo como sus ojos se llenaban de lágrimas. Se sentía feliz, muy feliz. Jimin a su lado, abrazándole y sintiendo el peso de su hija en su pecho, le hacía feliz.

Sin darse cuenta, los tres se quedaron dormidos, con toda la tranquilidad del mundo, sintiéndose plenos y dichosos.

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El timbre de un celular, llegó a los oídos de YoonGi, sacándole de su ensoñación. Abrió los ojos, dándose cuenta de que ni Jimin y ni su hija, estaban con él.

Desorientado, buscó su celular entre las sábanas y sin fijarse en el remitente, contestó, dejándose caer en las almohadas, restregando sus ojos.

—¿Diga? — contestó con voz ronca y baja

—¡Min YoonGi!

Ese grito… le hizo abrir los ojos de golpe.

—M-mamá… — tragó saliva asustado — ho-ola…

—Min YoonGi, ¿Cómo es eso de que mi nieta ya nació y no nos habías llamado para informarnos? — regañó — si no fuera por Namjoon que nos envió accidentalmente una fotografía de ustedes con mi nieta, aún no estaríamos enterados

—Y-yo… iba a llamarles — rascó su cabeza con una mueca — Pero cuando vi a SunMi, me olvidé de todo, incluso de dormir… lo siento, mamá

—Está bien... — sonrió comprensible del otro lado de la línea —  entonces, ¿Su nombre es SunMi?

YoonGi le contó todo a su madre. Desde que empezaron los primeros síntomas de parto, el proceso del nacimiento hasta la primera vez que la vieron abrir sus ojitos.

Min Haneul, no podía dejar de sentirse tan orgullosa de su hijo al escucharlo contar todo tan emocionado, ahora que ya se había convertido en papá.

La mujer le dijo a su hijo, que debido al estado de salud de su padre, no podrían ir hasta Seoul a conocer a su nieta. YoonGi comprendió, así que le prometió a su madre que les enviaría fotografías de su hija y que harían lo posible por ir a Daegu.

Después de colgar, observó la hora en la pantalla, marcando las 5:37pm. Se sorprendió al darse cuenta de que había dormido poco más de cinco horas.

Se quedó recostado por tres minutos en la cama con el antebrazo cubriendo sus ojos. Cuando decidió que era momento de levantarse, e irse en busca de Jimin y su hija, escuchó la puerta de la habitación abrirse y unos pasos avanzar.

La cama se hundió de un lado y sintió una respiración, cerca de sus labios, hasta que estos fueron presionados con otros

—Yoonie… sé que estás despierto

—Mhm… — gruñó — aún no… bésame otra vez y tal vez despierte…

—¿Ah, sí? — rió bajito — eres… ¿el bello durmiente?

Asintió con un puchero, estirando más sus labios, exigiendo su beso. Jimin rió, pues amaba cuando su esposo se ponía en plan de niño mimado. Y a Jimin, le encantaba mimarlo con muchos besitos y abrazos.

El menor se acercó a los labios de su esposo y dejó un besito sobre esos bonitos belfos.

—Otro…

Jimin rió en respuesta, para volver a besarlo. Se alejó unos milímetros, cuando YoonGi lo tomó de la nuca, para continuar con el beso y profundizarlo más

A Jimin no le molestó en lo absoluto, hasta aprovechó para subirse a horcajadas del mayor, quedando sentado en su regazo. Ambos se basaban con necesidad, concentrados en saborear sus labios, tanto que no escuchaban nada que no fueran los chasquidos de sus besos y sus fuertes respiraciones.

El pálido mordió el labio de su esposo para hacerle abrir su boca e invadir su cavidad con su lengua. Jimin con un jadeo, abrió su boca sintiendo como YoonGi adentraba su lengua, comenzando una erótica danza con la suya.

YoonGi deslizó sus manos hasta las caderas de su amado, para acariciar en círculos. Mientras que Jimin, llevó las suyas a la nuca del contrario, acariciando con lentitud, las suaves hebras.

Sus sentidos estaban nublados, el fuerte y veloz latir de sus corazones, llenaban sus oídos. Latían desesperados, como si acabasen de correr una maratón.

Jimin soltó un gemido y eso bastó, para que ambos volvieran en sí. Se separaron con la respiración agitada, labios húmedos e hinchados, mejillas sonrojadas.

En tan sólo unos segundos, se habían convertido, en un pequeño desastre juntos.

Mientras que Jimin, estaba prácticamente sentado, en el regazo de su esposo, se sonrojó violentamente al sentir, cierta protuberancia chocar con su trasero.

—Mierda, Jiminnie… — jadeó tratando de regular su respiración

—L-lo siento, YoonGi… — cubrió su boca tratando se mantenerse lo más quieto posible

—No, no… está bien — suspiró un poco frustrado cubriendo su cara, tratando de controlarse — fue mi culpa, yo insistí con el beso…

—YoonGi… — quitó las manos de su boca, mostrando un puchero arrepentido

El mayor alejó las manos de su rostro. Le causó gracia, ver ese tierno puchero en su esposo. Se carcajeó bajito y ronco, echando la cabeza para atrás, dejándola caer en la almohada.

—Oh Minnie~… eres mi perdición… sólo treintainueve días más…

—Lo siento, Yoonie… — murmuró bajito, bajándose del regazo de su frustrado esposo, con mucho cuidado

—No te disculpes, cariño... — se reincorporó recargándose en los codos, sintiendo la molestia en su entre pierna, alargando un suspiro — ven aquí…

Jimin se acercó aún avergonzado con sus mejillas rojas. YoonGi sonrió tomando la mano más pequeña, acariciando con su pulgar.

—¿Y SunMi? — preguntó suave

—Está allá abajo con mi madre y Jennie… yo estaba con ellas, pero… — se sentó en la orilla de la cama mientras entrelazaban sus manos — …vine a ver si ya habías despertado

YoonGi asintió mientras que rodeaba la cintura de Jimin con su brazo libre y recargaba su cabeza en las costillas del menor.

—Minnie… — llamó sintiendo las caricias en su cabello

—¿Mhm?

—Te amo demasiado… por ti esperaría siglos, de ser posible… — murmuró con voz ronca, dejando pequeños besos sobre la tela — … tu salud y bienestar, es obviamente más importante, cariño. No quiero escuchar que te disculpes por esto, de nuevo ¿Sí? — besó la mano de Jimin y levantó su vista para observarlo a los ojos

—Yo también te amo demasiado, Min YoonGi… — besó cortamente los labios ajenos dejando escapar un suspiro enamorado

Se mantuvieron abrazados, de manera que Jimin acunaba el rostro de YoonGi. No fue hasta que éste, se removió zafándose de los brazos de su esposo.

—Iré a darme una ducha fría… en serio la necesito — se puso de pie, dejando ver el notable bulto en su pijama

—YoonGi, te puede hacer daño con este clima… — sintió sus mejillas sonrojarse, al ver al mayor, caminar en dirección al cuarto de baño, dejando su torso desnudo en el acto, pues se había quitado bruscamente su prenda superior, dejándola caer al suelo antes de cerrar la puerta detrás de él.

—¡Una muy fría, dije! — gritó desde adentro

Jimin no pudo evitar reír. Podría decir que él, se sentía bien… se alegraba de aún poder provocar eso en YoonGi, muy a pesar de su figura. Se sentía deseado…

Y no lo niega, él también necesita sentir a YoonGi. Pues, juntando los días de la cuarentena, serían, casi tres meses sin mantener relaciones sexuales.

Se escuchó el agua de la ducha correr, acompañado de un quejido del pálido.

—¡Mierda, está helada!

El castaño se rió sonoramente, así que inmediatamente, cubrió su boca con sus pequeñas manos, conteniendo las carcajadas.

—Espera un poco más, Yoonie…

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Una semana después...

El feliz matrimonio, recién llegaba a su hogar, después de acudir a la clínica para su cita con su amigo. Jungkook había revisado a Jimin, dando la buena noticia que el desgarre había sanado. También, midió y pesó a la pequeña SunMi. Felicitando de que la bebé, se está desarrollando muy bien y que tiene muy buenos reflejos. También alagó lo bella que la niña se estaba volviendo. Y a elección de Jungkook, el pediatra que estará a cargo de SunMi, será Jung Hoseok.

Toda la semana había sido un reto para los nuevos padres. Ambos se despertaban dos veces por noche, cuando la pequeña pedía ser alimentada, o tres veces, cuando necesitaba un cambio de pañal. Jimin al darle pecho, a fuerzas tenía que despertarse. Pero ahora, que su tiempo límite de producir leche, se había agotado, Jungkook le prescribió a la bebé una fórmula de leche en polvo. Les pidió que compraran la lata pequeña, para primero ver, que tal la aceptaba la bebé. Y ahora, que podrán darle biberón; Se turnarán en las noches para poder alimentar a su hija.

Si ellos creían que ésta semana, había sido un reto. Pues ahora, que la madre y hermana de Jimin se habían ido, empezará el verdadero reto. Ellas les ayudaban mucho. SunHee preparaba la comida y cuidaba a su nieta, Jennie también cuidaba de ella. Pero ahora, no tendrán quien les ayude.

Solo serán ellos dos y su bebé. Tendrán que estar un 110% más atentos de lo usual, con su hija.

Durante ésta semana, se habían ganado un par de bolsas bajo los ojos, producto de los desvelos. No se quejan, pues aman tanto a su hija, que todo lo que ella hacía, les parecía maravilloso y ellos sufrían junto con ella cuando lloraba.

Habían descubierto muchas cosas nuevas, ahora en su vida de padres. SunMi depende totalmente de sus padres y ellos dependen de su hija. No la dejan sola ni un segundo.

Su pasatiempo favorito era observarla. Cada gesto, cada movimiento, todo era encantador para éste par de padres primerizos. Esta semana, YoonGi descubrió, que a SunMi le encanta dormir sobre el pecho de su padre. Y a YoonGi le encanta tenerla sobre él. Ya se acostumbró a sentir ese pequeño peso descansando en su pecho. Jimin moría de ternura casas vez que los veía juntos, de esa manera.

Ahora, ambos estaban nerviosos por el primer baño de su hija. Todos estos días, limpiaban su cuerpecito con toallitas húmedas, pues aún no pueden bañarla, hasta que su cordón umbilical se caiga.

Además, en sólo una semana… la memoria de sus celulares, estaba abarrotada de fotografías y videos de su bella hija. Pues, aprovechaban cualquier momento para sacarle fotos.

—Dime si no es la bebé más tierna y preciosa de toooodo el mundo — dijo Jimin tomando a su hija en brazos, después de terminar de vestirla.

—¡Déjame verla! — el mayor estaba ansioso y con la cámara de su celular, lista, para tomarle miles de fotos de nuevo.

—Y… — se dio media vuelta — ¡aquí está!

La pequeña SunMi, yacía en los brazos de Jimin, succionando con tranquilidad su chupete. Su papi le acababa de vestir con el obsequio del matrimonio Jung.

SunMi lucía tan tierna en su trajecito de fresa. Aún le quedaba un poquito grande, pero se veía hermosa Parecía una muñequita.

—Mi hija es preciosa, ¿verdad? — se acercó a ella y tocó su naricita. — eres una muñequita…

La pequeña observaba el rostro de su padre mientras parpadeaba varias veces, moviendo su chupete con suavidad. YoonGi no se resistió ante la ternura que su bebé destilaba, así que besó una y otra vez, las bellas y ruborizadas mejillas.

Se acercaron al pequeño sofá que está junto al ventanal de su habitación. YoonGi acomodó unos cojines, donde después Jimin, acomodó a su hija.

Min SunMi, había quedado recargada en los cojines. Y tal como dijo YoonGi: SunMi lucía como una muñequita.

Los orgullosos padres, le tomaron varias fotografías. YoonGi le pidió a su amado que tomará a SunMi en brazos y para fotografiarles juntos.

—¡Oh, esa! — señaló el menor

Ya ambos sentados y Jimin con SunMi dormida en sus brazos, veían las fotografías recién tomadas, del celular de Jimin

—¿Ésta? — Jimin asintió — nuestro melocotón sale dormida

—¡Lo sé! Por eso me encanta, parece un angelito

—Nuestra hija, es un angelito todo el tiempo, Minnie — besó la mejilla de su pequeño esposo — entonces… ¿Le enviamos esta a Taehyung y Hoseok?

Jimin asintió efusivamente. Así que YoonGi procedió a enviar la imagen.

Yo:
[Has adjuntando una imagen]

SunMi dice gracias, a Tío Tae & Tío Hope. ¿Acaso no es preciosa?👼💕

—Ahora, esperemos a que contes… — el sonido de un mensaje entrante le interrumpió — …te… vaya que rápido

—¿Qué dijo, qué dijo?

TaeTae~♡:

ASDFGHJKKLÑLLGDSADFGJLÑÑKHFDAAASFGKFSAAGHKJFS💖💕❤💖💕❤💖💕❤💖💕❤💖💕 ¡¡SE VE PRECIOSAAAAAAA!! ❤u❤

La pareja rió ante tal respuesta tan entusiasta.

—Bueno, creo que le gustó — comentó YoonGi riendo

•●•

Un par de horas después, la pareja, yacía en su cómodo sofá en el living, con el televisor encendido en un volumen bajo. Jimin alimentaba a su hija con la nueva fórmula de leche en polvo.

YoonGi estaba, semi recostado en el sofá, mientras que Jimin estaba entre sus piernas, recargado en su pecho y la pequeña, estaba tranquila en los brazos del menor, bebiendo de su biberón.

SunMi se alimentaba con calma, la cantidad de leche iba disminuyendo poco a poco, al parecer si le había gustado la fórmula. Ahora sólo queda esperar, que tal la aceptaba su pequeño estómago.

La gatita, Miki. Estaba bajo la mesita de centro, enroscada y durmiendo plácidamente. Cuando el felino, conoció a SunMi, rápidamente la aceptó, restregando su cabeza y pasando sus bigotes por el piecito de la bebé.

Ninguno de los dos padres, alejaban su vista de su hija, amaban ver como su boquita se movía poco a poco al succionar su pequeño biberón.

YoonGi aprovechaba cada momento para besar el cuello, mejilla y labios de Jimin. Murmurándole palabras de amor y aún después de una semana del nacimiento, YoonGi le seguía agradeciendo a su esposo, por darle una hija tan preciosa.

El celular de YoonGi, comenzó a timbrar, sacándoles de su burbuja de amor. El molesto sonido, interrumpió el sueño de SunMi, haciendo que la pequeña soltara soniditos a modo de queja.

—Shh… tranquila, mi bebé… — la meció lado a lado — ¿Quién es?

—Es Hoseok… — observó la pantalla y presionó en contestar — Hey, Hope…

—Y-Yoon… — su voz sonó rota

—¿Hoseok? ¿Qué sucede? — se preocupó al escuchar la voz de su amigo así

—E-estoy muriendo de nervios, Yoon… el parto se ha adelantado, Taehyung está a punto de dar a luz…

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Tú, yo, ustedes. Al saber que en el próximo capítulo se viene el nacimiento de bebé VHope.

AAAAAAAAAAAAA SE NOS VIENE EL BEBÉEEEEEEEEEEEE

¿Qué les pareció el capítulo mis bellezas que tanto amo?

Wuuuh~ espero lo hayan disfrutado y no me quedara muy aburrido ;--;

¡Esperaré sus bonitos comentarios!

Oh y... ¡¡SE NOS VIENE EL COMEBACK!!

SE VEN PRECIOSOS TODOSSSSSSSSS. Ahque, ya me calmo.xD

LES AMO CON TODO MI CORAZONCITO!!!!! Besos y gatitos para todos:")❤💛💚💙💜 Sony💖