"El repetitivo sube y baja, el juego del sube y baja, habiendo llegado hasta aquí me canse, me canse de ello..."

Antes todo era felicidad, las miradas que compartían eran dulces, la balanza estaba equilibrada con sus sentimientos correspondidos... O al menos eso aparentaban.

-¿De verdad quiero estar a su lado?

Cuando estaba sola siempre se hacia esa pregunta de la cual no quería obtener respuesta, estaba tan acostumbrada a la presencia del chico que temía quedarse sola.

-¿Vamos al cine? -Él intentaba que salieran un poco más.

-Si, claro -Le respondía con una sonrisa forzada a cualquier petición.

-Bien, vamos a ver la cartelera.

Cada vez que se veían había una tensión y silencios horribles, de esos que dan ganas de que la tierra te trague en esos precisos momentos.

-¿Qué te pareció la película, YoonGi?

-Fue tan predecible, no me gustó.

-¿En serio?

-Si, ¿A ti?

-A mi si me gustó.

-Me sorprende.

Habían veces en las cuales no compartían las mismas opiniones y era normal en cualquier pareja pero en ellos eso rebasaba los limites, en ocasiones sus desacuerdos eran tan grandes que terminaban discutiendo fuertemente, a veces alguien rompía en llanto.

-L-lo siento, no quise decir eso -Min se acercó a ella para abrazarla pero lo único que recibió fue un leve empujón.

-N-no, dejame sola.

-Disculpame por fav-

-Ya, hablamos luego.

En casos como esos que peleaban lo mejor es que uno de los dos se fuera antes de que siguieran insultándose.

-Esto no puede seguir.

Llegó a un baño público y se lavó la cara, no tenia problema porque no solía usar maquillaje, estaba cansada de siempre pelear con él, últimamente ninguno de los dos se toleraba.

-¿Por qué?

Seguía haciéndose preguntas, esta vez los dos se gritaron de todo. Habían quedado de verse en el centro comercial a las dos de la tarde pero a ella le surgió un problema en la universidad que tuvo que resolver, le avisó a YoonGi que llegaría tarde pero él no leyó el mensaje puesto que dejó el celular en su casa así que molesto le reclamó una vez que llegó al lugar acordado dos horas tarde.

-Hola, YoonGi, ya sabes como son los problemas de la uni-

-Me dejaste esperando dos horas como idiota aquí -La vio molesto con los brazos cruzados recargado en una pared, le habló golpeado.

-Te avise que llegaría tarde, también te avise que ya venia en camino hace un rato -Trató de mantener la calma por la forma en la que él había hablado.

-No me llegó tal cosa al celular, si tenias compromisos debiste cancelar a uno de los dos, no dejarme esperando como un tonto dos horas en esta maldita banca -Elevó la voz señalando una banca donde había estado sentado hace media hora.

-Revisa tu celular -Habló firme.

-No hace falta que lo haga, me voy, estoy cansado -Se dio la vuelta - Vuelve a casa o haz lo que quieras.

Se alejaba con los manos en los bolsillos de la chaqueta negra que llevaba puesta, estaba furioso pero ella no se quedaba atrás, odiaba cuando él no le creía, cuando no la comprendía o cuando no se detenía a escucharla.

-¡Min YoonGi! -Gritó pero no se detuvo - ¡No me importa lo que pienses, estoy harta de todo esto!

También se dio la vuelta y fue a buscar algo de comer, tenía hambre, por esa discusión no iba a dejar de lado su salud.
Por otra parte cuando Min llegó a su departamento y dejó las llaves sobre la mesa de la sala, ahí noto que no llevaba su celular, por un momento se sintió mal pero pronto pensó:

«Seguramente no hay mensajes de ella»

Tomó en celular, al prenderlo vio notificaciones de cuatro llamas pérdidas y mensajes de texto indicando que llegaría tarde, se sintió la peor persona del planeta, fue tan injusto con ella, ni siquiera le dio oportunidad de hablar, por momentos debatió entre si hablarle por teléfono o ir a buscarla, la idea ganadora fue la última, con la esperanza de que ella siguiera en el lugar la buscó pero...

-No hay nada.

Siguió dando vueltas hasta encontrarla, la vio compartiendo mesa con Jackson Wang, uno de sus amigos, hablaban tan animados, reían a carcajadas, se sintió molesto por verlos así, pensó que tal vez ella estaría desanimada en algún restaurante de comida rápida pero la encuentra bien en una cafetería, se acercó a ellos con el semblante firme.

-¿Podemos hablar? -Los interrumpió.

-Oh, Hola YoonGi -Wang lo saludó con una actitud positiva.

-¿Y eso? -Le respondió seria bebiendo un poco de café - Hace rato no querías escucharme.

-Linda debes hablar con él -Jackson Sonrió mientras se ponía de pie- Yo invitó -Tomó del hombro a Min- Todo con calma amigo.

Pagó la cuenta y se fue dejando que ese par resolviera sus asuntos, la chica no le contó nada pero supuso que algo andaba mal al ver la forma en la que se hablaban.

-Supongo que viste los mensajes y lo que decía era verdad.

-Los ví cuando llegue a casa.

-Hmmm...

-Pensé que estarías triste, llorando en algún lugar pero veo que estabas muy cómoda.

-¿Crees que iba a llorar por eso? -Lo vio incrédula - Ja, que poco me conoces.

-Te conozco, lo suficiente como para saber que odias la pizza con piña.

-Para empezar yo amo la pizza por igual, ¿De donde sacas eso?, además, ¿No venías a disculparte?

-Venía porque pensé que estabas triste, veo que no es así.

Molesta apretó los labios, indicó a el pelinegro que salieran de allí, fueron a una de las zonas más calmadas del centro comercial, donde no transitaba la gente tan seguido.

-Triste o no deberías disculparte.

-Comprende, estuve esperando dos horas y obvio que iba a estar furioso.

-Por furioso debiste dejarme hablar pero en cambio decidiste dejarme.

-Es que... -Rascó su cabeza desesperado - Ya, a veces me pregunto si en serio estoy saliendo contigo, siempre llegas tarde o pospones nuestras citas por tu universidad.

-¿Cuanto?, lo máximo son cinco minutos y pospongo nuestras citas con anticipación, en esta ocasión debía hacer algo importante, sabes muy bien que mi carrera requiere de mucho tiempo, pensé que lo entendías.

-Es cansado todo esto, tu "carrera" nos separa cada vez más.

-¿Te das cuenta de lo que dices?, eres egoísta, quieres que pase tiempo solo contigo, te enojas cuando me ves hablando con otro chico, de puro milagro no le gritaste a Jackson pero si lo viste feo, ¿Acaso no puedo tener amigos?

-¿Sabes lo que son los celos?, así me siento. -Su voz se volvió burlona.

-No me hables como una tonta -Odiaba cuando le hablaba con ese tono de voz- Tus "celos" son exagerados, no me tienes confianza.

Continuaron diciéndose cosas duras y difíciles de digerir hasta que ella explotó y terminó llorando de coraje, rápido él sintió la culpa, corrió a abrazarla y pedirle perdón pero antes de terminar su acción recibió un empujón leve.

-L-lo siento, no quise decir eso.

-N-no, dejame sola.

-Disculpame por fav-

-Ya, hablamos luego.

Y así llegamos al principio, ella llorando en el baño haciéndose preguntas, por otra parte él estaba sentado en una banca llamándose tonto por hacerla llorar.

-¿Por qué no confió en ella?, ¿Por qué la hago llorar siempre?

No estaban bien, su relación ni siquiera tuvo un comienzo sólido, a pesar de llevar saliendo siete meses nunca supieron sus gustos exactos, a veces él le llevaba café sin azúcar cuando a ella no le gustaba así, o al revés, ella le llevaba un pastel de fresas cuando a él no le gustaban del todo.

Cuando la chica llegó a casa se encontró que afuera estaba esperándola recargado en la pared uno de sus amigos, Jeonghan, él la saludó con una sonrisa agitando su mano pero dejo de hacerlo al notar que tenía los ojos rojos y llorosos, a parte de tener cara triste.

-¿Otra pelea? -Asintió- ¿Quieres hablar?

-Por favor.

-Entonces entremos.

Tardaron hablando, lo que es Jeonghan y JiMin son los más cercanos, mejores amigos en otras palabras, ambos están al tanto de los problemas que hay en esa relación.

-Tome una decisión.

-¿Qué es? -Bebió un poco de agua viéndola interrogante.

-Voy a pedirle tiempo.

-¿Qué? -De la impresión comenzó a toser - ¿Es en serio?

-Si -Suspiró- Le voy a llamar pidiéndole que nos veamos.

-Entiendo -Sonrió nervioso - Ah... Haz lo que creas mejor.

-¿No tienes que irte a casa?, es tarde.

-Nah, me quedó a cenar contigo -Abrió el refrigerador sacando una olla de comida.

-¿Quien te invitó?

-Yo solo, ya esta calentando. -Señaló la pequeña estufa.

-¿En serio?

-No puedo dejarte sola, somos amigos y debemos apoyarnos.

-Agradezco mucho tener buenos amigos.

-¿Abrazo? -Abrió los brazos a lo que ella rió negando con la cabeza - Vamos, lo necesitas

Sin volver a preguntar le dio un abrazo, de esos que se dan los amigos en todo momento.

-Mi estadía en Seul es buena pero gracias a ti y los otros chicos es mejor.

-Hablando de estadía, ¿Cuando...?

-Pronto.

-Tenemos que hacerte una fiesta de despedida.

-No es necesario.

-¡Hyeon Ji!, Deja que te consintamos. -Infló las mejillas.

-Esta bien -Se separó- Vigila la olla, voy a hablar por teléfono.

-Anda.

Lo dejo en la cocina, con rapidez le hablo a YoonGi, que se encontraba todavía en el centro comercial, en el mismo lugar pensando, pero al escuchar su celular sonar contestó sin dudar.

-¿Hola?

-YoonGi, ¿Podemos vernos? -Su voz femenina lo hizo sonreír

-Claro, dime en donde y la hora.

-En cuarenta minutos, en el parque cerca de tu casa.

-Perfecto, por cierto.

-¿Qué?

-Lo siento linda.

-Nos vemos en un rato.

Le cortó la llamada, a él le pareció extraño eso, por otra parte se dirigió al lugar acordado pero sintió que algo no andaba bien.

-Hyeon Ji, ¿Vas a comer? -El chico llevaba dos platos.

-No tengo hambre.

-Bueno, lo dejaré en el refrigerador por si las dudas.

-Si, esta bien.

-¿Qué te dijo? -Se sentó a comer.

-Le dije que nos viéramos ahora -Se puso un suéter y guardó las llaves de casa en sus bolsillos, al igual que el celular- Me voy.

-¡Fighting!

Le dio una ultima mirada antes de salir a encontrarse con el joven hombre de piel blanca como porcelana, el camino sería largo, más a esa hora de la noche. Luego de un rato llegó al punto de reunión, encontrándose allí a YoonGi sentado en un columpio, al verla sonrió, se puso de pie y avergonzado le hablo.

-Lamento mucho haberte hablado así.

-Ah -Suspiró- Disculpa aceptada... YoonGi tengo algo que decirte.

La sonrisa que él tenía en esos momentos se borro al escucharla hablar con ese tono de voz serio y firme, presintió algo malo.

-Lo que sea ya dilo, sé directa.

-Estoy confundida.

-Ah, Cielos -Tomó una gran bocada de aire- Hay que acabar con esto de una vez, ¿Necesitas tiempo?

-Si, hombre, no sé ni en donde estoy parada en estos momentos -Señaló al suelo- Quiero pensar con claridad, tú también deberías hacerlo... Ninguno de los dos esta bien.

-Entiendo, será lo mejor. Estamos viendo nuestro día como... -Vio a su al rededor buscando algo como referencia a alguna expresión - Un sube y baja.

-¿Sube y baja? -Arqueó una ceja-Bueno, luego comprenderé.

-Entonces, nos veremos hasta el día en que tengamos una decisión sobre nuestra relación.

-Exactamente -Mordió sus labios nerviosa - Hasta luego, cuidate mucho.

-Tu también, ve con cuidado.

-Si, adiós.

"¿Fue la pequeña discusión el comienzo?, el momento en que me convertí a ser más pesado que tú, intentamos ansiosamente coincidir..."

❄☀❄☀❄☀❄☀❄☀❄☀❄☀❄☀❄☀❄☀

Al principio dude mucho en publicar la historia pero me convencieron unas amigas,así que aquí esta, espero les guste.
La portada la hizo ArekusaNikiforov
¡Mil gracias por hacerla! <3